
5.20 Vampira…
Aquello a lo que llevaba temiendo desde que era una niña… estaba comenzando.
Todo era borroso.
No podía más que percibir la presencia de unas sombras a mí alrededor. Unos brazos me rodeaban y alzaron del suelo, mientras sentía como me depositaban cuidadosamente en una cama.
Entre espasmos pude escuchar la voz de mi padre. El estaba hablando pero no lograba descifrar el significado de sus palabras. Sabía que había alguien más allí, pero el dolor me consumía.
Oleadas que me abrasaban por dentro iban y venia en un vaivén de pura desesperación. Gritaba, gemía de dolor… me retorcía sobre la cama… pero nada conseguía mitigar mi dolor.
-Jake corre a buscar a Leah…
¿Leah? No pude oír bien lo que decía mi padre pero si pude escuchar perfectamente como pronunciaba el nombre de Jake… y que fuese a buscar a Leah. ¿Leah? ¿Qué pintaba ella en toda aquella historia?
Otra oleada da calor recorrió mis venas caramelizando la poca sangre que aun tenia en ellas. Aquello fue tan doloroso que mi cuerpo empezó a convulsionar entre gemidos de dolor. Note como un nuevo olor entraba en aquella habitación. Mientras mi madre me sujetada de las muñecas. Entre gemidos de dolor percibí que no eran solo mis gritos los que se podían oír allí.
¿De quien eran aquellos gritos? ¿Qué estaba pasando? Ya no me preocupaba lo que le estaba ocurriendo a mi cuerpo. Lo sabia, ella me lo había dicho… algún día iba a ocurrir y todo parecía indicar que ese día era hoy.
Lo había aceptado… ya hace días que había asumido a mi nuevo “yo”… pero mi mayor temor no era en lo que me iba a convertir. Sabia que eran, sus hábitos, lo que podía hacerme daño, sabia en lo que me iba a convertir… ¡Maldita sea vivía rodeada de ellos! ¡Yo misma era mitad vampiro! ¡No tenia por que temer nada de eso! ¡Más de una vez desee lo que me estaba ocurriendo!
No quería seguir siendo el centro de las preocupaciones de la familia.
Pero aun sabiendo mejor que nadie en lo que me iba a convertir al fin… tenia miedo… miedo de no ser aceptada… ¿Y si… el me rechaza? ¡Siempre lo había dicho! ¡El nunca permitiría que me convirtiese en un vampiro! Mientras cientos de preguntas golpeaban mi mente ese dolor que no me dejaba ni respirar pude escuchar la voz de Leah… ¡Era ella la que gritaba de dolor!
Como pude gire la cabeza… las sabanas empapadas en mi propia sangre y en sudor se me pegaban al pelo y la piel… lentamente gire la cabeza hasta que logre vislumbrar aquella escena… la cual nunca podría olvidar. Mi corazón de hizo pedazos.
-Felicidades Jake, tienes un pequeño niño precioso- dijo mi padre sonriendo mientras sostenía entre sus brazos un pequeño bulto que se movía.
La sonrisa que se dibujo en el rostro de Jake. Aquello me conmovió de tal forma que todo el doloroso proceso de conversión al que me veía sometida ceso unos segundos para dejarme asimilar lo que acababa de suceder justo a mi lado.
La felicidad se dibujaba en sus rostros. La escena se empezó a empañar en cuanto comprendí cual era mi papel en aquel teatro.
Las lagrimas empezaron a recorrer mi rostro y aquel dolor que me había otorgado una pequeña tregua volvió y con mayor fuerza. Extenuada observe la cara de mi madre. Que me miraba apenada y con el gesto descompuesto de pura impotencia.
-Lo… Lo… siento- logre decir entre gemidos- perdóname…
Esas fueron las últimas palabras que pude pronunciar antes de perder el control. Todo lo que me estaba sucediendo… todo lo que acababa de ver… había acelerado el proceso… sentí que mi cuerpo iba a explotar.
-¡Edward! ¡Rápido! ¡Algo extraño le esta sucediendo a Nessie! ¡Parece como si… se hubiese acelerado el…! ¡Detenlo Edward! ¡Detenlo!- grito mi madre histérica mientras apretaba aun mas mis muñecas contra el colchón.
Mi corazón comenzó a latir desbocado una vez mas. Mi cuerpo se estremeció y la garganta me quemaba. “Adiós”
Pum Pum Pum
Pum Pum
Pum
Mi corazón se detuvo. Mi respiración ceso. Y mi cuerpo se convirtió en el más frió de los mármoles. Mis ojos inyectados en sangre vieron la luz por primera vez.
Ante la atónita mirada de todos me levante torpemente mientras mi padre me suplicaba que volviese a tumbarme.
Gire suavemente la cabeza y eche para atrás todos aquellos molestos mechones de pelo que cubrían mi cara.
-Nessie… tu… -dijo Jake anonadado.
Le mire con fervor y le dedique una sonrisa calida… quizás desperdicie el ultimo atisbo de calidez que quedaba en mi cuerpo… pero sabia en el fondo… que era a el al único que debía darle ese privilegio.
La cara de todos, asustados, atemorizados por mi nuevo rostro, ¿Por qué me era una escena conocida? Sonreí para mi misma. El ardor que producía la sed era espantoso… deseaba lanzarme sobre el cuello de Leah y destrozarla con mis propias manos. ¡Ella me había robado! ¡Había robado mi vida! La furia me embargo por completo. Y los cristales de la habitación comenzaron a palpitar, con solo un gesto se rompieron cubriendo el suelo con miles de pedazos.
-Nessie… ¡Basta! ¡Debes calmarte!- me grito mi padre- ¡Tu Don es muy peligroso en tu estado!
Pero sonaba tan lejano… a pesar de encontrarse a un paso de mí. Papa...
De un salto pode delicada mente las puntas de mis dedos en el pequeño alfeizar de la ventana. Podía sentir la brisa como nunca antes la había notado sobre mi piel…
-¡Detente Nessie! ¡Que vas hacer! –grito Jake.
Y sin darme la vuelta di un paso hacia delante y me precipite al vació.
O_o_kristy_o_O
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