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—Aquí vienen.
Bella miró por la ventana de la camioneta ante la advertencia de Bree.Marco y Edward estaban bajando las escaleras del porche.Su primo,evidentemente,había pedido prestado una de las camisetas de Jacob,la de Edward que estaba manchada de sangre,faltaba y en su lugar estaba una camiseta de Metallica.
—Luce tan pálido—dijo Victoria con preocupación.
Bella no decía nada ya que todos sabían que a Edward le habían disparado.Su madre le había hecho cerrar los ojos y la alimentó con varias bolsas de sangre una vez que todos se habían instalado en la camioneta.
Después,Bella les dijo lo que había sucedido desde que dejaron el refugio,cuando esperaban a Charlotte y los hombres se les unieron.
—Aquí viene mamá también—dijo Nessy cuando Charlotte vino por el costado de la casa.
—Bueno,podemos irnos—comentó René y luego miró hacia la parte trasera de la camioneta—.Rosalie,¿hay más sangre en el refrigerador?Parece que Edward podría utilizar un poco más.
—Un par de bolsas—respondió la mujer—.¿Te las paso?
—Sí,por favor—dijo René—.Bella,cierra los ojos.
Suspirando,ella cerró sus ojos y escuchó cómo estaban revolviendo.Entonces la puerta lateral de la camioneta se abrió.
—Vamos a estar un poco abarrotados aquí,Edward—escuchó que decía su madre—.Pero no estamos lejos de casa.
—Bella puede sentarse en mi regazo—Edward sonaba mejor que antes,pero su voz seguía siendo débil y cansada,notó con preocupación.
—Bella,puedes abrir los ojos—dijo su madre—.He escondido la sangre.
Ella abrió los ojos con alivio y lo primero que vio fue la cara de Edward cuando él se asomó desde el asiento del copiloto.Le sonrió afectuosamente y le tendió su mano.
Bella agarró sus dedos y se acercó agachada para ponerse en su regazo,dejando su asiento entre su madre y Jane para su tía Charlotte.Rosalie,Nessy y las gemelas estaban amontonadas en el asiento de la parte trasera.
—Tenemos más sangre para ti,Edward—anunció su madre y a continuación ordenó—.Cierra los ojos,Bella.
Suspirando,cerró sus ojos.Bella inclinó la espalda contra la puerta para tratar de permanecer fuera de su camino cuando él se alimentaba.Oyó la puerta de atrás de la camioneta cerrarse cuando Marco terminó de poner el refrigerador vacío lejos.Un momento después,oyó la puerta delantera del otro lado abrirse y la camioneta se sacudió un poco cuando Marco se metió en el asiento del conductor.
Edward aceptó la bolsa de sangre que le alcanzó René y tiró de ella con sus dientes como un viejo profesional.
Había tomado seis bolsas en casa y estaba sintiéndose mucho mejor,pero sabía que probablemente podría tomar varias más.
Su mirada se dirigió hacia Marco cuando el otro hombre cerró su puerta y se puso el cinturón de seguridad.El primo de Bella sonrió abiertamente cuando los miró a ellos dos abrazados en el asiento delantero.Él sacudió la cabeza.
—Ustedes dos son un desastre.No se los puede dejar solos por un minuto,que ya están en problemas—se burló Marco y a continuación,dijo más serio—:¿Tú entiendes Bella,que vas a tener que dejar el trabajo?
—Sí,lo sé—dijo tranquilamente Bella,pero pensando que sería una cosa buena.Los comentarios del Padre Aro acerca de su aprovechamiento de los desfavorecidos le habían dado una punzada de remordimiento.
Nunca más podría considerar morder a otro cliente en el refugio sin evocar esas palabras.Enderezando sus hombros,dijo:
—Supongo que tendré que buscar otro trabajo,algo que no entre en conflicto con el horario de Edward,tal vez.
Edward le dio a su hombro un apretón con la mano que no estaba sosteniendo la bolsa de sangre.
—Entonces,¿cuándo es la boda?—preguntó René.
La pregunta tomó a Edward por sorpresa,pero Bella estaba tan sorprendida que sus ojos se abrieron.Por supuesto,que la bolsa de sangre que había estado presionando en sus dientes aterrizó directamente sobre ella.Vio los ojos de ella dilatarse,entonces gimió—:¡Oh maldito!—y se desplomó contra él.
Edward suspiró y reajustó su sujeción para estar seguro de que ella no escaparía de su regazo.
—Hijo—comenzó René desde el asiento trasero,entonces hizo una pausa para preguntar—.¿Puedo llamarte hijo?
—Uh,sí señora—murmuró él.
—Gracias…hijo.
Edward miró alrededor para ver su sonrisa y entonces a continuación,ella dijo:
—Tienes que concentrarte en curar a Bella de esta fobia.
—Sí—acordó solemne—.Eso está de primero en mi lista de prioridades.Será lo primero mañana por la mañana…eh…por la noche.Después de dormir—terminó Edward finalmente y luego añadió—.Y en cuanto a la boda,tendrá lugar tan pronto como se pueda arreglar.
—Buen chico—René se inclinó hacia adelante y acarició su mejilla,luego le susurró en una voz que solo él y Marco podían escuchar—.Te dije que mi hija te amaría.Eres mi mejor regalo de cumpleaños.
La boca de Edward cayó cuando recordó la primera vez que había sido secuestrado.Después de atarlo a la cama,René había acariciado su mejilla y le había dicho:
“Mi hija va a amarte.¡Tú eres mi mejor regalo de cumpleaños hasta ahora!”.Seguramente no estaba diciéndole que ella había planeado todo esto.Que ella…
Su mirada bajó hacia Bella situada en sus brazos y entonces subió a las sonrientes caras de todos en la camioneta.
Su familia ahora,comprendió.Sintiéndose bastante aturdido,Edward se volvió hacia Marco cuando él habló.
—Bienvenido a la familia,Edward—dijo el vampiro con diversión.
Hola chicas!!!
Bueno,hasta aquí ha llegado la historia!!!
Espero que os haya gustado como han ído surgiendo los acontecimientos y que no os haya parecido muy larga!!!
Un millón de gracías a todas las que me apoyaís y me leeís!!!
Tengo pagina web propia:
http://www.misfanfics.jimdo.com/
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