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 Bella POV Nuevamente lunes por la mañana. Aun odiaba las mañanas de los lunes. Otro fin  de semana llena de boberías y diversión con los Cullen se había terminado y  necesitaba alistarme para la escuela. Edward debió de llevarme arriba, por que  lo ultimo que recordaba era a él tocando mi nana en el piano. Me desperté en  otras dos ocasiones, una cuando Eddie lloró por que Edward había dejado de tocar  y otra por que Emmett había bajado las escaleras aclamando su victoria por haber  cambiado un pañal con popó sin sentir arcadas ni una sola vez y sin usar  indumentaria protectora. Me di la vuelta viendo a Edward sentado en el sofa con Eddie en brazos. Que  pareja esos dos, mis buhos nocturnos. "Entonces, ahora que el sol sale el  pequeño vampiro duerme ¿verdad?" dije mientras me estiraba, saliendo de la  cama. "Si, finalmente duerme." Edward se puso de pie y lo acostó en la cuna antes  de acercarse y darme un abrazo. "A pesar de que extrañaré al pequeño estaré feliz de ser la única que pueda  pasar las noches acurrucada contigo." Le di un rapido beso y fui a  cambiarme. La casa de los Cullen estaba excepcionalmente tranquila mientras bajábamos.  Alice y Elizabeth estaban sentadas con sweaters y con calzas blancas haciendo  juego. Jasper estaba en la computadora con Emmett, trabajando en algo que los  tenia hablando bastante rápido como para que pudiera seguirlos. Rosalie tenia a  Everett en el sofa y le estaba aplicando lo que parecia ser maquillaje al dedo  herido para hacerlo menos notable. Elliott estaba sentado en los brazos de Esme,  tomando un biberón antes de ir a la escuela. Edward y yo fuimos a la cocina para darle un biberon a Eddie. Me senté en la  mesa de la cocina y mire a Edward pasear por la sala, preparando la botella y  luego alcanzándomela con una sonrisa. "¿Por qué tan callada?" me preguntó  mirándome a los ojos. Senti las lagrimas comenzando a llenar mis ojos y  rapidamente mire a Eddie. "Es Lunes, tu sabes cuanto odio los lunes." Murmuré rehusándome a mirarle. Le  escuché suspirar y supe que nuevamente estaba frustrado por no poder leer mi  mente. Eddie tenía su biberón, Elliott terminó el suyo y estábamos listos para ir al  instituto. Jasper y Emmett debieron de tener éxito con lo que fuera que  estuvieran haciendo por que los vi chocar los cinco y Edward comenzó a reír. "¿De que estan tan felices?" pregunté. "Ellos, a diferencia de ti, les encanta los lunes." Respondió Edward con una  sonrisa complice. No traté de esconder mi confusión, lo cual solo le hizo reír  más. "Ya veras Bella. Vamos, tenemos que ir al instituto. Yo manejo…" llevó a  Eddie al camaro y lo acomodó en su sillita. "Buenos dias hermoso auto nuevo que no puedo manejar." Dije mientras palmeaba  el techo y me sentaba en el asiento delantero. Edward se rio de mi. Nosotros nos fuimos primeros de la casa, Emmett y Rose estaban acomodando a  los chicos en el asiento del patrullero. Creo que Rosalie sentía que estarían  mas seguros allí y nadie les haría nada estando en un patrullero. Alice y Jasper  aun estaban empacando las cosas esenciales de Elizabeth en el maletero del auto  mientras nosotros nos alejábamos. Cuando nos acercábamos al estacionamiento del instituto, Edward decidió hacer  una gran entrada haciendo resonar el motor en el lugar. Si el brillante color  azul de mi auto no era suficiente para hacer que la gente lo notara, el sonido  del auto hacia que la gente se desmayara. "Que bueno que no te gusta llamar la atencion mi querido vampiro. Valla  forma..." le dije. El se volteó y me dio una deslumbrante sonrisa. "Se que te encantó, y...me amas." Se inclinó y me dio un beso antes de que  saliéramos del auto. Cuando me aparté de él, noté que una multitud comenzaba a  amontonarse frente a nosotros. Completamente ignorando a todos, Edward y yo estábamos alzando a Eddie cuando  oímos su voz familiar. "¿Qué tuviste que hacer para que Cullen te compre esto Bella? Oh, es cierto,  ya recuerdo…vi lo que hiciste en el punto de inspiración." Lanzó Mike. Un coro  de 'OOOHHHHHHHSSSS' vino de la multitud que nos rodeaba. Edward dio un paso  hacia Mike antes de que yo le detuviera. "Mike, realmente debes superar esa obsesión que tienes conmigo. No es sana. Y  si no te alejas de mi, la próxima vez no detendré a Edward, y créeme, lo  lamentaras." Me di la vuelta para tomar a Eddie de Edward. "Vamos Edward,  tenemos clases. Pero antes de irnos, ¿Ya te he agradecido como se debe por mi  auto?" dije con voz lo mas seductora que pude. "No, no lo has hecho." Dijo entusiasmado. "Entonces permíteme..." me estiré y le di un beso. No creo que esperase que  fuera tan exuberante por que se tensó y oí un gruñido. Eso me hizo reír y  finalmente me di cuenta de lo que estaba haciendo y rompí el beso. "Recuerdame comprarte cosas mas a menudo." Se rió. Su rostro se volvio hacia  Mike y con un movimiento de su cabeza sonrió "Newton." Mientras nos alejábamos escuchamos el familiar sonido de las sirenas del  patrullero entrando al estacionamiento y la voz de Emmett gritando "¡Mike Newton  eres una basura! No te muevas, necesito hablar contigo...no corras Mike...¿A  donde vas?...¡¡COBARDE!!" miré por sobre mi hombro para ver a Mike y a Jessica  corriendo dentro del edificio tan rápido como podían, de seguro buscando algún  armario o algún lugar para esconderse hasta que devolvieran el bebé. "Todos los de cuarto y quinto año preséntense en el gimnasio en lugar de sus  clases. Traigan a los muñecos con ustedes." El anuncio salió por el sistema de  parlantes. Tiré mis libros dentro del armario y Edward y yo nos encontramos con  el resto de la familia afuera del gimnasio. Emmett estaba buscando por toda la multitud a Mike y a Jessica, o al menos  eso asumí. Jasper sostenia a Elizabeth, caminando freneticamente. Mientras nos  acercábamos podía sentir su miedo. "¿Qué va mal? ¿Qué sucede? ¿Algo sucedio?" comencé a molestarme. Edward puso  su mano sobre mi hombro y comenzó a reír. "¡Esto no es gracioso Edward! Algo va mal pero ninguno me lo dice…tengo una  sensación…esperen…no es mi sensación, es… ¡JASPER!" le golpeé en el hombro. "Bella, Jasper parece tener un mal rato por la idea de devolver a Elizabeth.  Lo siento." Dijo Alice. "Jazz, controlate. ¡ten fuerzas hombre!" "Alice ¿donde esta Newton? Necesito hablarle antes de entrar…" preguntó  Emmett. "Él y Jessica están saliendo del armario de limpieza, donde se  escondieron…ahora mismo." Y señaló al pasillo por el cual vimos a dos personas  salir de una puerta en la mitad del corredor. Cuando nos vieron a todos nosotros  ahí parados, Jessica ahogó un grito, Mike lanzó una mirada y avanzó. "¿Que estas mirando Cullen?" le gruñó Mike a Emmett. "¿Vas a decirle al señor Anderson lo que hiciste?" preguntó Emmett, parándose  entre Mike y la puerta del gimnasio. "No tengo idea de lo que dices Cullen, ahora apártate del medio." Trató de  abrirse paso, pero Rosalie le tomó por el brazo y lo dio vuelta. "Es tu ultima oportunidad Newton, creí que para estas alturas sabrías que no  es bueno meterte con esta familia." Graznó Rosalie. Jessica se asustó y miró a  Mike quien simplemente sacudió su cabeza. "No tienen prueba de nada. Disfruten de su 'F'. Vamos Jessica." Mike fue a  tomarla de la mano cuando Jasper le detuvo. "Jessica, dejaste caer esto." En la mano de Jasper estaba el pequeño Eugene.  Jessica lo tomó y le lanzó una mirada a Jasper antes de meterse al gimnasio con  Mike. Nuevamente vi a Emmett, Jasper y Edward intercambiando sonrisas y asintiendo  con sus cabezas. "¿Acaso quiero saberlo?" pregunté cuidadosamente. "Confía en mi, ¡Esto será bueno!" susurró Edward a mi oído mientras  entrábamos al gimnasio. Para mi poco agrado los Cullen se sentaron juntos en la  fila principal. Le di a Edward una mirada frustrada ante la elección de los  asientos, pero él golpeó mi rodilla suavemente. "Confía en mi, querrás tener un  buen asiento para esto." El señor Anderson nos llamó la atencion. "Felicitaciones por sobrevivir el  fin de semana con los bebés. Espero que se hayan tomado en serio el proyecto por  que en unos minutos los llamaremos, pareja por pareja y conectaremos los muñecos  a la computadora para que puedan generar sus notas. Si le hicieron algo a sus  bebés." Miró directamente a Emmett "y no me llamaron a mi casa para contármelo,  interrumpiendo mi salida con mi esposa, entonces será mejor que lo confiesen  antes que el muñeco lo haga por ustedes." La computadora...algunas de las cosas que sucedieron con Emmett y Jasper en  las últimas horas comenzaban a tener algo de sentido en mi cabeza. Miré a Edward  quien trataba de no reír, simplemente me miró y asintió. El señor Anderson fue pareja por pareja, llamando a los estudiantes al frente  para recibir sus notas. Algunas confesaron haber olvidado el muñeco en el auto,  o dejarlo caer, pero aun nada terrible. La mayoria de las personas obtenian A y  B. "Alice Cullen y Jasper Hale." Escuché al señor Anderson llamar. Jasper se  quedó congelado y sentí panico, desolacion, ansiedad y una profunda tristeza  provenir de él. Alice gentilmente tomó su mano y le ayudó a levantarse de las  bancas. Le dio un abrazo y le miró a los ojos. Inmediatamente, sus emociones  estaban bajo control y caminaron al frente, con Elizabeth en sus brazos. "¿Conjuntos a juego, señorita Cullen? Creo que usted y el señor Hale se  tomaron demasiado enserio el proyecto ¿verdad?" murmuró el señor Anderson  mientras buscaba en Elizabeth el puerto USB en su espalda. La conectó a la  computadora y la pantalla se llenó de datos. "Se ve bien, muy bien. Con la excepción de un patrón de sueño interrumpido,  lo cual parece haberle causado algo de estrés. ¿Podrian explicarlo?" preguntó el  señor Anderson. "Bueno, es una niña señor Anderson y la moda no espera a nadie. Así que en  algunas ocasiones tuve que despertarla para ponerle un nuevo conjunto, la moda  cambia, hay que mantener el ritmo ¿sabe?" murmuró Alice, esperando que fuera  suficiente esa explicación. Completamente tomado por sorpresa por su explicación, el señor Anderson  simplemente dijo "Bien, A-. Vayan a tirarla a la caja." Y se volteó a su  teclado. "¿A que se refiere con TIRARLA a la caja?" gruñó Jasper un poco mas alto de  lo que debería. "Es una pequeña niña, no puede simplemente lanzarla a la caja,  necesita su mantilla y su pingüino de peluche y este es su pijama preferido…"  Ahora Jasper estaba sacando cosas del bolso pata enseñárselas al Señor Anderson,  quien estaba perfectamente quieto, mirando a Jasper tener su crisis. "Señor Hale...es un muñeco. Lo sabe, ¿verdad?" preguntó lentamente,  debatiendo si debía llamar al psicólogo de la escuela por ayuda. "No, no es un simple muñeco, tiene nombre, su nombre es Elizabeth Cullen Hale  y era nuestra pequeña niña así que apreciaría que la trate con respeto." Jasper  estaba echando humo. Alice puso su mano sobre su hombro. "Respira Jazz."  Murmuró. "Alejese del muñeco señor Hale...antes de que llame a seguridad." El señor  Anderson respondió con sus manos sobre su cadera, ya no estaba sorprendido por  el comportamiento de Jasper. Jasper envolvió a Elizabeth en una manta y fue a dejarla en una de las cajas.  Gentilmente besó su cabeza y suavemente dijo 'Adios' mientras se alejaba. Alice  apretó un poco más su mano y le lanzó un beso a Elizabeth antes de alejarse.  "Estúpido irrespetuoso..." murmuró Jasper mientras pasaban cerca del señor  Anderson. "¡Semanas de detención Hale! Puede ir con sus hermanos." Gruñó el señor  Anderson mientras la vena en su frente comenzaba a llenarse. Jasper le ignoró y  se sentó en las bancas con un bufido. El gimnasio se había mantenido en silencio  durante todo el intercambio, inseguros de cómo reaccionar. De alguna forma  parecía gracioso, sicótico, ilusorio y conmovedor al mismo tiempo. No me atrevía  a mirar a Edward por que sabría que me reiría. "¿Señor Cullen y señorita Swan? ¿Podrían soportar despedirse de su muñeco,  por favor?" lanzó el señor Anderson mientras nos levantábamos y caminábamos  hacia la computadora. Con Eddie en brazos, el señor Anderson enganchó los cables  y la computadora comenzó a soltar los datos. "Escuché que alguien recibió un  brillante auto el fin de semana." Dijo el señor Anderson mientras esperaba que  los datos se cargaran completamente. "Es muy generoso señor Cullen." Edward  lanzó una mirada al señor Anderson, pero aun no teniamos nuestra calificación,  asi que tiré de su brazo, llamando su atencion. Le alcé una ceja y el presionó  sus labios en una delgada línea, luchando contra la urgencia de responderle al  señor Anderson. "Muy interesante...puntuaciones perfectas. Nunca antes lo vi...A+." Anunció  en voz alta el señor Anderson. Escuché algunos gruñidos a nuestras espaldas,  pero no me importó. Edward se inclinó y me besó la cabeza antes de tomar a Eddie  del señor Anderson y ponerlo en mis brazos. "Ahora vayan a tirar…perdón, discúlpenme. Por favor, acérquense a las cajas y  amorosamente recuesten a su pequeño ángel si son tan amables. Si necesitan un  minuto para despedirse, por favor sean libres de hacerlo…" dijo sarcásticamente  mientras miraba a Jasper. Alice le detenía firmemente por el brazo mientras  Emmett por el hombro. El rostro de Edward se endureció mientras miraba al señor  Anderson, pero tomó mi mano en la suya y caminamos a la caja donde Jasper había  dejado a Elizabeth. Lo envolví con su mantilla y sentí una lágrima cayendo por mi mejilla  mientras acomodaba su cuerpecito en la caja. Edward gentilmente acarició mi  espalda y limpió mi lágrima. "Te amo." Dijo mientras nos acercábamos a las  bancas. "¿Qué tienen los Cullen con estos muñecos? Tómense un respiro." Dijo molesto  el señor Anderson. Edward y yo nos sentamos, puse mi cabeza en su hombro y me senti  extremadamente triste. Entonces escuché nuevamente al señor Anderson "Bueno,  hagamos esto de una vez, señorita Hale y señor Cullen, traigan a la  pandilla." Emmett y Rosalie intercambiaron una mirada nerviosa mientras se aproximaban a  la computadora. "¿Algo que ustedes tengan que confesar?" preguntó el señor  Anderson mientras primero examinaba a Elliott. Podía ver que los dos trataban de  recordar lo que le había sucedido a Elliott y ver si algo podría aparecer en la  información. Lo habían lanzado por el techo de la casa y también estaba el  incidente del hábitat del oso, pero no había algún daño mas grave… "Bueno, yo lo  estaba sosteniendo y se cayó desde la baranda de la escalera, pero Emmett lo  atrapo, así que además de eso, no hay nada mas." Le lanzó Rosalie, pretendiendo  no importarle pero le vi mirar la computadora intensamente. "Nada mal, ya que tienen gemelos haremos un promedio de las notas y tienen un  bonus de 10 puntos por tener gemelos…por este obtienen una A- por el marcador en  su cabeza. No puede dibujar en los bebes, señor Culllen." Emmett y Rosalie  rieron orgullosos, pero duró poco ya que el señor Anderson preguntó por Everett.  Emmett dio una mirada por sobre su hombro e hizo contacto visual con Mike  Newton, quien comenzó a esquivar su mirada. "El otro muñeco, señor Cullen..." preguntó el señor Anderson comenzando a  sentirse impaciente. "Um, antes de que lo enchufe, recuerda lo del perro ¿verdad?" el señor  Anderson asintió. "Bueno, tuvimos otro problema, que quizás afecte nuestra  calificación, fue secuestrado." Todo el gimnasio estalló en risas. "¿Secuestrado? ¿O quiere decir perdido?" acusó el señor Anderson. "¡No perdimos a nuestro hijo! Fue robado por esa bestia de Mike Newton y su  compañera Jessica Stanley." Siseó Rosalie, apuntando en la dirección de sus  rostros entre la multitud. El lugar nuevamente se silencio. "¿Le importaría explicarse, señor Newton?" preguntó el señor Anderson desde  el frente. "No tengo idea de lo que dicen. Por alguna razón la tienen contra Jessica y  contra mi." Dijo Mike. Jessica puso su mejor rostro de 'estoy ofendida ante la  acusación'. "Querían secuestrar al bebé de Bella y Edward para que saquen mala nota, pero  por error se llevaron al nuestro." Explicó Emmett mientras el señor Anderson le  miraba sospechosamente. "¡Es la verdad!" "Lo siento, pero sin prueba alguna..." comenzó el señor Anderson. "¿Quien dijo que no tenemos pruebas?" soltó Rosalie mientras rebuscaba en su  blusa y sacó un pendrive de su escote, dándoselo al señor Anderson, quien estaba  completamente paralizado. Jessica dejó escapar un grito. Él lo enchufó a la computadora y bario el único archivo con el nombre de  'Confesion de Mike Newton' y mi voz comenzó a escucharse, seguida de la de  Mike. "Mike, ¿no hay nada que pueda hacer para convencerte de darnos al bebé?  Por favor, lo que sea." "Bueno, quizás lo considere con una condición…"  "¿Que condición?"  "Bésame." Un coro de 'EEEWWWWW's provino de los estudiantes. Edward se  rio ante su reaccion. Jessica se puso de pie y golpeó a Mike en la cabeza con  Eugene, haciéndole gritar. "¿Que dijiste?"  "Bésame Bella." Escuché a uno de los de cuarto gritar 'No lo hagas  Bella' desde el fondo del gimnasio. "Entonces, ¿Si te beso me devolverás al bebé que tu y Jessica nos robaron  en el zoo? ¿Esos son los términos del acuerdo?"  "Si, bésame y tendrás a tu bebé de vuelta. Solo quería que obtuvieran una  nota mas baja que nosotros ya que pusimos al bebé en le baúl anoche y nos  atraparon. Supuse que si, ustedes perdían al bebé, obtendrían un cero y Jessica  y yo podríamos devolverlo mañana y quedar como los héroes obteniendo puntos  extras…" Todos comenzaron a gritar 'Atrapado Newton'. Asumí que la cinta terminaría  ahí, pero obviamente los chicos habían puesto un poco más para seguir humillando  a Mike. "Lo siento Mike, no puedo darte esa oferta. Preferiría que me arrancaran  las uñas de los pies una a una y comérmelas antes de dejar que tus sucios labios  se acerquen a los míos. Y si fuera tú, cuidaría mi espalda por que Edward de  seguro va a tratar de matarte por esto. ¿Acaso mencione que es cinturón negro y  que sus manos son armas letales?"  "¡¡Cuentaselo Bella!! ¡¡A por él Edward!!" Escuché a la mitad de cuarto año  gritar. Mi rostro estaba rojo, mientras Edward pasaba sus brazos a mí alrededor  y me acercaba a él. Vi a Rosalie guiñándome un ojo y Emmett me dio una amplia  sonrisa. "Entonces eso lo tomaremos en consideración…" el señor Anderson conectó a  Everett a la computadora y Rose tomó la mano de Emmett. Él señaló la pantalla. "Entonces este es el incidente del perro…y aquí esta  lo del secuestro. Miren eso, durmió todo el tiempo. Que idiota es Newton…ni  siquiera se dio cuenta de ello. El secuestro no afecta su nota para nada, solo  lo del perro, y obviamente lo del marcador… B- por este. Pero añadiendo los  puntos extra queda en una B+. Felicitaciones." Emmett alzó a Rosalie en sus  brazos y la dio vueltas por el aire, frente a todos. De las gradas se escucharon  silbidos y aplausos. Rosalie junto a sus chicos y los recostó en la caja junto con sus primos, así  todos podían estar juntos donde quiera que fueran. Emmett les puso una mantilla  sobre ellos y cerró la caja. Saludo con la mano mientras él y Rosalie se  dirigían de vuelta a las bancas, de la mano. Le dio a Edward y a Jasper un  choque de manos y se sentó. Edward aun se estaba riendo, probablemente de las  obscenidades que pasaban por la cabeza de Mike Newton en esos momentos. "Señor Newton y señorita Stanley, ¿podrían venir?" preguntó el señor Anderson  mientras los miraba. El pequeño Eugene estaba gritando por el golpe contra la  cabeza de Mike, unos instantes antes y Jessica no hacia esfuerzo alguno por  calmarlo mientras se lo entregaba al señor Anderson. "¿Hay algo que los dos  quisieran confesar? Lo del secuestro bajara su nota, sin importar lo que digan  los datos. ¿¿Algo mas que deba saber??" Mike estaba sudando y Jessica golpeteaba el suelo con su pie nerviosamente.  Me incliné hacia delante para poder oír cada palabra de lo que pudieran decir.  La silenciosa risa de Edward le hacia temblar mientras tomaba mi mano. "No, no hay nada mas que decir." Dijo Mike secamente. El solo quería que el  proyecto se terminara, cualquiera podía notarlo. Se rehusó a mirar la pantalla  de la computadora y decidió mirar a Edward, lo cual hizo que este se riera más.  Emmett estaba casualmente mostrándole a Mike su dedo del corazón mientras que  Jasper enviaba algo de ira hacia el señor Anderson para aumentar el fuego que se  había encendido mientras se cargaban los datos en la pantalla. "¡Que demonios le hicieron al muñeco!" rugió el señor Anderson. La cebza de  Mike se volteó para mirar la pantalla. Habian picos en los lugares donde  indicaban que el bebé sufria de estress, habia llorado o pasó hambre demasiadas  horas. El señor Anderson estaba echando humo cuando vio un pequeño icono  mezclado con el resto de los datos. "¿Qué es esto?" preguntó mientras cliqueaba  en el. Los datos fueron reemplazados con un video casero…del punto de  inspiración. Alguien con un uniforme de policía se acercó a la ventana de Mike y la  golpeó. "¿Hola? ¿Todo esta bien allí?"  Una enorme linterna se encendió y una columna de luz brilló en el auto de  Mike. Todos podían ver su cabeza levantándose del asiento y a Jessica cerrándose  la blusa con su mano. El gimnasio se llenó de silbidos mientras Jessica permanecía completamente  paralizada frente a los de cuarto y quinto año. El video de su conversación con  Emmett continuaba, pero por la forma en que Rosalie lo filmó, no podías ver su  rostro, así que todos creían que era Charlie. "¿Escena del crimen? Aquí no hay ninguna escena de crimen Jefe. Debe de  estar equivocado. ¡Yo...yo no hice nada! Fue ella...Jessica insistió en que la  trajera aquí, ella, ¡Ella me forzó a hacerlo señor! Gracias a Dios que llegó a  tiempo o me estremezco al pensar lo que podía haber sucedido." La voz de  Mike estaba rogando. Jessica gritó. "Mike Newton eres un imbécil. ¿Esto fue mi idea? ¿Mi  idea? ¿Lo dices de enserio? ¡Si fue mi idea, explica por que tienes estos!" del  bolsillo delantero de la camisa de Mike, Jessica saco una larga tira de  condones. La luz de la linterna se reflejó en los envoltorios. "Y para que quede  claro, es imposible que necesites los Tojans Magnum, ¡irías mejor con los  anatómicos!"  Mike estaba furioso y temblaba de la ira. El gimnasio explotó en risas y  hasta el señor Anderson comenzó a reírse. El video se cortó hasta la parte que  Edward y yo nos habíamos perdido cuando nos fuimos del aparcamiento. Un llorisqueo comenzó a salir del baul del auto. 'Charlie' preguntó "¿Le  molestaria si reviso su baul, señor Newton?" "No, jefe, por favor." Respondió Mike nerviosamente. 'Charlie' se movió y abrió el baúl, revelando un sucio y gritón muñeco que  estaba empapado por no haber sido cambiado en mucho tiempo. "Creo que  esto es de ustedes." Lo sostuvo frente a Mike. "Si señor...en, lo dejamos allí para que durmiera." "Creo que lo dejó allí para que pudiera tener algo de acción con la  señorita Stanley…Sabe que esto es un abuso de menores ¿verdad? Esto es  espantoso, por muchas razones. Creo que me pondré en contacto con su  profesor para contarle del incidente. Ahora vuélvase a poner sus ropas y vayan  para sus casas." El video terminó allí. Jessica se puso colorada y se cruzó de brazos, dandole  la espalda a Mike. Él cerró sus manos en puños y cambiaba su peso de un pie al  otro, como si quisiera pegarle a algo, o alguien. "Bueno, creo que nunca tuvimos un par de padres tan incompetentes como  ustedes en veinte años de mi carrera como maestro. Aun contando al chico que  prendió fuego su muñeco…esto no se compara. Así que raptaron a un muñeco, y lo  retuvieron por rescate, el cual no consiguieron, rechazaron a su hijo, más de  una vez dado lo que dicen los datos y mintieron en mi propia cara. Eres tan  tonto como dicen, Mike Newton, creí que exageraban, pero veo que te pusieron  bien el calificativo. Tienen una D- y voy a poner en su expediente que ambos  deberían ser esterilizados y castrados y no se les debería dejar reproducir.  Pobre del chico que ustedes dos hagan...UGH...oh y casi lo olvido, cuando bajo  su nota por lo del secuestro se convierte en una F. ¡disfrútenla!" exclamó el  señor Anderson mientras juntaba su computadora y salía del gimnasio. Edward me alzó de la banca y nos llevó a la puerta de salida con el resto de  sus hermanos. Nos reunimos en el jardin, donde todos caimos al pasto, muertos de  la risa. "¡La expresión de Mike fue impagable!...oh dios..." dije mientras  respiraba. Edward se sostenía sus costados mientras reía "Si hubieran podido escuchar lo  que pensaba…Rosalie, lamento decírtelo, pero creo que rompió tu record personal  de malas palabras." Alice se volteó hacia Jasper quien fue el primero en dejar de reír. "Lamento  lo de la detención, Jasper. ¿Quieres que le pise el pie así te hago compañía?"  preguntó alegremente. "No, Alice, disfruta de tu libertad." Bromeó Jasper. Edward extendió su mano para ayudarme a poner de pie. El resto de los Cullen  se levantaron del suelo mientras nos dirigíamos a clase. "¿Quieren irse de aquí  para el almuerzo?" preguntó Emmett. "¡Si!" contestamos al unisono. "¿Pero ustedes no tienen castigo?"  pregunté. Edward sonrió y sacó su teléfono. "Esme, soy Edward. ¿Acaso acabo de escuchar  que la tia abuela Betty falleció? ¿Podrías llamar a la escuela y decirles que  debemos irnos antes del almuerzo? y asegurare de mencionar lo apegada que era  Bella con nuestra tía y que estará angustiada y necesitará venir a nuestra casa  también. Gracias mamá, eres la mejor." Alzó su vista y sonrió. "Nos dejarán ir  para el almuerzo…pero debo hacer una breve aparición en la cafetería antes de  irnos, si no les importa." Sus ojos estaban brillando de emocion. Alice hizo un gritito de emocion. "Oh, prometo que todos estaremos allí para  eso, Edward, ¡eres un pequeño demonio! Tu plan es atrevido. Chicos, se sentiran  orgullosos por esta." Alice picó nuestra curiosidad con su reacción, el timbre  sonó antes de que pudiéramos discutir algo más. Mientras se pasaba la mañana yo seguía tratando de averiguar a que se refería  Alice con que el plan de Edward era atrevido. Mi mente se puso furiosa unos  cuantos minutos y me encontré a mi misma ruborizándome en medio de la clase.  Jessica me lanzó rayos con la mirada y Mike pretendía ignorarme, lo cual iba  bien para mi, pero veía que le costaba controlarse en medio de la clase con los  chicos. Hasta había vuelto a sacar el tema de lo que él y Jessica 'hicieron' en  el punto de inspiración lo cual, como yo bien sabia, era una completa  mentira. Un mensajero de la oficina entregó la nota que informaba de la muerte de la  tía Betty y dejé escapar un sollozo mientras la leía. Momentos después el timbre  sonó, enviandonos al almuerzo. Me apresuré a ir a mi casillero y tiré mis libros  dentro para encontrarme con Alice cuando entré a la cafetería. Nos sentamos en  nuestros lugares habituales mientras esperábamos que llegara el resto de la  familia. Jasper, Rosalie y Emmett corrieron hacia nosotros. "¿Nos perdimos de algo?" preguntó Emmett sin aliento. "Nop, solo estamos esperando a Mike y a Edward... ¡justo a tiempo!" Alice  sonrió mientras que con su cabeza nos mostraba donde se encontraba Edward, quien  acababa de entrar a la cafetería. Su hermosa forma flotó por el lugar, y la  gente se tuvo que detener para mirarle, después de todo era perfecto. Sus ojos  se encontraron con los míos y él me hizo una seña para que fuera. Mi corazón dio un brinco ante los nervios mientras miré a Alice "¿Que  necesito hacer?" pregunté un tanto asustada. "Solo ve y toma su mano, y sonrie Bella, no dejes de sonreir." Se rio Alice.  Jasper me lanzó una ola de calma y finalmente comencé a moverme hacia  Edward. Angela, Ben, Lauren, Tyler, Eric, Jessica y Mike estaban sentados juntos en  su mesa, riéndose de algo, mientras Edward me arrastraba en su dirección. Los  ojos de Angela se agrandaron al vernos ir en su dirección. Me encogí de hombros  haciéndole saber que no tenia la menor idea de lo que iba a ocurrir. Ella me dio  un guiño y sonrió, sabía que no le importaba ver sufrir a Mike y a Jessica un  poco más. Otras personas en la cafetería debieron de vernos ir hacia Mike ya que  un extraño silencio lleno el lugar y sentí cientos de ojos mirando cada  movimiento con anticipación. Mike avistó a Edward por el rabillo del ojo y su rostro se enrojeció de la  ira. "Cullen, sigue caminando. No tengo nada que decirte ni a ti ni a tu pequeña  novia." Lanzó en mi direccion. Abri mi boca para decirle donde podia meterse su  dedo, pero Edward interrumpió con su suave voz vampirica. "Mike, relájate, no quiero armar problemas." Sonrió mientras se paraba en la  punta de la mesa, mi mano envuelta en la suya firmemente. Mire alrededor a las  chicas de la mesa, se habían quedado embobadas con su sedosa voz. Sin embargo,  Mike parecía irritado. "Entonces dime que es y vete. Me enferma hablar contigo."  Respondió Mike mientras apartaba su almuerzo a un lado. Grácilmente, Edward metió la mano en su bolsillo y sacó una pequeña bolsa  marrón con una caja roja dentro. Escuché a Alice reír, lo cual hizo que mi  rostro enrojeciera, pero seguía sonriendo tal como Alice me había dicho. Edward  me apretó un poco mas la mano mientras mi corazón daba brincos, golpeando contra  mi pecho. "¿Que diablos es esto?" preguntó Mike, un tanto sorprendido. Vi a las  personas de otras mesas juntándose, tratando de ver lo que Edward había dejado  en la mesa.. "Considéralo como una ofrenda de paz, de mi parte y de Bella, para ti Mike…"  se volteó un poco y dijo "y para ti también Jessica. Espero que puedan hacer  bueno uso de ellos." Sin apartar sus ojos de los de Edward, Mike sacó la caja roja de la bolsa y  la sostuvo frente a sus ojos. En unas enormes letras blancas se leía 'CONDONES  DE CALCE AJUSTADO' en el frente de la caja. Mike miró la caja por un segundo,  inseguro de lo que eran. Tyler y Eric se rieron primeros, seguidos de media cafetería. Mis ojos casi  se salían de su lugar mientras me volteé a ver a Edward, quien permanecía allí,  con una expresión de completa seriedad. "Que tengas un buen día Mike." Dijo  tranquilamente mientras se daba vuelta sobre sus talones y me guiaba fuera de la  cafetería. Podía escuchar a Mike gritando "¡CULLEN!" mientras las puertas se  cerraban detrás de nosotros. Emmett alzó a Edward y lo lanzó sobre su hombro.  "¡Eso fue lo mejor que vi hermanito!" gritó Emmett mientras corría por el  estacionamiento. Jasper aplaudía violentamente detrás de ellos. Rose, Alice y yo nos reíamos ante el espectáculo frente a nosotros mientras  caminábamos hacia los autos. Edward miró a mi dirección con una sonrisa tímida.  "Divertido ¿huh?" "¡Demasiado! Quizas quede permenentemente rojo despues de eso. Vamos,  vayámonos de aquí, ¿no se supone que tenemos que velar a la pobre tía Betty?"  bromeé mientras saltaba dentro de mi reluciente auto azul. "¡los vere en casa!"  saludé mientras salia del estacionamiento. Cuando llegamos a la casa de Edward noté el asiento de Eddie en la parte  trasera del Camaro y me puso triste. "Tenemos que entrarlo para que Alice pueda  llevarlo al hogar con el resto de las cosas." Edward rápidamente lo sacó del  asiento trasero y lo puso en el porche. Cuando entramos a la sala familiar, mis ojos inmediatamente notaron dos  enormes imágenes colgando de la pared cercana a la chimenea. Corrí hacia ellas y  deje escapar un gritito de sorpresa. La primera era una foto familiar que Esme  nos había tomado con nuestros vientres, y teníamos las camisas negras. Tenia  fotos mas pequeñas de Edward y de mi juntos, Alice y Jasper y Rose y un muy  embarazado Emmett a su lado. La segunda imagen era de nosotros seis con los  bebés vestidos como vampiros. Me alcé y toque el rostro de Eddie y senti  lagrimas llenar mis ojos. Los brazos de Edward me envolvieron mientras Rose,  Emmett, Jasper y Alice se acercaban a ver lo que estaba mirando. Rose recostó su  cabeza en el hombro de Emmett y Jasper soltó un sollozo al ver a Elizabeth. Demasiado deprimida, me senté en el sofá con Rosalie y Alice mientras los  chicos comenzaban a desarmar las cunas y empacar las cosas de los bebés para que  Alice y Jasper pudieran llevarlas al refugio de mujeres. Ninguno dijo una  palabra mientras trabajaban, cada uno perdido en la última semana. Esme bajo las escaleras sosteniendo tres paquetes en sus brazos y vio  nuestros rostros entristecidos "¿Quién murió?" preguntó. "La tia betty…" murmuré. La risa musical de Esme me sacó de mi estado. "No, quiero decir, ¿Por qué las caras largas? Salieron antes de la escuela.  Crei que estarian saltando por las paredes." Rio Esme. Eche una mirada a las  enormes fotos que estaban colgadas cerca. "OOHH entiendo, estrañan a sus bebés."  Susurró. Se acercó y se paro frente al sofá, nos entregó un paquete a cada una. Alice  formo una enorme sonrisa en su rostro antes de abrirlo. Rompí el papel azul y  encontré un hermoso libro de fotos con la letra E en el frente. Mis manos  temblaban mientras lo abria. En la primera página había una foto similar a la  que colgaba en la pared de Esme, estábamos embarazados y con las camisas negras.  En la segunda pagina había fotos de las parejas en poses bobas, estaba la imagen  de Jasper sosteniendo a Alice y la foto de Emmett 'dando a luz'. Di vuelta a la  segunda pagina y vi una foto mía y de Edward donde el besaba dulcemente mi  enorme vientre. Ya no podía contener las lagrimas "Oh Esme...esto es...hermoso."  me las arreglé para decir. Limpié mis lágrimas para poder ver las próximas fotos. Debió de tomarnos  fotos a escondidas durante la semana. Yo durmiendo en el sofá, Edward  sosteniendo a Eddie, Edward en el piano con Eddie sentado cerca, yo dándole el  biberón a Eddie, Edward haciendo una mueca ante un pañal sucio, había cientos de  fotos. Era lo mas asombroso que jamás vi. Alice y Rosalie abrieron los suyos  para ver las fotos que Esme les había tomado. También obtuvimos una foto donde los chicos se habían quedado a cargo de los  bebés y la sala de cirugía de Carlsile en medio de la sala familiar, lo cual nos  hizo estallar en risas. De alguna manera, Esme consiguió las fotos de las  cámaras desechables del zoo y Alice tomó una de Emmett dentro de la jaula del  oso y el pobre Elliott debajo de la pata del animal. "Quiero que siempre lo recuerden." Susurró Esme y nos dio un beso en la  cebeza a cada una. Yo estaba sollozando y Alice y Rosalie estaban temblando,  incapaces de hablar. Los chicos caminaron hacia nosotras y se quedaron  helados. Edward corrió a mi lado y tomó mis manos. "Bella, ¿que sucede? ¿Que ocurrió?"  preguntó mientras las lagrimas continuaban callendo por mi rostro. Alcé el libro  de las fotos hacia él y traté de sonreir. "Esme..." fue todo lo que pude decir.  El abrió el libro y soltó una exclamación al ver las paginas. Me di cuenta de  que estaba tan conmovido como yo por el regalo de Esme. Emmett y Rosalie estaban  mirando algunas fotos de su libro y Alice estaba acurrucada junto con Jasper  mientras el silenciosamente miraba las paginas rosadas, tocando el rostro de  Elizabeth en cada imagen. Edward me devolvio el libro y yo lo apreté contra mi pecho. Tomo mi mano y me  guió hacia la banca del piano. Encima de la lustrosa superficie del instrumento,  Esme había dejado una foto de Edward y de mí junto con Eddie en su traje de  vampiro. El marco simplemente decia 'Familia' en letras negras. La mano de  Edward se acomodó impulsivamente sobre su pecho, donde una vez su silencioso  corazón había latido. Respiro profundamente y comenzó a tocar una suave música,  la cual reconocí instantáneamente, la nana de Eddie, mientras sostenía,  sonriendo, contra mi pecho el libro que contenía uno de mis mas preciados  recuerdos como humana. |