POV Alma

-         ¿Diga?

-         ¡Alma! ¿Cómo estás?

-         ¿Andrew? ¿De verdad eres tú?

-         No… soy el fantasma.   –Idiota – oí de fondo la voz de María.

-         No lo digas ni en broma.

-         Vale, tranquila. Bueno que ya estoy en casa, y te llamaba por si te apetece venirte a cenar tú y Jacob.

Cuando dijo Jacob me saltó una lágrima.

-         Bueno… Jacob no podrá venir lo más seguro, se lo preguntaré. Cuando.

-         Oh, pues ahora a las ocho y media nos vemos en el taberna los serrano. ¿Te parece?

-         Perfecto. Ahora me arreglo y nos vemos en la entrada.

-         Que no sea nada con Jacob.

-         Como me conoces.

-         Demasiado. Hasta ahora.

Empecé arreglarme, era sábado.

Ya me quedaba poco para el examen y estaba menos nerviosa. Ya me lo sabía todo a la perfección.

Escogí un vestido estampado de flores y una chaquetita rosa y los tacones. Me maquillé poco. Las sombras, la ralla del ojo y los labios.

http://www.fotolog.com/just_m0da/45364077  (SERIA ALGO ASI)

Le llamé a Jacob para pedirle disculpas y si quería venirse de cena. Sabía que no sería la mejor situación. Pero me había comportado fatal con él todo por culpa de Nahuel. Pero no me lo cogía. Decidí ir a la Push porque me daba tiempo.

Cogí el monedero y las llaves del coche y emprendí la trayectoria.

Fui hasta la Push y no estaba Jacob. Estaría de guardia.

Le volví a llamar y lo cogió.

-         ¿Diga?

-         Jake… ¿Dónde estás?

-         ¿Ocurre algo?

-         No… he venido aquí a tu casa, pero no estas. Bueno me voy. Lo siento.

-         Ahora voy.

Me senté en el portal de Jake a esperarlo y el móvil empezó a sonar.

-         ¿Diga? –ponía desconocido.

-         Alma. ¿Cómo estás?

-         ¿Cómo tienes mi número? – le había reconocido rápidamente la voz.

-         Eso no tiene importancia.

-         Que quieres de mí.

-         Quiero que te quites ese estúpido collar. – No se porque le hice caso.

Me levanté y empecé a caminar estaba como en trance.

-         Muy bien. Camina hasta la orilla y no respires aunque quieras. Te metes dentro y no salgas. ¿Entendido?

-         Sí, señora.

Empecé a caminar hacia la orilla y cuando estaba apunto de entrar, cogí aire y paré de respirar puse los pies y empezaron a mojarse los tacones.

-         Muy bien. Ahora métete. Adiós.

Di un paso y no se porque lo hacía. No quería sabía lo que iba hacer una misión suicida. Quería respirar pero mi cuerpo me lo impedía.

Pero alguien me cogió en brazos y noté algo en el cuello que me hizo volver.

POV Jacob

Fui corriendo hacia la Push y vi a Alma en la orilla ¿Qué hacía?

Fui corriendo y vi en el suelo el colgante y a pocos metros estaba su teléfono. Cogí el collar y fui corriendo a cogerla.

-         ¡Alma! ¡Para!

Pero parecía que no me escuchaba.

La cogí en brazos y estaba como en trance y le puse el collar.

Cuando me vio saltó a mis brazos llorando.

-         Tranquila. ¿Qué ha ocurrido?

-         Victoria… -me miró a los ojos y noté que estaba asustada. La abracé. – Me llamó en número desconocido, empezó a decirme que me quitara el colgante y le hice caso, no se porque. Luego me dijo que fuera al agua y que no respirara aunque quisiera. Que no tardaría en mor…

-         Tranquila. –la corté. No podía oír la palabra morir, que saliera de su boca. No. – Te quiero. Y voy a cuidar de ti.

-         ¿Y si no puedes? Si no puede nadie. Es que creo que al final creo, que tengo un final. Pronto o tarde.

-         No quiero que vuelvas a decir eso. ¡vale! –me mosqueé.

-         Jacob… lo siento por todo. El otro día… me pasé.

-         Cállate, piensa ahora que solo estás aquí conmigo. Te quiero. – le di un beso.

Me fijé de qué iba bien vestida. ¿Dónde iba?

-         ¿A dónde ibas? –le pregunté.

-         Me ha llamado Andrew. Me iba de cena con ellos, pasaba por si querías venirte conmigo. Pero tranquilo. Ya me voy. Solo quería verte y halar contigo. – se levantó y se iba y me quedé paralizado. Hasta que reaccioné y fui hasta ella.

-         Dos minutos. Y ya hablaremos otro día de Nahuel y toda su mierda. Pero no te voy a dejar sola. –me miró a los ojos. – Por que quiero que sepas que siempre te voy a querer. Porque te quiero.

-         Jake… yo… Te queda un minuto.

Sonreí y fui corriendo a ponerme algo bien. Unos vaqueros y una camisa. Me hice el pelo y cogí dinero. Salí pitando y vi a Alma en su coche, llorando. ¿Qué habría pasado?