Olvidandome de ti en Paris + 18

Autor: Pampita
Género: + 18
Fecha Creación: 14/09/2011
Fecha Actualización: 01/11/2011
Finalizado: SI
Votos: 5
Comentarios: 13
Visitas: 48522
Capítulos: 18

Bella es la típica adolescente, que se enamora del chico nuevo del instituto, ahora mejor amigo de su hermano Emmet. En un acercamiento entre ellos, Edward debe decidir entre mantener su amistad o en dejar a Bella, y opta por la salida más cobarde? Bella, desolada, decide viajar a Paris para olvidarse de el y encontrarse a si misma.

FIC TERMINADO!!

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Capítulo 4: Mi vida en Paris - Libro de Bella

Llegue a parís, y la verdad la ciudad era arrebatadora. Me instale en mi hotel y me dedique a conocerla… Los primeros días iba con mi mapa en la mano como buena turista, pero luego me manejaba a mi antojo… Paris era una hermosa ciudad, donde los artistas estaban en cada esquina… Utilice mi tiempo para despejarme y pensar. Paris es la ciudad del amor, dicen, y estar allí sola era una desventaja, pero lo aprovecharía.

Un día pasee por el costado del Sena, y me encontré con un grupo de artistas. Comencé a ver sus dibujos, y uno me llamo la atención. Era una imagen hermosa en blanco y negro de los puentes… Una voz con unas palabras en francés me sacaron de mis pensamientos. Me gire y un hermoso hombre, un tanto mayor, estaba parado detrás mio.

-          Lo siento – Dije – No hablo francés…

-          Ok. Yo lo hablo bastante mal – Dijo riendo – De donde eres?

-          Americana – Dije – Seattle, precisamente.

-          Guau… mucha lluvia – Dijo

-          Si… y tu?

-          Yo soy de todos lados. Originariamente de philadelphia, pero desde los 8 años que no he vuelto a casa… Dijo

-          Lo siento – Dije

-          No tienes porque… estoy feliz así – Dijo sonriéndome

Nos quedamos unos segundos en silencio, y luego estiro la mano y se presento.

-          Me llamo Jacob – Dijo

-          Bella – Dije riendo.

-          Bella… Que hermoso nombre… y que edad tienes Bella?

-          Tengo 15 años – Dije.

-          Y se puede saber que haces a esta edad sola en parís? Huiste de casa?

-          No – Dije – Necesitaba encontrarme a mi misma, y pensé en Paris …

-          Buena elección – Dijo el – Y que has visto hasta ahora?

Le comente todos y cada uno de los lugares que había visitado y el escucho atentamente. Así nació mi amistad con el hombre que cambio mi vida…

Jacob me hizo conocer todo de Paris… Lo turístico y lo que no. Me enseño como desenvolverme con muy poco dinero, lo que me permitió pensar en extender mi estadía… Cuando les avise a mis padres no estaban muy contentos, pero no les quedo otra que aceptar ya que todo estaba siendo pagado por mi. Luego de un mes de estar en Paris, Jacob me ofreció mudarme con el para quedarme  y ahorrarme estadías. El mostraba algo de interés en mí, pero no era una persona de temer. Me hacia acordar mucho a Emmet ya que era de su tamaño…

El segundo mes que pase en parís, fue realmente renovador. Viviendo con Jacob descubrí mucho de mi misma. Comencé a sentirme mas una mujer y ya no tanto una niña pesar de mi corta edad. El me sugirió unos cambios personales… Corte mi cabello, lo aclare un poco y cambie un poco mi manera de vestir. Mi cuerpo también había cambiado, si era posible. Estaba un poco mas alta, y delgada. Mis pechos habían crecido. Lo notaba en mi ropa. Comencé a interesarme en la fotografía, y conseguí una especia de trabajo sacando fotografías a turistas… Eso me permitió comprarme una cámara y continuar con mi nueva pasión…

Jacob me llevaba a citas. Me mostraba cosas de la ciudad y nos besábamos… Nos besábamos mucho… el era un hombre muy considerado… Nunca me presiono a nada. Siempre me enseñaba cosas nuevas. Una noche, me entregue completa a el. Perdí mi virginidad en una noche de lluvia en que me llevo a conocer los jardines de Versalles… Caminamos por horas. Yo me había puesto un vestido negro y unos tacones hermosos que el me había regalado. Salimos a caminar y comenzamos a besarnos, cuando se largo a llover. Corrimos para protegernos de la lluvia bajo un árbol. La calle estaba desierta. Comenzamos a besarnos desesperadamente. Llegamos al departamento como pudimos, y cuando entramos nos miramos a los ojos. Me cargo hacia su habitación y me apoyo sobre su cama. Comenzamos a besarnos nuevamente. Sus manos viajaron por todo mi cuerpo en caricias muy agradables. Beso mi cuello mientras corría los breteles del vestido, lo bajo hasta mi vientre. Capturo con mi boca uno de mis pezones haciéndome gemir… El se comenzó a desvestir lentamente y una vez desnudo se recostó nuevamente a mi lado. Me ayudo a sacarme lo que me quedaba de ropa,  mirándome a los ojos acaricio todo mi cuerpo. Me sentía relajada de estar así con el. Estaba nerviosa, pero a la vez tranquila porque sabia que me cuidaría… el se posiciono en mi entrada luego de ponerse protección. Me decía palabras que me relajaban a mi oído. Eran palabras dulces que me animaban a dejarme llevar. Comenzó a adentrarse en mí lentamente hasta que comenzó a dolerme. Me contraje instintivamente ante el dolor.

-          Relájate Bella… Solo dolerá unos momentos, lo prometo.

Se adentro en mí completamente, haciéndome agarrar su espalda con fuerza. Se quedo dentro mio hasta que me acostumbrara a su miembro. Una vez que el dolor pasó, comenzó a moverse lentamente en mí, y el dolor fue reemplazándose por un placer intenso… El comenzó a sentir mi relajación, y acelerar sus estocadas. Me sentía en el cielo. No sabia que un placer así podía llegar a sentirse. Sentía algo dentro de mí crecer. Un fuego, un calor, algo que no podía explicar… Mis gemidos acompañaban esa sensación, y de la nada, sentí como algo en mi interior explotaba, haciendo que ese calor se esparza por todos lados… Unos segundos después Jacob gruño en mi oído y se recargo en mi hombro. Supuse el también había terminado.

Esa noche nos quedamos despiertos. Estaba segura que lo que sentía por el no era amor, pero el lo sabia y con eso me bastaba. Yo volvería a Forks eventualmente y el no vendría con migo… el nombre de Edward ya no daba vueltas en mi cabeza. No sabia cuales serian mis emociones al verlo, pero al menos creía haberlo olvidado. Jacob había sido la parte más importante en ello. Sin el no hubiera podido hacerlo.

Me di cuenta que me había convertido en un objeto deseable para los hombres. Cada vez que salíamos, Jake me regalaba un hermoso vestido para lucir, y acaparaba muchas miradas. Jacob me contaba muchas de sus experiencias con otras mujeres, y experimentábamos juntos las que mas me interesaban. Una noche de salida nos encontramos con una pareja italiana que hablaba perfecto nuestro idioma, y nos ofrecieron ser Swingers por una noche. La idea debo decir que me sorprendió y le dije a Jake que lo pensaría, pero el me respondió que estas cosas eran espontaneas. Si era si, era en ese momento. No habría un después. Me pregunto si yo quería que eso formara parte de mi experiencia y esas palabras fueron suficientes para cerrar el trato. Con esta pareja nos fuimos a un hotel. La idea era estar las cuatro en una habitación. Jacob les dijo que mi experiencia era escasa y que me tengan paciencia. La mujer en cambio parecía muy emocionada con Jake y debo decir queme dio un poco de celos…

Cuando entramos a la habitación, tomamos un trago del minibar. La cama era una, y ambos hombres se sentaron en ella. La chica con la que estaba, era una muy linda mujer. Su cabello era rojo intenso y sus ojos eran verdes. Por un momento pensé en sus ojos como los de Edward que a pesar de no ser iguales eran del mismo color, y eso me excito. Su cuerpo era perfecto. Se acerco lentamente a mí, corrió el cabello de mi cara y me beso. La idea de hacer eso con una mujer era totalmente extraño, pero excitante. La mujer recorrió con sus manos suaves el costado de mi cuerpo, y me estremecí. Cerré mis ojos y sus caricias me hicieron temblar. Me beso nuevamente y comenzó a recostarme en la cama. Sus manos se introdujeron por mi vestido y lo levanto por completo hasta sacármelo. Estaba allí en la cama solo con una tanga y mis zapatos. La mujer se tiro arriba mio y succiono mis pezones de manera lenta y excitante. Mantenía mis ojos cerrados disfrutando de todo lo que ella me hacia. Sentía sus besos por mi vientre y descender. Sus pequeñas manos comenzaron a bajar mi tanga y sentí unos labios sobre los míos. Por su gusto supuse que era Jacob. Unas manos comenzaron a tocar mis senos mientras la mujer comenzó a besar mi intimidad. Sus besos eran con un deje de succión, pero mínimo. Ella sabia lo que estaba haciendo. Sabia donde debía tocar. Era distinto que cuando Jake lo hacia. Me imagine que era porque un hombre no sabe lo que se siente, solo imagina lo que puede llegar a gustar, en cambio la mujer lo experimenta… La lengua de la mujer comenzó a hacer círculos en mi clítoris, haciéndome gemir de placer dentro de la boca de Jake. Sus lamidas eran tan suaves pero certeras que sabia que en cualquier momento me vendría. La mujer dejo su trabajo, para ser reemplazada por el hombre. Se notaba el cambio, pero yo estaba ya tan excitada que mucho no importaba. Solo buscaba el placer del momento. El hombre ya estaba desnudo, y Jake estaba desvistiendo a la pelirroja. Verlo desvestirla me causo un placer extraño, ya que imaginaba que me lo hacia ami. Este hombre se puso protección, y dejándome sobre la cama me penetro salvajemente. Debo decir que su tacto con las mujeres era prácticamente nulo, por eso me di cuenta que la que tendría que hacer las cosas era yo, si no quería terminar insatisfecha. Nos gire en la cama, y comencé a cabalgarlo. Los gemidos del hombre se hicieron bastante audibles. Al lado nuestro, Jake cayo prácticamente seguido por la mujer que comenzó a cabalgarlo. Nuestras miradas se conectaron, y seguíamos al ritmo nuestro.  Jake jadeaba cerrando los ojos eventualmente pero los abría al instante y buscaba nuevamente mi mirada. Las manos del hombre viajaban por mis senos y espalda. Me imaginaba que era Jake quien lo hacia… EL ritmo que llevábamos las dos parejas era sostenido e igual. Poco a poco mis paredes se iban tensando. Estaba por terminar, Jake lo sabia porque ya me conocía, asique comenzó a hacer su parte con la pelirroja para terminar todos juntos… mi orgasmo exploto dentro de mi, seguido de mi acompañante. Las descendidas de los movimientos de Jake y su pareja me hicieron dar cuenta que también. Cruce mi cuerpo y bese a Jake intensamente.

Salimos del hotel saludándonos y nos alejamos.

-          Eso es todo? – Pregunte

-          Si – Dijo Jake agarrando mi hombro… esperabas algo más?

-          No se… pensé que nos cruzaríamos teléfonos o algo – Dije

-          No Bella – Dijo riendo – De eso se trata. De ese momento y nada más…

-          Ok – Dije asintiendo y entendiendo como era…

-          Y te gusto la experiencia? – Pregunto.

-          Me gusto estar con la mujer… creo que hubiera sido mejor invitar a una mujer y estar solos. El hombre era muy desesperado.

Jake comenzó a reír.

-          Créeme que la experiencia de estar con otra mujer solos con un hombre es distinta. El hombre no puede dedicarse a satisfacerte a ti, tiene que dividirse en dos – Dijo

-          Lo se… pero la otra mujer puede ayudar… o no?

Jake quedo sorprendido ante mi comentario. Creo que un deje de excitación recorrió su rostro.

 

Dos meses en Paris habían pasado. Llamaba a mis padres regularmente, y me decían cuanto me extrañaban. No solo conocí Paris. Conocí casi toda Europa junto a Jake. Algo que me sorprendía de el. No sabia como alguien que solo pintaba podía tener acceso a estas cosas. Los viajes, los regalos. Es decir prácticamente me regalo un nuevo guarda ropas… todo era pagado por ambos, pero igual, me preguntaba eso.

Quedaba muy poco para que el verano concluya. Sabía que en cualquier momento tendría que volver a casa, y Jake también. El había comenzado a dibujarme en todo momento. Mientras dormía, mientras me bañaba, mientras paseábamos en el parque, mientras tomaba fotografías… El día en que confirme mis pasajes de vuelta, con Jake nos dijimos que disfrutaríamos todo. Teníamos citas a cenar todas las noches, hacíamos el amor y nos levantábamos de la cama solo si teníamos ganas… Me sentía triste de tener que irme, pero feliz por la experiencia…

Un día antes de salir, arregle mis maletas. Tenía dos maletas extras por lo que me llevaba. Regalos para todo el mundo. Mi nueva cámara y miles y miles de tarjetas de memoria en fotos… 

La ultima noche con Jacob me llevo a cenar a la torre Eiffel Era un restaurant exclusivo, de muy alto nivel, por lo que Jake me regalo un vestido para la ocasión, y el se vistió con un hermoso traje. Llegamos y el ordeno por ambos ya que mi francés, aunque algo había aprendido, era limitado. El mesero nos saco una foto de ambos con mi cámara. Nos veíamos muy bien, y de fondo se podía ver las luces de Paris. Era la foto más hermosa que tenia…

Dimos una vuelta por Paris sacándonos fotos, y cuando llegamos al departamento hicimos el amor toda la noche… A la mañana, me levante a regañadientes. Subimos juntos a un taxi y me acompaño al aeropuerto. Nos besamos hasta que llamaron a abordar. Subimos juntos la escalera mecánica y me dejo ir. Lagrimas corrían por mi rostro, pero estaba feliz de lo que había vivido… Mañana llegaría a casa y con el mi primer día de escuela.  Me senté en el avión y me acomode para descansar y dormir un poco. En unas horas llegaría a casa.

 

Capítulo 3: El comienzo - Libro de Edward Capítulo 5: El comienzo de clases - Libro de Bella

 
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