-          Prométeme que llamaras cuando vayas a nueva york yo te recojo en el aeropuerto – dijo bella mirándome sonreí mirándola y asentí

-          Lo prometo – dije mirándola cuando llegamos al aeropuerto los dos nos despedimos con un apasionado beso y cada uno tomo su rumbo

Cuando abordamos el avión mi hijo se dedicó a jugar en su asiento y yo tome mi celular cuando nos dejaron prenderlo

“no sabes lo caliente que me puse al subir al avión recordé la última ves cuando viajamos a Orlando”- BELLA

Sonreí viendo el mensaje no había sido el único que se había calentado  

“no eres la única bebe sentí que me quemaba cuando entre al avión como me gustaría estar contigo en este momento” EDWARD

“no podríamos hacer nada” Bella

“aun no me conoces lo suficiente hermosa”- escribí sonriente

“estas loco Edward “

“un poco pero no me vas a negar que en un avión repleto de personas sería más excitante “estaba seguro que se había puesto como una lamparita pero eso me gustaba, no espere que me respondiera tan pronto y mucho menos como lo hizo

“y según tu que me arias “BELLA

Sonreí deje a mi hijo jugando y entre al baño del avión cerré la puerta y me senté en el inodoro

“cariño estaría sentado a tu lado y si estuviéramos en primera clase pasaría mi mano por debajo de la mesa y acariciaría tus deliciosas piernas sería fácil por el hecho de que tienes vestido”- dije sonriente

“no sabes lo que me calienta eso Edward”- dijo bella sonreí

“a mí me calienta saber que alguien puede vernos o escucharnos amor te haría el amor en el baño del avión sin importarme nada y nadie – escribí

“bebe es mejor que no escribas esas cosas porque estoy caliente tengo que dejarte cariño tengo que mirar unos documentos que aro me mando”
“ok hermosa hablamos cuando llegues márcame cuando estés en tu casa te amo “no me había podido contener y lo mande no recibí respuesta y me puse nervioso

“Edward es verdad lo que leí”

“que leíste” dije emocionado

“te amo “

“si es verdad no pensaba decirlo así pero no pude evitarlo te amo”

“pensé que era el auto corrector pensé que me escribirías te llamo”- dijo ella sonríe mirándolo el teléfono “yo también te amo Edward después de mis hijos eres mi vida entera

“y tú la mí a bebe te amo te dejo trabajar cuídate y piensa en mi”

“siempre”

Cuando deje  el teléfono mi hijo me sonrió

-          Papa ya vamos a bajar – dijo mirándome sonreí y asentí nos bajamos y tomamos nuestras maletas pedí un taxi que nos llevaría a la casa cuando llegamos Anthony fue corriendo  a su habitación a empacar- papa – grito desde arriba

Subí las escaleras y lo mire

-          Que vamos hacer con esta casa papi – dijo mirándome

-          Aun no lo sé no sé si tu mama se quería quedar con ella cuando nos separemos – dije mirándolo el asintió y situó con la maleta

Yo también fui a mi habitación hice mis maletas y no me llevaría nada tenía que aclarar eso con Heidi a ver ella con que se quedaría y en el caso en el que ella me diera  divorcio se quedaría con todo no sería tan humilde para dejarme algo a mi pese a que todo lo había comprado yo, cuando las maletas estuvieron listas llame a Anthony para que nos fuéramos al hospital para arreglar todo mi jefe marco me había dicho que era un gran medio y que el mismo me había dado de referencia para el hospital le agradecí y deje todo listo para que el médico que estaba no tuviera problemas, cuando nos despedimos de todos nos fuimos al aeropuerto pero antes llame a bella porque no quería que se molestara conmigo

-          Alison no corras así  grito

-          Hola hermosa- dije

-          Edward- dijo emocionada- como estas

-          Bien amor ya estábamos subiéndonos al avión – dije

-          Bien te espero paso por ti me avisas cuando aterrice el avión por favor – dijo

-          Claro que si bebe te llamo en cuanto aterrice el avión te amo

-          Yo también te amo – sonreí al escucharla, le di el número del vuelo y ella asinino

Cuando llegamos al aeropuerto sonreí al verla en primera fila esperándome Anthony corrió a sus brazos ella lo cargo dándole  un beso en la mejilla y el sonrió emocionado

-          Edward- dijo corriendo a mis brazos y poniendo sus piernas en mis caderas sonreí alzándola y colocando mis manos en su trasero – oh no sabes lo mucho que te extrañe

-          Pero si nos vimos ayer- dije besándola

-          No importa te extrañe mucho pero vamos- dijo dándome la mano sonreí besándola y nos fuimos a su carro era una camioneta negra sonreí viéndola y ella me miro – he querido cambiarla pero aun no me decido – dijo mirándome

-          Y los niños

-          Están con Rosalie

-          Ya llego?- dije mirándola

-          Llego ayer – dijo mirándome con una sonrisa – está más emocionada que nunca efectivamente Emmet le pidió que se casarán y ella le dijo que si – dijo sonriente

Sonreí eran las 3 de la mañana estaba muerto de cansancio y cuando llegamos a la casa bella le dijo a mi hijo que se podía quedar en la habitación de al lado de la de sus hijos Dylan y Alison tenían una para cada uno, la casa era enrome y muy linda era una casa de dos pisos grande de color beis en la parte de atrás había un jardín hermoso,

-          Quieres ver el resto de la casa- dijo mirándome sonreí asintiendo, en el primer piso estaba la sala con dos sofás blancos y dos sillas individuales blancas, una alfombra negra en el centro

-          Hace cuantos años vives aquí  dije

-          Desde que nos vinimos a vivir mi papa me ayudo con la casa y pues Rosalie tiene la herencia que le dejaron sus papas entre los dos compramos la casa

-          Y cuando eran pequeños los niños no te ensuciaban la sala es blanca

-          Si pero compre de un material que es fácil limpiar de todas maneras los dos son limpios y muy ordenados – dijo mirándome – y esta es mi habitación – dijo

-          Es enorme –dije mirándola ella sonrió-y veo que el color blanco es tu favorito – dije mirándola

-          Así es – dijo la habitación era blanca completamente tenia ventanas que daban al jardín un armario pegado a la pared dos sillas individuales una mesita pequeña y la cama era matrimonial muy linda- ven – dijo señalándome la cama sonreí y me senté ella me abrazo fuertemente  - no sabes cuánto te extrañe

-          Y si me muestras- dije besándola en el cuello y me acostó en la cama poniéndose  sobre mi mostrándome que efectivamente me había extrañado mucho