Todo era un caos, un completo desastre. Había comenzado como un día normal cazando con Bella, mi vida, Nessie, mi hija y... bueno, Jacob en forma humana para poder hablar con Nessie, Jacob era... bueno era mi... mi y... ash, el... bueno estaba con mi... USTEDES SABEN! Ash. Cambiemos de tema.

Pues sí, era normal, maldita sea, pero no pude detectar el olor a tiempo. Estaba en una pequeña y diminuta charla con Jacob sobre alguna estupidez que ya habia olvidado, solo distraje mi atencion de Bella, y Jacob de Nessie, un segundo, y ahora estaba mi preciosa Bella retorciendose del dolor en el suelo. LA escena se repetia una y otra vez en mi mente. Bella gritaba sonoramente "RENEESME!" antes que pudieramos reaccionar. Entonces un gran lobo, un lobo de la especie de Jacob, se abalanzaba sobre Nessie. Empecé a correr hacia ella, pero Bella estaba más cerca, y se interpuso primero. Jacob se transformó y puso a salvo a Nessie, que ya había alcanzado su madurez. Acabé con el lobo en cuestion de segundos, pero Bella ya se encontraba retorciendose por el veneno de la mordida. Sabia que para esto no habia cura, mi Bella iba a morir y no pude hacer nada por ella.

-Bella, Bella.No me dejes, por favor, mi Bella, mi vida... no me dejes ¡Isabella Cullen no me puedes dejar! -grité desaforadamente mientras la llevaba  a casa. Reneesme sollozaba en los brazos de Jacob mientras corrian detrás de mí -¡Carlisle! -grité furioso rompiendo la ventana de vidrio, creo que la cuarta vz que esa ventana se rompia.

Mi unica esperanza se desvaneció como tierra entre mis manos: no había nadie en casa. Dejé a bella en uno de los muebles, al instante Nessie y Jacob la flanquearon, Jacob puso la cara entre las manos al lado de los pies de Bella y Nessie tomó sus manos y las apretó susurrando un "te amo, mamá" bajito. Se escuchó un débil "yo tambien, hija" seguido de quejidos. Marqué el telefono que utilizabamos cuando llamabamos a todos, y dije solo tres palabras cuandse contestó en varios telefonos a la vez "Bella se muere"  y colgué. 

-Bella, Bella -susurré otra vez pegado al cuerpo de mi hermosa vampiresa. Ella se fue tranquilizando, había llegado el final. Jacob se lanzó a los brazos de Nessie susurrando un "lo siento". 

-Cuídala, Edward -me murmuró Bella mirando a Nessie con dificultad. Yo asentí en silencio, con las lágrimas que no podían brotar de mis ojos. Ella me miró con dulzura, atravesando la veta del dolor para mirarme con esos ojos marrones que tanto amaba. Entonces, escuché sus pensamientos. Abrí los ojos desmesuradamente, Bella tenía que hacer grandes esfuerzos para eso, pero ella no se veía tensa. Eso quería significar una cosa, su vitalidad se estaba yendo. 

Escuché pocas frases, cosas sueltas... pero una se repetía incesamente.. "Nunca me olvides, ni olvides que te amo, Edward Cullen". Bella suspiró un "los amo" y ningun otro pensamiento emanó de su mente. 

Todo se volvió oscuro después de eso.