Descubriendo a Bella (+18)

Autor: isabella33
Género: + 18
Fecha Creación: 25/01/2012
Fecha Actualización: 17/05/2012
Finalizado: NO
Votos: 5
Comentarios: 10
Visitas: 16186
Capítulos: 8

Edward pasa 2 años lejos de Forks estudiando medicina y cuando regresa descubre a una Bella totalmente diferente a lo que la recordaba y se enamora locamente de ella pero no va ser tan facil como el cree ya que va a tener que competir con Jacob enemigo desde la niñez de el

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Capítulo 5: Juegos de Seduccion

Capitulo 5 juegos de seducción

 

Esta noche he soñado que te hacía el amor sobre tu cama pero cuál ha sido mi desilusión cuando me he despertado con mis sabanas vacías de ti,  y mojadas por mi semen, voy a luchar por lo que quiero voy a luchar por ti, para que la próxima vez que despierte estés en mi cama a mi lado, y mis sabanas estén mojadas de sudor pero de tanto follarte.

 Edward Cullen

 cogí unas de las flores y la olí profundamente, no podía creer que Edward me hubiera mandado flores, y lo más increíble con esa pedazo de nota, Edward Anthony Cullen había soñado conmigo, y no un sueño cualquiera no, un sueño bastante acalorado y húmedo por sus palabras, en ese momento me acorde de mi sueño, sería posible que ambos hubiéramos tenido el mismo sueño a la vez.

Si me quedaba alguna duda de lo que había pasado en la playa esta nota me lo había aclarado, estaba claro que quería algo mas conmigo que una simple amistad, pero antes tenía que solucionar un pequeño gran problema Jacob Black, no quiero hacerle daño pero tampoco quiero perder la oportunidad de tener a Edward, he soñado con él desde que tenía uso de razón y tengo muy claro lo que tengo que hacer.

 el coche de Alice me saco de mis pensamientos. A Alice no le dio tiempo ni a llamar a la puerta ya que al oír su coche me fui hacia la puerta para abrirla.

-woow Bella que precioso ramo de flores ¿Quién ha sido el generoso caballero que le envía flores a mi amiga?-dijo Alice mientras se dirigía a coger la nota

-nadie en particular-dije arrebatándole la  nota antes de que pudiera leerla si Alice leía eso me moriría de vergüenza tenía que pensar algo rápido

-solo son flores Alice

- ¿que solo son flores? entonces por qué no me dejas leer la nota-o mierda que le digo ahora

-está bien me las manda Jake y no te dejo la nota porque es un poco…….-le dije poniéndome el típico rubor en mis mejillas solo de pensar de nuevo lo que la nota expresaba, se que estaba mal pero no podía decirle que esa “nota” era de su hermano Edward

-oh vaya así que tu y Jake ya……

-Alice Nooo, no me he acostado con Jake si es lo que insinúas, bueno que te trae por aquí –le dije para cambiar de tema cosa que pude conseguir, sabía que cuando a Alice se le metía algo entre ceja y ceja era difícil poder quitárselo

-bueno he venido para ayudarte con el equipaje, tu papa llamo esta mañana a Esme para que te quedaras en casa mientras él está en Washington

-bueno deja que prepare mi equipaje y salimos-apenas cogí algo de ropa ya que Alice se había empeñado en que me iba a llevar al centro comercial a renovar todo mi vestuario, que no podía ir por ahí con esas bragas de algodón tan poco femeninas que, que diría Jake cuando las viera, mi cara paso por todos los rojos posibles pero no de pensar en Jacob, si no en mi dios griego y como el que no quiere la cosa Alice me dio la pista para poder poner en marcha mi plan.

En cuestión de minutos llegamos a casa de Alice, bajamos mi “equipaje” y nos dirigimos al salón donde se encontraban Esme y Carlisle.

-Bella cariño es un placer tenerte aquí en casa-dijo Esme mientras se acercaba a darme dos besos

-gracias a ti Esme por permitir que me quede aquí mientras  Charlie esta en Washington

-Alice acompaña a Bella a su habitación que seguro que tendrá ganas de dejar su equipaje-dijo Carlisle muy amablemente

Subimos la escaleras y Alice me indico cual era mi habitación entrando conmigo

Era una habitación bastante amplia con una cama de matrimonio  en el centro, mientras que al lado de la puerta por la que entramos se encontraba un pequeño sofá color beis, en la otra esquina de la habitación había una puerta que cedía a un inmenso baño, con bañera de hidromasaje y justo pegado a la bañera pero independiente de esta una pequeña puerta de cristal que daba a una ducha, mis ojos se fijaron en la puerta que había frente a la que había entrado

-Alice esto……

-esa puerta da a la habitación de al lado –y antes de que pudiera decir quien la ocupaba lo descubrí, viendo entrar a mi dios del Olimpo con cara de sorpresa al vernos allí

-hola Edward, estaba enseñándole la habitación a tu nueva compañera de baño-le dijo Alice con un guiño-Bella se quedara durante unas semanas con nosotros.

-eso será genial- dijo Edward con deseo  en su mirada, cosa que me hubiera extrañado  si no me hubiera llegado esa nota esta mañana.

-bueno yo voy a guardar la ropa en mi armario-dije un poco avergonzada, la verdad es que el tener a Edward tan cerca no me resultaba nada fácil, así que el tener que compartir el baño aun peor.

Guarde la poca ropa, que a Alice le había parecido “pasable,” y me dirigí hacia abajo, puesto que casi era hora de comer, cuando llegue a la cocina Alice Rose y Esme estaban preparando la mesa para cenar, intente echar una mano pero Esme se negó diciendo que era su invitada y que de eso nada.         

-Bella cariño ¿no te gusta la comida? Si quieres te preparo otra cosa-dijo Esme al ver que casi no tocaba la comida de mi plato.

 Pero, como iba a comer con Edward a mi lado rozándome de vez en cuando, y cada vez que lo hacía  me recorría como una pequeña electricidad por todo mi cuerpo ¿Qué pretendía oh Bella no seas tonta, está claro lo que pretende, te lo ha dejado bien claro en la nota de esta mañana y mi corazón, dio un vuelco al recordar esas palabras.

-oh no, Esme no te preocupes, la comida esta deliciosa, lo que pasa es que almorcé tarde, y no tengo mucho apetito

-he campanilla, que planes tienes  para esta tarde-dijo Emmett en tono burlón, sabía que a Alice le odiaba ese mote

-Emmett, te he dicho mil veces que no me llames así, que no soy ningún duende ni lo parezco, te queda claro.

-bueno eso habría que discutirlo-dijo Edward, provocando las risas de todos los presentes en la mesa

-bueno chicos, nosotros nos vamos que dentro de unas horas tenemos que coger un vuelo a N.Y-dijo Carlisle 

-pero algo grave papa-comento Emmett ahora más serio

-no hijo, nada grave, domingo  por la noche estaremos ya de vuelta, sabes que me gusta de vez en cuando visitar las diversas clínicas Cullen, y espero por vuestra parte, que estos dos días sepáis comportaros como personas adultas, sabéis que yo confío en vosotros, pero ahora Bella esta también bajo nuestra responsabilidad-dijo un Carlisle ahora con el semblante serio y casi autoritario

 

Y es que la familia Cullen disponía de varias clínicas, en diversos puntos de los EE.UU, y a Carlisle le gustaba de vez en cuando hacer acto de presencia en ellas, para saber si todo marchaba bien.

Carlisle y Esme se fueron a su habitación a descansar, mientras nosotros nos quedamos en la cocina, esperando que la pequeña duende se le ocurriera algún plan para esa tarde, y el resto del fin de semana ya que sus padres iban a estar ausentes, cosa que a mí me aterrorizo, ya me imaginaba todo el fin de semana dentro del centro comercial de compras, con Alice y Rose. Aunque pensándolo bien, necesitaba despejarme y aclarar mis ideas sobre el tema Cullen/Black, de sobra sabía que mi corazón palpitaba por Edward, pero mi mente me recordaba a Jake y lo bien que se había portado conmigo, en especial estos dos últimos años. Y un gritito procedente de  la voz chillona de Alice me trajo de nuevo a la tierra.

-ya sé que vamos a hacer esta tarde, podríamos aprovechar para darnos un baño en la piscina, y después salir compras

-Aliceee, no me apetece salir de compras-dije haciendo un puchero

- ah, ah no pucheritos no señorita, sabes que tenemos que renovar tu armario-dijo Alice con voz autoritaria, mientras me señalaba con el dedo índice

-está bien, lo que tu digas –le dije con resignación

-yo también me apunto-dijo Edward- necesito comprar algunas cosas

-nosotros pasamos- dijeron Emmett y Rose

- está bien, pero nada de hacer de las vuestras –dijo Jasper en un tono burlón –que os conocemos, y soy muy joven para ser ya tío-mientras le dirigía una mirada a su hermana Rosalie

-mira quien hablo, el que juega a los médicos y las enfermeras, y no precisamente con ropa que digamos-soltó esta vez Emmett

-oh basta ya, creo que a Bella y a mí no nos interesa para nada lo que hacen en sus habitaciones- dijo Edward

-vaya, parece que alguien hace mucho que no saca de fiesta al pequeño Eddie, que esta un poquillo envidiosillo creo que deberías de buscarte una novi….

-cállate Emmett-le dijo Edward antes de que terminara la frase

Después de unos cuantos minutos más entre risas en la cocina, subimos a nuestras habitaciones a ponernos los trajes de baño, para disponernos a bajar a la piscina del jardín, me encontraba en el baño terminado de colocar mi diminuto bikini rosa cortesía de Alice, y mi vista fue hacia la puerta que cruzaba a la habitación de Edward, una pequeña curiosidad  hizo que abriera la puerta un poco, para ver si estaba mi precioso dios, mientras me preguntaba que estaría haciendo.

 mire por el pequeño espacio que había abierto, y lo vi ahí sobre la barandilla de su balcón de espaldas, se había quitado la camisa, quedando solo con unos ajustados jeans que marcaban su precioso culo, se dio la vuelta sin percatarse de la puerta del baño, ya que apenas se podía apreciar desde ese punto, y lo vi caminar hasta su cómoda mientras habría un cajón y rebuscaba en este algo, cuál fue mi sorpresa cuando vi que su mano se dirigía a su labio, colocando un cigarrillo  a la vez que lo encendía de vuelta al balcón, dándome una faceta de chico malo que desconocía y que aun me enloqueció mas.

No sé qué paso por mi mente, si fue la imagen descubierta de chico malo, el calor o simplemente mis hormonas, que en un pequeño impulso cruce el umbral de la puerta, y me dirigí hacia Edward sigilosamente, y le arrebate el cigarrillo que reposaba en su mano derecha.

-que diablo……-y su mirada y su cuerpo se quedaron como congelados

-¿puedo? Le dije, mientras me llevaba el cigarrillo a mis labios sensualmente

-umm humm –fue lo único que logro pronunciar

-vaya Edward Cullen siendo un chico malo, y yo que pensaba que eras un angelito –le dije mientras daba una ligera calada al cigarrillo

-bueno, tú me acabas de demostrar que tampoco eres ningún angelito-me dijo mientras me arrebataba con una mano el cigarrillo, y con la otra me cogía de la cintura pegándome a su firme pecho desnudo, mientras le daba una profunda calada al pitillo, y lo acercaba de nuevo a mis labios con sus dedos, haciendo que un escalofrió recorriera todo mi cuerpo al sentir su miembro duro presionar mi bajo vientre.

Sus labios estaban casi rozando los míos, y nuestras respiraciones empezaban a agitarse cada vez más, un fuerte carraspeo de garganta hizo que nos separáramos precipitadamente

-no me lo puedo creer quien eres tú y que has hecho con mi amiga Bella-dijo Alice en tono de burla Sali de allí disparada por la puerta por donde había entrado anteriormente dirigiéndome a mi habitación, con mi cara mas roja que un tomate por lo que cavaba de ocurrir, yo Bella me muro de vergüenza Swan, había estado coqueteando con Edward dios del Olimpo Cullen, llevando solo un diminuto traje de baño diosssssssssssss, que vergüenza, como era posible que él tuviera ese efecto en mi, el toc toc de la puerta hizo que saliera de mis pensamientos, y a la vez que me tensara, y si era él, y si venía a terminar lo que casi empezamos.

-Bella puedo pasar por favor-dijo Alice tras el otro lado de la puerta

-esta abierto Alice pasa

-dime, que es lo que acabo de ver en la habitación de Edward ¡estabais casi besándoos y ¿fumando? ¿Desde cuándo fumas?

-ya Alice tranquilízate por partes-mientras le explicaba todo.los sentimientos que tenia hacia su hermano, y que me gustaba desde que tenía uso de razón hasta mi lio mental Cullen/Black

-entonces la flores no eran de Jake-negué con mi cabeza-eran de Edward DIOS MI HERMANO MANDANDO FLORES A UNA CHICA entoces la nota –si era de Edward-que decía por fi por fi están cursi como parece-me dijo Alice haciendo pucheros

-Alice ¿Por qué no te sorprende que te haya confesado que estoy loca por tu hermano?

-a eso bueno, hace mucho que lo descubrí, esperaba que algún día tu me lo contaras, me extraño mucho cuando hace dos semanas empezaste a salir con Jake, pensé que… bueno, que te habías olvidado ya de mi hermano, yo siempre he tenido la premonición de que seriamos cuñadas y cuando empezaste a salir con Jacob pensé que mis poderes empezaban a traicionarme, pero cuando ayer vi a Edward babeando por ti en la piscina y tu ruborizarte como una tonta, supe que mis poderes no se equivocaban pero cuando Jake apareció y te marchaste con el pude comprobar los sentimientos de Edward así que quise daros un pequeño empujoncito organizando la salida a la Push. Cuando os vi ir a dar un paseo pensé que podría ocurrir algo entre vosotros, pero cuando llegaste con Jake me desconcentraste totalmente, pero ahora sé lo que pasaba por tu cabecita.  Pero no cambies de tema que ponía en la nota-dijo Alice en tono firme   

-bueno…esto…decía….

-vamos Bella suéltalo ya que decía

-pues que iba a luchar por lo que quería y que iba a luchar por mi-no podía decirle todo el contenido de la nota a Alice me moriría de la vergüenza

-típico de Edward bueno tengo un plan vamos a hacer que sufra un poco, pero tienes que arreglar lo de tus sentimientos hacia los dos y decidirte por uno u otro, Edward es mi hermano y tampoco quiero verlo sufrir

-tranquila Alice –le dije dándole un beso en la mejilla sabia que para ella Edward era uno de sus pilares de apoyo y si el se derrumbaba ella también-después de esta charla contigo creo que sé muy bien lo que quiero

-pues entonces vámonos hacia la piscina que seguro que ya están todos allí.

Bajamos al jardín, y como bien dijo Alice ya estaban todos allí a excepto de Edward que bajo pocos segundos después de nosotras, dejamos nuestras toallas sobre las tumbonas de jardín y nos tiramos al agua.

-Eddie te reto a un largo-le dijo Emmett a Edward en tono burlón

-Emmett te he dicho mil veces

-sí que no te llame Eddie que te llamas Edward-dijo poniendo sus ojos en blanco-aceptas o no gallina

-¿Qué quieres perder?- le dijo Edward desafiante

-tu bebe contra el mío por un día a elegir

-te refieres a mi volvo –dijo un Edward burlón

-Ah, ah tu Aston Martin vanquish v12

-mi vanquish ni lo sueñes –nunca había visto a Edward  rendirse tan pronto, desde pequeños Emmett y el siempre estaban apostando, por lo general ganaba Edward pero alguna vez la victoria era de Emmett.

- a que tienes miedo Eddie –dijo Emmett nombrando el diminutivo que sacaba de las casillas a mi dios, Emmett sabía muy bien que teclas tocar y la respuesta de Edward no se hizo esperar

-está bien vas a tragar más agua que hay en esta piscina cabeza hueca

-bien chicos a la de 3- dijo una Rosalie muy animada- una, dos, TRES

Ambos empezaron a nadar rápidamente, Emmett llevaba la delantera sobre Edward, pero cuando llego al borde de la piscina el giro Edward fue más rápido, sacándole un buen tramo a su hermano y proclamándose campeón

-Emmett tu jepp me pertenece ya te avisare cuando necesite las llaves

-enhorabuena campeón-le dije a Edward dándole un beso en la mejilla teniendo muy claro lo que hacía y lo que quería esa misma tarde hablaría con Jake y se lo explicaría se que al principio no lo entendería y le aria daño pero si seguía mintiéndome de que Jake me gustaba no solo le aria daño a él, sino a mí y a Edward- espero que me des una vuelta con tu bebe-le dije a la vez que salía del agua y me sentaba en una de las tumbonas del jardín

-cuando tú quieras princesa-esa frase hizo que a mi cuerpo le azotara un tremendo escalofrió, dejando aun más claro lo que de verdad quería, y lo que necesitaba, necesitaba a Edward entre mis sabanas.

 

El que Emmett no hiciera ninguna burla al respeto del la frase de su hermano, me dio que pensar entonces mire hacia un rincón de la piscina y vi a la pequeña duende subida al cuello de Emmett por detrás de su espalda, tapándole la boca como vilmente podía, gesto que le agradecí con una mirada, de sobra sabia Alice que poner al cabo su plan me iba a costar un poco ya que era bastante tímida en cuanto a Edward se trataba.

Edward salió de la piscina sentándose en la tumbona de al lado de la mía

-chicos nosotros vamos dentro a ver una película os apetece venir-dijo Alice  

-la verdad es que a mí me apetece quedarme aquí un rato tomando el sol-conteste rezando de que Edward se quedara, la verdad es que necesitaba hablar con el después de la charla que tuve con Alice y hasta el momento no había tenido la oportunidad

-Yo paso de entrar a ver una película con vosotros cuatro, que siempre que me he apuntado he terminado en medio de las dos parejitas y ya sabéis como soléis acabar así que pasando-dijo  Edward recostándose en la tumbona

-pues vosotros os lo perdéis o quizás no-dijo Alice mientras me guiñaba un ojo y me dirigía una mirada picara mientras cruzaba la puerta del porche hacia el interior de la casa.

-Edward yo quería esto… darte las gracias por las rosas de esta mañana son preciosas

-bueno esto…. Yo…. me quería disculpar, Bella creo que fui un poco brusco con la nota, pero quiero que sepas que te quiero y que voy a luchar por lo que quiero.-mi cara se volvió de un color rojo semáforo al oír esas palabras ya las había leído en la nota pero escucharlas de sus labios era como música celestial

-Edward yo… yo también te quiero, estoy enamorada de ti desde que tengo uso de razón, pero antes de empezar algo necesito que me des un poco de tiempo para decírselo a Jake.

-eso quiere decir que….-asentí con mi cabeza sabiendo perfectamente a que se refería, note su fuerte  brazo sobre mi cintura que me empujo hasta su duro pecho, notando su duro miembro en mi bajo vientre, mientras sus labios se fundían con los míos en un cálido y ardiente beso.

 Cuando nos separamos nos quedamos mirando profundamente a los ojos, hasta que note una pequeña quemazón por mi espalda mientras pasaba mi mano para calmarla cosa que se dio cuenta mi amor.

-te pasa algo princesa-me dijo, mientras me acariciaba mi mano libre con su dedo pulgar.

-no se noto un escozor por mi espalda

- a ver deja ver- dijo Edward dándome la vuelta y poniéndome de espaldas a él-Bella tienes toda la espalda rojo del sol

-oh mierda se me olvido ponerme crema solar por ahí

-si quieres te la puedo poner yo-dijo con una aterciopelada voz algo mas roca

-umm humm-le pase la crema solar Edward, y me recosté boca abajo en la tumbona, el se sentó encima poniendo sus piernas una a cada lado de la tumbona en el suelo, mientras sus manos desabrochaban la parte de arriba de mi bikini, enseguida note sus cálidas manos con el frescor de la crema solar haciendo círculos por toda mi espalda, mientras bajaban peligrosamente hacia mi trasero deslizándose un poco por dentro del traje de baño, para subir inmediatamente, hacia mi espalda de nuevo, haciendo  círculos y bajando cada una de sus manos al lateral de mi pechos mientras notaba de nuevo la erección de Edward sobre mis muslos

-Cullen porque la vez que te veo tus manos están sobre mi chica, te dije que te alejaras de ella-dijo Jake apareciendo por una de las puertas traseras del jardín  a la vez que Edward se levantaba veloz para desafiarlo y yo decía tierra trágame

-será porque le gustan más las mías que las tuyas

-basta, parecéis un vampiro y un licántropo peleándose por la misma presa y yo no soy el juguete de nadie –dije gritando enfadada –Jake espérame ahí afuera que voy a cambiarme.

Estaba cambiándome en el baño de mi habitación, pensando en que de hoy no pasaría que aclarara las cosas con Jake, mientras terminaba de abrocharme mis jeans, vi que la puerta que daba a la habitación de Edward se abría dejando ver a un sensual Edward

-Bella, mi amor, siento mucho que te hayas enfadado por mi culpa pero quiero que sepas que para mí no eres ningún juguete, sé que no tenía motivos-dijo mientras sus manos se aferraban a mi cintura

-bueno creo que yo también te debo una disculpa por cómo me he puesto a gritar-le dije mientras el se acercaba a mis labios dándome un dulce apasionado y ardiente beso en los labios, mientras sus manos recorrían todo mi cuerpo de arriba abajo excitándome una y otra vez, Edward solté en un gemido, sus manos empezaron a recorrer por bajo de mi camiseta acariciando mis pechos.

-Edward no ahora no-le pare, aunque me apetecía muchísimo pero tenía que aclarar las cosas con Jake-Jacob esta bajo esperando y tengo que hablar con él no quiero hacerle más daño.

 Edward  soltó un gruñido pero sin separar sus manos de mí, que ahora estaban aferradas a mi cintura, me dio un tierno beso en los labios y me susurro al oído

-está bien pero esta noche no te escapas- me dijo mientras yo me soltaba y me dirigía hacia la puerta para bajar a buscar a Jacob mientras pensaba que esa noche iba a ser muy larga.      

Capítulo 4: sueños rotos Capítulo 6: Nuestro secreto

 


 


 
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