Bella POV
Abordamos el avión a eso de las 6:30 de la mañana. Medio dormida y también enojada, me acomode en el asiento que me toco. Rayos no puede ser peor. Al lado de un mocoso malcriado, lleno de mugre y chillon( que llora mucho). ¿Acaso no era suficiente castigo que Charlie me llevara hasta la puerta del Instituto?. No, no lo era.
Charlie fulmino al mocoso con la mirada, el cual se asusto y por fin, a eso de las 8:30 de la mañana, se mantuvo quieto y callado.
¿se acuerdan de la pregunta que hice?. Esa de que si no era suficiente castigo que Charlie me llevara hasta la puerta del Instituto. Pues no. Aun con todo y el mocoso molesto, lo que había al llegar a Forks, fue igual de peor.
A la salida del aeropuerto, por la puerta del ala este, me esperaba un batallón. Una camioneta de esas de militar (que raro ¿verdad?. Notesé el sarcasmo) fue la primera que divise, pero no iva a ir en ella. Esa camioneta era una de las cuatro, que ivan custodiando, a un pequeño automóvil 300, (hasta yo sabia ese modelo, pues era un automóvil de lujo) con el logo del colegio.
Me puse roja de solo pensar que tengo que pasar por esto otra vez.
-papá!, pensé que todo el circo lo dejabamos en Phoenix –proteste mientras me cruzaba de brazoz.
-lo siento, Bella. Pero esto no es a causa mia. Sino de tu padrino Phil. –contesto Charlie, encogiéndose de hombros.
Perfecto. Mi padrino Phil. Se me olvido por completo que mi padrino Phil, viva en Forks. Saben, creo que tengo algo asi como un don o algo por el estilo, para eso de conocer personas o mas bien, de personas que me conocen, con la capacidad de mandar en la policía o algo asi; pues Phil, era comandante del Quinto Cuartel de Forks. Aaaaa… genial. Un padrino militar.
Mientras caminaba hacia el carro del Intituto, un hombre completamente de negro se interpuso en el camino. Lo fulmine con la mirada, pero él no me miro a mi, sino a Charlie.
-Hola Charlie, cuanto tiempo –Genial. Mi padrino militar Phil.
-Hola Phil. Si, ya hace tiempo que no te veía –contesto papá con gusto.
-Así, que la pequeña Bella, es una chica rebelde –Bromeó Phil, con una enorme sonrisa. Yo muy a penas pude hacer una mueca de esta.
-eso parece Phil, pero creo que la dejo en buenas manos y muy bien custodiada –afirmo Charlie a media carcajada.
-Esto solo es por precaucion. Bella es mi ahijada y es para cuidarla –dijo Phil. Jum! padres sobreprotectores y ahora también padrinos. No puede ser. Yo solita hubiera tomado un taxi hasta el colegio y no me hubiera pasado nada, no era necesario tanta fanfarria. Pero claro, el "hubiera" no existe y menos si eres Bella Swan.
-Te agradesco por ello, amigo. –dijo Charlie- Bella…
Voltee a verlo, pues yo miraba las posibilidades de escapar. Nulas.
-Bella… pórtate bien, pero, tampoco mal, si me explico, cariño? –pregunto papá, con una voz que… ash, no puedo negarle nada.
-si, papá –conteste entre dientes.
-despues te enviamos las cosas que te faltaron –me dijo.
-Ok, ok. Es mejor ya irnos, Bella –dijo Phil, al ver que ya no dije nada.
-si, vamos a esa cárcel –comente mientras extendia las muñecas hacia mi padrino- ponme las esposas.
-Basta Bella. Sabes que eso no es necesario –dijeron Charlie y Phil con renuencia.
-lo se, lo se. Solo estaba bromeando.
Despedi a papá con un beso en la mejilla y un abrazo, mientras él me los regresaba y me susurraba al oído: " recuerda lo que hablamos ". Solo asentí.
Perdí de vista a Charlie. Dí media vuelta y camine con los hombros caidos. Subí al 300, este 300 de lujo que me llevaría directo, a algo peor que la prisión de Forks, me llevaría a la prestigiosa y respetada Academia Williams de Forks.
-vamos hija, quita esa cara –comento Phil, cuando el carro ya estaba en movimiento- la Academia no es tan mala.
-no me molesta ir a esa Academia, Istituto o lo que sea –dije cruzándome de brazos- lo que me molesta es toda esta carabana.
-Bella, es por tu seguridad, solo es eso. Ademas, la Academia Williams es de los mejores a nivel de educacion –dijo con orgullo.
-y a mi, eso que? –conteste ya un poco mas exasperada- es un colegio lleno de chicas si cerebro y chicos con la cabeza llena de aire y esteroides en los musculos.
-a lo mejor encuentras amigas aquí y que tal un chico, algún novio tal vez – solto Phil con entusiasmo.
¿Qué?. Acaso esta loco. Un novio entre todos esos fresas con la cabeza hueca. Claro que no.
-Amigas? –era mejor irse por ese lado- lo dudo mucho. Mis amigas eran de verdad. Con cerebro, capaces de pensar y aquí creo que solo hay barbie's con humo en la cabeza.
-pues lo que sea, Rene me pidió que te cuidara, por eso la escolta…
Dijo algo mas pero yo estaba demasiado enojada y necesitaba tranquilizarme, asi, que saque mi ipod, me puse los audífonos y deje de escucharlo. Phil se callo al percatarse que ya no le ponía atención alguna.
30 minutos después, llegamos a la Academia. Lo primero que vi fueron las rejas del barandal enorme, como de unos 3 o 4 metros; las paredes llenas de enredaderas, definitivamente difícil de escalar, pero no imposible. Los jardines, preciosos, para que negarlo, de un color verde precioso y uniforme. A lo lejos devise un ahuehuete enorme, perfecto para leer y pasar el tiempo a solas.
El porche era grande. Tenia bastantes escalones, hasta llegar a la puerta principal. A los lados de los escalones, dos estatuas de leones con el osico abierto, tipo como los de los museos de historia.
Maldición. Llegue a la Academia Williams.
Mierda, fresas!. Rayos, ¿no puede haber algo peor?, a si, que yo este metida en esta Academia.
-Bella, Bella… -dijo Phil sacándome de mi burbuja.
-si, ¿Qué pasa?
-nada nena, solo que te fuiste de este planeta –comentaba mientras yo rodaba los ojos.
-lo siento Phil, es solo que mis papas ME METIERON A UNA ESCUELA LLENA DE FRESAS! –no pude mas, explote. O sea, como es posible, ¿Fresas?. Definitivamete, mamá quería que fuera a la militarizada, pero no, tendría que aguantarlo.
-vamos, Bella. No es tan malo.
-si tal vez tengas razón, Phil, ya lo veremos.
Ok, me tengo que ir, ¿podras arreglártelas sin golpear a nadie? –dijo mi padrino riendo.
-eso intentaré –conteste entre dientes. Ok, Phil sabia que golpee a una zorra, ahora si que Rene me quemo y gacho. Pero eso ya no importaba.
-bueno, Bella cariño, adentro esta la recepción de la Academia. Mañana llegan tus demás cosas. Pasa y pregunta por la Sra. Cope y presentate correctamente ¿si?
-si , señor! –dije con el ya clásico saludo militar.
-descanse soldado –rectifico Phil riendo- solo compórtate, ¿si cielo?
-ok, lo intentaré, pero no te prometo nada hee –dije lanzándole una sontçrisa y apuntándole con mi dedo índice.
-ok, con que lo intentes me basta y ya sabes, si necesitas algo, conoces cual es mi cuartel.
-si, señor! –dije riendo y poniéndome firme- gracias de todos modos padrino.
-de nada cielo, de nada.
Camino hacia una de las cuatro camionetas que me escoltaron y solo escuche decir "mision cumplida, soldados!". Entonces traerme hasta aquí era una mision. Obviamente ¿no?
Entre a la Academia por una puerta gigantesca, no era como la de mi antigua escuela, la cual solo era de vidrio y ya, esta era una puerta de roble, tallada a mano con hermosas incrustaciones y figuras que la hacían mas bella.
Al pasarla, me puse a buscar la recepción, que se encontraba a la derecha en la cual se encontraba una ventanilla y arriba de ella un letrero que decía "RECEPCION". Daaaa!, como sino fuera obvio. Camine a la ventanilla, deje mi maleta en el piso y toque el timbre o la campanilla, lo que sea. Me atendió una señora.
-si, se te ofrece algo –pregunto educadamente, pero recelosa al mismo tiempo. No se si era el arete, la greña o que, pero me miro de pies a cabeza.
-ammm.. si, busco a la sra… -rayos! ¿Cómo dijo Phil que se llamaba? A si- …a la sra. Cory –dije sin demorar.
-no será, la sra. Cope? –mierda!, me equioque de apeido.
-a si, perdón. busco a la señora Cope.
-un momento por favor.
Ví como esta Sra., caminaba tranquilamente y al mismo tiempo volteaba de reojo, como diciendo "a ver si esta no se roba las plumas o algo". Se detuvo enfrente de otra señora, de unos 10 centimentros mas abajo, de la que me atendió. algo le dijo por que me volteo a ver muy enojada y entrecerrando los ojos. Después se encamino hacia mi.
-que se te ofrece, jovencita? –mmta, esta que se cree. Su tono era de lo mas descortes.
-¿señora Cope?
-si, a tus ordenes –contesto con mas amabilidad pero igual de recelosa.
-amm… soy Isabella Swan, soy la nueva alumna –dije con desden.
-Oh, claro, Isabella Swan, te estábamos esperando –contesto un poco emocionada- entonces todo eso de las camionetas militares eran tuyas?. Es decir, ¿por ti?
-si –conteste pesadamente- podría decirme donde esta mi habitación?
Aquí acabo mi vida. Necesito ayuda urgentemente. ¿me voy a volver fresa?. Jamas!.
-claro que si nena.
Era un poco empalagoso, pero al menos, podía refugiarme en la habitación que me asignaran.
La Sra. Cope voceo al micrófono el nombre de "Rosalie Hale". No se para que, pero me lo imaginaba, de seguro ella es quien me iva a enseñar la escuela. Mi niñera, genial.
Tome asiento mientras llegaba mi niñera. Mientras esperaba, vi pasar a un grupo de chicos muy guapos, sin duda niños fresas, consentidos, hijos de papi; aun que solo uno me llamo la atención, bueno él no, pues no pude verle la cara, solo capte su cabello con unos extraños destellos dorados. Me gusto su cabello. Lindo de verdad.
Detrás de ellos, venia una top model o eso creí yo. Era una chava mas o menos de mi edad, o quizás, un año mayor que yo, solo que era mas preciosa. Su cabello rubio en rizos se mecia con su andar. Tenia un cuerpazo, que por Dios, ya quisiera tenerlo yo. Eit no piensen mal, no soy lesbi ni nada por el estilo, es solo que al verla mi autoestima se vino en picada, como un avión sin piloto. Además es una barbie si cerebro.
Se detuvo enfrente de mi. Mientras me zorreaba de arriba hacia abajo y de vuelta, me dijo:
-¿Isabella Swan?
-tu eres mi niñera ¿no? –pregunte levantándome de mi asiento y haciendo o mismo que ella. No le iva a demostrar que mi autoestima era escasa en ese momento.
-tienes agallas niña –contesto a mi comentario.
-asi es, no me dejo de nadie.
- a de ser por eso, las camionetas militares ¿no?
Por Dios, nadie lo dejaría pasar o que?
Me limite a encogerme de solo sonrio.
-eres una chica rebelde –afirmo, no pregunto.
-pues eso dicen
-ja!, me alegra encontrar a otra –contesto sonriendo.
Esperen un momento. ¿Otra?.de que me perdi.
-¿otra? –pregunte confundida.
-si, pues que pensabas, ¿Qué eras la única rebelde aquí?. Pues no querida. De hecho solo hay dos, bueno contigo ya somos tres –observe que se incluia en esas tres- aquí hay demaciadas cabezas huecas.
Sentí como enrojecía al instante. Eso mismo pensé de ella al verla acercárseme. Juzgue mal lo se. Odiaba ponerme roja, yo sola me delataba.
-¿Qué? –pregunto Rosalie.
-nada –enrojesi mas si es posible.
-Oh! –no, ya se dio cuenta- pensaste que era una barbie sin cerebro ¿verdad?
-… -me limite a encogerme de hombros.
-no te preocupes, aquí si te quieres adaptar tienes que fingir ser fresa –contesto con desganas.
-yo no, si quieren ser mis amigas, que me acepten tal como soy, yo no voy a cambiar por nada ni por nadie.
-yo si quiero ser tu amiga, si quieres claro –Rosalie desvió la mirada, como si fuera timida.
No le conteste nada. Espere a que levantara la vista y cuando asi lo hizo, le di una enorme sonrisa. Mi primer amiga en esta Academia. Bueno eso creo. Ya es algo ¿no?
-bueno , vamos, te enseño tu cuarto y las instalaciones ¿si?
Asentí. Tome mis cosas y la seguí.
|