El cambio había sido bueno y malo, todos nos sentíamos como nuestro futuro se estaba formando, como empezábamos a construirlo, mi idea era hacer crecer los negocios de mi padre, ya que era el futuro mío y de Garrett. Y no quería decepcionar a nadie. Veía a Dulce de vez en cuando, solo cuando ella lograba convencer a René de dejarla ir a ver a Garrett, me llamaba y yo sin pensarlo me iba a la casa y me la pasaba con mis hermanos, se que René no era tonta y sabía lo que hacíamos pero por lo visto se hacía la tonta, al menos Dulce la hacía ser un poco más noble respecto a mí, seguía sin hablarme pero había logrado dejar eso en una esquina de mi corazón para que no me hiciera tanto daño.

Pero no todo es color rosa, tal vez mi vida estudiantil iba bien, pero mi corazón cada día estaba más roto. Las cosas con Edward habían cambiado  mucho seguíamos como amigos con nuestros derechos; pero yo no era la única que ocupaba su cama; había creado un monstruo; el muy sexópata se había ganado una reputación de mujeriego, se acostaba con quien le abriera las piernas.  Eso alteró nuestra relación peleamos casi por cualquier cosa, la verdad era yo la irritada por todo eso y él solo me provocaba.

 No se como había cambiado tanto, paso de ser ese chico tierno del cual me enamore a convertirse en ese sínico chico que se salía con la suya, engatusaba hasta las más santas y lograba su cometido, los demás lo veían como algo normal, pues es el rumbo que la mayoría de los solteros universitarios toman; pero a mi me rompía el alma, era mi versión, lo que yo fui en la secundaria, pero en versión hombre y peor.

Flashback

Estaba entrando a la casa, muy enojada y con quien?, pues con él, con el que me peleaba casi las veinte cuatro horas al día últimamente. Abrí la puerta dispuesta a marcarle su linda carita por idiota, cuando vi saliendo de la cocina a esa víbora de Jane.

-        Dios Edward insiste en traer perras callejeras a la casa- la mira directo a los ojos, la muy estúpida no era fea, era rubia, de ojos celestes, pero un poco más baja que yo- no entiende que no están entrenadas.

-        Uy que creativa estas hoy- dijo pasando a mi lado, dirigiéndose a la puerta- chao Bella que estoy muy cansada, tu amigo me deja exhausta

-        Tranquila yo sé que se te pasará el cansancio pronto- dije sosteniendo la puerta, ella estaba ya afuera-  para que vuelvas a empezar con otro y otro y otro.

-        Eres una…- pero no la deje terminar le cerré la puerta en la cara. Esta estúpida me sacaba de quicio. Y ahí venia el idiota.

-        Hola Bella-salió de la cocina, lo mire con todo el enojo que tenía- uy- dijo seguro acordándose de lo que me hizo.

-        Sí uy- dije acercándome- me puedes  decir porque diablos no fuiste por mí- mi coche estaba siendo reparado y él había quedado en traerme de clases para disculparse por una pelea, pero más bien la embarro- a no ya sé- estaba frente a frente- Jane te abrió las piernas y te olvidaste de todo- frunció el seño.

-        Bella no seas- empezó a decir.

-        Que no sea que- dije caminando a un lado, respire y lo volví a ver.

-        Sabes que he tratado de estar bien contigo, pero últimamente te enojas de todo- me dijo muy enojado.

-        Has tratado- reí falsamente- si claro como hoy, me dejaste esperándote- respiro- al menos me vieras avisado que me ibas a dejar plantada por la mojigata de Jane.

-        Ves es que solo expulsas veneno cuando hablas, que diablos te pasa- me dijo tomándome del brazo, con una fuerza excesiva.

-        Sabes que me pasa, quieres saber, que te - le dije apunto de explotar, que te amo imbécil, que me duele que te acuestes con esas zorras; dijo mi inconsciente, pero eso él no lo iba a saber- que te odio- le grite y me solté de su agarre, camine para las escaleras pero me tomo del brazo de nuevo, emití un gemido, el muy bruto me recostó bruscamente contra la pared- eres un imbécil- pero no me dejo decir más, me pego a su cuerpo y me beso con brusquedad, no había nada del niño dulce que me besaba, aparte la boca para que no me pudiera besar más, trate de soltarme pero el me mantenía prisionera entre sus brazos- suéltame Cullen- dije casi entre gemidos, ahora tenía su boca devorando mis senos, por más que lo detestara en estos momentos, mi cuerpo era débil ante él.

-        No parece que tu cuerpo quiera eso- me dijo mirándome con lujuria y volvió a mi pecho, quito los primeros botones de mi blusa, que dejaban ver el sostén rojo que llevaba- me encanta como te ves con esto- mordió el inicio de mi pecho, de seguro dejaría morete- quiero hacerte mía, hacerte el amor, hasta que no tengas fuerzas para hablar- como se atrevía a decirme eso, yo con él si hacía el amor, pero él a mi no, solo era sexo.

-        Suéltame imbécil- lo empuje había bajado su defensa por lo que lo pude apartar- no me digas que hacemos el amor, porque eso no es cierto, tu y yo solo tenemos sexo- me miro con mucha ira y creo ver dolor, pero debía estar mal- que Jane no te sacio hoy- le grite.

-        Bella a ti quien diablos te entiende- me dijo lleno de ira, me dolió y mucho- sabes que me tienes arto.

-        Pues ya somos dos- dije en eso su mirada se desvió a la puerta, me giré y eran los chicos nos miraban con desaprobación, sí ellos ya estaban artos de nuestras peleas, en eso las chicas me vieron directamente a mí y bajaron la vista a mi pecho, baje la vista y vi que aun tenía la blusa abierta y los botones no estaban, seguro los rompió, trate de acomodarla, ellas me dieron una mirada de confusión y luego miraron a Edward con interrogantica.

-        Están peleando otra vez- dijo Emmet, enojado, era difícil ponerlo así pero el idiota y yo éramos expertos.

-        No es nada- dije subiendo las escaleras pasando junto a Edward pero no lo miré.

-        Bella estas bien- me dijo Alice, Edward bufo.

-        Perfecta- dije sin voltear y me fui a mi cuarto que por desgracia estaba a su lado.

Fin flashback

Esa fue la peor pelea que tuvimos, las demás eran puras indirectas, casi no nos hablábamos, solo cuando por estúpida que soy teníamos sexo. No había estado con nadie más que no fuera él, por más que tratara solo quería sus besos, sus caricias, su cuerpo, nadie más me interesaba, aunque hacía la lucha pero no lograba nada, había salido con un par de chicos pero al final no quería nada con ellos y como estúpida enamorada y masoquista que era no me resistía cuando él me tomaba por sorpresa y me hacia el amor, al menos para mí era eso; hacer el amor y no solo sexo como lo era para él. Claro que algo de orgullo tenía o al menos aparentaba, siempre que estaba con él lo llevaba a mi cuarto, pues no quería compartir la cama que él compartía con otras, mayormente no las traía a casa pero cuando lo hacía lo único que podía hacer era salir de la casa e irme a algún lado, un bar o algo; lo que fuera el truco era no estar ahí, no lo soportaría y estallaría  a llorar.

Les decía a los chicos que estaba muy estresada y salía a tomar algo, cuando él llegaba con alguien para que no sospecharan, pero creo que ya casi ni me importaba, mi corazón ya estaba muy roto como para preocuparse por tonterías.

 hola aqui les dejo un capi, espero les entretenga y les guste.

Saludos desde COSTA RICA

SUCULLEN

PURA VIDA