PROTECTOR DE MI CORAZON (+18)

Autor: esmecullen
Género: + 18
Fecha Creación: 30/09/2010
Fecha Actualización: 30/09/2010
Finalizado: SI
Votos: 10
Comentarios: 8
Visitas: 33149
Capítulos: 12

Summary: Luego de la muerte de sus pares, Bella esta bajo la tutela de Aro, él la tiene encerrada en su propia casa, dejándola salir para lo apenas necesario, ¿Qué sucede cuando después de siete años de encierro le contrata un protector para que pueda salir?

Disclaimer: Los personajes de Twilight son propiedad de Stephanie Meyer

ESTA HISTORIA NO ME PERTENECE

ES PROPIEDAD DE YURIKA CULLEN, JEN QUIEN ME AUTORIZO A PROBLICARLA

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Capítulo 4: CAPITULO 4

By. Yurika Cullen


*-B-pov-*

— Shh, Bella soy yo— me dijo Edward, inmediatamente me relaje— Te voy a soltar pero no grites ni hagas ruido— yo asentí y él inmediatamente me soltó

— Me asustaste— le dije en un susurro

— ¿Puedo saber que demonios haces aquí y a esta hora?— su vos era medio enojada, medio angustiada. Yo agache la cabeza— ¿no me lo vas a decir? ¿Es que aun no confías en mi?—

— No es eso, es solo que…—

— ¡Bella, Edward!— era la voz de Jasper. Gire a mi derecha y lo vi corriendo junto con Alice hacia nosotros

— Váyanse rápido de aquí, James se despertó para dar su ronda nocturna y no debe encontrarlos fuera de las habitaciones— nos aviso Alice. Ambos asentimos y en silencio nos fuimos a las habitaciones, ellos tomaron el rumbo de la cocina. Abrí la puerta de mi habitación y estaba a punto de despedirme de Edward cuando él me tomo del brazo y entro conmigo cerrando la puerta tras de él. Ahí pude ver que Edward solamente llevaba el pantalón del pijama y también estaba descalzo.

— Tenemos que hablar— yo me puse nerviosa ¿me iría a regañar? ¿Estaría enojado conmigo?

— Pero, Edward, si James pasa y no te ve en tu habitación…—

— James no tiene permitido entrar a las habitaciones, así que podemos hablar tranquilamente— yo asentí y me senté en la cama, él continuó de pie— ¿Me vas a decir que hacías tratando de entrar al despacho de Aro a la media noche?— nuevamente el tono medio enojado, medio angustiado. No me gustaba que se enojara conmigo, no se porque, pero me sentía mal— Bella ¿confías en mi?— me dijo arrodillándose frente a mi y hablándome en un tono cálido, yo levante la mirada y me encontré con sus ojos verdes, me miraba con angustia

— Claro que si— le dije, él suspiro

— ¿Entonces? ¿Qué es lo que pasa? Dímelo—

— ¿Me prometes que no se lo dirás a nadie? ¿Si te parece muy absurdo no se lo contaras a Aro?—

— Bella— dijo mi nombre, y me sentí como una niña a la cual regaña su papá— Yo te dije muchas cosas que solo tu debías saber y que Aro no esta al tanto ¿Cómo crees que le voy a contar lo que me digas? ¿Acaso no somos amigos?— mi corazón se lleno de calidez, claro que lo consideraba mi amigo. Yo asentí— ¿Entonces? ¿Me lo vas a decir?— suspire y le tome de las manos

— Ayúdame Edward— le dije mirándolo a los ojos, él los abrió sorprendido y entrelazo sus dedos con los míos

— ¿Con que quieres que te ayude?—

— Edward, tal vez no me creas, pero Aro no es la persona que aparenta ser, yo podría jurar que esconde muchas cosas, ayúdame a averiguarlo, ayúdame a descubrir que es lo que esconde… yo… estoy casi segura, de que él, es el responsable de la muerte de mis padres, por eso estaba intentado entrar en su despacho, quería buscar cualquier prueba que pudiera utilizar en su contra, yo se que mi padre no lo dejo a él encargado de la empresa ni de mi, puedo asegurarte que todo es una treta suya para quedarse con nuestro dinero, pero yo aquí encerrada no puedo hacer nada, él me tiene en su poder, se que es difícil de creer, porque…— él puso uno de sus dedos en mis labios silenciándome

— Te creo. Te creo, porque yo estoy aquí para eso— yo lo mire sorprendida— Mi trabajo es buscar pruebas para hundir a Aro— ¿Qué me estaba diciendo? Su trabajo…

— Explícame por favor, porque no entiendo nada— él me tomo el rostro con ambas manos y me miro directo a los ojos

— Antes tienes que jurarme que nada de lo que yo te diga saldrá de tus labios—

— Te lo juro, pero ¿Qué pasa?— Edward abrió la boca para hablar, pero se escucharon pasos en el pasillo, el me hizo una seña para que guardáramos silencio, luego de unos minutos, abrió la puerta lentamente y se asomo al pasillo comprobando que James no estuviera. Luego cerró nuevamente con seguro y se acerco hasta mí. Se sentó en la cama y tomo mis manos

— Bella, Emmett, Jasper y yo, somos agentes especiales del FBI— yo me quede en shock— nuestro trabajo, es buscar todo lo que pueda demostrar que Aro Vulturi es uno de los mas grandes cabecillas de la mafia, Aro ha tenido muchísimas acusaciones por supuestos nexos con la mafia y el narcotráfico, pero sorprendentemente siempre sale impune, pues las pruebas que se encuentran contra él, desaparecen, resultan falsas o los testigos nunca llegan a atestiguar—

— Pero ¿Cómo lograron infiltrarse aquí?— le pregunte asombrada y curiosa

— No se si recuerdas que, el día de la reunión, Aro dijo que los hombres que le recomendaba Laurent siempre eran los mejores—

— Lo recuerdo—

— Veras, Laurent es conocido en los bajos fondos, porque es un experto en contratar, asesinos a sueldo, ladrones, secuestradores y todo tipo de hombres para la mafia, pero Laurent fue capturado hace mas o menos ocho meses, como una ayuda para su rebaja de pena, él estuvo dispuesto a colaborar con nosotros, para poder capturar a Aro y unos cuantos mas, así que él continuara facilitando hombres para la mafia, pero en esta ocasión son agentes como nosotros, de ese modo cuando Aro lo contacto, nos enviaron aquí, nuestra misión es tenerlo vigilado y buscar toda la evidencia posible, pero ya registramos toda la casa y no encontramos nada, esta limpio— yo lo miraba sin poder creerlo, esto era como una película de acción

— ¿Y yo? ¿Entonces tu misión jamás ha sido protegerme?— de repente sentí un vacio en el pecho

— Nuestra misión, es buscar todo lo que incrimine a Aro, proteger a quienes están siendo sometidos por el también es nuestra misión, pero cuidarte a ti, es un compromiso mío— mi corazón se acelero

— ¿Tuyo? ¿Por qué?—

— Porque se me hace increíble que alguien sea capaz de hacerte todo lo que Aro te ha hecho, especialmente a alguien tan inocente como tu, eres una mujer única y no te mereces lo que te ha pasado, no se concretamente el motivo, pero siento una gran necesidad de protegerte— al igual que con Alice, no resistí mas y lo abrace

— Gracias— le dije a Edward mientras me respondía el abrazo

— No tienes porque agradecerme, te dije que éramos amigos, ¿lo somos, no?—

— Claro que si, Emmett, Jasper y tu se han portando como nadie en estos años conmigo, a los tres los considero como mis amigos, pero a ti, te tengo un cariño mas especial— no se porque se lo dije, pero no me arrepiento. El me abrazo más fuerte

— Yo también siento un cariño especial por ti Bella, por eso te prometo que Aro pagara por sus crímenes y tú podrás ser libre de vivir como te plazca— yo me solté de su abrazo pero volví a tomarlo de las manos

— ¿Y si nunca conseguimos la forma de acabar con Aro?—

— Se que lo haremos Bella, si no lo hacemos nosotros, lo harán sus enemigos, pero, si llegara a suceder, igual te liberaría de Aro, pase lo que pase te voy a sacar de aquí y esto nada tiene que ver con mi misión, es una promesa que te hago solamente a ti— en sus ojos había un cariño tan verdadero que estuve a punto de lanzarme a sus brazos y besarlo, pero mi parte racional, actuó a tiempo y no lo hice

— Es una promesa entonces— le dije, él asintió

— Ahora tengo que advertirte Bella, no vuelvas a andar sola por la casa a estas horas, recuerda que todo esta monitoreado y lleno de sensores y alarmas, si hubieras abierto el despecho de Aro se habría accionado la alarma y estarías en problemas, tuviste suerte de que escuchara tu conversación con Alice y de que Jasper te hubiera visto por cámara, te podemos confundir con algún enemigo—

— Lo siento, no se repetirá—

— ¿Por qué no acudiste a mí? ¿Por qué no me pediste ayuda?—me dijo con tono triste

— Durante todos estos días, he estado buscando el momento para decírtelo, pero siempre pasa algo y nos interrumpen, cuando Aro dijo que se iba de viaje, pensé que era tal vez mi única oportunidad, quería hablar contigo, pero tampoco quería ponerte en problemas con Aro si nos descubrían, no soportaría que te pasara algo por mi culpa— Edward volvió a abrazarme

— No seas tonta Bella, prométeme que no importa lo que sea, de ahora en adelante vas a acudir a mi, no vas a pensar en que serás la culpable de nada y vas a pedir primero mi ayuda, promételo—

— Te lo prometo— ¿Y como no hacerlo? Si ese hombre me pedía la luna, haría la forma de bajársela, no podía negarle nada, ¡nada!

— Muy bien, ahora necesito, que me cuentes todo lo que sepas o sospeches de Aro, cualquier cosa por mínima que sea, nos servirá— me dijo soltándome del abrazo pero tomando mis manos de nuevo, yo asentí

— En realidad yo no se nada concreto, pero siempre he sospechado que la muerte de mis padres ha sido culpa de Aro, es un presentimiento, no te lo sabría explicar— Edward suspiro

— Hay algo mas que tienes que saber— yo lo mire a los ojos— El incidente del avión de tus padres fue provocado— yo abrí los ojos asombrada, de sospecharlo a saberlo era un sentimiento muy diferente— luego de hacer un estudio a su avión privado, se descubrió que habían manipulado mecánicamente el avión, además nunca se encontró el cuerpo del piloto ni los paracaídas de emergencia, una de las teorías es que, el piloto fue sobornado y abandono el avión en pleno vuelo, como tu padre savia manejar avión, es ahí donde intervinieron mecánicamente, para asegurar que ocurriera el accidente, Aro fue acusado porque él fue el ultimo en hablar con el piloto y el mecánico un día antes del viaje, se suponía que habían un par de videos donde se le veía entregándole dinero a ambos hombres, pero del piloto no se sabe nada, y el mecánico apareció muerto en New York dos semanas después de que tendría que haber ido a testificar, los videos jamás salieron a la luz y cuando apareció el testamento de Charlie Swan donde lo dejaba a cargo de todo, él lo uso como un voto de confianza de su amigo y salió impune—

Mis ojos se llenaron de lagrimas al imaginar a mis padres en una situación tan terrible como esa, Edward me abrazo y yo no pude evitar largarme a llorar, hacia muchos años que no lo hacia, nunca quise darle el gusto a Aro de verme destrozada, al comienzo lo hacia a escondías en la soledad de mi habitación, pero luego decidí no llorar mas, pero ahora lo necesitaba, necesitaba descargar todo ese dolor que sentía de una vez, Edward me sentó en su regazo y empezó a susurrarme palabras de aliento y a mecerme como si fuera una niña pequeña y en ese momento, me sentí de esa forma, como una niña que necesita consuelo, un consuelo que encontré en Edward. Cuando deje de llorar después de un largo rato, Edward limpio mis mejillas con sus pulgares y me dio un beso en la frente.

— ¿Estas mejor?— yo asentí

— Gracias por consolarme—

— No tienes porque agradecerme, para eso estamos los amigos— yo lo abrace por el cuello y escondí mi cabeza en su pecho— ¿quieres irte a dormir?—

— No, me gustaría seguirte contando— él acaricio mi cabello animándome a hablar— el testamento de mi padre fue otra gran sorpresa para mi, mi padre, dos meses antes de morir, me había comentado delante de Aro y mi madre, que iba a hacer una modificación en su testamento una semana después, en donde me dejaba a cargo de todo, ya que yo cumpliría pronto los dieciocho podía libremente manejar todo, al comienzo yo no quise prestarle mucha atención a eso alegando que él aun tenia mucho por vivir, aunque me insistía en hablar del tema yo le daba por zanjado, diciéndole que podía hacer lo que quisiera, pero que no me gustaba hablar de algo referente a su muerte, así que jamás me entere si realizo el cambio al testamento o no, cuando el abogado de mi padre vino a leerlo y dijo que todo quedaba a nombre de Aro yo me sorprendí, Charlie nunca me había dicho nada referente a Aro, le pregunte a ambos y me dijeron que a ultimo minuto Charlie había decidido poner a Aro a cargo, pues consideraba que yo aun era una inexperta con los negocios y no podría soportar el peso de la empresa—

— Eso es algo muy importante, es un buen dato por donde podemos empezar, hare que contacten al abogado y traten de sacarle toda la información necesaria sobre el testamento... Bella ¿hay algún lugar donde tu padre guardara documentos y cosas importantes? Un lugar que solamente ustedes supieran— yo me quede en silencio y trate de pensar algo importante

— En su despacho tenia una caja fuerte—

— Ya la revisamos, no hay nada— yo continúe pensando

— ¡En su oficina! En la empresa, mi padre tenía una caja fuerte en la oficina, solamente mi madre y yo teníamos conocimiento de ella, es muy difícil de encontrar, pero no se si Aro habrá dado con ella—

— ¿Sabes como abrirla?— me pregunto algo animado

— Si, nuevamente la forma de abrirla, solo la sabíamos nosotros tres—

— Bien, eso nos servirá de mucho, pero es todo por hoy, será mejor que descanses, ya pensaremos en la forma de entrar a la empresa sin que Aro se entere— me dijo bajándome de su regazo, pues aun continuaba en el y acomodándome en la cama, yo me prendí de su brazo antes de que se fuera

— Edward— él me miro curioso— ¿Podrías mantenerme informada de todo lo que pase? Me gustaría estar al tanto de lo que sucede— Edward me sonrió

— Claro que si, pero ahora descansa, mañana hablaremos con Jasper y Emmett— yo asentí, cuando el se fue me acosté y me dormí casi al instante, me sentía mas tranquila, después de hablar con Edward

Capítulo 3: CAPITULO 3 Capítulo 5: CAPITULO 5

 
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