dejen sus ocmentarios y sus votos ya estoy terminando el libro solo quedan dos cap sus opiniones son importantes para mi en cuanto termine este pienso subir otro que se llama Cullen vs Swan
Capítulo 36
Vacaciones de Invierno
Bella POV
Unos días después de que llegué a casa de los Cullen, cayó la primera nevada y justo como yo había predicho ya no pudimos salir de la casa, nos la pasábamos tomando chocolate caliente, o viendo películas los seis. Si estábamos solos, Esme y Carlisle estaban internados en el hospital ya que en esta época era cuando más accidentes había y era cuando más los necesitaban. No había dejado de nevar un solo día y cuando ya llevábamos tres días encerrados sin salir Emmett se cansó.
-Creo que es suficiente, no aguanto más esta trancadera vamos a salir.- dijo Emmett levantándose.
-Emmett que hace mucho frío afuera, y que vas a hacer, los autos no los podemos sacar.- le dijo Alice mientras todos lo mirábamos.
-Pues vamos a divertirnos un poco, que tal una guerra de bolas de nieve.-dijo Emmett mientras todos nos mirábamos.
-Suena muy divertido, pero con una condición.- le dije mientras Edward me miraba sonriendo.
-Y esa condición cual es.- me dijo Emmett mientras todos me miraban.
-Pues que sea por parejas.- le dije mientras me abrazaba a Edward.
-Muy bien, vallan a prepararse.
Subimos hacia nuestra habitación y comenzamos a ponernos unos impermeables, botas para la nieve, gorros, orejeras y guantes. Aquí adentro no hacía tanto frío, por la calefacción y no teníamos tanta ropa puesta, pero de seguro que allá fuera si hacía mucho. Bajamos y nos encontramos con los chicos en la puerta. Salimos con un poco de trabajo ya que había nieve en la entrada en cuanto terminamos de bajar los escalones de la entrada sentí un fuerte impacto de una bola de nieve en mi cabeza, me giré buscando quien había sido y me encontré con Emmett riendo como un idiota. Aproveché mi oportunidad e hice una bola y se la iba a lanzar cuando Edward me la quitó de la mano y se la lanzó el tan fuerte que lo tiró al suelo.
Y así comenzó una guerra de bolas de nieve, Edward y yo corrimos para escondernos en un buen lugar y tratar de que no nos dieran, mientras que Emmett Rosalie y Alice con Jasper se tiraban bolas de nieve sin siquiera esconderse. Así que aprovechamos nosotros que estábamos escondidos y comenzamos a tirarles a todos pero sin que nos vieran. De un momento a otro se forma una gran guerra de bolas de nieve y los chicos se unieron los cuatro contra nosotros dos. Buscamos rápidamente un lugar para escondernos y evadir así la lluvia de bolas de nieve que caía sobre nosotros. Nos escondimos cerca del bosque detrás de una montaña de nieve que había allí. Al cabo de media hora tirándonos bolas de nieve mientras volvíamos a escondernos Edward me señala hacia los árboles, y aprovechando que los chicos habían tomado un descanso nos escabullimos sin que nos vieran. Le dimos la vuelta a la casa para salir detrás de donde ellos se encontraban. Cuando terminaron el descanso volvieron nuevamente a su sitio y empezaron a tirar bolas de nieva hacia donde debíamos estar nosotros. Y aprovechando que ellos estaban entretenidos comenzamos a tirarles nieve a ellos. Cuando se dieron cuenta se giraron y comenzaron a tirarnos nuevamente a nosotros.
Esta era la rutina de casi todos los días, aunque en alguna que otra ocasión íbamos a patinar al lago que quedaba cerca de la casa y estaba congelado. Aún recuerdo el primer día que fuimos a patinar, nunca lo olvidaré.
Flash Back
Era una fría mañana aunque hoy hacía más frío que de costumbre, pero eso para mi no era problema, con el cálido cuerpo de Edward a mi lado casi se podía decir que no sentía frío alguno. Cada vez que me besaba la temperatura en la habitación subía cada vez más, se podía decir que afuera no estaba nevando, ya que cuando terminábamos de hacer el amor ambos estábamos sudando. Para cuando nos levantamos que bajamos a desayunar los chicos ya se encontraban allí.
-Parece que a ustedes no les molesta el frío para dormir.- nos dijo Emmett mientras ambos reíamos.
-Al contrario Emmett nos encanta el frío para dormir.- le contesté mientras Edward me besaba.
-Y hoy que vamos a hacer.- preguntó Edward mientras nos sentábamos a desayunar.
-Que les parece ir a patinar al lago.-dijo Alice muy emocionada.
-No creo que sea una buena idea.- dije yo mientras Alice se me quedaba mirando.
-Y eso porque no.
-Recuerdas que nunca te acompañé que cada vez que me invitabas.
-Si lo recuerdo te ibas con tu madre a un lugar más cálido.
-Pues te mentí, no me iba a ninguna parte, la verdad es que no sé patinar.- dije mientras todos me miraban.
-Pues tu si tienes suerte, te va a tocar el mejor profesor.- me dijo Emmett.
-Vamos chicos no es para tanto, yo no patino tan bien.- dijo Edward.
-Si claro por eso no quisiste estar en el equipo de jockey sobre hielo.- le dijo Emmett.
-No eso lo hice porque me gustaba más la música que el jockey.
-Entonces si sabes patinar.- le pregunté mientras el me miraba sonriendo.
-Si sé patinar.
Después de terminar de desayunar salimos de la casa, cada cual con un par de patines en la mano y nos dirigimos hacia el lago. Una vez allí todos nos pusimos los patines y los chicos comenzaron a patinar en el lago mientras yo me quedaba mirando mis pies.
-Edward que se supone que debo hacer ahora.
-Tu no harás nada, yo te voy a cargar y te voy a llevar hasta el hielo.
Y diciendo esto Edward me cargó en sus brazos y caminó conmigo hacia el hielo y una vez allí patinó conmigo hasta el medio del lago. Cuando estábamos en el centro del lago me puso sobre mis pies mientras me sostenía por los brazos.
-Edward no me sueltes.- le dije un poco asustada.
-Eso jamás lo haría.- me dijo mientras me apretaba contra el y me besaba.
-Vas a besarme o a enseñarme a patinar.-le dije sonriendo.
-Las dos cosas.- me dijo mientras volvía a besarme.-Bien ahora que ya te he besado voy a enseñarte a patinar.
Edward me tomó de las dos manos mientras patinaba de espaldas y tiraba de mi indicándome que fuera moviendo mis pies. Poco a poco nos fuimos moviendo hasta que llegamos a una orilla del lago. Edward no me soltó en ningún momento y cuando llegamos al otro extremo del lago volvimos nuevamente hacia el centro, pero esta vez el iba detrás de mi. Iba guiándome con sus manos en mis caderas, mientras me susurraba en el oído que moviera el pie derecho o el izquierdo. Al cabo de una hora ya me había enseñado lo básico y me soltó, la verdad que no era tan difícil así que me impulsé un poco, pero aún no sabía girar y a Edward no le dio tiempo alcanzarme y terminé de cabeza en una gran loma de nieve.
-Bella estas bien.- me dijo Edward cuando llegó a donde yo estaba y me ayudaba a levantarme.
-Si estoy bien, ya estoy adaptada a caerme.-le dije sonriendo.
- Deberías tomártelo con más calma, no se aprende a patinar en un día.- me dijo sonriendo.
- El problema es que no sé doblar, por eso me caí.-le dije mientras regresábamos al hielo.
Así continuamos el día, entre caídas mías y otras ridículas de Emmett, para el final de la tarde había aprendido a doblar y ya no me caía tanto. Después de eso casi todos los días íbamos Edward y yo al lago a patinar y en alguna que otra ocasión iban los chicos también.
Fin Flashback
El tiempo de las vacaciones pasó muy rápido y cuando nos dimos cuenta ya era acción de gracias. Ese día nos reunimos todos en la casa, mamá no había podido ir por la nevada. Hicimos una gran cena familiar con un enorme pavo y después de la cena nos reunimos todos en la sala donde se encontraba el enorme árbol de navidad rodeado de regalos. Todos nos sentamos alrededor del árbol excepto Esme y Carlisle que se sentaron en un sofá. Estábamos sentados por parejas cuando en un momento Edward me susurró al oído.
-Es la cena de acción de gracias, porque vas a agradecer.
-Voy a agradecer el día en que te conocí, y tu.
-Pues creo que tengo que agradecer a mi querida hermana, porque de ella no haberse hecho amiga tuya yo jamás hubiera conocido al amor de mi vida.- me dijo el mientras me besaba.
-Sabes ahora que lo pienso bien, creo que debo agradecer por algo más.
-Ah si y eso que es.
Pero había algo que ninguno sabía solo las chicas y Carlisle que prometieron guardar silencio. Había tenido mis dudas pero una semana atrás las había aclarado, ahora si estaba cien por ciento segura. Estaba embarazada.
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