—Así que nunca me dijiste…¿Qué pasó?

Bella miraba inexpresivamente mientras Tanya caminaba por su oficina y se sentaba en la silla frente a su escritorio. 

—¿Qué pasó con qué?

—¿Qué pasó con qué?—repitió secamente Tanya—.Cuando dejé mi casa el lunes por la tarde tú te estabas estableciendo por la noche.Cuando regresé el jueves por la mañana después del trabajo,la casa estaba más limpia de lo que la había dejado y allí estaba un gran arreglo de rosas en la mesa de la cocina con una tarjeta de “¡Gracias!” y tú no estabas por ninguna parte.Pudiste haberme dejado una nota con lo que sabes que pasó.

—Lo siento—murmuró Bella.Marco le había dicho que él le había mencionado a Rosalie el lío que había en la casa de Tanya cuando él se había ido del lugar.Aparentemente,ella se lo dijo a Charly y él inmediatamente llamó para que lo limpiaran.Al parecer,quienquiera que él había enviado a casa de Tanya,había hecho un trabajo de limpieza completo.Bella no estaba sorprendida:su tío no podría aceptar menos.Las flores la sorprendieron;nadie le había mencionado aquello a ella.

—Lo siento— repitió ella—.Debería haber pensado en una nota.

—Sí,debiste hacerlo—dijo Tanya con una sonrisa—.Especialmente desde que no te presentaste ayer por la noche a trabajar y tu madre llamara para decir que estabas enferma.La curiosidad estuvo matándome por dos días hasta ahora—suspiró pesadamente—.¿Entonces?Dime.¿Debo entender que tú y tu madre lo habéis arreglado todo?¿Eso significa que ella aceptó a Edward?

—Sí—murmuró Bella con una pequeña sonrisa. Todos habían aceptado a Edward.Después de pasar el día alternativamente haciendo el amor y durmiendo,los dos se habían encontrado con su cama rodeada por sus primos y  Rosalie. 

—¿Aún en la cama?—les preguntó Marco con asombro,cuando Bella les había pestañeado—.Me alegro de que descansaras un poco el resto del día.Temía que trabajaras en la muerte de Edward mientras el resto de nosotros intentaba dormir.

—¿Intentaba dormir?—había preguntado Edward,sofocando un bostezo cuando cambió la posición de cuchara en que habían estado durmiendo y había rodado sobre su espalda bajo las sábanas.

—Sí,bueno,fue difícil—les había informado Marco—.Escuché gritos y chillidos desde esta habitación.

Entonces hizo una pausa mientras observaba con interés cómo Bella se ponía roja,antes de decir:

—Supuse que era una de aquellas malditas pesadillas que dicen que acompañan el cambio.

—Sí,Edward tuvo pesadillas—había dicho Bella,agarrándose gratamente a la excusa. 

—Hmm,eso fue lo que pensé—había murmurado Marco.

—Entonces me di cuenta de que tú también estabas gritando,Bells—había arqueado una ceja y en su rostro,había aparecido una amplia sonrisa y había exclamado—.Sois muy ruidosos en la cama.He oído menos ruido de un gato en celo y su compañero.

Gimiendo cuando todos sus primos se empezaron a reír,Bella había enterrado su rostro en la almohada cuando Edward había intentado poner fin a la fiesta anunciando que él estaba por levantarse y a no ser que quisieran verlo,sería mejor que se marcharan.

A Jane,Rosalie,Nessy y a las gemelas no les molestó la idea de ver un espectáculo gratis,pero René les había pedido que se alejaran un poco para examinar a Edward.Después de echarle una ojeada,había declarado que estaba sano y salvo y había sacado a cada uno fuera del cuarto para que él y Bella pudieran levantarse.

El resto de la tarde la había pasado en el normalmente caótico ambiente familiar,con cada uno feliz y locuaz y diciéndole a Edward todas las cosas que ellos pensaban que él debería saber ahora porque él era uno de ellos.

Bella había estado triste cuando comprendió que era el momento de prepararse para ir a trabajar y que había envidiado a sus primos Marco y Jane por no tener que trabajar esta semana.

Los dos trabajaban para su hermano,pero les había dado la semana libre a insistencias de René para que la ayudaran a entretener a Nessy y a las gemelas durante su visita. Bella no tenía el tipo de trabajo donde ella pudiera tomar una semana sin avisar.Las personas en el refugio dependían de ella.

Edward parecía igualmente decepcionado por que ella tuviera que trabajar y había acompañado a Bella al cuarto para ayudarla a bañarse y cambiarse. Sus esfuerzos la habían retrasado considerablemente y ella habría llegado a trabajar tarde si Marco no hubiera ido a recordarle la hora y ofrecerse a llevarla.

Arrastrándose fuera de la cama,con el pelo húmedo,Bella le había lanzado su ropa y se había cambiado bajo las escaleras con Edward pegado a sus talones.Él los había acompañado a la ciudad,dándole un beso de despedida antes de que ella se bajara del Jeep,entonces los hombres se habían ido y  habían ido al apartamento de Edward a recoger más ropa para regresar a la casa de ella.Le habían convencido de que debería permanecer allí hasta que se acostumbrara a todos los cambios que podría atravesar y Bella estaba casi segura de que él estaba con sus primos recibiendo un curso avanzado de cómo ser vampiro.

—Tierra a Bells,tierra a Bells—repitió Tanya y Bella brincó cuando la otra mujer pasó una mano frente a sus ojos.

—Lo siento—murmuró cuando la mujer la regresó de sus pensamientos—.Sólo estaba pensando.

—¿Pensando?—Tanya arqueó una ceja—.Cariño,comparte algunos de esos pensamientos conmigo,quiero sentir cualquier cosa que hizo que sonrieras como lo hiciste.

Bella se sonrojó por su burla y arrugó la nariz,luego dijo:

—Siento no haber dejado una nota,Tanya.Sobre todo después de ayudarnos como lo hiciste.

—No importa—dijo fácilmente—.Te perdonaré por completo si me dices qué pasó.

Bella vaciló,entonces dijo:

—Bueno,Edward consiguió mudarse con mi primo Marco y él y una amiga de nombre Rosalie despejaron todo—eso era lo más cerca de la verdad que podría llegar a estar,decidió.—Mamá está feliz,soy feliz…—Bella se encogió de hombros—.Todo va sobre ruedas.

Tanya miró su rostro;examinando su expresión minuciosamente,entonces dijo:

—No suenas completamente segura.

Bella bajó su mirada,pero no sabía que decir.Ella no estaba del todo segura.Ella era sobre todo muy feliz,pero…

—¿Es miedo?—preguntó Tanya—Ahora no hay objeciones por parte de Mamá,¿te está dando la oportunidad de tener algunas dudas propias?

Bella comenzó a negarlo y entonces comprendió que podría estar mintiendo.Tenía miedo. 

Tanya no le obligó a que se lo contara.Poco después dijo:

—No podría ser sorpresa si lo es. Me sentía igual cuando me casé.Era miedo,puro y simple.Temía que fuera posible que él no fuera tan maravilloso como parecía y arruinara las cosas y que acabara con mi corazón roto…—suspiró con pesadez—.Y yo tenía razón.

La cabeza de Bella dio un respingo de sorpresa.

Tanya sonrió con ironía ante su desconcertada expresión y añadió:

—El día de su muerte mi corazón se rompió irreparablemente—tenía un gran  dolor dentro—.La vida no siempre es fácil,Bella.Está llena de duras decisiones y angustias y las cosas no siempre resultan como esperamos.La vida simplemente no viene con garantías.Y a veces,por evitar arriesgarse a tener una oportunidad con las personas,evitamos que nos duela el corazón,pero también podemos perdernos los mejores momentos de nuestras vidas.No le tengas miedo al amor.