Enseñándote a vivr

Autor: mary31
Género: Drama
Fecha Creación: 01/08/2013
Fecha Actualización: 23/12/2013
Finalizado: NO
Votos: 6
Comentarios: 31
Visitas: 15161
Capítulos: 14

Edward es un chico muy solitario desde ese fatídico día donde perdió lo que más le importaba, se sentía solo y perdido, hasta que conoce a una hermosa chica de ojos chocolates que le hará cambiar su forma de ver la vida

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Capítulo 4: El destino?

Bella POV

Llegue a casa y ya era un poco tarde, gracias a Dios que tenía llaves, las saque y entre fui directo a la cocina pues estaba hambrienta, camine hacia la nevera y en la que estaba pegada una nota

Bella

Salí a comer con unas amigas, cuando llegue hablaremos

René

Arrugue la nota y la tire en el cesto, ya sabía por dónde iban los tiros de René con eso de “cuando llegue hablaremos”, ella me gritaría lo terrible hija que soy por no quererme hacer más nada mientras yo miraba hacia otro lado para así no ver sus lágrimas de decepción, con ella era siempre lo mismo, pero nadie la cambiaria

Me prepare un emparedado con atún, mayonesa y tomates, me serví un poco de jugo de naranja y me senté a disfrutarlo, mi mente comenzó a vagar y lo único que podía ver era esos profundos ojos verdes, no entendía por qué era así, porque se comportaba de esa manera, pero lo averiguaría

Me levante lave el plato y vaso que había utilizado y subí a mi habitación me coloque mi pijama y me metí de un salto en la cama, estaba agotada

…….

Sentí como los rayos del sol golpeaban mi cara, sonreí aun con los ojos cerrados, amaba el sol, comencé a levantarme mientras tallaba mis ojos en busca del reloj, eran las 10 am, me levante de un salto tome una relajante ducha de agua caliente y me vestí con un lindo vestido de flores color rosa y unas zapatillas bajas amarillas, solo pase un poco mis dedos por mi cabella para arreglarlo y baje corriendo las escaleras, esperaba no encontrarme con mi madre, no tenía ganas de pelear hoy , camine a la cocina, tenía ganas de comer tocino y huevos hoy, pero apenas entre en esta lo que vi me deje atónita un hombre rubio estaba parado frente al refrigerador, agarre el salera ya que era lo que tenía más cerca en esos momentos y comencé a caminar hacia él

Quien eres y que quieres? – dije con la voz un poco temblorosa, él se dio la vuelta y levanto las manos, al verlo a los ojos pude notar que era de un hermoso color azul de verdad que el hombre era muy bien parecido y de otra cosa que me percate fue que solo usaba unos bóxer y una camisa

Soy amigo de René- dijo con los ojos muy abiertos

Qué? – dije confundida, René nunca traía hombres a casa

Bella él es Phill- dijo mi madre entrado también a la cocina, Phill?Él hombre del que René hablaba como el mas maravilloso

Ohhh – dije con una gran sonrisa, no podía aguantar las ganas de reírme- pues entonces los dejare solos- me di la vuelta, tome mi bolso y comencé a caminar hacia la salida- nos vemos mamá, adiós Phill espero verte pronto

Nos vemos, no llegues tarde- grito mamá mientrs cerraba la puerta

Saque mis audífonos y comencé a caminar sin rumbo fijo, cuando llevaba algunas cuadras comencé a sentirme un poco cansada la espalda me estaba matando y mi estómago rugía pues no pude alimentarme gracias a la intromisión de Phill, sonreí al recordarlo me sentía feliz por mamá ya no estaría sola, me dirigí a una cafetería que estaba cerca de donde me encontraba entre y todo era muy pintoresco me encanto al instante me senté una mesa cerca de la ventana para poder admirar el hermoso día

Buenas puedo ayudarla- dijo una joven hermosa, era rubia y tenía una cara muy dulce

Buenas, me gustaría una malteada de chocolate, huevos, tocino y pan tostado

Claro – dijo ella mientras anotaba todo y se iba no antes de mirarme por última vez y dedicarme una sonrisa tímida, seguí observando todo a mí alrededor, hasta que lo vi de nuevo sus hermosos ojos verdes estaban más apagados de lo normal y tenía ojeras aún más grandes que ayer, comencé a agitar mi mano en forma de saludo para llamar su atención me vio y un intento de sonrisa apareció en su rostro

Edward – grite desde mi mesa- ven siéntate conmigo- camine hacia mi vacilante

Me estas siguiendo – pregunto mientras se sentaba

Hola, yo estoy muy bien gracias por preguntar y no, no te estoy siguiendo- dije mientras le sonreía

Aquí está su pedido- dijo la chica mientras dejaba mi desayuna, se veía delicioso – desea algo – pregunto dirigiéndose a Edward, vi en su semblante que diría que no asi que hable yo primero

Tráigale lo mismo que a mí por favor – dije mientras le sonreía a la chica, ella se retiró con un pequeño -vuelvo en un segundo-

No tengo hambre- dijo Edward llamando mi atención

Bien mejor más comida para mí- dije mientras metía un trozo de tocino en mi boca, me miro mientras levantaba una ceja

Siempre eres así?- pregunto de forma seca, no entendía porque era tan tosco

Como? Mm no lo sé, hablas con cualquiera que se topa en tu camino y le ordenas comida sin dejar nunca esa maldita sonrisita- dijo de golpe, su cara de enfado era muy divertida, comencé a reirme

A veces – dije mientras metía mas huevo y tocino en mi boca, estaba delicioso- y tú siempre eres asi de tosco?

A veces – respondió con la misma frase que yo

Y cuéntame cómo está tu hermana y el bebé- pregunte mirando directo a sus ojos , vacilo un poco antes de responder

Bien, aunque no te incumbe saber su estado de salud

Claro tienes razón- tome un poco de mí malteada, no entendía porque siempre parecía enojado – todo esta delicioso, te encantara

Aja – dijo mientras miraba por la ventana, comencé a sentirme mal, comenzó a dolerme el estómago y tenía ganas de vomitar, me levante de la silla y comencé a correr por todo el lugar en busca del baño con mi boca cubierta por mi mano, cuando llegue a el comencé a vomitar todo mi delicioso desayuno que ahora solo me repugnaba, cuando termine levante la cabeza y me encontré con unos ojos verdes que me miraban un poco preocupados, intente sonreírle pero solo logre una mueca

Bella tu nariz está sangrando- dijo Edward asustado ayudándome a levantarme- mierda, Dios- decía mientras me llevaba al lavabo, lave mi cara y busque un poco de papel para ponerme en la nariz

Ya estoy bien – dije casi en un susurro me sentía un poco mareada pero con té y una pastilla se me pasaría

 Bella, estas muy pálida te llevare al hospital- dijo mientras me cargaba hacia la salida del baño

No, no, no, no- dije mientras alaba su camisa- nada de hospitales, solo llévame a casa por favor

Capítulo 3: Una nueva vida comienza Capítulo 5: No debería sentir esto

 
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