Al escuchar la voz de Eli volteé de inmediato

-Hola cielo te desperté- pregunte dulcemente acariciando su carita, tratando de ignorar el hecho de que Edward se encontraba en esta misma habitación observándonos, ella asintió rascándose los ojitos-lo siento nena, vuelve a dormir.

Eli recostó su cabecita en mis piernas ya que yo aún me  encontraba sentada en la cama, me quede por un momento observando a Eli  hasta que tome valor suficiente y mire de nuevo a Edward. Él estaba inmóvil, sus ojos observaron detenidamente a Eli con la poca luz que se colaba por la ventana y luego me observo a mí, para después volver a mirar a Eli, al parecer no se había percatado de la presencia de Eli hasta este preciso momento, con mucho cuidado, acomode a Eli en la cama para poder pararme, pero cuando estaba a punto de  lograr mi cometido Eli hablo.

-No mami, quédate- dijo Eli medio dormida agarrándome con sus manitas fuertemente, con un poco de fuerza, pero sin llegar a lastimarla, deshice su agarre, la deje en la cama y la acaricie.

-Ya vengo cielo no me demoro, duerme.

Le di un beso y me dirigí hacia la puerta, pero antes de que lograra abrirla completamente, Edward me agarro del brazo fuertemente, respire profundo ocultando el dolor ante su agarre.

-suéltame-dije lo más alto que me fue posible teniendo en cuenta que Eli estaba en esta misma habitación y no quería que despertara de nuevo, pero aun así intente que mi voz sonara fría y firme-no querías que me fuera, bueno entonces suéltame para poder buscar a Emmett y poder irme de una vez por todas-para mi gran sorpresa, mi voz no se quebró en ningún momento, lo cual agradecí, trate de soltarme de su agarre, pero este se aferró aún más-me haces daño- susurre ya que el dolor era insoportable y el parecía no darse cuenta de lo mucho que me estaba lastimando.

Edward aflojo un poco su agarre, pero no lo suficiente para tener la posibilidad de apartarme de él, me arrastro hasta la pared y allí al fin me soltó, pero para mí mala suerte, no tenía forma de escapar ya que estaba atrapada en medio de la pared y el.

- no, no vas a ningún lado hasta que yo quiera-dijo olvidando que Eli estaba ahí, por lo que la observe  removerse un poco sin llegar a despertarse

-vas a despertarla- dije ignorando por un momento la situación en la que estaba.

Edward me agarro de la muñeca, abrió la puerta sacándome de  allí y cerrándola con el pie, me dirigió hacia otra habitación y una vez adentro, me soltó con brusquedad.

-Claro, ahora lo entiendo- dijo de repente Edward, pero sinceramente no tenía ni idea de a que se estaba refiriendo-¿cuántos años tiene?

-¿Qu…quién?-tartamudee

-La niña, ¿Cuántos años tiene la niña?

-Emmm… 7-susurre confundida por la pregunta, Edward se quedó en silencio por un momento.

-Así que fue eso-susurro- por eso nunca llegaste, nunca volviste a llamar después de que nos fuimos, nunca intentaste siquiera contactarnos, estabas con alguien más… y si la niña tiene 7 años, eso quiere decir…-cayó por un momento y en seguida su cara se crispo en una mueca de rabia y odio- ya estabas embarazada antes de que mi familia se mudara, ¿no te importo nada lo que teníamos?, te revolcaste con un idiota mientras estábamos juntos,-grito- mientras yo trataba de protegerte, de que no te sintieras presionada por ese tema y tú ya te habías revolcado con alguien más, maldita sea-dijo golpeando la pared.

-Edward, yo no...

-Cállate, no eres más que una perra.

Le di una cachetada antes de que pudiera continuar la frase, descargando en ella todo el dolor que me hicieron sentir sus palabras.

-Ni se te ocurra insultarme de nuevo-grite-no eres nadie para hacerlo, no sabes cómo son las cosas ni nada de lo que paso, pero sabes que, piensa lo que se te de la regalada gana-termine y salí corriendo de allí antes de derrumbarme frente a él.

-Emmett-grite a penas salí de aquella habitación-donde demonios estas.-no me importaba si tenía que cargar a Eli hasta mi casa, tenía que salir de este lugar lo más pronto posible.

Me dirigí de nuevo a la habitación donde se encontraba Eli y la acomode en mis brazos, de tal forma que me permitiera mover fácilmente, baje lo más rápido que pude las escaleras con Eli alzada y cuando estaba bajando el ultimo escalón, aparecieron Emmett, Rose y Alice

-¿Pero qué…?

-No preguntes nada Rose, ¿me llevas o me voy caminando?-pregunte haciendo un último intento para no derramar ninguna lagrima.

-No, claro yo te llevo, vamos.-Rose salió rumbo al porche.

-¿Quién es ella bella?-pregunto Alice haciendo referencia a Eli

-Ahora no Alice, por favor, otro día te explico con calma todo, pero no me pidas que lo haga ahora, porque no puedo-dije.

Con las lágrimas rebosando por mis ojos, salí de aquella casa y me subí en el auto de Rose, esperamos unos segundos más a que Emmett saliera y con ello al fin emprendimos marcha. Emmett iba manejando y de vez en cuando me miraba a través del retrovisor, Rose iba igual, cada tanto me miraba. Una vez llegamos a casa Emmett se bajó y sin tiempo de hacer nada cogió a Eli de mis brazos

-yo la llevo-dijo

No opuse resistencia, ya que sinceramente no me sentía con la fuerza necesaria para llevarla yo, entramos a la casa y Emily salió de la cocina a recibirnos

-Oh, Bella que bueno que lle…-paro a mitad de la frase al ver mi rostro lleno de lágrimas- ¿qué paso Bella?-pregunto un poco alarmada

-No te preocupes Emily, yo me encargo de bella, le podrías indicar a Emmett donde queda el cuarto de la nena por favor.

-Claro-dijo Emily, en su cara pude notar toda la preocupación que sentía, pero no estaba de ánimo para explicar nada.

Llegue a mi habitación por inercia, todavía estaba procesando todo lo que me había dicho Edward, no lo podía creer.

-Oh cariño, ¿qué paso?-pregunto Rose abrazándome

Por más que quise no pude contestar, llore en sus brazos por unos instantes, hasta que mi llanto se convirtió en un simple sollozo, me seque el rastro de las lágrimas y me senté en la cama, al instante Rosalie imito mi acción

-Ahora si me puedes contar-pregunto Rose

-Larga historia-dije suspirando

-Tenemos toda la noche

-Lo sé,- suspire pesadamente una vez más, sabiendo que tenía una larga historia que contar-bueno… no sé por dónde empezar

-Porque no empiezas por el principio-sugirió

-bueno… como bien sabes yo ya me conocía con la familia Cullen desde hace mucho tiempo-ella asintió-bueno mi relación con… Edward no fue la misma que tuve con sus hermanos, al principio ninguno de los dos nos soportábamos, el disfrutaba haciéndome bromas y cosas por el estilo, sinceramente nunca pensé que las cosas entre nosotros cambiaran, pero paso, teníamos 12 años y estábamos en vísperas de navidad, yo estaba sentada en la entrada de la casa y luego de unos instantes, Edward se sentó junto a mí y por primera vez después de tantos años, hablamos amenamente, sin molestia alguna, hasta que Emmett y Alice aparecieron y nos miraron de forma picara y burlesca, al principio no entendíamos el porqué de aquello hasta que vimos que arriba de nosotros se encontraba un muérdago, yo iba a salir corriendo de inmediato, pero Edward me agarro de la mano y me dijo que la tradición se tenía que cumplir… y esa fue la primera vez que nos besamos, desde ese día mi relación con el cambio de sobremanera, aprovechábamos cada momento que teníamos para estar juntos y poco antes de cumplir 14 formalizamos nuestro noviazgo, todo era perfecto,  Edward era el mejor novio que podría tener jamás, hasta después de mi cumpleaños décimo quinto, que como bien sabes ellos se fueron…

-Pero aun no entiendo que paso esta tarde en la casa de los Cullen

-Bueno… estaba en la habitación que tu adorado novio-dije sarcásticamente-me indico y resulto siendo la habitación de Edward, me dijo que no tenía derecho de entrar a las habitaciones sin autorización alguna y menos a la de él, pero con ello despertó a Eli, una vez que se durmió de nuevo, Edward parecía en un estado de shock, estaba por salir de la pieza para buscar a Emmett y poder salir de allí, cuando me agarro del brazo, me dirigió a otra habitación y me pregunto por la edad de Eli y cuando le dije que tenía 7 se puso a gritarme como loco, me acuso de haber estado con otra persona mientras que estaba con el-dije sin poder evitar que una que otra lagrima se me escapara-asumió que Eli era mi hija y que había quedado “embarazada” antes de que él se fuera, mientras yo aún estaba con el…

-Pero…

-Espera, aún no he llegado a la mejor parte, antes de que él se marchara hicimos una promesa…

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Bueno chicas, hasta aquí por hoy, dejen sus comentarios, opiniones sugerencias o de más, no olviden escribir… besos guapas.