-         Estaba muy feliz por fin había podido encontrar un trabajo tanya  era una buena persona, estaba contenta con ella

-         2 meses después

-         Mis hermanas estaban muy feliz en el trabajo había entrado en unos meses en el trabajo así que estaba muy feliz no ganaba mucho pero si lo suficiente para poder darle a mis hermanas y empezar ahorrar para cuando salieran mis hermanas de estudiar, y encontrar un lugar donde podíamos ir a vivir con ellas así que simplemente seguí con el trabajo, había entrado en enero estábamos en marzo en un mes cumplía años mi hermana Rosalie y tenía que darle algo así que simplemente estaba ahorrando para poder conseguir un bonito regalo

-         Bella – dijo tanya mirándome sonriente

-         Hola Tanya – dije mirándola

-         Como estas- dijo mirándome

-         Bien y tu – dijo mirándome

-         Bien – dije limpiándome las manos de harina estaba haciendo unas galletas

-         Que haces- dije mirándola

-         Estaba haciendo unas galletas – dije mirándola ella me miro y tomo una mirándome

-         Claro que si – dije mirándola

-         Ella tomo la galleta y el probo

-         Se ve deliciosa- dijo mordiéndola – es deliciosa

-         Gracias – dije sonriéndole – me las enseño hacer mi hermana

-         Bueno – dijo mirándome – venía a decirte que voy a salir más temprano así que puedes salir

-         Muchas gracias- dije mirándola – quiero ver  a las monjas y llevarles algunas cosas a mis hermanas

-         Cuando tanya salió Salí con ella y me fui a mi casa para meter  el dinero en mi cofre y coger un poco las galletas que había hecho le di unas a la hermana de aurora y Salí de la casa, camine al internado cuando volví a chocar con una persona

-         Perdón – dije

-         Isabela – dijo sonriéndome

-         Perdón nos conocemos – dije mirándolo

-         Nos chocamos hace un tiempo – dijo mirándome

-         Oh – dije mirándolo – entiendo pero como sabes mi nombre

-         Mi prima- dijo mirándome – trabajas con mi prima en la tienda de galletas- dijo mirándome

-         Oh eres  Edward cullen – dije riendome 

-         Si – dijo sonriéndome – veo que  mi prima te conto sobre mi 

-         Si – dije mirándolo

-         Espero que haya sido algo bueno – dijo mirándome

-         Si claro – dijo mirándome

Nos quedamos mirando y el me sonrió de lado yo baje la mirada sonrojada y metí un mechón detrás de la oreja

-         Tengo que irme – dije mirándolo

-         Espera- dijo mirándome – quieres que te lleve- dijo mirándome

-         No es necesario – dije mirándola – es muy cerca

-         Pero – dijo mirándome – si quieres puedo acompañarte- dijo mirándome

-         No es necesario  de verdad- dijo mirándome

-         Solo déjame que te acompañe a menos que pienses que soy mala persona – dijo mirándome –

-         No claro que no – dije mirándolo – iré a ver a mis hermanas al internado de las monjas y no sé si te dejen entrar- dije mirándolo

-         Bueno – dijo riéndose  – ya me conocen  cuando acompaño a mi mama a entregar las donaciones que hacemos así que  no creo que haya ningún problema

Sonreí mirándolo y nos fuimos caminando hasta el internado y toque el timbre

-         Bella- dijo la madre Bárbara- que bueno tenerte aquí

-         Gracias madre- dije mirándola – como están las chicas

-         Están estudiando pero pasa- dijo

-         Madre espero que no le moleste pero vine con

-         Edward- dijo Bárbara mirándolos

-         Madre buenos días- dijo mirándola

-         Qué bueno tenerte aquí – dijo mirándolo

-         Si vine acompañar a una amiga- dijo mirándome negué riendome

-         Que bien pasen, pasen – dijo la madre Bárbara mirándolo

Cuando entramos al internado nos dejaron sentarnos en la salita mientras nos servían el café

-         Y cuéntame bella que es de tu vida- dijo mirándome la madre

-         Muy bien madre- dije mirándola – estoy trabajando con tanya denali la prima de Edward- dije mirándola – lo que Rosalie me enseño me ha servido mucho

-         Espero algún día poder probar algo de lo que has hecho – dijo mirándome

-         Si madre en este momento traje algunas galletas para que puedan probar todos – dije mirándola

-         Oh que bien

Sonreí mientras sacaba las galletas

-         Bella grito mi hermana lanzándose a mis brazos

-         Ali- dije abrazándola

-         Dios me has hecho tanta falta

-         Y tú a mi pequeña- dije mirándola ella me abrazo más fuerte y sonreí mirándola

-         Y como estas- dijo mirándome

-         Bien – dije mirándolas – ya conseguí un buen trabajo y

-         Hola- dijo Alice mirando a Edward

-         Hola – dijo Edward sonriente

-         Me llamo Alice- dijo mirándolo

-         Me llamo Edward- dijo el sonriéndole

-         Eres novio de mi hermana?- dijo mirándolo

-         Alice no es mi novio solo es el primo de tanya mi jefe- dije mirándola

-         Bella- grito ros mirándome y lanzándose a mis brazos

Nos quedamos toda la noche en el instituto con mis hermanas Edward no se quiso ir así que nos quedamos con el cuándo llegaron las 9 de la noche decidí irme

-         Chicas nos veremos en unos días- dije mirándolas

-         Eso espero – dijo Rosalie mirándome

Me despedí de las monjas

-         Quiere que te lleve algún lugar- dijo Edward mirándome

-         Me encantaría- dije mirándolo- mi casa no es muy lejos de aquí pero bueno ya es muy tarde- dije mirándolo

-         Vamos – dijo el mirándome sonriente

Cuando llegamos a mi casa me dejo en la puerta y me sonrió

-         Espero que nos veamos pronto – dijo mirándome

-         Bueno – dije sonriéndole – espero que así sea

Me despedí de él y entre a mi habitación definitivamente Edward cullen era un hombre muy guapo

EDWARD

-         Edward- dijo mi prima cuando entre

-         Si – dije mirándola

-         Espero que no estés pensando en tener nada con bella- dijo mirándome

-         Pero que – dije

-         No es que sea una mala persona al contrario es una mujer perfecta – dijo mirándome – por esta razón no quiero que te metas  con ella

-         Porque – dije mirándola

-         Porque te conozco Edward- dijo mirándome – sé que tienes una mujer diferente cada noche y no quiero que le hagas daño a bella es una buena mujer

-         Yo veré lo que hago – dije mirándola

Yo simplemente subí a mi habitación para descansar si era una mujer hermosa pero como decía tanya no pensaba sentar cabeza, ella era una mujer hermosa lo admitía pero definitivamente no pensaba perder mi libertad por una cara bonita