—¿Cuánto falta para que podamos ir a casa?—preguntó esperanzada.
Sus primos y Rosalie habían decidido sacarla a bailar antes de dirigirse a la fiesta de cumpleaños que su madre estaba preparando para ella.Bella había estado feliz con la idea en ese momento,pero eso había sido cuando simplemente había estado hambrienta.Ahora estaba hambrienta y ansiosa por llegar a la fiesta y aprovechar la ofrenda que su madre sin duda tenía a mano.En ese punto hasta aceptaría una intravenosa,lo que era decir bastante.Bella odiaba ser alimentada por vía intravenosa.
—Son apenas pasadas las nueve—anunció Rosalie mirando su reloj de pulsera—.René nos dijo que no debíamos llevarte hasta después de las diez.
—Hmm—la boca de Bella se retorció contrariada—.¿Alguno de ustedes tiene alguna idea de por qué la fiesta comienza tan tarde?
—Tía René dijo que tenía que recoger algo para ti en la ciudad antes de la fiesta y que no podía hacerlo hasta después de las nueve—observó Marco—.Luego tiene que conducir de regreso,de todos modos—se encogió de hombros—.Ninguna fiesta comienza antes de las diez.
—Debe estar recogiendo tu obsequio—supuso Rosalie.
—No lo creo—dijo Marco—. Mencionó algo sobre Bella y su comida.Sospecho que está recogiendo un postre especial o algo.
—¿Un postre especial?—preguntó Jane interesada—.¿En la ciudad?¿Después de las nueve?
Su mirada se deslizó hacia la expresión ilusionada de Bella cuando sugirió:
—¿Un Mordisco Dulce?
—Debe serlo—Bella estuvo de acuerdo en ello,sonriendo con gusto ante el panorama.
Había heredado el amor por los dulces de su madre y nada la satisfacía de la misma manera que un Mordisco Dulce,que era el término con el que se referían a los diabéticos no diagnosticados que andan de un lado para otro con niveles de glucemia peligrosamente altos.Era un gusto infrecuente,aún más infrecuente por el hecho de que después siempre ponían en la mente de la persona la idea de llamar a su médico para hacerse un análisis de sangre,lo que por lo tanto retiraba de la carta a ese Mordisco Dulce en particular.
—Ése podía ser eso—comentó Marco—.Explicaría la buena voluntad de Tía René de conducir desde las afueras al centro.Odia conducir en la ciudad y en general lo evita como la plaga.
—Si condujera ella—comentó Rosalie—.Pudo haberle pedido que enviaran para ella uno de los automóviles con chofer de la compañia.
Marco agitó su cabeza ante la mención del hermano de Bella,la cabeza de las empresas Vulturi.
—No.Ella iba a conducir y no estaba feliz por ello.
Bella se movió impacientemente y preguntó:
—Así que,¿cuánto tiempo hasta que podamos irnos?
Marco vaciló.
—Bien,es viernes por la noche y el tráfico podría ser malo,con todos tratando de librarse de la ciudad por el fin de semana—dijo pensativamente—. Supongo que podríamos salir en otros quince minutos y no arriesgarnos a llegar demasiado adelantados.
—¿Y si partimos ahora y conduces despacio?—sugirió Bella.
—No soy tan aburrido,¿o sí?—preguntó divertido.
—No tú.Este lugar.Es como una carnicería—dijo Bella arrugando la nariz.
—Está bien,malcriada.
Marco enredó su pelo cariñosamente.Era cuatro años mayor que ella y era más como un hermano mayor que sus propios hermanos,pero era porque ellos habían sido criados juntos.
—Salgamos.Haré todo lo posible por conducir despacio.
—Sí,está bien—dijo Jane con un bufido—.Como si algo así fuera a ocurrir alguna vez.
Bella sonreía mientras recogían sus abrigos y se dirigían hacia la salida.Marco era una especie de demonio de velocidad y sabía que Jane tenía razón.No tenía duda de que llegarían temprano y enfadarían a su madre.Era un riesgo que estaba dispuesta a correr.
Bella había olvidado todo sobre el Padre Aro cuando había sugerido que partieran,pero no había ninguna señal de él cuando caminaron hacia el Jeep de Marco.Se había rendido o proseguido su búsqueda en otro lugar.Su próximo pensamiento fue para Jacob y Bella echó un vistazo hacia los contenedores mientras Marco conducía frente a ellos,su mirada tenía la capacidad de escudriñar entre las sombras,pero tampoco había ninguna señal de él.También había partido.
Estaba un poco sorprendida ante su rápida recuperación,pero se encogió de hombros y dejó el tema a un lado.No estaba tendido inconsciente en medio del estacionamiento así que obviamente se las había arreglado para pedir un taxi.
El tráfico no era malo después de todo.Habían esquivado lo peor de él y habían logrado un buen tiempo para llegar a la residencia de su madre en las afueras.Demasiado bueno.
—Llegamos con media hora de antelación—dijo Jane desde el asiento trasero cuando Marco estacionaba el Jeep detrás del pequeño deportivo rojo de René.
—Sí—echó un vistazo a la casa y se encogió de hombros—.Estará de acuerdo con ello.
Jane resopló.
—Tú quieres decir que estará de acuerdo con ello tan pronto como tú le dediques tu encantadora sonrisa.Deberías permanecer siempre alrededor de Tía René.
—¿Por qué piensas que me gustaba colgarme de Marco cuando éramos más jóvenes?—preguntó Bella divertida.
—¡Oh!¡Ya veo!—rió Marco cuando salió del vehículo—.Así que por fin se conoce la verdad.Solamente te gusto por mi habilidad con tu madre.
—Bien,no pensabas que en realidad me gustaba estar colgada de ti,¿o sí?—lo bromeó Bella mientras caminaba a su lado.
—Malcriada—le dio un juguetón tirón de pelo cuando se reunió con ella.
—¿Ese no es el automóvil de tu hermano Emmett?—preguntó Rosalie mientras salía desde el asiento trasero y cerraba de golpe la puerta del Jeep.
Bella echó un vistazo hacia el Mercedes oscuro y asintió con la cabeza.
—Eso parece.
—Me pregunto si alguien más está aquí—murmuró Jane.
Bella se encogió de hombros.
—No veo otros automóviles.Pero supongo que Emmett podría haber organizado que un par de la compañía recogieran y dejaran caer a los invitados.
—Si lo hizo,dudo que alguien haya llegado aún—dijo Rosalie mientras se dirigían hacia la puerta principal—.Sabes que no está de moda llegar puntual.Solamente los gansos pasados de moda llegan a tiempo.
—Supongo que eso nos convierte en gansos pasados de moda—comentó Bella.
—No.Somos sólo marcadores de estilo—anunció Marco y todos rieron.
|