A los diez minutos que Edward se fue apareció Alice con un pantalón para mí, un pantalón que ella utilizaba para cabalgar.

-Saliste tan apurada que imagine que no habías pensado en el detalle de tu vestido, así que te traje esto- dijo Alice mientras me entregaba un pantalón beige de mujer junto con unas botas negras.

-Gracias Alice, la verdad es que si, en estos momentos son necesarios- me sonroje al recordar el accidente del que me salvo Edward.

-Te dejamos, en todo caso estaremos por aquí cerca si nos necesitas-dijo Alice mientras salía con Emmett que venia junto a ella.

Estuve gran parte de la tarde con Carlisle aprendiendo a montar, la verdad es que no era tan complicado como pensaba, tenia confianza en Aura, ya que era muy dócil y fácil de montar.

Carlisle me dijo que iba al establo y volvía, que no intentara galopar, cosa que no tenia pensado en hacer, recién había aprendido y no iba a arriesgarme estando sola, estos pensamientos se alejaron rápidamente cuando me sentí observada. A orillas del río me encontré con esos ojos que detenían mi corazón, no sabía cuando rato Edward estuvo ahí mirándome, pensaba si acercarme o simplemente ignorarlo. No fue necesario llegar a una resolución ya que vi que se acercaba montado en un caballo muy hermoso, pero no pude evitar apreciar lo condenadamente sexy que se veía andando a trote. Me imagine una escena en la que los dos pudiésemos cabalgar por los alrededores juntos quizás de una manera más romántica, pero rápido volví a la realidad, realidad en la que no le simpatizaba.

-¿Qué hace por aquí sola? pregunto al llegar junto a mi. -¿Vamos te llevare?

-Carlisle dijo que tenía que ir al establo pero que estaba aquí en un par de minutos, que lo esperara- respondí a su pregunta de manera educada.

-Carlisle me pidió que viniera por Ud. y que la llevara a casa- me parecía raro que Carlisle no haya venido por mi, y sobre todo que haya enviado a Edward conociendo que no le simpatizaba mucho, más raro aún encontraba la preocupación evidente en sus ojos al verme ahí sola, reacción que tenia justamente cuando estaba así, sola. Avance relativamente lento, no tenia apuros en llegar ya que disfrutaba de la compañía, lo sentía cerca de mí por el costado derecho, aunque no hablamos en casi todo el camino, se sentía bien tenerlo ahí junto a mí e inevitablemente sonreí.

-¿Qué es tan divertido?- dijo intentando ocultar su curiosidad y alegría, me agradaba un poco más este Edward, Edward que no buscaba cualquier motivo para ser desagradable.

-Nada- conteste rápidamente – Es solo que se siente realmente bien esto, el pasear a caballo rodeada de tanta naturaleza, en la ciudad definitivamente no podría hacer esto y menos aún cerca de mi padre.

-¿Qué acaso no haces lo que quiere allá donde vive?- pregunto de forma despectiva pero con un dejo de curiosidad.

-Uff! Ojala pudiera- solté sin pensarlo -no se si conoces a mi padre, de conocerlo de seguro es la parte que todos conocen de él, como el jefe Swan, él en si como mi padre es una persona completamente diferente, no le gusta la manera en como veo las cosas y la vida en general, por eso es tan aprensivo- dije con tristeza, el solo hecho de recordar como es mi vida en la ciudad me produce una gran tristeza en saber que tengo que volver a esa vida que me parece tan ajena.

-Creo que si se sientes de esa manera simplemente deberías ser tu misma, sin importar lo que diga tu padre, ya eres grande y puedes manejar tu vida- dijo Edward mientras me percataba que ya estábamos de represo al establo.

-Es fácil decirlo cuando eres hombre, y sobre todo teniendo unos padres como los tuyos- quizás mi reacción lo enoje, no lo se, él pareciera reaccionar ante cualquier cosa que haga, puede pensar que es arrogancia o desconformidad pero no estaba ya de muchos ánimos para corregirlo en su manera de pensar, el paseo a caballo me había dejado realmente exhausta y solo quería tomar un baño.

-Disculpe que me halla entrometido en sus asuntos familiares- dijo una vez que se bajo de su caballo y se acercaba a mi para ayudarme a bajar del mío –Permítame por favor, no quisiera verla en el suelo y que se fracture algo, de ser así habría que explicarle a su padre que salio a montar con autorización de mi padre.

-Gracias- le dije -No te preocupes, no te entrometiste en nada que la gente no note, es facil darse cuenta que la vida que tengo no me gusta-le dije una vez que me bajo. Espere un poco a ver su expresión, lo que me decía que no estaba molesto o algo por el estilo –Edward, se que no soy de tu agrado, solo quería pedirte que dejes de tratarme de Ud. y simplemente decirme Bella como los demás, podría decir que tenemos la misma edad y me haces sentir como una vieja.

-Disculpe, no creo que sea prudente, lo intentare pero no le prometo nada, y por favor cuídese que es peligroso andar solo por los alrededores, hasta luego- y se fue junto con los caballos.

Iba de camino a la casa de los Cullen para ver a Alice, tenía muchas cosas en la cabeza, sinceramente Edward me desconcertaba de varias maneras, tenía un don para hacerme enojar con facilidad, para que me sintiera apenada pero a la vez hacerme sentir tranquila y feliz cerca de él.

-Oh! Bella ¿Dónde haz estado?, te dije que no te movieras de ahí, que iría por ti en unos momentos, cuando llegue no estabas, realmente me asustaste pequeña- dijo Carlisle realmente afligido con lagrimas en los ojos, dándome un fuerte abrazo.

-Pero … si- dije confundida por su innecesaria preocupación, ya que Edward había ido por mi como el se lo pidió.

-¿Cómo llegaste aquí?- pregunto extrañado.

-¿No le pediste nadie que fuera por mi?- dije así como restándole importancia, pero muy ansiosa de escuchar su respuesta.

-La verdad es que no ¿Alguien te trajo?- pregunto Carlisle asustado.

Que feliz me hizo sentir su respuesta, eso quiere decir que la preocupación que vi en los ojos de Edward cuando me encontró sola fue real, el se preocupo de verdad, el decidió traerme por mi bien y no por que Carlisle se lo allá pedido, y sobre todo, mintió, mintió por alguna razón. De haber pensado en que si me sucedía algo mi padre sancionaría al suyo el claramente lo hubiese dicho, pero no fue así, quizás este hombre si tenia sentimientos después de todo y podría llegar a ser una buena persona, debía averiguar por que era así.

-No, nada que ver Carlisle- mentí –Llegue sola, es solo que divise a alguien a lo lejos y seguí el mismo camino y llegue aquí- No se por que mentí, pero no quería dar alas a que el tema saliera después y que Edward descubriera que sabia la verdad, yo sabia que el se preocupo por mi de una manera sincera y para mi eso era suficiente…por el momento.

Cotinuara...