
4. 35 Confianza
-Leah, no lo voy a hacer – balbuceé en cuanto pude reaccionar.
Carlisle se levantó del sillón en el que estaba sentado y se acercó a mí.
-Este es un problema complicado… Jacob, Leah, comprendo vuestras dos posturas, pero debéis situaros cada uno en el lugar del otro. Sé que es difícil, pero tenéis que intentarlo… Tiene que haber una solución para que ninguno de los dos pierda, no podéis ignorar ni a vuestra manada ni la imprimación.
Esas fueron las últimas palabras que se escucharon antes de que Jake y Leah saliesen disparados de la habitación. Allí me quede… clavada ene l suelo. No sabia que hacer. Que decir, ni siquiera sabia que pensar.
-Es normal cariño, nadie se podía imaginar eso… -hizo una pausa y continuo- nadie podía imaginarse ese tipo de leyendas.
Mire a mi padre intentando comprender, buscar…encontrar respuestas. ¿Es que nunca iba a ser feliz? ¿Por que mi vida me jugaba estas malas pasadas? ¿Leah la madre del hijo de Jake? Se me escapo una lagrima, que mi padre recogió con sumo cuidado.
-Cariño se que estas muy confusa, pero en esta ocasión en Jake el que debe decidir su futuro… y decida lo que decida las consecuencias de ambas decisiones serán…
-¡Edward! ¡Deja de decirle eso a nuestra pequeña! ¡Jacob nunca aceptara tener un niño con Leah!
-Bella –contesto mi padre con suma delicadeza- cariño no solo estamos hablando de Jacob… sino de toda su raza, si el no decide tener ese niño estará… sentenciando a la extinción a su tribu.
-¡Basta! ¡Basta! ¡No quiero oírlo más! – grite desconsolada y arrolle todo lo que encontré a mi paso hasta que salí de la habitación.
Sin poder ver con claridad a causa de las lágrimas que no dejaban de brotar de mis ojos, recorrí todo el pasillo y empecé a subir las escaleras del hotel. No tarde demasiado en llegar a la azotea. Una ligera brisa me acaricio la cara.
Allí sola, sin que nadie pudiese ver el lamentable aspecto que tenia… me derrumbe. Prácticamente deje caer todo el peso de mi cuerpo sobre mis rodillas, estas se doblaron con una facilidad pasmosa… como si fuera de papel, mi cuerpo frágil se arrincono en una pequeña esquina. Mis lágrimas no dejaron de recorrer mi cara en ningún momento, mientras mi corazón dividido en dos partes me torturaba con cada latido. “Debo apoyarle” me decía a mi misma, mientras entre lamentos y sollozos me negaba en rotundo ante esa idea. ¡Como voy a dejar que la única persona que amo se valla así de mi lado! ¡No puedo! ¡No puedo!
Mientras me debatía conmigo misma… mis dedos, enredados entre mis rizos sujetaban la poca serenidad que me quedaba para no volverme loca. Negué con la cabeza varias veces.
Solo quería deshacerme de todas las preguntas que se acumulaban en mi mente… todas ellas querían respuestas… respuestas que no tenia… respuestas que no estaba preparada para dar. Pero fue entonces, cuando una gota salada recorrió la comisura de mis labios, la que me ayudo a recodar aquellas palabras que tan solo unas horas atrás le había dicho a Jake…
“Digas lo que digas Jacob Black… yo siempre te querré, no lo olvides….pase lo que… pase yo siempre te apoyare.”
Y eso es lo que debía hacer. Tenia que confiar en el. Decidiese lo que decidiese… yo le apoyaría. Por que le quiero… es por eso que debo confiar.
Me calme lo más rápido que pude. Disfrute de unos minutos tranquilos en aquella azotea. Sintiendo como cada caricia de la brisa se llevaba con ella un pedacito de mi angustia.
Si Jake decidía tener aquel niño con Leah yo le apoyaría… y si al final decidía romper con todos los lazos con la manada… yo nunca le dejaría solo. Pasase lo que pasase… yo siempre estaría a su lado.
Tenia que encontrar a Jake. Baje las escaleras mas rápido aun que las subí. Me llevo su tiempo encontrar el pasillo del que minutos antes había salido corriendo. Pero todos eran muy parecidos. Al llegar al pasillo me detuve de golpe. No podía imaginarme que ella seria la primera persona que vería antes de hablar con Jake sobre mi decisión. Apoyada contra la pared y mirando hacia el infinito me dedico una sonrisa ausente.
-Aunque no me creas…No quiero a Jake… pero debemos cumplir con… nuestro deber hacia la manada-sus labios se sellaron de nuevo y volvió a sumirse en aquella mirada perdida hacia el vacío.
Con mucho cuidado pase a su lado y me volví a centrar en mi objetivo. Jake. Tenia que hablar con el antes de que decidiese nada. Tenia que saber lo que pensaba. No quería que se viese sometido a tomar una solución equivocada tan solo por mi culpa.
Seguí su rastro. Allí estaba en aquella habitación. Aun conservaba nuestro olor.
Entre sigilosamente y pude ver su silueta a contraluz. Sentado encima de la cama. Abatido y deshecho en mil preguntas, se agarraba el pelo y la cabeza mirando el suelo.
-Jake-intente sacar la mayor de mis sonrisas… falsas- …yo… yo… yo te apoyare… ¡Decidas lo que decidas yo te apoyare! –grite.
-Lo se…
Esas son las únicas palabras que conseguí robarle de sus labios antes de que volviese a sumirse en sus propios pensamientos de nuevo.
O_o_kristy_o_O
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