Viviendo Felices, Comiendo Perdices (+18)- Continuación de Acuerdo Perfecto

Autor: Cintia_pattinson
Género: Romance
Fecha Creación: 20/11/2009
Fecha Actualización: 10/12/2011
Finalizado: SI
Votos: 63
Comentarios: 80
Visitas: 317213
Capítulos: 20

Secuela de Acuerdo Perfecto. Edward y Bella se enamoraron de una forma poco convencional ahora tendrán que lidiar con los preparativos de una boda, unos adolescentes precoces, un secreto que saldrá a la luz sobre su relación y los cuidados de un embarazo.

Propiedad de Jazzy W.

 

+ Añadir a Favoritos
Leer Comentarios
 


Capítulo 11: La Familia Está Completa

-Esto esta mal, se supone que es mi horario de trabajo-, murmuró Bella mientras Alice rodeaba los ojos y Esme sonreía.

-Si y técnicamente yo soy tu jefa así que no hay problema-, contestó Esme mientras entraban a la pequeña tienda, habían viajado a Port Ángeles y estaban en la única boutique de todo el lugar.

Hacia ya una semana y media que Edward y ella había empezado a trabajar en la empresa de Diseño de la familia Cullen, ambos se había acoplado bastante bien y solo deseban llevar la empresa a otro nivel, para sorpresa de Bella la supuesta cita con un nuevo proveedor que había concertado Esme era nada mas y nada menos la primera visita a los preparativos de su ya cercana boda, para Bella lo mas practico seria subirse al Volvo junto Edward y casarse en las Vegas, algo que sabia dejaría tristes a las dos mujeres que la acompañaban y que sinceramente había aprendido adorar.

-Era la única manera de que Edward no viniera-, confesó Alice con una sonrisita, digna de una travesura.

-Podríamos venir el fin de semana enana…se supone que estoy trabajando-, murmuró Bella echándose los lentes hacia atrás.

-Ya déjalo Bella, te digo que no hay problema han estado trabajando muy duro, además también vendremos el fin de semana-, sonrió Esme mientras Bella rodeaba los ojos.

-Prueba de vestido-, murmuró Alice divertida

-Buenas Tardes Carmen-, saludó Esme a una mujer algo mas grande que ella, elegantemente vestida, mientras esta la abrazaba.

-Esme hace mucho que no te veía-, confesó mientras la madre de Edward sonreía.

-Lo se…estoy buscando algo de tu talento amiga-, sonrió mientras se giraba hacia Bella.

-Y tienen algún motivo en especial-, preguntó Carmen mientras Esme hacia las presentación.

-Carmen ella es Bella la prometida de Edward, Bella ella es Carmen, una vieja amiga de la Universidad-, anunció mientras Bella daba la mano cordialmente.

-La novia de Edward…eres muy hermosa-, halagó Carmen mientras Bella negaba sonriente.

-Mi hijo y Bella se casan en un mes y medio-, continuó Esme mientras Carmen asentía comprendiendo.

-Bien no se hable mas, veamos cual es tu vestido-, contestó Carmen mientras Alice sonreía entusiasta, Bella cerró los ojos… esta seria una larga tarde.

Balla jamás había imaginado lo difícil que seria decidir, estraple, tirantes, hombros caídos, línea A, falta recta, corsé, etc., al final se había tenido que sentar pues la cabeza la estaba matando.

-Anda Bells-, insistió Alice mientras Bella reía al verla con un montón de telas entre los pies.

-Quiero algo sencillo-, confesó Bella mientras Carmen parecía pensarlo, entró a uno pequeño cuarto y salió con un lindo vestido azul de seda, era recto, con encaje enmarcando el abdomen, y estraple.

-Es hermoso-, confesó Esme mientas Bella tocaba la tela.

-¿Puede hacerse?-, murmuró mirando la prenda

-¡Te gusta!, por fin-, exclamó Alice mientras Bella le sacaba la lengua.

-Tu déjalo en mis manos-, contestó Carmen mientras Bella sonreía.

-Es perfecto-, susurró

-¿Por qué no te lo pruebas?-, pidió Esme mientras Bella tomaba el vestido y entraba al probador, al salir se miró al espejo sin poder creer la forma en que el vestido se amoldaba a su cuerpo.

-Te veras irreal cuando sea blanco-, confesó Esme mientras Bella sonreía.

-Creo que nos hubiera ahorrado unas horas de haberlo mostrado antes Carmen-, confesó Alice ganándose sonrisa de todas.

-Mira ya te quieres ir y yo que pensaba que debías escoger el modelo de tu vestido de dama de honor enana-, bromeó Bella mientras Alice sonreía.

-¡Oíste mama…por que no lo dijiste antes, son tantas cosas!-, se giró hacia Carmen que le dio una mirada a Esme y sonrió girándose hacia una Alice bastante parlanchina

-Gracias Esme, ni siquiera había pensado en todo lo de la boda y…-, Bella desvío la mirada, si lo había pensado pero no había sido capaz de no pensar en que de nuevo desearía a su madre ahí junto a ella, pero Reene había sido clara, ni siquiera la había llamado.

-Bella lo hago por que te quiero…eres como una hija para mi, la mujer que hace a Edward feliz, no hay mas…se que tu y tus padres no están muy bien, no quiero entrometerme solo que sepas que eres parte de esta familia y además…me fascinan las bodas-, pronunció en tono bromista mientras Bella la abrazaba.

-Lo siento son las hormonas-, comentó Bella con ojos llorosos.

-Al menos tu tienes una excusa-, confesó Esme limpiándose la mejilla…

-Rose se va a morir cuando vea el diseño de los vestidos que escogí-, comentó Alice ya de camino a Forks

-Estoy ansiosa de verlos nuevamente-, comentó Bella

-A veces aun me parece demasiado que vivan tan lejos-, confesó Esme mirado hacia la carretera.

-¿Cuándo llegan?-, preguntó Bella.

-El viernes por al noche-, contestó Alice sonriente.

-Saben que Edward no se va a tragar lo de que la junta con el proveedor se prolongo hasta la 7 de la noche verdad-, preguntó ella ya en la puerta de su casa, Esme sonrió y negó.

-Creería que comiste con elefantes rosas…si se lo dices tu-, Bella sonrió y se despidió antes de bajar, el auto arrancó al tiempo que Bella entraba a la casa, cerró la puerta y miró la luz proveniente de la cocina, Edward comía algo de cereal, ya con un pants y una playera.

-Hola Cullen-, saludó ella dándole un beso en los labios.

-Hola Swan…¿se alargo la reunión?-, preguntó el mientras ella reía.

-Me secuestraron…-, confesó ella en modo teatral.

-Lo se…aun estoy dándole las vueltas a donde…a mama se le olvidó preveer que el proveedor con el que supuestamente tendrían la cita llamaría para platicar sobre unos pedidos-, contó Edward sonriente, Bella caminó y se sirvió un vaso de agua.

-¿En serio?, y ellas que creían que yo te lo diría-, Edward sonrió y la miró.

-Me lo dirás-, inquirió mientras Bella le sacaba la lengua.

-No se ocultarte nada…un defecto asqueroso-, bromeó mientras Edward se levantaba y lavaba sus platos.

-Claro Swan…y bien ¿cual fue el martirio?-, preguntó el mientras ella sonreía

-En realidad no fue tan malo…fuimos a ordenar los vestidos para la boda-, confesó mientras Edward se secaba las manos.

-Me imagina algo así-, concordó mientras Bella rodeaba los ojos.

-Claro tu y tu poder de leer mentes-, se giró enjuagando el vaso de agua mientras Edward la abrazaba por detrás,

-¿Cómo es tu vestido?-, murmuró a su oído

-No te lo puedo decir…recuerdas es mala suerte-, contestó ella mientras el la pegaba mas a su cuerpo.

-Una pista-, pidió el besando su cuello tenuemente

-Nop-, contestó ella con los ojos cerrados.

-Tendré que obligarte-, dijo el con una sonrisa mientras Bella se gira en su brazos.

-¿Me estas amenazando Cullen?-, preguntó ella divertida.

-Me vas a decir como va ir vestida mi novia si o no-, preguntó el acariciando su cintura y su cadera.

-Nop…-, sonrió ella mientras el se acercaba a su cuello,

-Dame una pista…solo una-, pidió el mientras besaba su piel.

Edward sonrió cuando ella llevo sus manos a su cabello, su boda se acercaba y no podía ser mas feliz al pensar que faltaba poco para que ella fuera su esposa.

-Edward-, susurró ella mientras el comenzaba a desabrocharle la blusa de botones dejando expuesto su sujetador.

-Una pista-, pidió el besando el borde de sus senos.

-OK-, murmuró ella mientras el se levantaba y la miraba.

-Es blanco-, confesó ella mientras el rodeaba los ojos.

-¿Te crees muy lista verdad?-, preguntó el divertido.

-Es es una pista Cullen-, replicó ella mientras el se acercaba y la cargaba, girándose para dejarla sentaba sobre el desayunador.

La besó mientras ella le quitaba la playera, acariciando su torso denudo.

-Me vas a decir algo mas-, preguntó Edward besando el lóbulo de su oreja, Bella gimió y se mordió el labio.

-No, pero puedo decirte como será el negligé-, contestó divertida mientras el sonreía y la besaba acariciando su pechos quitando el sostén, bajó besando su cuello hasta llegar a su pezones, su lengua jugo y bebió de la esencia de su piel, Bella llevó sus manos a su cabello y lo atrajo de nuevo a su boca.

Las manos de ella bajaron su pantalón, acariciando su erección por sobre su ropa interior, Edward volvió a besarla, recostándola en el desayunador, desabrochó y bajó su pantalón, acariciando sus piernas llevándose consigo sus bragas, dejándola expuesta, Bella cerró los ojos mientras las manos de el recorrían su cuerpo, sintió la boca de el explorar su intimidad, mientras ella gemía y se retorcía.

-Edward-, gimió mientras el sonreía.

-¿Aun no hay pistas?-, inquirió el mientras ella negaba

-No-, Edward sonrió y volvió a besarla, mientras hundía un dedo en ella

-Es largo…el vestido-, jadeó ella mientras el reía.

-Aja-, besó de nuevo mientras ella enterraba las manos en su cabello.

-Es hermoso…y deseo que te guste tanto como a mi-, gimió ella mientras se corría, el subió aun acariciándola tenuemente Bella lo besó al tiempo que el sonreía, besó su cuello y su oreja respirando contra su piel.

-Me encantara si eres tu la que lo llevas-, aseguró mientras ella envolvía las piernas entorno a su cintura, Edward se hundió en ella mientras comenzaban un movimiento cadencioso, entrelazó las manos con las suyas llevándolas sobre su cabeza.

-Serás la novia mas hermosa-, murmuró el

-No eres muy objetivo Cullen-, gimió ella mientras el sonreía.

-Claro Swan-, acaricio unas de su piernas levantándola un poco mas, hundiéndose en ella tanto como era posible mientras ambos llegaban disfrutando de la intimidad del momento.

El fin de semana llegó y con ello la llegaba de Emmet y Rosalie por la tarde se reunieron todos los Cullen como era costumbre par ir por ellos al aeropuerto, Bella estaba feliz de volver a verlos, al igual que toda la familia, el primero en recibirlos fue Jasper que abrazó a su hermana , después a Emmet quien lo alzó de forma cómica soltando risotadas.

Saludaron a sus padres y a Alice hasta que por fin llegaron hasta Edward y Bella.

-Ey conejos….-, saludó Emmet mientras abrazaba a Bella

-Felicidades pequeña…el pequeño Eddie dio en el blanco cierto-, bromeó mientras Bella negaba.

-Ya sabes no me pude resistir-, contestó ella mientras Emmet le daba una palmada a su hermano, Rosalie abrazó a Bella mientras la miraba sonriente.

-Hola Bells-, saludó

-Creí que te había enseñado mejor sobre el pequeño sobrecito-, siguió Emmet molestando a su hermano.

-Ya basta Emmet-, pidió Rosalie mientras el la miraba y caminaba un poco mas.

-Estoy bromeado Rose, es lo único que puedo hacer bien ¿no?-, murmuró en tono bajo mientras Rosalie se llevaba una mano a la cara.

-¿Esta todo bien?-, pregunto Bella ya con Emmet delante caminando junto a sus padres para recoger el equipaje.

-Si-, contestó la rubia yendo hacia Alice y Jasper, Bella miró a Edward y se dio cuenta que no fue la única que lo notó…algo pasaba con esos dos.

Capítulo 10: Miedos y Curas Capítulo 12: Confianza

 
14671190 visitas C C L - Web no oficial de la saga Crepúsculo. Esta obra está bajo licencia de Creative Commons -
 10905 usuarios