Bella pov.
Llegamos al día siguiente a Vancouver, eran las seis de la mañana y Alice había dormido poco al igual que yo, por pensar en que haría Edward.
Alice había llamado varias veces a Edward y este no contestaba.
Alice había decidido que fuéramos a un hotel para darnos una ducha para tomar fuerzas y seguir en busca de Edward.
Ya eran las 12:30, Alice seguí insistiendo hasta que por fin Edward contestos, al igual que la otra vez, Alice puso en altavoz la llamada.
Solo me limite a escuchar la llamada, pues además su voz de ángel aun me llevaba a soñar.
- Halo, Alice.
- Edward, Edward ¿Dónde estas?
- Estoy con Aro.
- ¿Qué demonios vas a ha hacer?
- Voy a reunirme con mi Bella.
- ¿Pero que dices?
- Por mi cobardía Bella esta muerta, por si no lo sabias.
- No es asi ella esta viva.
- Eso lo dices para no hacerme sentir mal, y lo sabes.
- No es asi Edward, por favor espérame un momento, estoy por llegar a las oficinas.
- Esta bien solo diez minutos ¿ok?
Reaccione tarde, cuando Alice termino la llamada, yo había podido pronunciar su nombre.
Alice me arrastro hacia la salida, tomamos el coche ya habían pasado 8 minutos.
- Alice, cuanto falta para llegar con Edward.
- Es aquí Bella, tienes que ir a pie, dile que vas de mi parte, date prisa solo quedan dos minutos.
- Esta bien Alice, pero no tardes.
- Por supuesto que si.
Sali corriendo a la entrada había un tipo de gran musculatura.
- Hola mi nombre es Isabella Swan, vengo en busca de Edward Cullen, me ha enviado su hermana Alice Cullen.
- ¿y ella donde esta?
- Ha ido a estacionar el coche.
- Esta bien entra.
Él hombre me llevo hasta una habitación, y allí estaba sentado con sus manos tapando su cara, ya habían pasado los diez minutos, y una voz salió de una de las puertas.
- Lo siento Edward, Alice no ha llegado.
- Hazlo ya Aro.
Y un disparo se escucho estruendosamente, el tal Aro había disparado a orden de Edward, vi como la bala entraba en su estomago y esta caía al instante me acerque y lo único que pude decirle.
- Edward aquí estoy, todo estará bien.
- Si, esto es el infierno, es mas hermoso de lo que creí, porque estas tu mi Bella.
- Edward estoy viva, y tu también resiste, por favor. – le decía una y otra vez mientras que con aliento muy agitado Edward me beso.
- Es verdad, esta viva, y yo casi me muero.
- No es verdad, tu estarás bien.
Una voz salió del umbral.
- ¿Quién eres?
- Soy Isabella Swan
- Asi que tu eres Bella
- Asi e, donde esta Alice.
- Aquí Aro, por favor llama una ambulancia, créeme no te culparemos de nada.
- Esta bien.
La ambulancia llego y Aro se había marchado. En el hospital Edward estaba grave aun, pero ya fuera de peligro, cuando entre a verlo lo vi durmiendo, su cara era la de un ángel hermoso, me acerque poco a poco, y acaricie su cara con el torso de mi mano con demasiado cuidado para no despertarlo.
- Bella estas aquí.
- Si asi es, estoy aquí, porque te amo y quiero que lo sepas.
- Jamás te dejare Bella.
- Se que no me amas, leí tu carta.
- ¿Leíste mi carta.?
- Eso es solo una mentira, todo bueno casi todo.
- Porque dices que casi todo.
- Porque no es verdad que yo no te amo.
- Pero…
- Shhh… Bella, te amo demasiado como para dejarte ir.
- Y yo a ti Bella.
- ¿me perdonas?
- No hay nada que perdonar, y solo quiero estar contigo para siempre.
Al decir estas palabras nos fundimos en un beso, que fue interrumpido por la familia Cullen.
Al separarme de Edward. Rose, Emmett, Esme, Carslie, y ahora Jasper estaba con nosotros abrazándonos, ahora éramos una familia, como me lo había dicho Esme y Edward.
|