CAPITULO IV. EL INFIERNO EXISTE Y SE LLAMA: FORKS

JACOB POV.

Había sido una pelea campal, nunca me hubiese imaginado que pelearía de tal forma por Bella y por... ese monstruo que crecía dentro de ella.

*Flash Back*

Me había pasado todo el día arreglando la vieja moto de Bella, sabía que no volveria a montarla después de su caída, o al menos yo no la dejaría hacerlo; escuché como un carro aparcó en la entrada de mi taller, así que salí a recibirle.

-¡Hey Bella! no te esperaba, te vez.. horrible- reí para aligerar el ambiente, su cara denotaba nerviosismo y supuse que la mia confusión, intenté mantener una sonrisa mientras me sentaba en un tronco viejo que adornaba la entrada del taller, le hice una seña para que se sentara a mi lado. 

-Jake necesito hablarte- me miró sin siquiera fijarse en mi broma de mal gusto.

-Escupelo ya Bella- me centré en lo que intentaba decirme.

-Jake.. se que no te gusta hablar de esto..- ¡Ja! y sabía muy bien de lo que había venido a hablarme.

-¿De tu chupasangre? pff- reí sarcásticamente -Bella, sabes muy bien que eres tú la que te empeñas en obviar el tema, a mi me da igual si hablas o no de esa sanguijuela- y claro que estaba mintiendo, mientras menos Bella hablara de ese maldito, todos estabamos mejor; ella me miró con cautela, tal vez previniendo que lo que le acababa de decir era una vil mentira. 

-Bien.. Jacob, debes saber que si estuve con Edward- la vi bajar la mirada.

-Por supuesto, fue tu novio ¿no?- pero no comprendí realmente por qué me lo había comentado.

-No me refiero a eso- negó mirandome -Jake, estuve con Edward- abrió mis ojos lo más que pudo intentando que la comprendiera.

-Oh.. -fue lo unico que pude razonar en ese momento -¿por qué me dices esto Bella? sabes lo que siento por ti, no entiendo..- sentía la rabia agolparze dentro de mi ¿que demonios ganaba con restregarme a la cara que lo amaba a él?

-Hay algo que tienes que ver- me calló al instante haciendo una mueca, vi como levantaba su gran sudadera y dejaba ver un enorme vientre.

-¿Qué demonios.. Qué diablos es eso?- me quedé de piedra viendo la imagen -¿es por eso que estás asi? esa maldita sanguijuela dejó que un monstruo creciera en ti- señalé su vientre lleno de cólera, esa sanguijuela la había abandonado, si, pero había dejado su semilla dentro de Bella.

-Eso- la vi acariciar su vientre -como le llamas, no es un monstruo Jacob, es un bebé- ¿qué demonios acababa de decir?

-¡No Bella! escuchate, sé que aun amas a ese chupasangre pero no puedes cegarte, ¡Date cuenta! esa cosa acaba con tu vida, mirate en un espejo ¡Por Dios!- mis gritos se hacían cada vez mas fuertes.

-¿Sabes? esperaba más de ti- la vi quitar las lágrimas que empezaban a escurrir por sus mejillas y caminar hacia su auto, pero yo no podía dejarla ir así, debía convencerla de sacarse esa cosa, eso la estaba matando por dentro.

-Bella debes escucharme, lo que llevas dentro te está matando poco a poco, sabes lo que siento por ti, no puedo verte en ese estado, y mucho menos por culpa de ese maldito- negué con la cabeza casi rogando que me hiciera caso.

-No es su culpa- suspiró, y ahí estaba otra vez, defendiendo a su chupasangre.

-¡No lo protejas más! todo esto es su culpa, sufriste por él cuando te abandonó, y ahora sufres por su hijo, ¡por el monstruo que llevas dentro!- intentó empujarlme pero solo me moví 2 centimetros.

-¡Alejate de mi! no te quiero cerca ni de mi ni de mi hijo, y que te quede algo claro Jacob, voy a tener a mi hijo, así esto me cueste la vida- la vi abrir la puerta de su camioneta y marcharse, dejandome con una gran cólera que necesitaba descargar; entré a mi taller con la respiración entrecortada, intentando concentrarme en algo.

-¡Maldita Sea Bella!- grité estrellando una de las herramientas contra la pared, que quedó hecha añicos justo donde la herramienta se estrelló; mis ojos se empezaban a annegar de lágrimas y yo sentía como el lugar me sofocaba lentamente.

Corrí hacia el bosque mientras me deshacia de mi ropa y la metamorfosis hacia su efecto, la imagen del vientre de Bella inundaba mi mente y sus palabras quemaban mucho más que el efluvio vampírico.

"¿Qué diablos es eso?" los pensamientos de Leah me hicieron alertarme, Demonios! lo habian visto todo.

"Claro que lo hemos visto y ahi que decirselo a Sam"

"¿Para qué Embry?" pensé encolerizado.

"Recuerda el tratado" pude alcanzarlos y correr a la par justo cuando estabamos a unos escasos metros de la Casa de Emily.

Leah y Embry se habían encargado de que Sam viera con sus propios ojos todo lo que yo había visto.

-Debemos hacer algo- La voz Alpha de Sam se hizo presente -Si trae a esa criatura al mundo, acabará con el tratado y empezaremos una guerra- miré atento lo que decía.

-¿Y qué se supone que haremos?- lo miré ya en mi forma humana.

-Acabar con la criatura- Leah intervino mirandonos a todos.

-Sigue adentro de Bella, tendrían que...- y en ese momento lo comprendí, supe lo que querían hacer.

Corrí hasta adentrarme en el bosque a pesar de las órdenes de Sam, ser el alpha no iba a lograr sublevarme, mucho menos obligarme a matar algo inocente, Bella no tenía la culpa de nada; dejé mis 4 patas cuando entré al terreno de mi casa, busqué unos pantalones y corrí hacia la casa Swan.

Las cosas estaban muy tranquilas cuando llegué, supuse que Sam estaría planeando la forma de sorprenderme para no poder proteger a Bella; tomé dos pequeñas piedras y las lancé a su ventana para poder llamar su atención, pocos segundos despés su rostro se asomó mirandome con confusión, y por supuesto que lo entendía.

-¿Jake?- susurró

 -Bella, necesito hablarte, hazte a un lado- la vi salír de la ventana;  de una forma ágil trepé por las enredaderas de la pared y me impulsé en las ramas del árbol hasta entrar en su habitación, no tuvo tiempo de hablar cuando mis brazos se encontraban rodeandola -Bella, disculpa, en verdad disculpa, no queria hacerte sentir mal, quiero ayudarte pero..- mi preocupación podía palparse en el ambiente.

-¿Qué pasa?- preguntó prevenida.

-He metido las 4 patas- suspiré -me transformé en lobo y toda la manada se ha enterado de tu embarazo, Bella, en estas tierras, el tratado dice que no pueden venir vampiros sin que los Quileutes se hagan cargos y pues..-

-Mi bebé será un vampiro- me interrumpió sacando sus propias conclusiones -¿quieren acabar con él?-

-No Bella.. quieren acabar contigo- y sus ojos delataron su miedo.

*Fin del Flash Back*

Suspiré mientras terminaba de ajustar una de las piezas a la motocicleta; todo había sido en vano, haberle ayudado a escapar, haber luchado con Sam y los otros, todo; Bella había desaparecido nuevamente, con vampiros.

*Flask Back*

Me abalancé sobre Paul cuando sus pensamientos me hicieron girar a verlo, el muy maldito pretendía acabar con Bella y yo no podía permitirlo; nuestros dientes se encontraron pero yo solo era una barrera, la manada podía hacerme cualquiero cosa, pero nunca pasaría a donde estaba Bella, con una seña le di a entender que hasta ahí había llegado, y que debía marcharse sola; vi en la mente de Leah como Bella corría y se perdía en el bosque.

"Vamos de una vez Jacob, que ya se fue" Jared se empeñaba en seguir las órdenes de Sam.

"¿Qué no lo entienden? no voy a dejar que la lastimen" mi voz sonaba mas grave y molesta.

"Es una orden Jacob, hazte a un lado" pero ya ni la voz de Sam podía doblegarme "Jacob" lo miré retandolo.

"Yo soy el nieto de Ephraim Black" y me quedé ahí, imponiendo mi voluntad. 

Aquella manada solo me miró, entendiendo lo que había hecho, había renunciado a estar con ellos, y corrí, corrí siguiendo el olor de Bella con ellos pisando mis talones; pero no la encontré, soloestaban sus pertenecias y una blusa rasgada ,manchada de... sangre.

*Fin del Flash Back*

Desde aquel día nada había vuelto a ser igual, Leah y Seth se habían unido a mi "manada" luego de que Sam también intentara doblegarlos, yo nunca quise ser el líder, pero las circunstancias me habían obligado a serlo; habíamos pasado una semana buscando a Bella, pero no lograbamos encontrarla, al menos no podían hacerlo los humanos, la manada de Sam y la mia, sabía muy bien donde estaba Bella y con quien, pero no podíamos hacer nada, ese ya no era nuestra reserva, no era La Push.

Solo podía conformarme con saber que Bella estababa bien y que había logrado lo que quería, estaba con su hija por lo que había podido ver, y lejos de Edward al fin.

La vida en manada no era dificil, nos habiamos adaptado pero los vampiros pasaban cada vez más y más, y yo estaba seguro de que el infierno existía, y ya tenía nombre: Forks.

BIEN SEAN SINCEROS! ¿que les ha parecido hasta ahora el fic? y ¿que tal estuvo este capi? ¿se esperaban que Jacob decidiera darle la espalda a Sam? em el proximo capitulo sabremos como le estará llendo a Bella en su nueva vida.

Oh! esto no podía faltar...

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