Narrado por Robert

La promoción de eclipse me había impedido ver dos meses a mi hija y a Pau. Aunque diario hablaba con Nikki y ella me decía como estaba todo.

Afortunadamente iba bien y la podría ver ya en dos días. Paulina estaba a punto de cumplir 6 meses de embarazo; en menos de 3 meses iba a ser papá, mi familia moría por conocer a Paulina pero por como estaban las cosas los convencí de esperar un poco más.

La vida de Pau y su familia había cambiado, la prensa la buscaba y ella estaba muy cansada de eso. Maggie le había comentado a Nikki que ya la habían hecho pasar malos ratos en dos centros comerciales que incluso una vez le habían pegado accidentalmente.

Yo iba con la idea de convencerla de mudarse a Los Angeles, en Estados Unidos la prensa te acosaba pero jamás te tocaba.

Llegue a su casa y vi mucho movimiento. Subí a su apartamento y lo que vi me impacto; estaban llenando una mudanza, se iban de ahí.

La puerta estaba abierta, entre y me encontré con Maggie empacando cosas de la cocina.

Robert: hola Maggie, que sucede?

Maggie seguía impactandose como buena fan, yo me propuse tratarla de lo más normal hasta que se acostumbrara a mi.

Maggie: hola Robert, lo siento Robert mi mamá y mi hermana decidieron que nos íbamos a vivir a un estado que se llama Querétaro

Robert: y por supuesto no me iban a avisar

Maggie: no se, bueno Paulina ha dicho que esta enojada contigo

Robert: sólo eso ha dicho?

Maggie: en realidad si, de verdad eres tan mala persona?

Robert: te parezco mala persona?

Maggie: mmm... No

Robert: ya veras que estas en lo cierto, donde esta tu hermana?

Maggie: en su recámara

Camine decidido a saber porque otra vez me alejaría de mi hija y sin siquiera decírmelo, toque la puerta y ella me abrió.

Paulina: Rob

Robert: no me espetabas verdad? Pensabas irte y llevarte a mi hija

Paulina: pensaba decírtelo

Robert: cuando?

Paulina: yo no sabía que hoy planeabas venir

Robert: Paulina, entiende, soy el padre de esa niña que llevas en el vientre, no puedes quitarme cada que lo consideres necesario

Paulina: te dije que no iba a alejarte de ella y no lo voy a hacer, si me permites tengo 15 minutos para terminar de empacar

Robert: donde esta Querétaro?

Paulina: a tres horas de aquí

Robert: voy contigo

Paulina: como quieras

Terminamos de vaciar el departamento y la mamá de Paulina llego a vernos.

Gabriela: bueno pues vámonos, Paulina tu ve con Robert.

Paulina: mamá me voy con Ustedes

Gabriela: te vas con el papá de tu hija

De mala gana subió a la camioneta y yo estaba extrañado pero contento con la actitud de mi suegra.

Duramos una hora sin emitir palabra hasta que vi su pancita ya más grande y la toque.

Robert: puedo tocar a mi hija?

Paulina: si

Robert: ya esta enorme! Va a ser una niña muy hermosa?

Paulina: si se parece a ti seguramente si

Robert: también si se parece a ti, va a ser hermosa, dulce, honesta, firme...

Paulina: ya Robert

Robert: que? Sólo estoy diciendo la verdad!

Nos quedamos en silencio un rato y decidí volver a hablarle.

Robert: sabes mis papás quieren conocerte

Paulina: quieren ver por que insignificante mujer cambiaste a Kristen?

Robert: porque dices eso? Mi familia no es asi, quieren conocerte porque saben que vas a ser la mamá de su nieta y también porque te amo

Paulina: la mamá de su nieta si

Paulina estaba a la defensiva así que decidí cambiar el tema.

Robert: quería decirte que quiero que la niña nazca en Los Angeles

Paulina: que? Robert volvemos a lo que TU quieres, mi hija va a nacer aquí

Robert: no es un capricho, tendrá la nacionalidad mexicana por ti, la inglesa por mi y la americana de nacimiento será lo mejor para ella

Paulina: yo no voy a irme a vivir a los Angeles Robert

Robert: es imposible hablar contigo, te has cerrado a una posición totalmente inútil y no te das cuenta que te haces daño tu, y nos lo haces a mi y a la bebe, piénsalo

Volvimos a dejar de hablar y no tardamos en llegar, era una casa pequeña, pero en un lugar bonito y tranquilo, seguramente sería ahí donde mi hija nacería y crecería.