<!-- /* Style Definitions */ p.MsoNormal, li.MsoNormal, div.MsoNormal {mso-style-parent:""; margin:0cm; margin-bottom:.0001pt; mso-pagination:widow-orphan; font-size:12.0pt; font-family:"Times New Roman"; mso-fareast-font-family:"Times New Roman";} @page Section1 {size:612.0pt 792.0pt; margin:72.0pt 90.0pt 72.0pt 90.0pt; mso-header-margin:36.0pt; mso-footer-margin:36.0pt; mso-paper-source:0;} div.Section1 {page:Section1;} -->
Tenía tal impotencia de no haberme podido dar cuenta antes de lo que realmente estaba sucediendo aquí, siempre tan...diferente a todo lo demás. Jacob y mi mamá...yo, un obstáculo a su felicidad. Mis ojos se concentraron fríamente en lo de Edward, y...todo este enojo, esta tristeza, toda mi impotencia ante la situación, me ayudaron para aclarar mi mente y hacerle entender lo que YO quería.
"No me retengas".
Era insólito, no estaba funcionando igual que con Alice. Podría ser que esto no estaba funcionando del todo, porque a través de leer mis pensamientos, sabe lo que estoy pensando en hacer. Tenía que concentrarme más en esto.
"No intentes hacer nada".
Lentamente, vi como entre más intensos se volvían mis sentimientos, era mejor. Ése era el secreto. Intensidad. Su cabeza estaba llena de diversos pensamientos a la vez... Pero, pronto los vacié. Se alejo -un tanto aturdido hacia el garaje donde todos los vampiros ignorantes ante la situación- como si no me hubiera visto. Ese pensamiento había sido desechado.
-¿Escuchaste eso, Jake? -hablaba la voz de Bella.
Corrí lo más rápido que me era posible a mi pequeña cabaña, y a tomar lo más esencial. Me iría, esa ya era una decisión tomada. No me entrometería mas entre 2 personas que...Corrí. No miraba atrás, tenía que ganar tiempo antes que los demás, así sería mejor. No estoy segura al 100% si funcionara para tanto tiempo la idea que yo quería a Edward. Una vez al llegar a mi pequeña cabaña, -dueña de mi infancia-, me di cuenta de que no necesitaba nada, no quería nada... ¿Agarrar demasiado dinero? Tenía mi propia cuenta bancaria, sólo necesitaba mi tarjeta y tomé mi pequeño bolso que tenía un tanto de efectivo. Cuando iba a salir directo a la puerta, roce mi mano en el bolsillo de mis mezclillas delantero y me encontré con las llaves de mi nuevo carro... No lo necesitaría, podría ir más rápido sin él.
-Mi auto...-dije con un hilo de voz
No entiendo por qué pensaba en eso, cuando había cosas más importantes que estrenar un carro. Era grandiosa toda esa pintura metálica que lo cubría. Sería mejor apresurarme. No había prendido ninguna luz al entrar, y un rayo iluminó todo el interior de mi hogar, con el sonido de un trueno, -avisando la llegada de una tormenta-. Cuando eso sucedió, no pude evitar detenerme cuando mi mirada se encontró con una fotografía adornada con un marco de madera... Aparecían, Jacob, como siempre su sonrisa radiante, tan hermosa..y yo..ahí su lado aparentando tener 6 años. Él estaba incad o recargado sobre un árbol y yo abrazando al perro de la señora Sue. No pude evitar sentir ese nudo en la garganta, esto no podía estar sucediendo... ¿Acaso era un pecado en mí haber podido encontrar un lugar al cual sentir pertenecer después de tanto tiempo? No era que me sintiera excluida en los planes familiares, siempre era la primera en participar. Siempre les agradeceré el gran afecto que me brindaron, pero... Ya había ocasionado bastante caos. El primero, el gran peligro de varios clanes del mundo de vampiros, sin mencionar a ambas manadas -que pronto después la de Jacob fue creciendo por la unión de Quil y Embry-, al tratar de enfrentarse a los Vulturi completos, sin excepción. Ahora, la segunda, es vivir con éste instinto de predecir y vivir alertas ante la nueva y posible regreso de los Vulturi, nadie creería que esto se haya detenido, no se quedaría de brazos cruzados. Y tercera, pero no menos importante; el sentimiento de soportar ser el desastre natural, el punto de en medio que estorba para un amor que jamás me haya podido imaginar, ser un obstáculo para 2 de las personas que más amo en esta clase de vida... Dos por los cuales sin dudar, ó siquiera preguntar, daría mi vida. Corrí a más no poder. Sin pensar en nada más, ni en el mal ni en el bien. Quitándome la culpa de mi existencia, tratando de ir cada vez más rápido para no dejarme hundir por este sentimiento que me desgarraba por dentro como navajas, dejándome sangrar...lento...consumiendo todo a su paso. Un ruido sonó a mis espaldas..."mi familia", pensé. "Los Cullen", apresure el paso, no me dejaría caer y convencer de pobres mentiras. Se me había olvidado que ya había tomado la decisión, por lo tanto Alice... No. No me puede ver aunque así fuera, pero ya podría abrirse camino para ver el futuro de la mayoría-o toda- la fanilia, porque yo ya no era un impedimento para ello. Puse mi oído más sensible. El paso era apresurado, mucha agilidad, con tanto sigilo... No era ningún licántropo, por más ágiles, la sutil delicadez no provenía de ellos. Era uno de mi familia..puede que el efecto que hice en mi padre no fue lo suficientemente fuerte
-Edward -susurré. ¿Qué clase de monstruo me había convertido? ¿Usar mi poder en su contra?- Monstruo.Nunca confíes en un vampiro
Hice mi paso más lento, hubiera querido darme media vuelta e ir corriendo a pedirle perdón de rodillas
-Exacto,nunca lo hagas-respondió una voz suave
espero k sigan votando ojala les gusten estos capitulos .....dejenme sus comentarios...
|