Bella entró a la farmacia a unas tres cuadras del edificio en el que había vivido durante la Universidad, se sentía como cualquier vil criminal, tenia el tiempo justo, si se retrasaba todo se iba al traste.
El día anterior, ella y Edward habían regresado de aquel paradisiaco lugar…por ella montaría campaña ahí y no habría quien la hiciera regresar pero era hora de despertar, suspiró y fue hasta el pasillo donde visualizó las inconfundibles cajitas...
No lo podía retrasar mas, lo sabia, a un cuando la cena con Charlie y Reene ocupaba la mayor parte de su mente, debía estar segura…y no tendría otra oportunidad para comprarla sin que Edward se diera cuenta…una prueba de embarazo…estaba comprando una prueba de embarazo mientras su novio había ido a comprar cajas para las cosas restantes de su pequeño departamento y por fin mudarse a Forks…con la familia de este… ¡Genial!
Recorrió el pasillo, lentamente, mirando cada cajita…levantó una…la señal era una cara sonriente… ¿Quién quiere esa señal?, además el dibujo parecía una mera burla, como si estuviera diciendo… Recuerda Bella estabas demasiado ocupada con tu sexy novio como para olvidar el condón…y luego una risa macabra.
“Genial Bella ahora piensas que una prueba de embarazo te habla”, rodeó los ojos y dejo la cajita…esto era ridículo pero necesitaba estar segura antes de decirle algo a Edward, de solo pensarlo se ponía nerviosa, no quería pensar en malas reacciones, se le daba bastante bien ser pesimista y con sus padres a al vuelta de la esquina no era la mejor idea.
Tomó otra, la caja era mas pequeña, la señal era dos rayitas…la giró para leer el instructivo mientras el teléfono sonó haciendo que saltara tirando la cajita, refunfuñó y la levantó mientras contestaba…grave error
-Hola Bella-, la voz cantarina de Alice la sobresaltó
-¿Alice?...este no es tu numero-, Bella maldijo mientras volvía a dejar la cajita, esperó para volver a tomarla, rodeó los ojos y fue a la caja…su cuñada no tenia por que enterarse lo que estaba haciendo.
-Es el de Jazz…el mío esta descargado… ¿Cómo va la mudanza?-, Bella suspiró algo aliviada…si, céntrate en temas intrascendentes hasta que salgas de la tienda, pensó.
-Bien…nos faltan algunas cajas pero ya Edward lo esta arreglando-, se formó en la fila de la caja dos personas detrás del cajero
-Ah…eso explica por que no contestan en el departamento-, Bella se mordió el labio…esto no iba bien
-Pásame a Edward…quiero oírlo refunfuñar-, pidió Alice casi con la voz saltarina mientras Bella levantaba los brazos a modo de rendición, la señora detrás de ella la miró algo asustada.
-Eh…no esta…es que nos hemos separado, por las cajas…ya sabes-, por fin llegó junto al empleado y este tomo la prueba para pasarla por el lente y registrarla.
-Mm bueno le das un beso de mi parte…no sabes que solo dile que lo saludo-, Bella rodeó los ojos y se rió junto con su ahora amiga Cullen, mientras veía como el empleado pasaba una y otra vez la cajita sin que el precio se registrara.
-Creo que tomare la idea del beso-, bromeó Bella mientras el empleado la miraba y fruncía el ceño.
-Stan…no tengo un precio-, gritó mientras otro hombre algo mas grande salía de detrás de una estantería repleta de medicamentos por prescripción
-Me tienes que prometer que me dejaras ayudarte a comprar la decoración cuando tenga su departamento… ¿verdad?-, pidió Alice por el teléfono mientras Bella miraba al empleado
-Si…claro-, asintió sin pensar
-¿Que es?-, gritó el otro empleado… “No lo grites, no lo grites”
-Una prueba de embarazo…no marca nada-, “¡Doble genial!”, Bella se llevó las manos a la cara mientras la línea al otro lado parecía muerta, claro un segundo antes de un estallido de gritos.
-Bella…. ¿Voy a ser tía?, ¡Voy a ser tía!-, Bella miró al empleado con lanzas en los ojos.
El empleado mayor llegó y miró la caja, tecleó un código y el precio y la descripción aparecieron
-Alice-, llamó Bella en un susurro mientras la pequeña Cullen se calmaba
-Estas embarazada-, era una afirmación no una pregunta
-No lo se-, contestó Bella al fin mientras el empleado le daba su compra en una pequeña bolsa blanca.
-¿Ya sabe Edward?-, Bella suspiró mientras doblaba la calle con paso firme para llegara al edificio antes que el
-No…mira Al no lo se aun…primero necesito estar segura-, se hizo un breve silencio
-Si…entiendo…pero seré la mejor tía-, se oía muy convencida…demasiado, aun así Bella sonrió ante el tono amoroso de la chica.
-Puedes guardarme el secreto ¿cierto?-, Alice contesto un burdo “Si, señor”, Bella sonrió mientras miraba su edificio.
-Gracias Alice-, contestó sinceramente.
-De que, no te preocupes Bella mi hermano esta como un bobo por ti…un hijo solo lo haría amarte mas-, viniendo de una adolescente de 17 años era muy prometedor, Bella agitó la cabeza y se quito los pensamientos absurdos
-Cuídate enana-, Alice se rió a través de la línea y se despidió antes de cortar.
Ya en el departamento, se sentó en el sofá mientras miraba la cajita, el corazón le latía con fuerza, y las manos le sudaban, miró su departamento…o lo que quedaba de el, había unas cajas apiladas cerca de la puerta, el lugar era pequeño, el baño, una pequeña cocina con un desayunador que separaba la sala comedor, y dos habitaciones, volvió a mirara la prueba, ¿Y si estaba embarazada?...un hijo de Edward…jamás creyó sentir ese extraño sentimiento de anhelo, si, tal vez era lo que menos se esperaba que sucediera pero un hijo de Edward Cullen era un sueño, un hermoso sueño.
Escuchó el cerrojo de la puerta girar, metió la cajita y la bolsa en su neceser y fue hasta su closet para seguir doblando ropa.
-Hola-, Edward la abrazó por detrás dándole un beso en el cuello
-Hola…-, susurró ella aun con el corazón galopando rápidamente
-¿Las conseguiste?-, preguntó Bella tratando de desviar cualquier tema, tratando de clamarse.
-Si creo que con esas serán suficientes-, contestó el señalando unas cajas sin armar recargadas en la pared.
-Tal vez podamos terminar antes de la cena-, continúo mientras Bella hacia una mueca.
-Tenia la esperanza de que nos quedáramos encerrados aquí-, le echó los brazos sobre el cuello.
-Si claro Swan…-, Edward la miró entendiendo el pánico de aquel encuentro pero lo necesitaban…para que no hubiera nadie a quien no le quedara claro que estaban juntos.
-Podemos quedarnos aquí-, sugirió Bella contra sus labios, Edward sonrió
-Soy más fuerte de lo que crees Swan-, anunció mientras ella se pegaba más a el, Edward tragó fuerte
-Aja…-, lo besó mientras el la estrechaba contra si.
-Aun iremos a cenar con tus padres-, murmuró con los ojos cerrados, los abrió lentamente mientras ella rodeaba los ojos y le sacaba la lengua.
Lograron casi guardar todas la cosa de Bella, Edward había mandado sus cosas a Forks…al residir en los dormitorios de la Universidad sus pertenencias no eran tantas como las de ella, al día siguiente estarían viajando hacia Forks…a empezar…juntos.
Edward sonrió al pensar en ya compartir una casa con ella, en muchas cosas, en su boda...en…sus padres, oía el agua caer desde el baño, faltaba poco menos de media hora para que conociera a los Swan, sin saber muy bien para que prepararse, Bella salió del cuarto de baño con un conjunto de lencería café, el sonrió a través del espejo mientras se ponía la corbata.
-Ojos al frente Cullen-, bromeó ella mientras el reía, Bella se puso un vestido marrón, era sencillo pero lindo, dejo su cabello suelto y se puso los lentes y un saco café oscuro, Edward llevaba una camisa, corbata, saco y vaqueros…solo para no parecer del todo formal.
Bella se miró al espejo de nuevo mientras el la esperaba en la entrada de la habitación.
-Estas hermosa-, susurró Edward mientras ella sonreía
-Estoy nerviosa-, confesó mientras el caminaba hasta ella.
-Son tus padres amor…no asesinos seriales-, Bella sonrió y se giró para abrazarlo…
-Listo para la película de terror-, el se encogió de hombros y le besó la nariz
-No puede ser tan malo-, salieron del edificio y tomaron un taxi hasta un pequeño restaurante en el centro de la ciudad, se acercaron para preguntar sobre la reservación, ni Reene ni Charlie había llegado, Bella sintió su pecho doler pero trato de mantenerse entera, después de unos minutos apareció Charlie, serio, con una camisa y un pantalón de vestir, los miró y asintió.
-Hola Bella-, saludó secamente, Edward frunció el ceño pero no dijo nada.
-Hola papa…mira el es Edward Cullen…-, no hubo mas presentaciones, sus manos entrelazadas eran mas que mil palabras, Charlie le tendió la mano sin decir nada.
-Bella-, su madre saludó, con un vestido negro y su rostro perfectamente maquillado
-Hola mama-, Reene sonrió y le dio dos besos en las mejillas.
Miró a Edward de arriba abajo mientras el desviaba la mirada, después a Charlie mientras este bufaba y esquivaba sus ojos.
-Mama…el es Edward-, Reene se acercó y repitió el gesto que había tenido con su hija.
-Y bien ya nos vas a decir de que va todo esto Bella-, Charlie habló en tono algo brusco mientras Edward apretaba la mano de su novia.
-Si…podemos pasar a cenar-, los dirigieron a una mesa y les ofrecieron los menús, después de ordenar, la mesa calló en un prolongado e incomodo silencio.
-Entonces ustedes son novios-, inquirió Charlie mientras Edward asentía
-¿Desde cuando?-, preguntó su madre con el ceño fruncido
-Hace poco-, consiguió contestar Bella
-Ah, bien me alegra que por fin te hayas preocupado por otra cosa que no sean tus libros-, Reene bebió un poco de agua mientras Charlie la veía rodeando los ojos.
-¿Eres de aquí Edward?-, siguió Reene sonriendo
-No…de Forks…Washington-, explicó el mientras Reene fruncía el ceño.
-Es un pueblo….llueve mucho-, siguió mientras la madre de Bella hacia una mueca
-Al menos saliste de ahí-, Edward ignoró el comentario.
-Aun no nos han dicho de que va todo esto-, Charlie parecía lago irritado.
-¿Tendría que haber un motivo papa?-, Bella replicó sin poder detenerse, así que tenía que haber una gran noticia para que ellos se dignarán a verla.
Edward apretó mas su mano mientras tomaba la palabra
-Esta reunión fue idea mía…amo a su hija y le pedí que fuera mi esposa, se que no es el modo habitual pero quiero que ustedes lo sepan y que forman parte de lo que ella y yo compartimos-, Charlie lo miró sin expresión alguna hasta que su mandíbula comenzó a tensarse mientras Reene fruncía el ceño.
-Hay alguna razón para tanta prisa-, el tono de Reene fue acusador.
-Amor mama-, contestó Bella
-Y ya es todo…pague toda la Universidad para que ahora vayas a casarte y adiós a tu carrera-, Charlie miró a Bella mientras ella luchaba por mantenerse tranquila
-Pensé que me pagabas la escuela por que soy tu hija no por que esperaras una remuneración papa, además de verdad crees eso de mi, no me conoces, amo a Edward y me voy a casar con el y voy a tener mi profesión, al hombre que amo, todo lo que me proponga-, Charlie desvío la mirada bufando bajo.
-No es tan fácil Isabella-, su madre habló algo dudosa
-En que van a trabajar, donde van a vivir, nosotros no podemos mantenerte siempre-, Edward apretó los dientes un poco, estaba sorprendido de que toda la conversación fuera en torno a temas superfluos ninguno de los dos parecía importarles sin Bella era o no feliz.
-No es necesario que lo hagan-, contestó Edward en tono serio.
-Tu lo harás muchacho-, inquirió Charlie en tono de broma
-Los dos lo haremos….trabajaremos, nos mudaremos a Forks…esa decisión ya esta tomada-, habló Bella mientras su madre abría los ojos.
-Vas a mudarte-, Bella asintió mientras su padre se llevaba una mano al puente de la nariz, prácticamente nadie había tocado su comida.
-¿Y cuando pensabas decirlo niña?-, Charlie preguntó molesto
-En la graduación…aunque no se por que no lo hice…así si ya recordé a la que ninguno de los dos se presento-, Bella sintió su garganta echa nudos, tomó un poco de agua mientras Edward le acariciaba la pierna.
-Deja eso…ese evento fue algo imprevisto-, Reene agitó la mano restándole importancia
-Era tan difícil negarte-, le preguntó a su madre…-Negarse-, se giro hacia Charlie mientras este giraba el rostro.
-Estas siendo infantil…si eres tan adulta de tomar tus propias decisiones no creo que seamos necesarios para una simple celebración-, Reene replicó mientras Edward apretaba los dientes.
-Termine una carrera… ¿Una simple celebración?-, Bella preguntó con la voz entrecortada
-Mira Isabella creo que casarte es una estupidez….hace cuanto que conoces a este joven…por Dios hija te falta mucho por conocer…mucho por vivir-, Bella rodeó los ojos, su madre trataba de recuperar los años que perdió por ella y por Charlie y ahora quería evitar que ella cometiera “sus mismos errores”
-No necesito esto mama…solo te estoy avisando…si lo deseas serás bienvenida en mi boda y en mi casa-, Reene rodeó los ojos.
-Lo siento pero yo no puedo quedarme….lastima conocernos en estas circunstancias Edward…Charlie-, se levantó de la mesa seguida por Bella.
-Mamá-, Bella por primera vez deseó haberse equivocado, que sus papas se preocuparan por ella y no por ellos o por su historia, sus errores.
Reene salió del restaurante y esperó a que le trajeran su auto
-Deberías pensarlo mejor Bella…aun tienes mucho que vivir-, Bella suspiró y se limpio una lagrima
-Lo amo mamá-, trato de explicar pero Reene negó con la cabeza.
-Eso no es suficiente…no seas ilusa-, se subió al coche mientras Bella trataba de no llorar, entro de nuevo al restaurante limpiándose las mejillas.
-Yo solo quiero hacer feliz a Bella-, trató Edward de explicarse ante el silencio de Charlie
-No se trata de eso…y si ella te deja…las mujeres no saben lo que quieren-, replicó entre dientes, aquel comentario dejo a Edward totalmente confundido.
-Se que Bella me ama-, Charlie negó
-No no puedes saberlo-, Edward apretó los dientes….ahora entendía a lo que se refería Bella, el no había olvidado el abandono de su esposa, estaba amargado y Bella esa solo un mal recuerdo, algo que para Edward era inaceptable
-Lo se…ella me ama tanto como yo la amo, y soy feliz solo por tenerla a mi lado…el tiempo que dure…que luchare será para siempre-, Charlie se rió burlonamente.
-¿De verdad lo crees?-, Edward lo miró negando con la cabeza ante su tono.
-Ella no es su madre-, siseo mientras Charlie lo miraba
-De verdad no puedo entender como a podido cegarse tanto…usted no la conoce, ella no se parece en nada a Reene, es divertida, inteligente, alegre, tenaz, fuerte, valiente…mi familia daría la vida por ella….es la persona mas hermosa que conozco y usted se priva de conocerla solo por que su esposa lo dejó…Bella no lo necesita sin no puede verla como un regalo-, Edward levantó la vista para mirar a Bella detrás de su padre, Charlie se giró y la miró, se levantó dudoso y al final se fue también sin decir nada.
Edward pidió la cuenta mientras Bella volvía a sentarse, cuando al fin salieron del restaurante, pararon un taxi mientras Edward entrelazó sus dedos con los de ella, esto no era lo que esperaba, pero ahora mas que nunca, ella era su vida, Bella no lo miró, no hizo ningún comentario, llegaron al departamento y abrió mientras ella dejaba su saco y se quitaba los zapatos.
-¿Cómo estas?-, preguntó jalándola del brazo.
-Bien….estoy bien…fue una mala película de terror ¿no?-, Edward le acarició la mejilla, ella se burlaba de la peor situación, era la forma de protegerse, Bella sonrió y el la dejó mientras también se quitaba el saco y la corbata.
Bella fue hasta el mueble de la pequeña cocina y se sirvió un vaso de agua, de los últimos trastes que no había guardado aun, no quería pensar en sus padres, dolía…se había prometido que ya no le importaría su falta de atención pero cuando Edward entro a su vida creyó que todo había cambiado…claro salvo ellos.
-Tal vez fue una mala idea juntar a Jack y Jason no crees-, bromeó aun sin mirarlo
-Son malas mancuernas como Alien vs. Depredador-, Edward sonrió tenuemente y se acercó a ella.
-Bella…-, le tocó el hombro y ella se alejó
-Estoy bien-, repitió aun sin mirarlo.
-Pues mírame entonces…anda Swan dime que estas bien-, Edward apretó los puños cuando ella no se giro.
-Bella-, se acercó rozando su pecho contra la espalda de ella
Oyó como su voz se quebraba y los sollozos inundaban su garganta, la giró mientras ella lo abrazaba y escondía su cabeza en el cuello, ella se quito los lentes y los dejo sobre el desaynador, mientras seguía llorando contra el pecho de Edward.
-Cálmate…esta bien-, Edward besó su frente mientras ella lo miraba y lo acercaba con un beso urgente, lleno de necesidad y de dolor, Edward respondió solo un momento antes de separarse.
-Tranquilízate amor-, ella negó y lo volvió a besar, Bella necesitaba que el la amara, sentir que el no iba a desaparecer, que esa vida que conocía… la de sus padres ignorándola era solo su pasado que su futuro era el…y aquél posible hermoso bebe.
-Bella-, Edward habló contra sus labios mientras ella, respiraba contra su piel.
-Hazme el amor…Edward por favor… te necesito-, Edward la abrazó, sabia que esto era por esa maldita cena, que esto era por sus padres, y sabia que aun cuando no se lo pidiera el la amaba y estaría con ella siempre, siempre.
La volvió a besar mientras la acercaba a su cuerpo, ella comenzó a desabrocharle la camisa mientras el la levantó para quedar sentada en el desayunador.
-Te amo-, susurró mientras la besaba, acarició sus piernas y quito la bragas mientras ella acariciaba su pecho, metiendo sus manos entre la camisa, Bella llevo sus manos a su cabello mientras se perdía en su sabor, besó su mandíbula hasta llegar a su cuello, el desabrochó su pantalón mientras ella lo besaba queriendo grabarse su olor y su sabor, el miedo de perderlo la consumió, lo amaba con su alma y el no saber como podría reaccionar si la prueba era positiva, la aterraba, solo quería saber que por ahora el estaba ahí con ella, adiós Jack, adiós Jason, solo el y ella, no hubo juegos ni caricias previas, solo la urgente necesidad de unión.
Edward acarició su centro con la punta de su erección mientras ella gemía y se acercaba más a el, Edward la besó hasta llegar a su cuello y luego subir a su oreja.
-Te amo…no me importaba nada mas me entiendes-, ella asintió mientras el se hundía en ella, ella apretó mas la piernas en torno a su cintura, el se movió mientras ella se enroscaba, gimió en su oído una y otra vez mientras el orgasmo los alcanzaba a ambos.
-Te quiero-, jadeó ella mientras lo besaba suavemente solo un roce tierno, el sonrió y la abrazó
-No me gustan las películas de terror-, murmuró ella mientras el besaba su cuello suavemente
-Ni a mi…prefiero las comedias en las que la chica conquista al protagonista con una propuesta indecorosa-, Bella sonrió y lo besó mientras volvía a enrollar las piernas en torno a su cintura.
-¿Y como termina la película?-, preguntó ella con una sonrisa.
-Vamos a averiguarlo-, susurró Edward mientras la cargaba hacia la habitación.
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