Guarde todo y lo deje como estaba. Sabia que no iba a poder mentirle a Edward respecto de mi descubrimiento, no le veia algo malo a que se entere.

Sali despacio de la gran habitación, tratando de no perderme y me dirigi al patio, alli deberian de estar Matteo y Edward.

Cruce toda la estancia y los encontre. Anna me saludo con la mano feliz, su sonrisa era unica.

Edward estaba hablando de algo con Matteo, pero apenas me vio me rodeo con sus brazos y el matrimonio a cargo de la antigua casa de Esme, rió en silencio.

-¿Qué te parece un paseo mi Bella?

-me encantaria, pero… ¿no deberiamos ayudar a Anna y Matteo?

Me miro confuso, era obvio que tenia otros planes en mente, razon la cual me hizo ilusionar un poco.

-no se preocupen, enserio, Edward ya ayudó mucho, y vos Bella, me fuiste gran compañía hace rato.- recalcó Anna

-si, es cierto, ademas, se supone que ustedes vinieron a vacacionar-guiñó un ojo a Edward, se nota que estuvieron hablando entre ellos- es justo que disfruten.

-pero…-interrumpí aunque no me dejaron terminar la frase y Edward tiraba de mi hacia el lado de un bosque.

-se van-dijo terminantemente Matteo- tienen que amarse tranquilos. Anna y yo nos arreglaremos.

-ya los escuchaste amor, sera mejor que nos vayamos, por lo poco que conozco de Matteo, no hay que pelear con él-sonó divertido como lo dijo Edward, asi que no era muy cierto, me alegre ya que Matteo no tenia cara de ser alguien malo.

Edward me miraba esperando paciente mi respuesta, claro que ya la sabia, nunca me negue a el.

-esta bien, pero cualquier cosa que necesiten lo tienen que decir-dirgiendome al matrimonio.

-ya Bella, estan bien, no quieren nada, ¿nos podemos ir amor?

-un momento…-dijo riendo Anna-si necesitamos algo de ustedes…

-¿Qué?-pregunte feliz

-¡que sean felices y piensen en ustedes! ¡Por Dios!-termino la frase su marido.

-sera mejor que me la lleve de una vez por todas a mi dulce Bella

Dejé que Edward me arrastrara tiernamente, estaba ansioso asi que me rei mucho cuando vimos que la vida tenia otros planes para nosotros, y mi novio no estaba de animos para ser paciente. Fue muy chistoso.

De camino a buscar a los caballos, otra de las sorpresas de Verona escondidas en la estancia, estaba el fantasma de una persona que según este chico Cullen, quien caminaba junto a mi, le arruinaba el dia.

-al fin paz-sentenció aliviado cuando me subia al caballo.

-hay que aprovechar, nadie sabe que puede pasar

De pronto, una vez que subió el tambien, llevando al margen al animal blanco puro que nos conducia al paseo, escuchamos un ruido que rompio toda la calma.

Edward gruñó en lo bajo y yo sonreí. Era una llamada.

-Edward, por el amor de Dios, ¿Por qué no contestas cuando te llamo?

-alice…

-si soy yo, hermano de mi alma y compañero de caceria, me tenian preocupada, ¿Cómo estan? No llamaron cuando llegaron como me prometieron. ¡Sufri mucho!

-alice cullen, si no me dejas hablar voy a cortar, interrumpiste mi paseo con Bella

-ya ya, seguro que Bella ya se canso de estar contigo todo el rato, necesita hablar con su cuñada favorita, ponla al celular.

-no, Alice, estamos bien, ya nos vamos.

-pero Edward…

-ups…-dijo Edward en tono inocente-creo que se corto la llamada

-Edward, no seas asi, tal vez Alice tenia que decirnos algo importante

-no creo

-no se dara por vencida, seguro la enojaste mucho, la conozco

-¿apostamos?

-Edward Cullen apostando… eso no me lo esperaba…

Silencio.

-te lo dije, ahora me llamara a mi, hay lo tienes, amor

-bella, perdon que no pude hablarte, es que mi ex hermano favorito colgo, no fue mi intencion, llamaron tus papas, solo te queria avisar

-estas en altavoz hermanita, habla claro, ¿Cómo no me dijiste eso? Eso era importante

-ya, paz familia Cullen, cuenta lo de mis padres

-ahh.. cierto-siguio dubitativa- pues… no se preocupen de nada, dijeron que mas tarde te llamaban, es todo

-en ese caso…-pensó Edward- si los Swan querian hablar a su hija, mi Bella, ¿Por qué no la llamaron a ella?

-pero que necios que son, mi hermano pendiente de todo menos de su mente, y mi futura cuñada, al margen del novio…-rio alice- Bella… ¿Por qué no prendes tu celular cuando es debido?

-era verdad-me disculpe- apague el celular todo el tiempo, es que queria estar aquí en un 100 %, ya lo dejare encendido Alice, lo prometo

-Alice, ya nos vamos, es que si no sabias, estamos cabalgando, y seguimos asi, vamos a terminar chocando

-llamo en una hora, no me extrañen tortolitos

Edward colgo aliviado y paseamos tranquilos, yo me aferre mas a su cintura con el pretexto de asegurarme de no caerme, él no se quejo.,

-cuando volvamos sera hora de salir, mi Bella, queria darte un regalo

-¿otro mas?-ya me estaba llenando de sorpresas

-es el que mas ansio Bella, espero que te sorprendas

-yo tambien te dare algo, es justo

-ya… la noche nos regalara su brillo, asi como las estrellas son el sol nocturno, que nos embriague de pasion con la luna gitana.

-¿y eso? Te amo mi Romeo

-me conformo con ser tu Edward…

La tarde paso lenta, a pesar de que ibamos rapido en el caballo, por cierto de un muy lindo nombre, Blanca se llamaba la yegua en honor al color de su pelaje.

Volvimos a la casa, y Edward me dijo que se iba a preparar para la sorpresa, debia hacer algo en mi habitación, cortesía de él tambien, todo misterioso.

Rei de los nervios.

Sobre la cama habia un vestido verde agua, sencillo pero bonito, con unos zapatos simples y comodos. Eran zapatillas, mis favoritas a la hora de salir.

-te ves bonita, muy Bella- me animo Anna cuando me ayudo a arreglarme.

"estas lista Bella Swan, que no se te olvide respirar" dije para mis adentros y Sali a la sala principal donde me esperaba un mas de lo normal guapo y sexy Edward Cullen.