BAJO LA LUZ DE LA LUNA

Autor: fati_fitimeta
Género: Romance
Fecha Creación: 20/06/2010
Fecha Actualización: 22/06/2010
Finalizado: SI
Votos: 5
Comentarios: 11
Visitas: 59303
Capítulos: 55

 

En el amor vale todo, lo darías todo cuanto quieres a esa persona que te ilumina cada mañana, tan solo con esa sonrisa perfecta.

El lugar más bonito es bajo luz de la luna, a veces en situaciones, como la adolescencia pensamos que esa persona no es correspondida, ¿pero y si se trata de un hombre lobo?

¿Y si ese hombre lobo está imprimado de ti?

En tal caso, pasan obstáculos en nuestra vida, tanto buenos como malos.

Hay que fer valientes y afrontar a esas cosas.

¿Qué pasaría si fueras una chica semi vampira y semi humana?

Fantástico, ¡eh! Pero muchas veces las cosas cambian, pueden ocurrir cosas desagradables, que puedes llegar a tiempo a saber lo que pasa o no, incluso ¿Os habéis parado a pensar que los sueños se hacen realidad? Pues, en algunos casos, las pesadillas si… pueden llegar a ser horribles.

Y pase lo que pase, siempre tendrás a tu lado a la persona que realmente te ama.

Básicamente son cosas de adolescentes, una vida muy aventurera, con muchas cosas.

 Pero es como un cuento de hadas, ¿podrá tener un final feliz?

 

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Capítulo 55: Los Vulturis y Los Cullen

Holaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaa, BUENO ANTES DE QUE EMPECÉIS A LEER QUERÍA DECIROS UNA COSITAA:


YO HACE TIEMPO TENÍA ESTA NOVE Y BUENO AYER POR LA TARDE SE ME OCURRIÓ LA IDEA DE HACER UNA CONTINUACIÓN PERO MÁS CENTRADOS AUN MÁS DE JAKE Y ALMA, UN POCO MÁS MAYORES LOS DOS. ¿VALE? Y A LO MEJOR MAÑANA O DURANTE ESTA SEMANA LA SUBA, ¿OS APETECE? O NO? ES POR PARAR DE ESCRIBIR O NO. BUENO DADME OPINIONES

LA NOVE SE LLAMARÍA: 

POR FIN UNA VIDA "NORMAL" 

 

 

Narra Alma


 

Esa noche me quedé mirando la televisión casi toda la noche, cuando tocaron las tres de la madrugada se paró el reloj de la cocina.

Era una noche terrorífica, había tormenta, mucho viento, la cuál cosa estaba un poco asustada. Pero todo pasa.

Noté una presencia a mí alrededor, me asusté y me giré pero no había nadie.

Fui a la cocina para arreglar el reloj y esa presencia volvió y entonces todo pasó muy rápido.

Un hombre  de tez blanca, los ojos rojos y vestimenta negra, me cogió rápidamente de las muñecas y otro más bajito y rubio de los mismos rasgos me habló.

-         Tranquila, Alma Cullen. Vamos a un sitio. Supongo que querrás acompañarnos.

-         Sois… ¿Los Vulturis? –dije asustada.

-         Formamos parte, pero no somos los oficiales. Vamos a ellos.

Me cogieron de las muñecas cada uno de una y fuimos corriendo, más bien yo fui casi arrastrada, hasta entrar dentro de la torre de la plaza mayor.

Allí el ambiente era como más antiguo. Bajamos unas escaleras que dirigían a una sala grandísima.

Allí abrieron las puertas y aquella chica rubia y el chico moreno estaban al lado de tres grandes tronos ocupados por tres hombres.

-         La silenciosa… -oí decir a la chica rubia.

Entré hasta donde me dejaron, delante de los tres grandes tronos réyales.

-         Buenas noches, Alma Cullen, si no me equivoco. Me llamo Johan Vulturi. Es un gran honor tenerte aquí en nuestras tierras. ¿Hace mucho que estás aquí? –me preguntó.

-         Dos casi tres meses. –dije.

-         Tranquila, eres de la familia, no estés asustada. –dijo Johan.

-         Me encantaría conocer tu vida. –dijo acercándose el otro hombre rubio que ocupaba un trono. –mi nombre es Malayo. –tomó mi mano y cerró los ojos.

-         Tranquila, quiere averiguar toda tu vida. –dijo Johan.

-         Una vida muy interesante, con muchos obstáculos. –dijo apartando su mano de la mía. –Un hombre lobo… No se si sabes que nuestras costumbres, y reglas…

-         Lo sé todo, pero no soy del todo vampiro, también soy humana.

-         Ya decía que aquí corría sangre…-dijo la rubia. –pero es distinta…

-         Sí, tienes razón, nuestra queridísima Janet, tiene un poder sobrenatural, quizás más de uno. Con la que convierte algo interesante. –dijo el otro del trono que aun estaba callado hasta este momento.

-         Es verdad, Marcos, tenemos que empezar cuanto antes con nuestro ritual.

-         ¿Qué ritual? –pregunté cuando los mismos que entraron en mi casa me volvieron a coger y Janet sacó una camilla de hierro puro, me acostaron ahí mismo y me ataron las manos y las piernas. –Quitadme todo esto. No hecho nada para merecer esto.

-         Sí, existir. Hay pocas clases como tú, y por fin que te tenemos en nuestras tierras, en nuestras manos, queremos aplicar un ritual para averiguar cosas de tus dones y habilidades. No nos lo pongas difícil.

-         Puedo haceros una sola pregunta, por favor. –pedí.

-         Di. –dijo Johan.

-         ¿Vais a matarme?

-         Supongo que sobrevivirás. Sí eres tan fuerte de alma.

Entonces ya nada me importaba en estos momentos, mi vida corría peligro, ¿y qué? Ya nada se podría hacer.

 

“Te amo…siempre ha sido así…”  -fue lo último que pensé de Jacob antes de ir perdiendo la cordura poco a poco por unas palabras que estaban diciendo y fijé la vista en mi pecho y barriga, estaban haciendo un tipo de símbolo de cinco puntas y alrededor un circulo de 360º, ese símbolo estaba echo por mi propia sangre, cada línea y circunferencia eran cortes de mi piel que hicieron. Dolía, tanto que dolía, pero cada vez que iba pronunciando esas palabras extrañas, los tres Vulturis… yo iba perdiendo la nesciencia.

 

-         L'umanità dall'incovocamos indietro oggi qui, cinque introduzioni dal sangrada di stella di religione. .. La corona di completamento ad una conoscenza questo;  la separazione per gli isotopi le buone notizie vogliono vedere, era digas erano eleggibili il soggiorno. .. Se era anche la questione partecipa alla quinta misura di comitato a, mostrò lato da lato che l'inesistenza di guida è con l'altra un controllo, su e è forte. Fino a che aumentò. E noi guardiamo alla replica.

 

Dijeron los tres a la vez, era como un ritual o algo parecido.

Entonces cuando terminaron de decir eso, veía borroso, y una quemazón salía de las cicatrices en sangre que tenía en mi cuerpo.

Grité de dolor, en ese momento solo deseé la muerte.

 

“Lo siento muchísimo, es mi fin…te quiero” profané otro grito mientras pensaba en Jacob.

 

 

 


Narra Jacob

 

 

 

 

“Te amo…siempre ha sido así…”  

Resonó en mi cabeza esas palabras que venían de Alma, pero a que venía ahora eso.

Tan solo sería mi imaginación.

Me levanté del sillón y salí hacia el bosque para despejarme.

No entré en fase ya que prefería descansar aquí un poco.

 

“Lo siento muchísimo, es mi fin…te quiero”  Y gritos de dolor y mucho sufrimiento se profanaron en mi cabeza, ahora estaba comprendiendo que Alma estaba herida, necesitaba mi ayuda. Lo notaba, en mi interior algo me decía que estaba en apuros.

El amor de mi vida, corría peligro, y no iba a quedarme aquí esperando y esperando, tenía que ser ahora o nunca.

 

Emprendí camino hasta la casa de Los Cullen.

Entré directamente y vi como estaban preparándose como para irse.

-         ¿Dónde vais? –pregunté.

-         Jacob, ¿qué haces aquí?

-         Eso es lo de menos, por favor, sabéis algo de Alma. –me dolió en pensar en ella, pero eso ahora supongo que no importaba.

-         Sí, nos vamos dentro de nada hacerle una visita… -dijo Bella.

-         ¡Escuchadme todos! –dije para que me prestaran atención, y así fue.

-         No os esperéis a ningún avión, Alice no se si habrás visto algo, pero he tenido un presentimiento horrible cuando unas palabras de Alma me han llegado a mi cabeza, entre gritos de dolor. No se que carajos le estará ocurriendo, pero debo ir ya, tengo un mal presentimiento... –dije a todos.

-         Los Vulturis. –dijo Alice volviendo del trance. –tienen a Alma y acaban de pronunciar un hechizo, puede que no sobreviva, tenemos dos horas, es lo que dura el encantamiento. Vamos.

-         ¿Cómo es qué lo has visto tarde?

-         Algo no me habrá dejado verlo, aunque no lo he visto con claridad.

 

No perdimos tiempo y cogimos y yo en forma lobuna y ellos, fuimos corriendo todo lo que podíamos incluso más, hasta llegar al cabo de hora y media a Italia, Volterra.

Cambié de forma al entrar al pueblo y corrimos a paso normal ya que había gente.

-         Están dentro, en la Torre, aun están con el hechizo tenemos pocos minutos para impedir que se lleven su alma... –anunció Edward.

Entramos al edificio que dijo Edward y bajamos por unas escaleras. Y de allí venían gritos y gritos de dolor, como en pensamiento que vino hacía mi hace apenas unas pocas horas.

Y esas escaleras conducían a una sala muy grande, y bajé la vista hasta encontrar a Alma, derramando sangre y gritando de dolor, mientras aquellos tres hombres pronunciaban cosas en su lengua.

-         ¡Alma! –grité y corrí hacia ella.

Conmigo vino Edward y Bella, los demás se quedaron arriba, ya que éramos demasiados para entrar.

Cuando corrí hacia ella un empujón recibí antes de llegar. Caí al suelo y entonces vi unos ojos rojos. Vampiro. Edward lo cogió en voladas y habló con él.

Mientras tanto yo volví a ponerme en pie y corrí hasta Alma.

-         Alma, Alma, estoy aquí. –dije dándole mi mano.

Alma giró su cabeza a mí y me habló.

-         Jacob... –y profirió otro grito. –haz que pare ya este dolor, por favor... no puedo más.

Entonces algo alucinante vimos, la estrella con un círculo que tenía dibujado en su barriga empezó a iluminarse, y eso que se iluminaba era su sangre, los vampiros estaban sedientos, se les veía, pero resistían a esa tentación.

-         ¡Parad! –dijo Bella y se acercó.

Puso el escudo protegiendo a Alma, y a mí también.

El conjuro estaba acabado, ya había terminado, bueno, al menos eso creíamos.

El escudo de Bella que puso se eliminó y los tres hombres pararon de hablar a la vez y se fijaron en Alma.

-         No puedo... te quiero... –susurró antes de cerrar los ojos.

-         Chicos ha salido mal el conjuro, habría sido un honor tenerla como quinta estrella de la figura, que formaba nuestra quinta Vulturi. Pero el demonio la ha querido para él. –dijo un tipo rubio.

-         Oh, estáis aquí, habéis tardado. –dijo otro hombre.

-         Te voy a matar, Johan, y a todos.

-         Alma... –dijo Bella acariciando el rostro de Alma.

 

Todo estaba ocurriendo muy rápido, la familia completa de Los Cullen entró y combatieron, sabiendo que Alma había ¿muerto? No podía ser.

Entonces se me ocurrió una cosa.

Me dirigí donde estaba Alma, y puse mi mano y su mano en su corazón.

-         Te amo, y siempre será así, Alma... no me dejes. No otra vez. –dije, y derramé unas lágrimas, que cayeron en su rostro.

No sabía que hacer, sabía que ya era demasiado tarde, había fracasado. Ahora sí que nada valía la pena.

Sin esperanzas dejé su mano en su corazón y le di un beso en la frente.

Noté como una corriente, la corriente que pasaba cuándo ella juntaba por primera vez nuestras manos...Y a  los pocos segundos, noté como volvía a respirar, fue un milagro.

-         ¡Alma! ¡Estás viva! –dije sollozando.

-         Jake... –dijo con un hilo de voz.

-         Alma... gracias a Dios.

Todo el mundo se paró de esa pelea y Edward y Bella vinieron.

-         Cariño. –empezaron a decir y a darle besos, muchos besos.

Noté que yo ahí ya sobraba. No quería causar más daños.

Todo el mundo se tranquilizó, aunque Los Vulturis y Los Cullen, no quisieron verse más.

Me fui de esa gran sala.

 

 

 

 

 

Narra Alma

 

 

 

 

Estuve unos minutos muerta, vi la luz del cielo, estuve apunto de cruzar, pero esa electricidad que notaba me hizo revivir, y vi a mi salvador, Jacob.

Pero cuando quise darme cuenta, Jake ya no estaba en la sala, y todo el mundo salvo los Vulturis, estaban conmigo.

Me limpió mi abuelo la gran cantidad de sangre que tenía a mis alrededores y mi herida en la barriga.

Luego cuando me encontré mejor fui a buscar a Jacob, agradecerle después del daño que yo le hiciera hace un par de meses, y que él me salvara.

Lo busqué cuando salimos de aquel horrible sitio, con esperanzas de volver a mi pueblo y dejar esta experiencia vivida aquí en Italia.

 

-         Papá… ¿sabes donde está Jacob? –le pregunté a mi padre.

-         Está en el bosque donde ibas a cazar necesitaba entrar en fase. Ha hecho algo grandísimo por ti, hoy. Si no hubiera sido por él…estarías muerta.

-         Él me salvó, esa corriente de siempre, hizo que volviera aquí.

-         Ve, y dile la verdad, cariño. –me animó mi padre.

 

Fui corriendo tal y como estaba yo, sin cambiarme, fui a buscarlo.

-         Jake… -le llamaba, y por fin vi el pelaje marrón rojizo pasar.

Estaba en su forma lobuna todavía, por lo que no pensé y me eché hacía él, y lo abracé, lloré de alegría, de volverlo a ver, y tenerlo entre mis brazos.

-         Lo siento tanto, Jake… -dije entre lágrima y lágrima.

Cambió de forma y vino hasta a mí. Así en forma humana, había cambiado un montón. Estaba más flaco, y mal. Todo por mi culpa.

-         Jake… yo lo siento…tanto. –dije.

-         Jacob, yo lo hice por nuestro bien, y mira como a resultado al final, casi muerta, y tú salvándome la vida. Otra vez. –aun seguía callado.

-         Sé que no me vas a perdonar, lo entiendo, de verdad. Comprenderé que ya no me quieras ni nada… es normal. Que tonta soy, lo siento. –dije y me giré para irme.

Pero sus brazos me lo impidieron. Sus manos cogieron dulcemente mis muñecas y me paré, lo miré a los ojos, llenos de lágrimas que se derramaron por mi mejilla, y agaché la cara.

-         Lo siento, lo siento… -susurré una y varias veces.

-         Sé por que lo has hecho, y sí estoy enfadado contigo, por tal tontería por irte, te preocupabas demasiado por tu sed, y eso es normal.

-         Ahora sé, que ya lo he controlado, más. ¿Me perdonas por mentirte? No te pido que vuelvas conmigo, solo quiero saberlo, por favor, sí o no.

Entonces un movimiento rápido hizo él, y juntamos nuestros rostros y por fin ese beso que tanto soñaba siempre, por fin lo tuve, y era la realidad.

-         Te amo, Alma.

-         Jake… -dije dándole un abrazo y llorando. –yo también, lo siento por decirte que no te quería, era todo mentira, pero tenía que mentirte. –puso un dedo sobre mi boca para que me callara.

 

-         No importa. –me sonrió. – Lo que importa ahora es que estés bien.

-         Te amo.

 

 

 

 

Después de dos meses…

 

Abandoné la casa de Italia, y no quise ni tuve interés de volver a ir, ni de tener la locura de abandonar otra vez a mi Jake, por suerte ahora estamos otra vez juntos, y vamos enserio, muy enserio. Más que la otra vez, diría yo, es el amor.

Todo tiene finales felices, finales trágicos; este final hubiera sido trágico si no hubiera sido por mi amor de existencia, y afortunadamente ha sido y será feliz.

Y para celebrar todo nuestro amor estamos celebrándolo como la noche en que nos conocimos, en la playa bajo la luz de la luna.

Capítulo 54: Absurdos recuerdos

 


 


 
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