Vacaciones y Locuras (+ 18)

Autor: lien
Género: Romance
Fecha Creación: 26/05/2011
Fecha Actualización: 01/08/2012
Finalizado: SI
Votos: 8
Comentarios: 14
Visitas: 95447
Capítulos: 42

 TERMINADO

Bella vive en Forks con su madre desde hace 3 años tras la muerte de su padre, las clases se están acabando y esta por graduarse. Su mejor amiga es Alice con la que siempre anda. Pero todo cambiará con la llegada de los hermanos de Alice y cuando su madre le regale un pasaje para irse de vacaciones a Brasil…

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Capítulo 5: Noche de Locuras II

EDWARD POV

Alice había decidido hacer una fiesta en la piscina, solo a ella se le podían ocurrir esas ideas. Todos estábamos muy entusiasmados con la idea peo sobre todo yo, me moría de ganas de ver como lucía Bella en biquini, aunque no me costaba mucho imaginarlo, ya la había visto en ropa interior. Las chicas se fueron de compras ya que ni Rosalie ni Bella tenían biquini que ponerse. Aquí en Forks casi siempre hacía frío así que no era muy necesario.

Nos quedamos en casa los chicos a preparar las cosas, Emmett iba a preparar unos tragos junto con Jasper y yo por mi parte me iba a poner a preparar unas hamburguesas. Pero antes debía saber algo, algo que me inquietaba, así que me acerqué a  Emmett.

-Emmett que sucedió después que subí a Bella a su habitación.- le dije a mi hermano.

-Nada hermano…digamos que Alice y Jasper parece que se entendieron.- me dijo sonriendo.

-Que quieres decir con que se entendieron.- le volvía a preguntar.

-Digamos que cuando ustedes subieron…ellos se besaron.

Ahora entendía porque se había levantado tan tarde. Eso era bueno, el amor es así, tu no puedes evitar enamorarte de una persona por muy poco que la conozcas. Esa sensación cuando ella está presente, cuando no puedes dejar de mirarla, cuando todo lo que haces es pensar en ella, y todo tu mundo se viene de cabeza. Esa sensación yo la conocía muy bien, era lo mismo que yo sentía por Bella. Al parecer ella también parecía sentir algo por mi, lo podía notar en la forma que me miraba. Como en la mañana, cuando estábamos preparando el desayuno y se me ensució la camisa y me la quité…podía sentir sus ojos clavados en mi, comiéndome con la mirada.

La mañana pasó rápidamente y entre los chicos y yo preparamos algunas hamburguesas y bebidas. Las chicas llegaron entrada la noche, aunque con Alice eso era de esperar, cuando va para las tiendas no tiene para cuando parar, al menos eso seguía normal aquí.

 

Me encontraba al lado de la piscina, en el patio trasero haciendo las hamburguesas, cuando todos se giraron hacia la puerta. Cuando me giré me encontré con Bella…ella quería matarme de un infarto. Llevaba un juego de biquini azul claro del mismo color de mi short, la verdad el biquini le quedaba de lo más bien, hacía resaltar sus curvas y no dejaba mucho a la imaginación. Y ahí me quedé mirándola embobado, ella me miraba  también, ella se acercó y comenzó a ayudarnos, pero sabía que Emmett no podía quedarse callado y tuvo que ir a hablarle.

-Bella, ya tu y Edward se visten a juego, genial.-dijo riéndose, y todos nos echamos a reir.

-Emmett eso no es gracioso, además solo es una coincidencia.- dijo ella.

-Tienes razón eso no es gracioso…pero esto si.

Entonces Emmett cargó a Bella sobre sus hombros y Bella le gritaba para que la soltara pero Emmett no quería hasta que por fin la soltó…pero en la piscina. Su cuerpo mojado se veía aún mejor. Todos nos echamos a  reír y yo no podía dejar de mirarla. Yo me encontraba al lado de Emmett  mirando a Bella cuando ella me hizo una seña y supuse que era para tirar a Emmett. Trate de agarrarlo con mucho trabajo ya que el era mas fuerte, cuando lo logré el no me soltó y caímos los dos a la piscina. Toda la tarde paso divertida entre las bromas de Emmett sobre mi y Bella y por supuesto ella no podía evitar ruborizarse. A cada rato la miraba, no me importaba que ella me viera mirándola, era algo que no podía evitar, se veía tan sexy en ese biquini.

 Al poco rato todos se fueron y yo me quedé en la piscina…pero no solo, Bella se encontraba allí recostada a uno de los muro, estaba tan perdida en sus pensamientos que no se había dado cuenta que se habían ido todos. Ya era bien tarde, estaba todo oscuro, solo tenuemente alumbrado por las luces de la piscina lo que le daba un ambiente un poco romántico. Me acerque a ella sin que se diera cuenta y la abracé por detrás, ella se estremeció ante mi contacto, aunque pudo haber sido por el frío que se comenzaba a sentir. Su piel era tan cálida, suave y el olor…me volvía loco. Ella se giró zafándose de mi, haciendo que yo me separara de ella, pero quedó pegada contra el muro de la piscina y atrapada entre mis brazos los cuales coloque contra el muro de la piscina para evitar que escapara. No podía evitar mirar a esos hermosos ojos color chocolate que hacían que me derritiera. Podía sentir su respiración acelerándose y la mía también, eso sucedía cada ves que ella se encontraba junto a mi.

 

-Bella te sucede algo.-le pregunté sonriendo, su corazón latía muy rápido.

-No nada, donde están todos.- me preguntó cambiando de tema.

-Subieron hace rato ya, al parecer estaban cansados.- le dije.

-Y porque no me avisaron que se iban.

-Yo les dije que te avisaría, estabas tan metida en tus pensamientos que no quisieron molestarte.- le dijo sonriendo.

Y comencé a acercarme a ella, lentamente, podía sentir como se aceleraba más su respiración. Me encantaba saber que ella se ponía así por mi. Levanté una de mis manos y acaricié lentamente su mejilla acercando más mi rostro al de ella, con la otra la agarré por la cintura para pegarla más a mi cuerpo. Mi nariz rozaba su mejilla y ella había cerrado los ojos esperando el beso. Entonces dirigí mis labios hasta su oído.

-Creo que aquí fue donde nos quedamos antes de que Alice nos interrumpiera.- le dije al oído casi en un susurro.

-Esperemos que eso no vuelva a ocurrir.- me dijo como pudo, casi no podía hablar.

-No te preocupes, ya tiene en que entretenerse.- le dije sonriendo

Y diciendo esto comencé a acercar mis labios a los suyos, trataba de ponerla más nerviosa, y lo estaba logrando. Acerque más mis labios hasta que lentamente rozaron los de ella. Sus labios eran cálidos como su cuerpo, justo como me los había imaginado, eran suaves. Había deseado tanto este momento desde que Alice interrumpió y quería disfrutarlo al máximo. Comencé a deslizar mi lengua por todos sus labios, sintiendo como ella se estremecía debajo de mi brazo. La apreté más contra mi y ella abrió sus labios para profundizar más el beso. Nuestras lenguas se tocaron, lentamente recorrí cada espacio de su boca hasta hacerle perder la cordura. Bella colocó sus brazos en mi cuello para hacer más intenso el beso. Ella era increíble, en solo un instante me había echo sentir tantas cosas que nunca antes había sentido. Nos separamos para buscar aire y la miré sonriendo.

-No sabes cuanto había deseado hacer esto.-le dije.

-Y tu no sabes cuanto deseaba yo que lo hicieras.-me dijo.

Y la volvía a besar, no como antes esta con mucha más pasión. Nunca me cansaría de esto, podría estar besándola toda la eternidad. O solo hasta que se nos acabara el aliento.

-Creo que mejor subimos a descansar.- me dijo y yo asentí no sin antes darle primero otro beso.

Subimos a nuestras habitaciones, yo por mucho que quería ir con ella me fui hacia la mía. Me tiré en la cama a pensar en lo que había ocurrido, en los labios de Bella sobre los míos, su cuerpo cálido entre mis brazos…de pronto sentí el agua de la ducha caer y me acordé de algo que más tarde le agradecería a Alice…su habitación y la mía compartían el mismo baño.

Estaba apunto de hacer una locura de la cual posiblemente más tarde  me arrepentiría. Entre al baño tratando de no hacer ruido y que ella no me sintiera. Ella estaba metida bajo la ducha, de espalda a mi, aún tenia el biquini puesto. Me acerqué a ella lentamente y coloqué mis manos alrededor de su cintura, ella no se giró, solo se quedó ahí sintiendo mis brazos sobre su cuerpo, al poco rato habló.

-Tu olor es tan embriagador y tu cuerpo es tan cálido que te reconocería donde fuera Edward.-me dijo girándose  hacia mi y yo no pude evitar sonreír.

-Sabías que tu olor me vuelve loco.- le dije pegándola más a mi.

-Que tanto.-me dijo retándome.

-Lo suficiente para hacer esto.

Y diciendo esto la comencé a besar, lentamente la fui empujando hasta que su espalda tocara la pared. Mis manos vagaban por todo su cuerpo, sintiéndola toda, sintiendo su cuerpo mojado, como su piel se erizaba ante el contacto de mis manos. Ella respondía ante mis caricias colocó sus manos alrededor de mi cuello para intensificar el beso y hacerlo más apasionado. Ella me volvía loco, mis labios recorrían todo su cuerpo desde su cuello hasta sus hombros, mis manos vagaban por todo su cuerpo sin rumbo y ella se dejaba llevar dejando escapar en una que otra ocasión algún gemido.

Los dos estábamos al límite, ambos sabíamos hacia donde nos estaba conduciendo todo esto. Yo no pensaba detenerme y al parecer ella tampoco pensaba hacerlo. Lentamente deslicé mis manos hacia el cierre de la parte superior de su biquini para zafarlo…cuando ella se separó algo de mi.

 

-Sucede algo.- le dije

-No quisiera que las cosas entre nosotros fueran tan rápido, a fin de cuentas te conozco hace solo un día.- me dijo pero yo sabía que había otro motivo.

-Tienes razón, creo que estamos yendo muy rápido.-le dije.

- Me esperas afuera.-me dijo ella.

Yo salí hacia su habitación y me senté en su cama a esperarla. Al poco rato salió y se sentó a mi lado. Yo estaba pensando en lo que estábamos a punto de hacer y la verdad no me hubiera gustado que nuestra primera vez juntos hubiera sido así. Aunque imaginaba cientos de formas para que fuera especial. Bella me sacó de mis pensamientos.

-Te sucede algo.- me dijo.

-No solo estaba pensando en lo sucedido.-le dije sonriendo.

-No te sientas mal pero…-de pronto se calló, estaba nerviosa.

-Pero que.- la alenté a que continuara y ella se ruborizó.

-Es que me da un poco de vergüenza.- me dijo ruborizándose aún más.

-Por favor no me mantengas en suspenso, lo odio.-le dije riéndome.

-Es que no quisiera que fuera de esta forma…quisiera que fuera inolvidable.-me dijo.

Ella pensaba de la misma forma que yo, y ya mi mente estaba pensando en como hacer para que fuera inolvidable…

-Edward por favor dime algo, parece que estas molesto conmigo y eso no me gustaría.- me dijo agachando la mirada.

Me acerqué a ella y lentamente levanté su cabeza para que me mirara, para que viera en mis ojos lo que ella me hacia sentir.

-Bella no te sientas mal, es normal que pienses así, a mi también me gustaría que fuera inolvidable.-le dije sonriendo y perdiéndome en sus ojos

Levanté mi mano hacia su mejilla que todavía se encontraba enrojecida debido al rubor.

-Me encanta cuando te ruborizas, te ves muy linda.- esto hizo que se ruborizara aún más.

-Es por tu culpa, tu me haces sentirme así.-me dijo sonriendo.-Te puedo preguntar algo.- me dijo.

-Lo que quieras.-le dije.

-Como entraste a mi habitación si la puerta está cerrada.- me dijo.

-Quien dijo que entré por tu habitación, entre por la mía ambas comparten el baño.- le dije sonriendo.

-Y supongo que esto fue idea de Alice…recuérdame agradecerle después.-me dijo sonriendo.

Y me acerqué a ella para besarla con ternura con pasión, un beso como tantos otros nos habíamos dado. Pero este era de buenas noches.

-Buenas noches Bella.- le dije y comencé a levantarme para ir a mi habitación.

-Edward, te puedes quedar conmigo esta noche, tengo un poco de frío.- me dijo ella.

-Lo que tu quieras.- le dije y le di otro beso.

Nos acostamos en su cama y la cubrí con una manta, al parecer ella no acababa de acostumbrarse al clima de aquí. Ella se recostó en mi pecho y me abrazó, le di un beso en la frente.

-Que sueñes con los angelitos.-le dije riéndome.

-Que es lo que tiene gracia.-me dijo.

-Nada.- le contesté.

Sabía muy bien que ella hablaba en sueños, al menos aquella noche lo había echo. Sus brazos alrededor de mi se sentían muy suaves. Podía sentir como ella iba perdiendo la batalla contra el sueño y se quedaba dormida. Al poco rato justo como la otra ves ella volvió a mencionar mi nombre en sueños…pero ya el cansancio me estaba venciendo y me dormí también…

BELLA POV

Me desperté y aún era de noche, me encontraba recostada sobre el pecho de Edward sus brazos alrededor de mi se sentían  muy bien y su olor…pero algo llamó más mi atención, sentía como si alguien me estuviera mirando y no era Edward…

Se veía todo oscuro y borroso, pero eso no me impedía ver que había alguien ahí…alguien que al parecer era pequeño. Suavemente movía  a Edward para que se despertara y cuando lo hizo encendió la luz para ver que me sucedía. Cuando lo hizo pude ver quien estaba en la habitación…

Capítulo 4: Noche de Locuras I Capítulo 6: Nuevo Amanecer

 
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