BELLA

Cuando llegue a la casa en la que habíamos vivido durante algunos  años me sentí muy asustada tenía miedo de ver a james de nuevo solo esperaba que no estuviera aquí porque de verdad mi vida se acabaría tenía miedo de que me hiciera daño o que se lo hiciera a renesme pero tenía que sacar a mi hija de esta, cuando toque Alex me abrió

-          Donde esta- dije

-          Mami – dijo mi hija en una esquina jugando con unas muñecas

-          Mi vida- dije llorando abrazándola

-          Pensé que nunca vendrías – dijo mirándome

-          Como estas- dije mirándola

-          Bien – dijo mirándome – mi papa me ha comprado muchas cosas

-          Que bien cariño – dije mirándola cuando sentí dos manos en mis caderas no podía permitir que él se diera cuenta que estaba esperando  un hijo o sino más daño me querría hacer

-          Ya estoy aquí – dije mirándolo – ahora que

-          Quiero que veas a alguien – dijo mirándome me tomo de la cadera sonriéndome y me tense sabía que me llevaría con su padre cuando llegamos a su habitación había un hombre en la cama con un periódico en las manos

-          Papa – dijo Alex me tense era el james estaba aquí dios ayúdame

-          Querida bella – dijo mirándome se veía diferente dios mío estaba- que no te gusta esto – dijo señalándose la cara

-          Que  quieren – dije mirándolos

-          Mi hijo hizo un buen trabajo – dijo tomándome ahora el de la cadera cerré los ojos con mucho pero mucho miedo – eres un buen chico Gabriel – dijo mirándolo mire a Alex bueno a Gabriel y luego mire a mi hija que estaba a su lado mirándonos con confusión

Tenía que inventarme un plan para salir de esta, mire a james y le sonreí el solo negó mirándome y sonriéndome acariciándome la cadera trate de meter lo que más pude el vientre para que no me pasara nada a mí y a mis hijos

Cuando me beso sentí que me iba a morir lo único que quiera era salir de aquí escuchamos un gruñido y james me soltó  era Gabriel mirándonos con molestia

-          Tranquilo cariño – dijo james mirándolo – ella era buena en su trabajo así que podemos disfrutarla los dos – dijo el solo sonrío y miro a nuestra hija – o tal vez podemos disfrutar más – dijo el lamiéndose los labios

-          Déjenla a ella en paz- dije mirándolo el solo negó

-          Porque no les muestras su habitación – dijo me soltó y me dejo ir tenía que escapar ahora o nunca no podía quedarme más tiempo con ellos esperando que le hicieran daño a mis hijos

Cuando nos dejó en la habitación mire a mi hija y busque si había una ventana pero nada no había nada, pasaron horas y estaba segura que edward estaría afuera esperándonos solo quería escapar de esta con mi hija y olvidarme de todo

-          Renesme amor – dije mirándola

-          Si mami – dije mirándola

-          Tienes que prometerme que pase lo que pase te iras sin mirar atrás

-          A que te refieres mami – dijo mirándome

-          Recuerdas que te dije que había un hombre malo hace mucho tiempo que me había hecho mucho daño – dije mirándola

-          Si – dijo

-          Bueno ese es el chico rubio que esta con Alex- dije

-          Mi abuelo

-          No cariño él no es tu abuelo él es un hombre malo y Alex no se llama así realmente él es Gabriel y no está enfermo él es malo – dije

-          Nos quiere hacer daño mami – dijo mirándome

-          Espero que no – dije mirándola – pero si algo llegara a pasar tienes que correr a las afueras esta papa   esperándonos corre con el sin devolverte si – dije mirándola ella asintió y la bese en la frente escuche que ponían un partido así que me levante y camine a la puerta la abrí despacio y vi a Gabriel dormido y james también así que tome a mi hija y empezamos a salir despacio

-          A donde van – dijo james mirándonos

-          Corre renesme – dije ella corrió abrió la puerta y salió corriendo pero sentí que me empujaban duro yo solo cerré los ojos y rogué que mi hijo estuviera bien

-          Que crees que haces- dijo mirándome – piensas que puedes escapar de mi  dijo pegándose contra mí no vi a Gabriel por ningún lado – fue por la perra de tu hija – dijo mirándome – cuando la tenga en sus brazos me la traerá y veras como la hago mía me encantan las niñas bella son carne fresca y más sus lloriqueos

-          No la tocaras- dije colocándome sonreí el pegándole en el pecho y en la cara

-          Mm tal vez primero me divierta con su mama dijo acariciándome los pechos cerré los ojos y baje mi mano acariciando su pierna y subí  mi vestido sacando mi arma la tome en mi mano y lo mire el solo sonrío – que crees que haces- dijo mirándome – crees que me puedes lastimar eres muy débil – dijo mirándome

-          No soy débil – dije llorando

-          No – dijo riéndose – estas llorando como una nena eres una nena débil – dijo cuando vi que no llegaba Gabriel llore más fuerte tal vez él estaba haciendo daño antes sentí que james me giraba y me trataba de quitar el arme pero le pegue una patada en su miembro y me levante poniéndome de pie

-          Eres una zorra- dijo mirándome – otra ves embarazada – dijo riéndose- pero mírate nada más con la edad que tienes y aun hijos – dijo

No aguante más lo mire y recordé todo el daño que me había hecho tome el arma y apunte en su pecho

-          Vamos muñeca dispara- dijo no lo pensé  dos veces y dispare pero en una pierna

-          - maldita perra- dijo tome mi arma y Salí de la casa edward tenia a Gabriel en el carro y mi hija estaba en sus brazos

-          Que paso – dijo mirándome

-          Le dispare- dije

-          Lo mataste- dijo alarmado negué

-          Le dispare en una pierna está herido

-          Ya llame refuerzos – dijo abrazándome – nada malo nos pasara ahora en adelante – dijo asentí pegándome a el