Un gran silencio se prolongo después de eso, y Aro fue el que lo rompió.

- Queridos presentes, se han de estar preguntando qué era eso que acaban de contemplar –hizo una
pausa-. Bien, lo que acaban de presentar es un hibrido como nuestros invitados con corazón activo
–se refería a los de mi especie-. Solo que a diferencia, con nuestro pobre compañero han
experimentado –le dedicó una mirada a Nahuel-. ¿No es así?

- No es nuestra culpa –dijo él entre dientes.

- ¡Oh, por supuesto! –coincido Aro-. Es de tu padre.

- ¿Y si ya lo sabe por qué nos tiene aquí a nosotros? –repuso el hibrido- Usted prometió que
no nos haría daño.

Quería hacerlo callar. Contradecir tanto a Aro no era algo que me atreviera a hacer. Miré a Nahuel
a los ojos, y ahora él a mí. Traté de dirigirle una mirada compasiva, una que entendiera, que
dijera “CIERRA EL PICO”.

- Lo sé –contestó el Vulturi al mando-. Nos tomó 8 años encontrarlo. Fue la búsqueda más
larga de todas, eso te lo puedo asegurar Nahuel. Es muy… inteligente –hizo una pausa con el
rostro entristecido-, lástima que esa inteligencia no la use para cosas beneficiosas. En vez de
tristes experimentos…con ustedes.

- Aro, es hora –anunció Marco, y Aro asintió.

- Acompáñenme a observar los diferentes experimentos que ha provocado este señor.

Esto no tenía mucho sentido, cambiar de lugar para ir… ¿A dónde? Me daba miedo ir a ver otras
criaturas como la que se había metido a mi mente, ese dolor tan fuerte… todavía punza mi cabeza.
Alec aún sigue sosteniéndome mientras caminamos, no cree que pueda caminar por mi propia cuenta.
Eso es totalmente ridículo. Que tenga un corazón activo no significa que sea tan frágil como un
humano.

- Yo me encargare de ella –llego Arenha, mientras se dirigía a Alec-. Ordenes de Aro –dijo ella
al ver la desconfianza pintada en el rostro de él.

Me soltó no muy seguro, y después se adelantó para estar al paso de la demás guardia. Ahora
Arenha era la que me sostenía de un brazo.

Me mostró un mensaje que tenía bordado en una parte de su capa.

“Es tiempo”.

- “¿Tiempo de qué?” –le pregunté usando mi don, aprovechando que estaba teniendo contacto
físico con ella.

Sacó de sus ropas un papel sumamente arrugado, doblado por muchos lados. Lo colocó discretamente
en mi mano –de tal forma que ningún vampiro presente se dio cuenta-. Y sin soltarme, se adelantó
un poco a mí.

Supuse que necesitaba que la leyera en estos momentos. Así que la abrí de tal modo que no se
escuchara al momento de abrirla.

“Nessie, al momento que todos estemos en la gran habitación de cristal, tú sabrás el momento en
el que tendrás que revelar la verdad. Entiendes a cual verdad me refiero, me alegra que la hayas
descubierto. Cuando eso sea, el plan que creaste se llevara a cabo”.

espero k les guste sigan votando plizzz