Capítulo 27

Amor y Odio

EDWARD POV

El tiempo pasó muy rápido entre noches de salidas a escondidas de mis hermanos y tardes de ver y películas…que casi siempre terminaban en sexo ya fuera en la alfombra frente al televisor, o en el sofá. Hasta ahora mis hermanos no tenían ni idea de donde nos estábamos quedando, aunque en ocasiones coincidíamos con ellos en los recorridos por la universidad, o en alguna que otra ocasión salíamos a cenar, pero siempre los perdíamos de vista entre algún gentío.

El incesante  sonido del despertador me levantó esa mañana, hoy era uno de esos días en los que no tienes ganas de hacer nada, solo de quedarte acostado en la cama, durmiendo…o haciendo cosas más provechosas. Me desperté sin muchas ganas, porque no quería llegar tarde el primer día de clases y teníamos el tiempo justo. A mi lado se encontraba Bella aún dormida, era extraño que siguiera dormida ya que el despertador sonaba bastante alto. Lentamente me giré hacia ella y le acaricié el rostro mientras le apartaba un mechón de pelo y besaba suavemente sus labios, mientras ella se despertaba lentamente devolviéndome el beso y colocando sus manos en mi cuello, tirando de mi hasta que quedara sobre ella. Si esto continuaba creo que íbamos a llegar tarde.

-Bella no podemos demorarnos, vamos a llegar tarde.- le dije mientras comenzaba a besarla por el cuello y mis manos descendiendo por sus cuerpo.

-No te preocupes hay tiempo suficiente.- me dijo ella mientras tiraba de mi para besarme en los labios.

-Si suficiente para vestirnos desayunar e irnos.- le dije mientras me perdía en sus ojos.

-Te equivocas mira el reloj, apenas marca las 6:00 am, aún tenemos dos horas antes de que comiencen las clases.- me dijo ella besándome nuevamente.

Mi cabeza no podía pensar con claridad en estos  momentos pero unas palabras se quedaron clavadas en mi mente, como era que aún teníamos dos horas si yo había puesto el despertador para las 7:00 am, como era posible que estuviera a las 6:00 am.

-Creo que vamos a tener que comprar un despertador nuevo, este está defectuoso.- le dije mientras me acomodaba sobre ella.

-No creo que funciona perfectamente.- me dijo ella sonriendo.

-Ah si y eso como lo sabes.- le dije mientras dejaba besos por todo sus rostro.

-Pues porque yo cambié la hora de la alarma.- me dijo ella sonriendo.

-Así que te declaras culpable de los cargos.- le dije sonriendo también.

-Si lo adelante, no sabes lo que me gusta despertar en las mañanas contigo a mi lado y hacer el amor.- me dijo mientras volvía a besarme.

-Si ya lo veo, no sabes cuanto te agradezco que hallas adelantado la alarma.- le dije mientras silenciaba sus labios con un beso.

Salimos del apartamento en el auto, se que era ridículo ya que estaba muy cerca de la universidad pero si no lo hacia los chicos iba a sospechar que vivíamos cerca. Llegamos a la universidad con tiempo suficiente y todo gracias a Bella que había adelantado la alarma y allí estaban los chicos esperándonos en el parqueo. Alice salió corriendo hacia Bella y la abrazó fuertemente.

-Hola Bella, hacía tanto que no te veía, tenemos tanto de que hablar.- le dijo ella mientras ella y Rosalie se la llevaban de la mano lejos de nosotros.

-Buenos días para ti también Alice…te acuerdas de mi soy tu hermano.- le dije mientras ellas se iban riéndose.

Y eso que solo habían pasado 4 días sin verse, no imagino si hubiera pasado un mes, bueno lo mas probable era que Alice ya hubiera buscado una forma de verla. Me quedé allí con los chicos conversando y poniéndonos al día hasta que regresaron las chicas. Luego de que Alice insistiera mucho en que le dijéramos en donde nos estábamos quedando, nos fuimos a clases. La mañana pasó de lo más tranquila y muy rápido ya que Bella y yo compartíamos todas las clases, a la hora del almuerzo nos reunimos con los chicos en el comedor.

El almuerzo al igual que había sido la mañana fue tranquilo, luego de almorzar nos sentamos en un parque a esperar hasta las clases de la tarde que comenzaban a las 2:00 pm y esa era específicamente la que hoy quería evitar. Era la clase de la especialidad, la única que no compartía con Bella y quería evitarla a toda costa, esta era la clase más larga, duraba casi 2 horas. Pero si no iba eso solo haría que la tuviera que evitar otras 4 veces más en la semana, aunque en diferentes horarios, y no sería muy bueno para mi carrera. No sabía como iba a soportar. Llegó la hora de entrar a clases y luego de darle un intenso  y apasionado beso a Bella y acordar encontrarnos en el parqueo salí hacia mi tortura.

La clase fue una verdadera tortura, yo ni siquiera me podía concentrar y menos después de recibir el mensaje que me mando Alice diciéndome que mañana era el cumpleaños de Bella. Y en estos momentos mi mente solo giraba en torno a una cosa…que regalarle a Bella, y no quería tener que recurrir a Alice y después deberle un favor. Así que tendría que arreglármelas yo solo de la manera que era más fácil para mi. Y así entre pensamientos sobre lo que le iba a hacer a Bella llegó la hora de salir, casi sin darme cuenta, recogí mis cosas y salí rumbo al parqueo. Estaba bajando las escaleras cuando alguien se me abalanzó encima y comenzó a besarme en la boca.

Primero pensé que era Bella, pero no era ella, sus besos eran muy diferentes a estos. Haciendo un esfuerzo y sin ser muy rudo separé a la chica de mi para ver quien era, y yo no creía lo que estaba viendo. Hacía muchos años que no la veía pero no había cambiado mucho, su pelo continuaba rubio y largo cayendo sobre su espalda, y sus ojos de un azul intenso me miraban profundamente. Por un momento no supe que decir, tantos recuerdos regresaron a mi mente…

-Edward que te sucede, ya no te acuerdas de mi nombre.- me dijo ella y solo entonces puede hablar.

-Tanya que haces aquí.- le dije todavía sorprendido.

-Que mala memoria tienes, se te olvida que me mudé para acá.-me dijo ella sonriendo.

-No lo recordaba, hace tanto tiempo.- le dije aún en shock.

-Pero no piensas darme un abrazo.- me dijo ella abriendo sus brazos.

Y la abracé con el mismo cariño con el que abrazaba a mis hermanos cuando hacía mucho tiempo que no los veía. No voy a negar que hubo un tiempo hace muchos años cuando era muy joven que  creía estar enamorado de Tanya, incluso llegué a pensar que ella sería la ideal, la chica con la que pasaría toda mi vida…pero después de conocer a Bella, ya no tenía ninguna duda, con ella era con quien quería pasar mi vida entera.

Me separe bruscamente de Tanya al recordar que Bella estaba esperándome allí en el parqueo y temí lo peor. Que ella hubiera visto el beso que Tanya me dio y hubiera pensado lo peor. Pero era demasiado tarde, cuando la localicé se encontraba junto a Rosalie y Alice y ella la estaba agarrando por el brazo. Podía ver su rostro muy serio, al parecer lo había visto todo…ahora si estaba metido en un grave problema.

Bella se soltó del brazo de Alice y se dirigió hacia donde yo estaba, mientras Alice y Rosalie venían detrás de ella, creo que lo mejor que podía hacer en estos momentos era presentarle a Tanya y explicarle las cosas. Cuando llegó a donde yo estaba todavía estaba muy seria y miraba a Tanya y me miraba a mí alternadamente.

-Bella, quiero que conozcas a…-pero no me dejó terminar, ya que estampó su mano fuertemente en mi mejilla.

-Te odio Edward, te odio.- me dijo y luego salió corriendo.

-Más te vale que luego tengas una buena explicación para esto.- me dijo Alice y salió con Rosalie detrás de Bella mientras yo me tocaba la mejilla.

Esto era lo último que me faltaba, pelearme con Bella y a solo un día de su cumpleaños,  y ahora como explicaba yo todo este malentendido. Los chicos se acercaron a mí y se me quedaron mirando como pidiendo una explicación.

-Edward creo que estás metido en un grave problema.-me dijo Emmett.

-Y ahora como piensas arreglar las cosas.- me dijo Jasper.

-Porque el problema, quien es ella.- me dijo Tanya pero en esos momentos yo no era capaz de articular palabra alguna.

-Esa es Bella, la novia de Edward.- le dijo Emmett contestando por mi.

-Edward que he hecho, lo siento tanto, no sabía que tuvieras novia, y cuando yo te vi estabas solo, creo que te he metido en un buen lío.- me dijo ella y se podía sentir al arrepentimiento en su voz.

-En uno muy grande y mañana era su cumpleaños.- logré decirle por primera ves en largo rato.

-Lo siento tanto, te prometo que te voy a ayudar a recuperarla.- me dijo ella mientras yo veía como Alice y Rosalie se llevaban a Bella.

-Y a todas estas, tu quien eres, me pareces conocida.- le dijo Emmett a Tanya.

-Emmett, que rápido te olvidas de tus viejos amigos.- le dijo ella sonriendo.

-Ella es Tanya, te acuerdas de ella, se mudó cuando teníamos 12 años.- le dije mientras mi hermano la miraba nuevamente.

-Quieres decir tu Tanya, con la que jugábamos cuando chicos y que te gustaba mucho.- me dijo mi hermano.

-Esa misma.- le dijo ella sonriendo.

-Pues que alegría verte después de tantos años.- le dijo Emmett mientras la abrazaba y la levantaba por los aires.

-Emmett suéltala.- le dijo Jasper.

-Este es Jasper, hermano de mi novia.- le dijo Emmett mientras ella y Jasper se saludaban.

-Bueno y ahora que vas a hacer Edward, como le explicaras las cosas a Alice.- me dijo Emmett mientras íbamos caminando hacia el auto.

-A Alice, que no es a tu novia a quien hay que explicárselo.- dijo Tanya de lo más confundida.

-Si pero primero hay que explicárselo a Alice, porque sino no me dejará hablar con Bella, ni siquiera por celular.- le dije a Tanya.

-Entonces que esperas, llámala y pídele que se encuentren en algún lugar cerca de aquí, quisiera estar también presente en la conversación para que puedas explicar mejor las cosas, además hace tiempo que no veo a tu hermana, y creo que ella ni siquiera me reconoció.- me dijo ella mientras nos parábamos al lado del auto.

-Si tienes razón, ahora mismo la llamaré.- le dije mientras sacaba mi celular del bolsillo.

Le marqué a Alice y le pedí que se encontrara conmigo en una cafetería que había cerca de la universidad para poder explicarle las cosas. Ella aceptó y fuimos hacia la cafetería y a los pocos minutos llegó ella. Y me miró extrañada cuando me vio sentado junto a Tanya, la causante de todo.

-Que hace ella aquí.- le dijo ella sin siquiera sentarse.

-Alice contrólate, estamos en un lugar público.- le dije mientras le señalaba la silla para que se sentara.

-Que me controle, mi mejor amiga está muy mal por tu culpa y tu me pides que me controle.- me dijo ella levantando el tono de su voz.

-Tu mejor amiga, creía que yo era tu mejor amiga.- le dijo Tanya y Alice la miró extrañada.

-Y tú quien eres, de donde me conoces.-le dijo Alice relajándose un poco.

-No te acuerdas de mi Alice y eso que casi nos criamos juntos.- le dijo ella y Alice se le quedó mirando.

-Tu cara me parece muy familiar.- le dijo Alice.

-Alice te voy a ahorrar el trabajo ya que tu memoria está fallando, te suena de algo Tanya.- le dije esperando que ella se acordara.

-Tanya…Tanya… espera un momento, tu Tanya, mi vieja mejor amiga.- me dijo Alice mientras miraba a Tanya nuevamente.

-Esa misma.- le dijo ella mientras Alice corría a abrazarla.

Luego de abrazarla y de Alice sentarse comenzamos a conversar sobre lo que había sucedido.

-Entonces por eso fue el beso y el abrazo.- nos dijo Alice.

-Alice Edward no tuvo nada que ver con lo del beso, eso fue culpa mía, me emocioné mucho cuando lo vi, en realidad al principio pensé que no era el, ya que luce muy diferente.- le dijo ella a Alice mirando hacia la mesa.

-Y que fue lo que te convenció de que era el.- le dijo Alice queriendo saber todos los detalles de la situación.

-Pues la forma de mirar, es la misma mirada tierna que recuerdo que tenía cuando éramos niños- le dijo Tanya a Alice.

-Ya veo, pero eso no explica el beso.- le dijo Alice.

-Es que lo vi solo, nunca imaginé que tuviera novia.- le dijo ella.

-Y no se te ocurrió llegar saludarlo y preguntarle.- le dijo Alice.

-Ahora que lo dices tienes razón, creo que me dejé llevar por la emoción de volverlo a ver.- le dijo Tanya.

-Bueno ahora eso no tiene importancia, Alice como esta Bella.- le dije temiendo la respuesta.

-Destrozada, todavía no cree que la hayas engañado de esa forma.- me dijo ella con un poco de tristeza en el tono de su voz.

-Pero ahora sabes que no fue culpa de Edward, fue mía, no se lo puedes explicar.-le dijo Tanya mientras Alice la miraba a los ojos.

-Creo que en estos momentos, ella no va ha creerle a nadie.- le dijo Alice.

-Pues si quieres yo se lo digo, solo tienes que llamarla y quedar con ella en algún lugar y bueno yo estaré allí también.- le dijo Tanya mientras Alice reaccionaba.

-Si puede funcionar, pero eso será mañana, ya que hoy no creo que ella quiera salir a nada.- le dijo Alice mientras me miraba a mi.

-Si es mejor mañana, de todas formas pensaba pedirte que te llevaras a Bella de compras para poder preparar su regalo de cumpleaños.- le dije mientras ella sonreía.

-Y que vas a hacer.- me dijo de lo más emocionada.

-Lo siento Alice, pero no te voy ha decir nada, primero hay que esperar a mañana y que ustedes le expliquen todo.- le dije yo sonando esperanzado.

-No te preocupes Edward de eso me encargo yo.- me dijo Alice.

Y le dejé todo en manos de mi hermana, ahora solo quedaba esperar y ver si se resolvía todo con Bella.