Estábamos casi a punto de terminar, llevábamos faldas cortas, con blusas de distinto color, yo llevaba un corpiño negro, Carrie una blusa roja, Alice una blusa larga pero ajustada gris y Rose una escotada rosa.

Carrie miró a Alice por un momento, mientras esperábamos que las Cullen terminasen de arreglarse, la verdad nosotras habíamos aprendido a arreglarnos en tiempo record.

-        Alice tu eres novia de Jasper, cierto- Alice asintió- ustedes no han tenido nada de nada aún- reí, dije sexto sentido. Rose solo río. Alice se puso roja de vergüenza y me miro acusándome.

-        Yo no dije nada, ella tiene un sexto sentido en estas cosas- dije en mi defensa.

-        Y también eres virgen- Carrie lo dijo como si fuera un tema convencional- oye tranquila no te juzgo, pero como te pusiste me di cuenta.

-        Pues sí- dijo algo triste.

-        Amiga porque la tristeza- le dije preocupada.

-        Es que ahora no se si Jasper de verdad quiere estar conmigo- dijo mirándome, con lagrimas tratando de salir de sus ojos.

-        Porque dices eso Al- le pregunto Rose.

-        El me dio tiempo, me espero y yo ya estoy decidida, quiero estar con él.

-        Pero- dije; siempre había un pero.

-        Ahora él se aparta de mi cada vez que los besos se hacen más subidos de todo, no se si seguirá deseándome; siento que ya no me quiere de ese modo.

-        La verdad me meto sin saber pero como te mira, créeme te desea bastante- dijo Carrie

-        Eso es verdad he visto como te mira, él no es tan obvio es muy caballeroso, pero tu sabes que conozco a un hombre deseoso y ese es Jasper por ti- una sonrisa se dibujo en sus labios.

-        Pero entonces porque no me toca- dijo Alice borrando su sonrisa. Lo pensé por un momento.

-        Tal vez el no entiende que ya estas lista y teme sobrepasarse- dije- debes dar el primer y el segundo paso si es necesario.

-        Sedúcelo, hazlo que piense con su entrepierna y no con su cerebro- siguió Carrie.

-        Si lo haces excitarse, no podrá negarse a nada lo tendrás en sus manos- seguí.

-        Y como hago eso- Alice parecía animada- díganme.

-        Bueno esa parte es buena Bella- dijo Carrie dejándomelo a mí.

-        Oye y yo porque, tú eres la más trabajada en este campo- dije.

-        Sip, pero todo lo que yo sé lo sabes tu; además la que ha seducido a un novio a sido tu, yo solo seduzco a chicos de una noche, ella necesita tu experiencia- Carrie no creía en el amor para ella.

-        Ok- dije volteando a Alice al espejo para mirarla- la materia prima esta bien- me puse al frente- ya sabemos que le encantas a Jas, tu cuerpo lo va a llamar si usa el lenguaje adecuado- Alice me miraba atenta.- bueno ahora es buena oportunidad, cuando bailes con él, trata de hacerlo de espalda para que lo roces con tu trasero, así su amigo se empezará a despertar- Alice estaba roja de la vergüenza- vamos Alice es algo que quieres y sé que puedes.

-        Tú crees- me pregunto.

-        Una mujer enamorada hace lo que sea porque ese chico sea suyo- me inunde en mis propias palabras, que eran totalmente ciertas, y vaya que no las aplicaba para mí, luego tendría que hablar con Carrie.

-        De acuerdo- dijo.

-        Cuando te sientes, siéntate en su regazo y muévete de vez en cuando, que parezca que no te das cuenta- seguí.

-        Jugar la carta de niña inocente- dijo Carrie con una sonrisa.

-        Exacto amiga- dije- dale besos apasionados y cuando este a full lo sueltas, para que quiera más y eso hará que lo busque él,  veremos cuanto resiste con esto y como sale la noche- termine de decir. Alice acepto y ella y Rose se fueron adelantando para bajar.

-        Tu tienes algo que contarme, no?- pregunto Carrie tomándome de la mano para que no saliera.

-        Mucho y necesito tu consejo, pero ahora no, luego- le dije, ella asintió.

Llegamos al bar, el cual tenía una fila enorme en la entrada y dos guardias bastante grandes; nos bajamos. Carrie y yo nos quedamos analizando las cosas y nos volvimos a los chicos que nos veían con confusión.

-        Ok- empezó Carrie- las chicas al frente- las chicas se acercaron, volví a ver a los guardias y note algo en el segundo guardia, él no miraba a las chicas, si no…

-        Carrie- le señale al guardia, y ella vio lo que yo vi.

-        Uy ya- dijo entendiendo y nos volteamos a los chicos.

-        Ok chicos ustedes van a tener que ayudar- me miraron raro- un guardia es homosexual- me miraron raros.

-        Como sabes- me dijo Jasper.

-        Solo lo sé ok- dije tajante.

-        Ve que puedes hacer- me dijo Carrie. Camine hacia los chicos, Emmet estaba bien, le subí un poco las mangas, James estaba bien al igual que Luca; a Jasper solo le alborote un poco el cabello y me dirigí al enemigo, sí Edward; me miro retándome; le desabotone los primeros botones de su camisa dejando al descubierto su pecho, que estaba de infarto, él muy idiota.- te gusta lo que tocas- me susurro y me dio una mirada pícara, lo fulmine con la mirada, la verdad hoy no me tenía nada contenta.

-        Listo- me volví sin más porque si no lo besaría aquí mismo, camine a Carrie.- ustedes solo síganos y hagan lo que les decimos- todos asintieron.

-        El escolta es mío- me dijo Carrie. Asentí; los chicos miraron confusos. Caminamos hasta los guardias, uno nos miro de pies a cabeza.

-        Hola cariño, soy Carrie- le dijo Carrie, acariciando su brazo, estaba bastante grande el chico, del tipo de Carrie. Tome a Carrie por la cintura y la acerque a mi cuerpo.- ella es mi amiga Bella- me estrecho con su mano mi muslo, al guardia se le cayo la baba, mordía la legua para no reírme, los hombres eran tan predecibles.

-        Hola chicas- dijo el conquistador. Ambas lo miramos, nos miro de pies a cabeza.

-        Oye que tal si nos dejas entrar y luego vengo por ti- eso es darle la oferta para que no se niegue. Carrie me soltó y yo me puse detrás de ella, abrasándola por detrás  y sonriendo.

-        Cuantos – pregunto aun engatusado.

-        Ellos-señale para atrás, volvió la mirada y supe que eran muchos, me fui adelante.- vamos no son tantos, sabes que no están mal y más le va a encantar a los de adentro- le dije al oído, lo más sexi que pude mientras pasaba un dedo por su abdomen.

-        Po mí sí, pero el amigo- nos dirigimos al amigo.

-        Oye tu no tienes problema que esos chicos guapos entren no?- le dijo Carrie, porque yo seguía con el grandote para que no se arrepintiera. Él chico los miro y por lo visto les encanto.

-        Claro pasen- nos dijo abriendo la puerta- Carrie vino donde mí, en lo que los demás pasaban, nosotras de últimas para que no dejaran a nadie fuera.

-        Nos vemos cariño- le susurre al oído, Carrie hizo lo mismo y me tomo de la mano y nos metimos adentro con los demás.

Sonreímos por la victoria y dirigimos a los chicos a una mesa, apartada en la esquina, Carrie se sentó en las piernas de James y yo en las de Luca.

-        O mi Dios- dijo Alice en grito por la fuerte música- ustedes son geniales.

-        Son las mejores- dijo Luca dándome un beso en el cuello- creo que el tipo tubo una erección con solo mirarlas tocándose.

-        Geniales- siguió Rose, los chicos nos miraban con desaprobación, eran muy sobreprotectores, cosa que yo no tuve en Inglaterra, James y Luca solo procuraban de saber en donde estábamos y ya.

-        Fue fácil- dijo Carrie- hemos tenido que hacer más cosas en el pasado.

-        Una vez se besaron en frente del tipo y nos dejo pasar de una- dijo James. Todos reímos por el recuerdo.

Después de vario rato, me fui a bailar con Luca, la verdad estaba muy bueno y llevaba tiempo sin verlo. La cosa se puso caliente, hasta que él busco mi boca y me beso; el beso me recordó todo lo que vivimos cuando fuimos novios, la verdad quería volver a sentirme así, por eso lo seguí besando, su mano paso a mis glúteos y las mías a debajo de su camisa, nos separamos por falta de aire y vi deseo en sus ojos; salimos de la pista de baile para ir a un lugar más apartado, cuando vi su mirada, clavada en mí; Edward me miraba con el seño fruncido,  lo ignoré; Luca se sentó en un sofá de un cuarto que no me di cuenta de que era y me puse ahorcadillas encima de él; por instinto me restregué a él, lo que emitió un gemido por parte de los dos, sus manos se fueron a mis piernas, acariciándola con mucha pasión, mi boca se fue a su cuello, mientras sus manos se metían debajo de mi falta,  su boca se fue a mis pechos y no pude dejar de gemir, por las sensaciones que me daba, entonces una imagen de Edward haciéndome el amor, vino a mi mente; me estremecí, porque este maldito me  molestaba hasta en recuerdos; con desesperación trate de sacar eso de mi mente, enfocándome en Luca, empecé a abrirle el pantalón, él se tenso, pero le masajee su excitación, no estaba para explicarle mi urgencia; necesitaba sacarme a Edward de mi mente, necesitaba olvidarlo. Luca emitió un gemido y siguió devorando mis senos;  trate de bajarle el bóxer o al menos  sacarlo de ahí, necesitaba quitarme su olor de mi cuerpo.  Me jalo para que lo besara y así lo hice.

-        Bella- me dijo entre jadeos, tomo mi mentón y me miró, su cara dejo la excitación por un momento y fue sustituida por la confusión- Bella por que estas llorando- lleve mi mano a mi cara y en eso me di cuenta que había lágrimas traicioneras en mis mejillas, me las seque.

-        No es nada- le dije.

-        No Bella porque estas llorando, hice algo mal- diablos con eso lloré más eso me lo había dicho Edward cuando casi nos acostamos una vez- gatita que te pasa- me bajo de su regazo y me sentó a su lado, se puso frente a mi y solo pude abrasarlo y me puse a llorar.

-        Tu no hiciste nada- dije entre los sollozos.

-        Bueno entonces llora, desahógate- Luca era muy especial para mí, pero el amor que tenía por Edward no me lo podía quitar, estaba enamorada y esto me estaba matando.- ya estas mejor- me dijo después de un rato, solo asentí.- Ahora me puedes decir que te pasa, porque debí imaginar esa urgencia de quitarme los pantalones no era normal, tu haces que las cosas se disfruten, que vaya cada cosa a su tiempo- ambos reímos, yo sin mucha gana- una sonrisa triste en tu cara es mejor que nada.

-        Lo siento, soy un desastre- le dije secándome las lagrimas- siento todo esto es que no puedo; mi maltita conciencia no me deja, o mejor dicho mi corazón.

-        O ya- dijo recostándose en el sofá- estas enamorada- me gire sorprendida por su conclusión- créeme se te nota, o al menos yo que te conozco lo suficiente en ese campo, ni cuando estábamos juntos, te brillaban los ojos tanto al mirarme; como ahora lo hacen por Edward- casi me ahogo, como supo, se me notaba tanto, alguien más se había dado cuenta.- tranquila solo yo me he dado cuenta, bueno yo y…

-        Y yo- dijo Carrie entrando por la puerta- lo siento los escuche, lo decentemente escuchable- sonrió y se sentó junto a mí.

-        Se nota mucho- dije resignada.

-        Digamos que conocemos mejor esa parte de ti  que los demás- dijo Carrie, mirando a Luca.

-        Ya no sé que hacer- me recosté en el sofá- La relación de nosotros ya no es la misma que antes, solíamos ser mejores amigos, estar siempre juntos; al menos antes sabría que al menos me quería algo, pero ahora ya no, solo es deseo lo que tiene por mí y odio.

-        Te has acostado con él no?- pregunto Carrie, yo solo asentí- me lo imagine.

-        siento que ya no le importo y no se si pueda con este nuevo Edward, que me ha lastimado mucho, tanto con sus nuevas conquistas como con su nueva manera de ser conmigo, siempre irritado, como que me odiase; ya no se ni que le pasa.- dije.

-        Yo no creo que sea odio lo que él siente por ti- dijo Luca, lo miré confundida- no soy experto pero no te odia, no se si te ama pero odiarte no.

-        Entonces porque me trata así, siempre molesto, mirándome mal cada vez que hago algo, hasta a ti te vio con cara de enojado- dije a Luca- es un bipolar ya no se que le pasa- dije recostando la cabeza al sofá.

-        Que piensas hacer- me dijo Carrie.

-        No lo sé, tal vez soportarlo un tiempo más y apenas me gradué salirme de la casa y olvidarlo- suspire- o al menos tratar.- los chicos cruzaron miradas, de alguna conversación silenciosa me estaba perdiendo.

-        Pues suerte- dijo Carrie dándome la mano.

-        Bueno señoritas, vamos a fuera que venimos a divertirnos- dijo Luca dándonos la mano para levantarnos; salimos de la oficina y nos acercamos a los chicos.

Al poco tiempo pude poner a un lado todo lo malo y tratar de divertirme; Alice estaba haciendo lo que le dijimos y parecía funcionar; pues Jasper estaba que se la comía con la mirada; las chicas y yo aguantábamos la risa para no arruinar el plan, pero era complicado.

Emmet parecía un loco bailando, de verdad era divertido verlo; un ser tan grande como lograba esos movimientos y claro Rose quitándole las tipas que se le acercaban a su hombre, como dice ella; pero Emmet también lo hacía, los chicos babeaban por Rose, pero teniendo a ese oso a su lado ninguno se atrevía a acercársele.

Por otro lado Carrie se fue a Bailar con James, perecía muy a gusto, algo raro en ella respecto  a James, si se llevaban pero no tan bien como para las risitas que tenían ahora; a Edward ni sus luces se le veían, quien sabe con quien se estará …; mejor ni lo pienso.

-        Ya vengo- le dije  a Luca que estaba junto a mí, la verdad era muy buen amigo. Él solo asintió. La verdad había tomado un poco de más, no se como llegué al baño, cuando termine de   lavarme las manos y Salí; sentí que me jalaban y era claro quien más Edward.

-        Hola Bella- me dijo a unos centímetros de mi cara me tenía contra la pared atrapada entre su cuerpo y esta.

-        Que quieres- dije sin poner resistencia, pues ya sabía de sobra que era más fuerte que yo y no me lograría soltar.

-        Muy civilizada- dijo con una sonrisa- como has pasado tu noche- dijo con algo de recelo y veneno en sus palabras.

-        Pues bien- mentira.

-        Me imagino, como te la pasaste con tu ex, duraron bastante no?- me miro mi boca, se acercó a la misma y hablo- no creí que fueras la de tríos, pero  que voy a saber yo de tus gustos- dijo sobre mis labios, este a que se refería, y caí en cuenta.

-        Eso a ti que te importa- dije volteando la cara.

-        Nada- dijo- pero dime tienes fuerzas para mí ahora- dijo volteando mi cara- porque yo sí- se acercó y me beso, trate de zafarme pero como dije, inútil. No deje que lo profundizara por lo que se rindió en esa parte, pero bajo su boca y empezó a besar mi cuello.

-        Bas…ta- dije tartamudeando, la verdad me encantaba lo que me hacía su  boca podía decir una cosa pero mi cuerpo decía otra.

-        No parece que tu cuerpo quiera que me detenga- dijo sobre el yacimiento de mi pecho.

-        No quiero- dije apartando solo su cara, lo miré a los ojos y estaba dolido- crees que todo se arregla con sexo,  pues no- respire para lo que iba a decir, no sería fácil- no quiero volver a acostarme contigo, el trato terminó- su cara se lleno de confusión- ya no puedo estar con alguien que aunque sea solo sexo, me odie.

-        Bella que estas diciendo- dijo acercándose a mí, pero lo pare poniendo mis manos en su pecho

-        No lo ves, esto nos arruino, ya nuestra amistad se fue por la borda; ya rompimos las reglas del trato, prometimos que esto no se interferiría con nuestra amistad.

-        Tener sexo no la arruino, fueron tus enojos, tu búsqueda de pelear conmigo siempre- dijo soltándome.

-        No fui la única que peleaba- respire- pero no voy a pelear por eso ahora, la cosa es que ya no hay amistas entre nosotros solo odio y yo no puedo con eso, así que quiero que todo lo que hay entre tu y yo se acabe- no podía creer lo que acababa de hacer, pero era lo mejor, no podía más con esto y esa parecía ser la solución.

-        Así nada más?- por su mirada me quería morir sabía que le dolía pero esto era por mi salud mental, él estaba perdiendo a una amiga, pero yo al hombre que amaba y si yo podía con esto, yo sé que él lo logrará.

-        Así nada más- repetí, me miro y por un momento volví a ver a ese niño lindo, el cual era antes, del que me enamoré pero se fue, llenando su mirada de rencor y me dio la espalda.

-        Entonces adiós – dijo cuando se iba; mi corazón se rompió en mil pedazos más, no creí que fuera capaz de ser roto más veces pero por lo visto el amor logra cosas maravillosas y el desamor logra cosas demasiado dolorosas. Lo había perdido de todas las maneras, pero espero que mi decisión me ayude a sacarlo de mi corazón y tratar de vivir sin él y al menos estar en paz, porque feliz era algo que no creía lograr ser sin él.

  Espero que les guste y entretenga, gracias por sus comentarios y votos.

saludos desde COSTA RICA

SUCULLEN

PURA VIDA