Un Amor En 1920

Autor: vaneian08
Género: Drama
Fecha Creación: 12/08/2010
Fecha Actualización: 12/09/2010
Finalizado: SI
Votos: 12
Comentarios: 43
Visitas: 46624
Capítulos: 27

En la epoca de 1920 las mujeres eran obligadas a casarse, aunque no existiese el amor. ¿Como sera la vida de Bella una adolecente de alta sociedad , cuando se enamore de un campesino hijo de su nana, Edward Cullen? ¿Que hara su padre para separarlos?

Hola chicas aca les traigo una nueva historia otra q me encanto y la queria compartir con ustedes, la autora es LOkiicita Cullen. Esperoq les guste y la voten y comenten.

Terminada

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Capítulo 9: -"Contigo Quiero Estar"-

«Traje aquí a la mujer correcta, a la mujer que hace que se detenga y se me acelere el corazón a la vez» es que no existía manera de sacar esas palabras de mi cabeza, giraban y giraban y no le encontraba sentido, con todo el corazón deseaba ser yo aquella mujer, pero ¿en que momento nos besamos?, de hecho, es eso lo que he esperado desde que lo vi, nos intérnanos un poco más al prado, la luna daba de lleno en el amplio lugar dando paso a una increíble visión.

-Pequeña ¿recuerdas la historia del niño con el que te diste tu primer beso?- dijo sacándome de mi hilo de pensamientos sin sentido.

-Si, pero…- iba a comenzar a discutir que tenia que ver eso con todo esto.

-Pequeña, yo fui ese niño que te beso, ese niño que te pidió antes de que te fueras que no lo olvidaras, por que sabia que tarde o temprano así seria, ya que tu eras y eres inalcanzable para él- había tristeza en su rostro, a pesar de que estaba confundida y algo enojada por aprovecharse de mi falta de memoria, no quería verlo triste pero ahora que lo pienso más solo le había comentado lo del beso con aquel niño del prado, pero no le había dicho las palabras del pequeño antes de partir, pero como es posible, ¿Será hijo adoptado?, pero nuevamente irrumpió mis pensamientos-Debo confesarte que mentí un poquito al decir que soy el hijo del duque Archibald Masen, si te decía que mi padre es Carlisle, tu padre podía haberte prohibido estar cerca de mi, a pesar de que era un niño tenia y tengo la necesidad de protegerte, de estar cerca de ti, claro sin contar mis sentimientos que son más fuertes cada vez.

¿De que Sentimientos me habla? desde que llegue lo único que hizo fue tratarme de lo peor he ignorándome como si no existiese -Pero entiendo ¿Quién es Anthony? Como inventaste tantas cosas y si se supone que me necesitabas cerca ¿Cómo es que me odiaste tanto cuando llegue hace un par de semanas?- creo que estaba comenzando a enojarme, de cierta forma él me estaba diciendo que necesitaba estar cerca de mi, pero me molestaba que no me lo halla dicho antes, semanas valiosas y sobre todo ahora que mi padre pretende casarme.

-Lo siento, es todo lo que puedo decir, se que me porte como un imbecil, pero dolió cuando te vi en mi casa he hiciste como si nada cuando me viste, pensé en ese entonces que podrías sentirte avergonzada al descubrir que yo no era millonario como te hice creer o que me habías olvidado, aunque la primera opción siempre a sido la que más valida para mi, pero ahora lo entiendo, ahora que me explicaste lo de que no recordabas, pero en ese entonces no lo sabia por favor perdóname y de inventar, solo mentí acerca de que no soy millonario y que mi padre es Carlisle ya que mi segundo nombre es Anthony y mi segundo apellido es Masen, aunque eso solo lo sabe mi familia- debió ver la confusión que produjo sus ultimas palabras –Eso es tema para otro día pequeña, solo trata de no comentarlo con nadie, es algo de lo que en mi casa no se habla mucho.

-¿Por qué tanto misterio?- la curiosa ya era más evidente, pero sabia que me lo diría en otro momento

-Ahora lo que me interesa es que me entiendas y me perdones por no haberte dicho nada y sobre todo por lo cruel que fui, cuando me dijiste de tus nublados recuerdos me sentí terrible, no sabia como abordar el tema, pero siempre he estado igual de pendiente de ti desde que estas aquí.

Entre risitas le confesé mis conjeturas de la vez pasada-Lo se, se te dio horrible el querer fingir que Carlisle te envío a buscarme cuando estuve sola la primera vez que salí con Aura-

-Lo malo es que ahora no se que hacer, tu eres inalcanzable, estas a kilómetros de mi- su rostro estaba lleno de tristeza, pena realmente me estaba carcomiendo el corazón, es que acaso no sabe las ganas que tengo de estar con él, puse su mano en el lugar donde esta mi corazón.

-Aquí estoy, no estoy a kilómetros de ti, estoy frente a ti

-No me refiero de ésta manera, aunque quisiera que tus sentimientos fueran igual que los míos, esto nunca podrá suceder- lo dijo mientras alejaba su mano de mi pecho.

-¿Por qué dices eso?, yo muero por estar contigo- y eso es sinceramente la pura verdad, solo que sonó algo desesperada.

-Pequeña, no lo dices enserio ¿Cómo podría ser?, estoy lejos de ti en muchos sentidos, no creo que sea alguien digno de ti, alguien a quien puedas presentarle a tu padre y ante la sociedad- subió sus manos a mi rostro deslizando sus suaves dedos por mis mejillas, es que ¿a caso no se da cuenta las mil y una sensaciones que ese pequeño detalle provoca en mi?

-Pero claro que lo digo enserio- sabia que lo que diría a continuación me causaría un rojo intenso en el rostro, pero debía hacerlo él dejo expuesto todos sus sentimientos, era mi turno de retribuirle de la misma manera confesándole la absoluta verdad –Cuando te vi en tu casa la primera vez a pesar de no recordarte, fue increíble el impulso que sentí de correr y abrazarte, de estar contigo y así cada vez que estaba en tu casa y tu estabas cerca tenia y tengo la necesidad de tenerte junto a mi, de intentar llamar tu atención pero tu rechazo me dolía, por eso me cuesta creer que puedes sentir algo por mi…- y de nuevo perdí el hilo de la conversación, mi mente empezó a recordar tantas cosas que implícitamente él me estaba demostrando que realmente quería estar cerca de mi, a pesar de que supuestamente no le agradaba, me fue a dejar a mi casa la primera noche, me siguió cuando Carlisle me dejo sola ya que de otro modo no hubiese dado conmigo tan fácilmente, las veces que almorzaba de igual manera junto a nosotros a pesar de que Esme le decía si quería hacerlo en su cuarto o antes que yo llegara. Creo que se dio cuenta de que mi mente estaba volando otra vez ya que pasaba su mano rápidamente delante de mis ojos, buscando mi atención.

- Entendería si no me quieres perdonar- como alguien tan hermoso podía verse así de triste por mi culpa.

-No, no es eso, es solo que me cuesta creer que fuiste tú aquel pequeño- y me ruborice al recordar el pequeño beso.

-Se como hacer para que me creas- cuando termino de decir eso me dio su mejor sonrisa torcida, mi favorita, pero me sentí histérica cuando dejo un mecho de pelo suelto detrás de mi oído y comenzó a acercarse lentamente, deslizando sus dedos desde mi oído pasando por mi mandíbula, mi mentón para luego acariciar mis labios, estaba llegando al colapso de las emociones, cuando creí que este solo acto iba a producir que mi corazón dejara de latir, llego algo mejor pero que muchísimo mejor, sentí su aliento exquisito a centímetros de mi boca, acercándose cada vez más, sus ojos estaban llenos de amor y ternura pero dándome la opción de si quería que continuara o no, cosa que con ansias esperaba, mi mejor manera de demostrarle lo que quería fue cerrando los ojos, deseando que la poca distancia que nos separara al fin se acortara.

Como explicar la sensación cuando poso sus calidos y suaves labios sobre los míos, instantáneamente mi estomago se lleno de mariposas y la piel se me erizo, la manera en que movía sus labios, en que su lengua fue con cautela hasta mi labio inferior pidiendo permiso para el acceso de ella, cosa que gustosa lo hice y de inmediato sentí la caricia de su lengua hacia la mía de forma majestuosa, de manera casi ilegal, su lengua danzando al compás con la mía es la sensación mas maravillosa que pueda existir mientras que con sus manos acariciaba mi rostro, sentía su necesidad de estar en contacto con mi piel de igual manera en que yo lo deseaba, decidí mover mis manos que en ese entonces estaban paralizadas por la emoción subiéndolas lentamente hasta su cintura para pasarlas a su espalda y de esa manera apegarlo más a mi cuerpo, pero es que necesitaba su cercanía cosa que al parecer él noto por que sonrío en mis labios alejándose suave y tiernamente de mi, mis labios sintieron su ausencia quemándome la falta de sus labios.

-Creo que ya recordaste- dijo radiante y divertido a la vez, a mi me hizo ruborizar ya que mis ansias fueron muy notorias –Aunque tengo la sensación que nuestro primer beso fue la milésima parte de bueno que éste- dijo mientras besaba mi frente en señal de respeto.

¿Como seguir respirando después de todo esto? Él cree ser poca cosa por un tema de clases sociales, pero es que ¿a caso no se da cuenta de lo inteligente y hermosa persona que es? No puede creer ser menos por no tener un mansión en la ciudad y otras propiedades para vacacionar, esas son cosas que van y vienes y de ninguna manera nos identifica como seres humanos, pero lo que realmente me esta preocupando es en los términos que quedaremos, por mi estaría toda la vida con él, arriesgaría y dejaría todo lo que me pertenece por herencia con tal de estar con él pero no se que tan lejos llegaría él por mi y él noto mi angustia.

-Quiero que sepas que te quiero, profunda y sinceramente, desde que te conocí sabia que era solo contigo con quien quiero estar pero soy conciente que no es posible, por ti arriesgaría todo, pero te quiero tanto que nunca te pediría que dejes tu forma de vida por mi, no podría soportar verte de la manera en que yo vivo causándote incomodidades y carencias- este Dios realmente me quiere, pero como es posible, no puede estar hablando enserio, como si a mi me importara algo de lo que tengo.

-También te quiero y mucho, la verdad es que no se como decirte cuanto y me asusta, no necesito que me pidas nada, yo por mi cuenta dejaría todo por estar contigo, solo me preocupa ser una molestia y una carga para ti a mi las comodidades no son una preocupación, aunque no lo creas los días que he pasado en tu casa han sido los mejores, no me hicieron falta ni las cenas lujosas, las reuniones sociales que me aburren de sobremanera y los vestidos innecesarios que mi padre me obliga a utilizar, de verdad, nada tienes que pedirme que deje, mi elección es dejar todo por ti sin pensarlo dos veces, si me aceptas solo como me ves ahora, despojándome de todo lo materia seria lo mejor que podría pasarme, entiende que lo único que necesito en la vida es estar contigo- mis palabras lo llenaron de emoción ya que me abrazo de manera efusiva, uniendo nuevamente sus labios a los míos, en un beso lleno de necesidad, deseo y amor.

-No se como lo haremos, pero encontrare la manera de ser digno de ti ante tu padre y la sociedad, de que estés orgullosa y no te avergüences de estar conmigo, de tener lo que te mereces para poder darte un hogar.

¿Un hogar? ¿Él esta pensando en formar un hogar conmigo? las posibilidades son o que Dios se confundió y no se dio cuenta del maravilloso hombre que me dio o es que no le tiene mucho aprecio a Edward que le envía cualquier cosa, de las dos maneras he sido bendecida.

Edward traía una manta dentro de un bolso lo dejo sobre el césped y nos recostamos, al principio el solo hecho de estar uno al lado del otro fue suficiente, de vez en cuando nos besábamos y la sensación seguía siendo la misma, como si nos besáramos por primera vez.

No se en que momento pero el cielo empezó a mostrarse más claro, en definitiva estaba por amanecer y si no quería partir esta misma tarde con mi padre de vuelta a la ciudad tenia que hallar la manera de levantarme de ahí, abandonando el calido abrazo de Edward para volver a la asquerosa realidad, parte de la realidad que aún no hablaba con Edward sobre el inminente compromiso que me esperaba en la ciudad pero es que como todo a comenzado de manera asombrosa, no quería arruinarlo con mi matrimonio forzado, para que discutirlo si tengo decidido hacer algo para evitarlo, el que, es lo que no se.

Le comente que era hora de partir y de seguro que mi rostro fue tan obvio al expresar el miedo de dejarlo y quizás de no volver a verlo, de que alguien nos separe.

-No se si sea la mejor manera y el momento adecuado ya que lo tenia pensado una vez que juntase más dinero pero…uhm… ¿quieres ser mi novia?- se veía sumamente decidido pero de igual manera parecía un niño tímido pidiendo repetición de postre, que adorable.

-Si quieres que te sea sincera… es lo que más deseo- y acto seguido lo bese, no pude aguantarme, se que soy una dama y hay ciertas cosas que tiene que hacerlo los hombres, pero con Edward es todo tan difícil, es difícil contenerse y evitar las demostraciones de amor que le tengo, pero para que decirle que son de Amor, no hay necesidad de asustarlo.

Me abrazo con adoración, dejando muchos besos en todo mi rostro, realmente no podía ser más feliz y esta felicidad la atesoraría a como de lugar.

-Quiero decir que en este momento no tengo mucho dinero pero pronto tendré el suficiente para comprarte un anillo como te mereces, no había pensado en que realmente lo necesitaría ya que nunca creí en la posibilidad de que me aceptaras, pero si me lo permites quiero que tengas algo que represente que eres mía y a la vez demuestre mi amor desinteresado y humilde que te entrego- no entendí mucho lo que comenzó a hacer, de una de las mangas de su suéter saco unas hebras de hilo que hizo que éste le dejara un agujero, cuando intente detenerlo para que no rompiera su suéter él me detuvo y tomo mi mano con la que se lo estaba impidiendo, lo que hizo a continuación me dejo sin palabras, tomo las hebras de hilo y las amarro a mi dedo anular formando un anillo, sentí las lagrimas quemando por salir.

-Este es el símbolo de mi amor eterno y te prometo que pronto lo reemplazare por algo igual de hermoso y valioso como tú- ya no pude aguantarme y las lagrimas comenzaron a desbordar por mis ojos, cubriendo mis mejillas -Se que no es ni un ápice de lo que mereces, por favor no llores si no lo quieres lo entenderé- intento quitar mi nuevo anillo de compromiso, pero se lo impedí, es que él estaba mal interpretando mis lagrimas ya que eran de emoción por tener al mejor hombre en mi vida, lo abracé dejando en el todo el amor que se pueda sentir y expresar, no me importaron mis miedos y simplemente me confesé.

-Te Amo

Me aparto inmediatamente -¿Qué dijiste?- en su rostro se reflejaba el asombro.

-Disculpa, se que fui imprudente y arruine el momento es solo que no pude evitarlo y se me salio, pero prometo no volver a decirlo pero no me dejes- me aferre a él, evitando que se fuera, tenia miedo a que mi error de no haber sido más prudente lo alejara de mi vida, y así fue, a penas me aferre a él comenzó a empujarme hacia atrás.

-Por favor Bella déjame verte, repítelo por favor.

-Prometo no volver a decirlo-dije avergonzada, llena de miedo, mis lágrimas salían a borbotones, pero ahora que sabia que el me quería y cuando lo amaba no quería tenerlo lejos de mi, que idiota fui.

-No tontita, lo otro, que me amas- sus ojos se veían emocionados, creo que fueron sus ojos lo que me llevo a repetir mi estupidez.

-Te Amo- me abrazo nuevamente como si de ello dependiera su vid, elevándome por los aires, girando y besándome efusivamente.

-No pensé que podía existir tanta felicidad y menos toda de una vez conseguida en unos minutos, pequeña yo también te amo más que a mi vida y lo único que he querido es decírtelo, pero temía huyeras.

¿Me ama? Es que no puedo creerlo, él quiere que me sienta menos ridícula ante mi confesión, por eso dice esas cosas para intentar darme apoyo, pero no debe hacer eso ya que las esperanzas comenzaran a crecer en mi.

-Eso es imposible- le dije –tu amor debe ser de seguro de una súper mujer, alguien que sea digna de ti.

-¿Como es que te valoras tan poco? No te das cuenta que me tienes loco de amor por ti, que sin ti no tendrías ganas ni de vivir, créeme y créele a mi corazón- y dejo mi mano en su tibio pecho. Como siempre tan arrebatada nuevamente me robe sus labios en un gran beso.

Caminamos de vuelta a mi casa tomados de las manos, creo que nunca podría llegar a acostumbrarme de estar con alguien como él, perfecto en todos los sentidos, cuando vi que poco a poco nos acercábamos a la gran casa de mi padre, la pena llego de inmediato, tener que dejarlo, pero mi gran consuelo es que seria solo por la mañana, ya que después de que mi padre se marche, correré a buscarlo para que estemos juntos como siempre debe ser.

Me ayudo a abrir silenciosamente la puerta de la cocina, me beso y abrazo dulcemente y me susurro al oído produciendo descargas, chispas y escalofríos por mi cuerpo, pero es que ciertamente con es voz tan sensual ni siquiera una estatua evitaría reaccionar de esa manera.

-Estaré al pendiente cuando tu padre se valla y vendré por ti para que demos un paseo- se alejo deposito un beso en mi nariz, me guiño un ojo y se fue.

Estaba en las nubes, pero debía bajar bruscamente ya que tenia que subir cuidadosamente las escaleras para no ser descubierta, subí las escaleras casi como espía, no emití ningún ruido, había conseguido pasar la primera etapa, sigilosamente camine fuera de su habitación feliz de haber pasado la peor parte pero cuando tenia la mano en el pomo de mi puerta para entrar escuche la voz que menos quería sentir.

-¿Isabella que haces levantada a estas horas de la mañana? Y ¿vestida?- definitivamente era mi padre.

Continuara...

Hola aca tienen otro capitulo este es uno de lo q mas me gusta de la historia. No me digan q no aman mas a Edward como puede ser tan dulce, vieron el era Antony y lo del anillo q hizo con su sueter. Bueno nos vemos en el siguente capitulo.

Capítulo 8: -"Edward Al Rescate"- Capítulo 10: -"Bungalo"-

 
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