Un gran cambio

Autor: emmaly76
Género: Romance
Fecha Creación: 11/03/2013
Fecha Actualización: 24/09/2013
Finalizado: SI
Votos: 5
Comentarios: 17
Visitas: 50094
Capítulos: 28

 

Nunca imaginé que al ganarme un viaje por ser la mejor en mi trabajo: traería a mí un gran cambio... El ser hija única e ignorada por mis padres, quienes aprovecharon la mínima oportunidad para deshacerse de mí, me trajo el mejor de los regalos... soy Isabella Merie Swan, perdón Isabella Merie Cullen y ésta es mi historia... (Corregido)

+ Añadir a Favoritos
Leer Comentarios
 


Capítulo 4: Bruja

BPOV

Esa noche no dormí nada, parecía que se repetían una y otra vez en mi mente las palabras de Alice, ella venía, y yo no tenía armas para defender a Edward de esa… de esa bruja que le partió el corazón, se que ella fue muy estúpida al engañarlo pero ¿y si el todavía siente algo por ella y decide volver?, por mi cabeza pasaron mil escenarios la mayoría donde él me decía adiós y volvía con ella, otras donde le daba con la puerta en las narices y se quedaba conmigo.

Me levante temprano y me di una larga ducha con agua caliente para relajar mis músculos, Salí solo envuelta en la toalla para buscar mi ropa y allí estaba Edward con sus bermudas negras y una musculosa blanca con una franja negra. De miraba…SEXI en tooooda la extensión de la palabra.

-hola –salude.

El solo se me quedo viendo, recorriendo con la mirada todo mi cuerpo de pies a cabeza, sin perder detalle, y podría jurar que sus ojos se oscurecieron.

Carraspeo- Ho…hola, yo…este…te dejo para que te vistas te espero en el comedor.- y salió disparado del cuarto.

-al parecer le gusto… algo es algo ¿no?-pense

Cuando abrí el closet, me encontré una nota de Alice, que decía.

Bella:

Sé que tienes muchas dudas pero créeme que ella solo es un cascaron esta hueca por dentro, no te dejes intimidar, vístete cómoda y sean auténticos no te limites frente a ella recuerda tú tienes la sartén por el mango Edward es tu esposo, no importa cuales hayan sido las circunstancias.

p.d. ya te seleccione la ropa que usaras esta semana cada cambio tiene la etiqueta del día correspondiente, créeme a TU ESPOSO LE VA A ENCANTAR. Cuando nos veamos de nuevo me lo agradecerás….

Y mire y efectivamente la ropa estaba colgada con un orden y tenían pequeñas etiquetas que marcaban cada día de la semana. Hoy me pondría un vestido de tiritas verde botella muy fresco, que me llegaba arriba de las rodillas con unas sandalias que le hacían juego. Me recogí el cabello en una trenza floja y me puse un poco de gloss.

Baje las escaleras despacio, porque hoy no tenía ganas de besar el piso y cuando llegue al comedor me quede como piedra la una mujer rubia, con cuerpo de infarto y un cortísimo vestido rojo estaba abrazando a MI ESPOSO… todo lo vi rojo no solo el diminuto vestido.

-mmmmmmm- compuse mi garganta para llamar su atención, Edward pego un brinco hacia atrás como si la rubia tuviera la peste.

-¿y esta quien es Eddie?- pregunto de forma despectiva refiriéndose a mí.

Edward se me acercó, con una mirada de ayúdame, entonces entendí que esa era nada menos que la bruja, así que tome la mano de Edward para acercarlo a mí, y le di un casto beso en los labios. Al principio se sorprendió un poco pero después me tomo por la cintura pegándome a su costado

-Kate Smith te presento a mi esposa Isabella Cullen, amor te presento a Kate.

Ella me miro de pies a cabeza nuevamente y soltó una risotada- ¿y tú crees Eddie que presentando me a esto como tu esposa te voy a creer?

-perdón, no sé que es tan gracioso, amor de que se ríe esta… mujer porque yo no le encuentro nada gracioso.

-Kate, no es ninguna farsa Bella es mi esposa y si estamos aquí en Miami sin que nadie supiera de mi destino es porque estaba de luna de miel y no quería que nadie molestara.

-supongamos que te creo que te casaste, explícame como y cuando la conociste, para casarte tan pronto…ah ya se te emborrachaste y te acostaste con ella y te esta chantajeando con un embarazo.

-no la verdad te voy a contar un secreto… ella tuvo un accidente en el mar y yo la salve, me quede tan prendado de ella que cuando se tenían que devolver a su lugar de origen no la quise perder así que le pedí que se quedara conmigo y lo quisimos hacer legal, y aunque ahora solo estamos casados por el civil espero muy pronto odre casarme con ella por la iglesia para que todo el mundo se entere que he encontrado al amor de mi vida.

Mientras decía su discurso, no la miro ella si no a mi cada palabra iba dirigida a mí, y me hizo sentirme la mujer más dichosa del mundo.

-pero como es que con poco tiempo de conocerla te casaste con ella y a mi nada aunque duramos dos años de relación nunca hiciste el menor esfuerzo por formalizar así.

-bueno Kate otra prueba más de que lo nuestro no estaba bien.

-¡y un cuerno!, si teníamos planes, hacia poco que vivíamos juntos, ¿ya no te acuerdas?

- claro que me acuerdo, pero no creo que fuera lo mejor, o tal vez si porque me sirvió para darme cuenta de que tu no eras mi futuro, y ahora estoy más seguro de ello porque mi futuro lo tengo entre mis manos.-beso mi cabeza y apretó mas su agarre,

Entonces salió Cathy de la cocina.

-Señora, el desayuno está servido…oh perdón.

- no te preocupes Cathy, y pon otro servicio por favor.

-por supuesto señora compromiso.

-¿nos acompañas a desayunar Kate?

-por supuesto, y dile a la sirviente que suba mi equipaje al cuarto de huespedes.

-esposo viejo, ¿no me habías dicho que se quedaría? Tu avanzada edad hace que se te olviden las cosas-

Sonrió con dulzura y toco con su dedo índice mi nariz- esposa bebé, eres tan ingenua por supuesto que no la he invitado a quedarse, al parecer se ha invitado sola.

-oh, perdón esposo viejo, no volveré a dudar de tu senil memoria.

-disculpa, Kate, pero como sabes estamos de LUNA DE MIEL, si sabes qué significa eso, es de esas ocasiones en las que pones en la puesta el letrero de no molestar, y quieres estar con tu pareja, sin terceros, si entiendes verdad.

-c...claro, pero como estamos en temporada alta y no hice reservaciones, traía otros planes, si entiendes ¿no?

-Por supuesto, por haber sido alguien en la vida de mi esposo le diré a Cathy que prepare recámara más alejada de la nuestra, tú sabes luna de miel igual a mucho ruido durante la noche. Cuando dije eso, sentí el peso de mis palabras y me sonroje furiosamente…

-amor, voy con Cathy para que prepare la habitación.-

Se acerco y yo pensé que me besaría la mejilla pero se fue hacia mi oído y dijo de forma poco discreta, -me encanta el ruido- y mordió el lóbulo de mi oreja… nunca antes había sentido así, como si una llama recorriera todo mi cuerpo provocando reacciones en zonas que no pensé que sentirían eso. Cuando Salí de mi aturdimiento y con una Kate todavía en shock nos dirigimos al comedor. Almorzamos en un muy incomodo silencio que Edward mitigaba cuando tomaba mi mano y le daba masajes circulares con su dedo pulgar.

- bueno Kate, no es que te corra pero, ¿cuándo te vas?, tenia ciertos planes con mi esposa donde por supuesto no hay tercero incluido.

-Eddie ¿porque te portas así conmigo?

-mira Kate en primer lugar odio que me digas Eddie, en segundo lugar, nosotros no te invitamos te invitaste sola y en tercer lugar y más importante quiero disfrutar de mi esposa.

-la verdad creo que me iré mañana, tengo varios compromisos pendientes pero quería si me podrías llevar a pasear por allí para no pasar tan aburrida la estancia aquí.

-está bien amor, podemos incluirla en nuestro plan no creo que interrumpa salo íbamos a pasar el día en la playa hoy.

-está bien esposa bebé…

-no se diga más me alisto y en un momento estoy contigo- le guiño el ojo a Edward, me aguante las ganas de alcanzarla y darle unas cuantas cachetadas…respira Bella, recuerda lo que dijo Alice… tú tienes la sartén por el mango, pero que rayos yo lo que quería tener era a esa rubia escuálida para retorcerle el pescuezo….en fin respira Bella…

Me fui yo también al cuarto y encontré a Cathy acomodando las cosas de Edward allí…no me acordaba que dormíamos en cuartos separados…y esta noche…de solo imaginar dormir nuevamente en sus brazos, solo dormir he, provocaba que se me pusiera la piel de gallina. Me coloque un biquini verde botella como el vestido y me volví a colocar el vestido encima, cuando Salí la muy bruja tenia arrinconado a Edward contra las escaleras….algo rugió en mi pecho…

-anda Eddie no creo que esa niña te haga sentir lo que yo….

-por favor Kate, no te compares…

Eso dolió quiere decir que no soy suficiente para el… estuve a punto de darme la vuelta y encerrarme en la recamara pero nuevamente las palabras de Alice resonaron en mi cabeza no le hagas caso a nada de lo que diga… así que seguí caminando con paso firme aunque por dentro estaba hirviendo.

-¿nos vamos?

Ella me dirigió una sonrisa triunfal, se había dado cuenta de que los había visto…

-claro, hace tiempo que no me baño en el mar…- Tome a Edward de la mano y nos fuimos caminando hacia la playa, de vez en cuando Edward besaba mi cabeza, después de un rato paso su brazo por mis hombros, me sorprendí pero note como la bruja garrapata estaba aferrada al otro brazo de él.

-aquí, Cathy alisto todo desde temprano espero te guste, bebé.

-me encanta todo es perfecto- se apuro a contestar la muy…piiiiiiiiiit, mis pensamientos no eran muy aptos para menores- sabes que me encanta la piña colada.

-lo siento Kate pero cuando dije bebe me refería a mi esposa. ¿Qué me dices esposa bebé, este viejo aun te sorprende?

-claro que si esposo viejo, todo es perfecto- me acerque para susurrarle al oído para que oyera doña bruja- como tu- y repetí su acción mordiendo el lóbulo de su oreja, un gemido ronco Salió de sus labios y eso me hizo sentir poderosa.

-bueno Eddie no tiene nada de malo de que te refieras a mí en algún termino cariñoso una historia de dos años nos precede.

-Kate, en serio si en dos años de relación, jamás te puse algún apodo cariñoso…

-bueno, en fin mejo me voy a darme un buen chapuzón,

- se quito el vestido y se quedo con un bikini negro si es que a tres triángulos que apenas tapan lo básico se le puede llamar así.

- ¿me acompañas?

-amor, ¿vamos?- pregunto Edward jalándome de la mano.

-claro- entonces me quité el vestido y me recorrió con la mirada, oh si, a ella ni la volteo a ver y a mi le esta comiendo con la mirada, eso puede ser bueno.

-te ves perfecta, hermosa.

- ya esposo viejo creo que a tus problemas de vejes tendremos que añadirle la falta de la vista.

-miro perfectamente y te puedo decir que de todas las mujeres aquí presentes tu eres la más hermosa…. Nivel máximo de sonrojo, alerta, alerta, creo que un día de estos los sonrojos que me provoca me provocaran quedar de un rojo permanente.

-vamos anda, ¿o estás muy viejo para nadar?

-no debiste haber dicho eso (esa frase me encanta)…

- me tomo en brazos y corrió conmigo hasta que caímos junto en el agua, estuvimos divirtiéndonos mucho, arrojándonos agua, o yo huía y él me atrapaba, claro que solo lograba dar unos cuantos pasos.

De repente sentí que Edward se quedaba estático y salía del agua así que lo seguí, Kate estaba tirada en la arena con la mejilla muy roja y una pelota de playa tirada a su lado.

-Eddie, ayúdame por favor, creo que me he mareado con el golpe, ¿me podrías ayudar a llegar al camastro para descansar?

- Edward la tomo en brazos y la llevo hasta el lugar y la sentó, luego me mandó a mi… a llevarle hielo.

-ok.- fue lo único que respondí y fui a casa, saque hielo del refrigerador y lo envolví en un pañuelo… pero cuando volvía a la playa mire a Kate y a Edward en medio de un muy acalorado beso… algo en mi pecho se quebró, ya no tenía caso seguir fingiendo, el volvería con ella, y yo volvería a ser la idiota Bella que trabaja en un súper. Me acerque para entregarle el hielo y para que él se diera cuenta de que lo había vista pero nunca espere escuchar lo que él le respondió después e separarse bruscamente de ella.

-estás loca o que, entre nosotros no hay ni habrá nada…jamás me vuelvas a besar.

-¿me vas a decir que no te gusto? Dudo mucho que la chiquilla que dice ser tu esposa te sepa besar tan bien como yo.

-quizás ella no sea una amante experimentada pero me hace sentir con una simple mirada más cosas de las que tú con mil besos de los que me diste.

- no te creo, las noches que pasamos juntos me dicen otra cosa.

-una sola noche con ella vale más que dos años contigo Kate, ella es lo más importante para mí ahora, y no me gustaría perderla por tus estupideces.

Apresure el paso haciendo como que acababa de llegar y le entregué el hielo bastante derretido a la bruja, y le pase los brazos por el cuello a Edward, no seré la gran desadora, pero si podía hacerlo.

- te extrañe- le dije y uní mis labios a los suyos queriendo borrar lo que hicieron los labios de ella, el beso se fue volviendo más demandante, hasta que sentí que su lengua pedía permiso para entrar en mi boca e inconsciente mente se lo di, este sí que era un beso, sentía como si estuviera a punto de explotar, pero mis pulmones empezaron a necesitar aire y nos separamos dándonos pequeños, besos, los dos teníamos la respiración agitada.

-yo también te extrañe.- cuando volteamos la bruja ya no estaba pero ni me importo, porque Edward reclamo mis labios nuevamente, y nos pasamos varios minutos en el mundo de los besos hasta que se nos hizo tarde y volvimos a casa. Kate estaba en la sala de espalda a la puerta de entrada hablando muy acaloradamente por teléfono.

-no me puedes despedir Alice… ese desfile es el más importante…está bien llegare para el ensayo adelantado… de ninguna manera te diré donde estoy… mañana a primera hora estaré allí… si hoy mismo tomo el vuelo de regreso… Bye.

-buenas tardes- salude con mi mejor sonrisa

- ¿como sigue tu cara?

-bien gracias, Eddie , me tengo que ir pero por favor cuando vuelvas a chicago me gustaría que nos viéramos de nuevo- y sigue la bruja de verdad que me daban ganas de montarla en su escoba y mandarla volando a la Antártida. Calma Bella que ya se va.

-lo siento Kate, pero si quieres verme, será vernos ya que a donde yo baya Bella ira conmigo.

- ¿Qué, tienes miedo de caer en la tentación?

-si a tentación te refieres a olvidarme de que soy un caballero y decirte varias palabras no aptas para ser escuchadoras por una dama tal vez sí.

-que tenga buen viaje Kate, no puedo decir un gusto conocerte porque puedo ser muchas cosas pero mentirosa no.

- lo mismo digo- respondió con acritud.

- esposo viejo, creo que iré a nuestra recamara a tomar una ducha y descansar, ¿le puedes decir a Cathy que nos lleve la comida allí?

- encantado esposa bebe-,

-lo siento Kate, puedes pedir un taxi allí está el teléfono, que tengas un buen viaje.

- por lo menos hazme compañía mientras espero el taxi Edward.

-si lo que te preocupa es estar sola no te preocupes Cathy vendrá a hacerte compañía, yo no puedo mi esposa me espera… y no me gusta hacerla esperar.

Nos abrazamos y subimos juntos las escaleras, cuando llegamos al cuarto me atrapo contra la pared y me beso con pasión, y a la vez con ternura.

- creo que tendrás que llevarme a una clínica de rehabilitación bebé.

-¿Por qué?

-soy adicto a tus besos, mientras más te beso mas quiero seguirlo haciendo.

-mientras, tu adicción sea yo o mis besos para mi es perfecto, porque creo que tu adicción a mi solo se puede comparar con mi adicción a ti.

Y nos seguimos besando hasta que unos golpes en la puerta y la voz de la bruja nos interrumpieron.

-Eddie, no hay vuelo disponible hasta mañana así que me tendré que quedar.

Edward ni siquiera se digno a abrir la puerta

- está bien puedes quedarte, lo que ocupes puedes decírselo a Cathy….

-y si salimos a cenar, digo como es mi única noche aquí…

En eso sonó el móvil de Edward.

-¿Alice?... ya entendí….yo también te quiero….yo le digo… Bye.

- lo siento Kate pero no podemos ir pero si quiere puedes salir…. Buenas noches.

-pero…

-buenas noches Kate. ...¿en que estábamos?... oh a recordé- y volvimos a nuestra sesión de besos, en medio de mi ensoñación y recordé la llamada de Alice.

-esposo, ¿Qué quería Alice?

- me crees si te digo que ella tiene un sexto sentido, me dijo que no aceptara nada de Kate y a nada se refería a nada.

- ¿en serio y porque?

-te digo que tiene un sexto sentido que, en serio vale, mas hacerle caso.

-bueno pues haremos caso a Alice.

- y para evitar problemas tenemos prohibido salir de la habitación.

-eso me gusta.

Pasamos horas hablando, Cathy nos subió la comida y disfrutamos de la comida y la compañía del otro. A media noche me desperté con mucha sed, y cuando me disponía a levantarme para ir por agua Edward no me dejo saliendo el… paso como media hora y no volvía así que Salí por él, venia subiendo las escaleras… abrazado de la bruja…adiós corazoncito… En eso sonó el celular de Edward en el cuarto y fui por él, era un mensaje de Alice, lo abrí, no estés solo con ella bajo ninguna circunstancia… Salí y casi terminaban de llegar arriba pero note que él se miraba muy mal,

-amor te tardaste mucho…me acerque a ellos.

- estábamos ocupados, no ves...

-bella…hermosa…eres mi ángel…dame mi dosis si- decía Edward pero parecía estar muy borracho.

-creo que tú no te llamas Bella, y la única que tiene sus dosis soy yo… así que…

Pero no necesite hacer mucho porque él se lanzo a mis brazos, tratando de besarme pero sin mucho éxito.

- ¿Por qué te mueves bebé?, yo quiero besarte.

-vamos a la recamara y me besaras todo lo que quieras ¿si?

-aja, adiós Kate, gracias por el jugo…

Así que la muy….piiiiiiiiit, bruja le dio algo a Edward.

- buenas noches y buen viaje Kate.

Me lleve a Edward al cuarto y en cuanto toco la cama cayo profundamente dormido… lo único que pensé antes de dormirme fue un gracias Alice. A la mañana siguiente cuando Salí del cuarto Cathy me dijo que la bruja ya se había ido. Para mi alivio, Edward se levanto a medio día con una terrible resaca quien sabe lo que le dio la bruja pero le cayó muy mal… toda la tarde se la paso agradeciéndome el haberlo rescatado a tiempo…¿y como lo hizo? Pues de una manera muy efectiva a puros besos….

resibi mi primer comentario yupiiiiiiiiiiiiiii

y dos votos yea!!!!!!!

gracias por ello

nos leemos pronto.

Capítulo 3: visitas inesperadas Capítulo 5: Primera vez

 
15088037 visitas C C L - Web no oficial de la saga Crepúsculo. Esta obra está bajo licencia de Creative Commons -
 11080 usuarios