Bella pov:

Después de agotar mi reserva de lagrimas decidí ir a la playa por un poco de ejercicio eso siempre suele hacerme muy bien cuando me atacan el familiar dolor que producen los recuerdos, camino a la playa recordé aquel chico que provocó mi caída desde el mirador debe pensar que soy una loca desquiciada rompe carros que pena y lo peor es que no recuerdo muy bien su cara para por lo menos tratar de disculparme por mi actitud.

Como todas la mañanas corrí dos kilómetros uno de ida hasta el faro y de vuelta a mi carro, una gratificante zambullida en las gélidas aguas del mar para refrescarme y después de nadar un rato suelo sentarme a ver pasar la gente en especial un hombre que llama mucho mi atención.

Aparte de tener un cuerpo muy bien esculpido lo que mas admiro es su vitalidad, siempre tan alegre con su característica sonrisa saludando a todas las personas con las que se encuentra, pero hoy prefiero ir de nuevo a mi apartamento y dejarme llevar por los recuerdos ya que no tengo ganas de ver o hacer nada mas.

RECUERDOS.

Tres años atrás:

Después que Edward salio rumbo al aeropuerto una sensación de vacío y abandono recorrió todo mi cuerpo llegando hasta los huesos atacando con mas fuerza mi corazón y cada hora que pasaba sin recibir una llamada el dolor se multiplicaba. Mas de doce horas sin noticias, desde que sali en la tarde de la u. le estuve marcando cada media hora exactamente hasta que por fin contesto y me dejo en penumbras con su forma de contestar pero reflexione y entendí que su familia en este momento es mas importante y en cuanto se sintiera mejor o solucionara el problema, llamaría para contarme lo que estaba pasando.

En mi corazón sentía una opresión y un cada ves que dormía despertaba agitada por las pesadillas donde Edward se despedía de mi en la mitad del bosque diciendo que ya no me quería, que yo no le convenia. En el sueño siempre gritaba su nombre mientras corría en la espesura y solo la oscuridad me rodeaba...

Paso un me sin tener noticias nada, y su celular me enviaba directo al buzón.

Viaje a Forks por que la salud de mi abuelo esta un poco deteriorada y para mi sorpresa el doctor me informo que llevaba meses en que su tos había empeorado y la medicina no estaba teniendo un muy buen efecto, me dolía mucho verlo en el hospital demacrado y por su cara pasaron años en lugar de meses, me reprochaba a mi misma el dejarlo solo. Podría haber estado con el cuidándolo pero los doctores decían que no tenia caso según me entere el doctor Carlisle lo dejo en muy buenas manos antes de abandonar el pueblo y hable con el señor Black quien me explico que mi abuelo no me quería preocupar.

Muy a mi pesar los seres que mas e querido y han cuidado de mi tienen que partir de este mundo dejándome sumida en la mas gran soledad y tristeza. A las pocas semanas murió. No fue muy consiente de ese tiempo.

Me encerré en la casa donde un día vivió mi papa, mi mama, mi abuelo y ahora yo; Solo recuerdo abrasar la que un día fue su almohada con ese olor tan característico a madera mientras todo a mi alrededor era negro y las lagrimas mantenían mis mejillas húmedas desde que despertaba hasta que me quedaba dormida creo de tanto llorar, no puedo decir si eran meses o años para mi siempre era de noche siempre tan obscuro como la boca de un lobo...

En mis momentos de lucidez escucha al señor Black, siempre contando historia de su pueblo, de sus antepasados. Pero la que mas llamo mi atención fue una acerca de mi mama.

-Bella te voy a contar una historia, -me decia el Sr. Black- es acerca del amor de mi vida!!!

Te preguntaras como un hombre guapo y vital como yo nunca se ha casado y sigue solo, pues déjame decirte que un día estuve enamorado.

Era una mujer de cabellos castaños y a pesar que era muy joven para mi eso a mi corazón no le importo y cada que la veía sonreír mi pecho se llenaba de dicha, en las noches no dormía por esperar que sol alumbrara el cielo para poder aunque fuera de lejos verla. Sus ojos que eran como dos luceros cafés con luz propia y al caer la noche maldecía el no poder escalar sus paredes y así entrar por su ventana y disfrutar del calor de su cuerpo.

Cuando esta chica se convirtió en mujer y cumplió su mayoría de edad le confesé mis sentimientos pero ella me insulto diciendo que era muy viejo, que yo podría ser su padre y créeme eso es lo menos que yo querría en mi vida.

Hable con sus padres para que me permitieran cortejarla como era la costumbre en mi época pero ellos tampoco vieron con muy buenos ojos mi propuesta o tal vez no entendían que no estaba hablando como un hombre lujurioso si no con un corazón enamorado que no funciona si sus ojos no me miran...

Quería que siguiera pero algo en su mirada me dijo que eso era todo por hoy, sus ojos guardaban tanto dolor.

-Descansa preciosa mañana te sigo contando, solo si tu quieres.

-No, por favor continúe. Dígame quien es ella?

-Que bueno que hablas, por un momento pensé que ni siquiera me escuchabas me sentía hablando solo. Pero te vez cansada tienes que dormir ya mañana seguiré con el relato.

En cuanto entro María en la mañana con mi desayuno, le pregunte si ella conocía alguna mujer que compartiera su vida con el señor Black.

Al principio no me contesto se quedo como muda como si sus oídos no dieran crédito a mis palabras.

-Por Dios si sabes hablar llevas meses que la veo sentada en esa silla o en la cama sin dar señales de vida, solo toma su desayuno cuando lo traigo, se baña cuando le dicen que lo haga, se viste por que le digo, nunca contesta cuando te hablan, ni siquiera nos mira. Después que el señor la trajo cuando desocuparon la casa de enfrente todos creían que terminaría en un hospital para loquitos puesto que solo lloraba todo el tiempo, los doctores decían que solo era una fase por la que estaba pasando debido a todo el dolor que tubo que atravesar y con muchos cuidados un día usted sola lograría superarlo, pero el verlo es como ser testigo de un milagro. Ahora coma y arréglese no pregunte bobadas debería salir al patio a tomar un poco del escaso sol que tiene este pueblo, se ve muy pálida -me decia la anciana mujer parloteando sin parar.

Salio dejando mi desayuno en la mesa frente a la ventana, me puse a pensar todo el tiempo que estuve en la casa de mi abuelo o en esta casa sin sentir el tiempo pasar como una flor en un jarrón olvidada sin nadie que le cambie el agua como muerta. Si no fuera por el dueño de esta casa tal vez estaría en un hospital psiquiátrico rodeada de locos. Que pensaría mi mama si me viera así, sin lugar a dudas estaría muy decepcionada de cómo me dejo llevar por la vida sin luchar como muerta peor que muerta, tengo un alma, tenia ilusiones, un futuro por delante y todo que? en el olvido como si lo hubiera perdido en el fondo del océano.

Estuve caminando por el bosque cuando regrese ha la casa me fui a la cocina y pase la tarde hablando con Rita una viejita de pelo blanco que era la encargada de preparar los alimentos me contó que el señor Black nunca se le a conocido esposa o ninguna otra mujer, --era muy guapo-- me dijo ella, en el pueblo corría el rumor que era raro pero tampoco se supo nada de eso solo rumores ya vez como es la gente.

Lo que si me dijo es que María estaba muy interesada en meterse en su cama, no por amor pero por codicia. Según Rita el señor es muy serio y la ultima vez que está intento pasarse según se entero por otros criados que los escucharon discutir. María llego a su recamara a altas horas de la noche con una vestimenta muy vulgar, y el patrón muy enojado la amenazó con correrla de la casa si no se comportaba pero creo que esa no pierde las esperanzas.

-Solo te digo niña que tengas mucho cuidado con ella y no te fíes, te tiene muchos celos y todos los días repite que deberían dejarte morir en un hospital. Y pues como el patrón desde que estas en esta casa pasa el día entero en tu recamara siempre lee para ti desde que amanece hasta que anochece incluso mando guardar todas tus cosas en el sótano de esta casa por si quieres conservar algo y día por medio manda traer al doctor para que te revise mantiene maldiciendo el día que te dio por hacerte la loca para estar aquí.

Esta mañana salio muy temprano después que vi al señor feliz de que por fin ayer reaccionaste.

Pero ya deja de escucharme decir tonterías y mejor ve a descansar aun estas muy demacrada.

-Rita gracias por cuidar de mi.

La amable viejita me dio un fuerte abrazo y me mando con un te de manzanilla para dormir.