Todo a su tiempo (+18)

Autor: AtalCullen
Género: + 18
Fecha Creación: 16/09/2012
Fecha Actualización: 07/10/2012
Finalizado: SI
Votos: 9
Comentarios: 15
Visitas: 58350
Capítulos: 27

Edward, un joven médico que ha dejado que sus prioridades sean lo más importante lo más importantes en su vida, dejando de lado lo más importante,... el amor.

¿Qué pasará cuando llegue la jefe de enfermería?

 


Hola amigas les dejo otra locura de mi mente,... esta es una historia que escribí hace un tiempo, la he publicado en otras partes, pero aquí la he querido colocar un poco editada, he corregido algunas cosas, sobre todo la gramática y redacción.

Espero les guste y pueda recibir comentarios y votitos,... un beso a mis lectoras que no me abandonan

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Capítulo 21: "Nueva actitud, nueva etapa"

EPOV

Ayer llegaron de Seattle las chicas, después de haberse quedado una noche porque no alcanzaron a hacer muchas cosas. Alice llegó tan emocionada, ya que ya tenían los vestidos para las damas de honor, dejaron listo los zapatos de Bella, el ramo y el vestido de mi novia… mi novia… se sentía hermoso nombrar a Bella como mi novia. Mi madre quedó fascinada con ella, se dio cuanta lo dulce y lo inteligente que es ella y sobre todo los sencilla y humilde de corazón. Me comentó lo afortunado que era y que entendía el porque me había fijado en ella.

Me sentí tan orgulloso al escuchar la aprobación de mi madre respecto a mi novia. Ella del principio la había aprobado, pero no había compartido con ella como lo hizo en estos dos últimos días. Al igual que Alice, las dos estaban muy asombradas de cómo era Bella.

Alice, estaba encantada y ya la consideraba su amiga, ya que me comentó que hablaron mucho y que le contó muchas cosas personales, le dio tanta confianza que se abrió como si hubieran sido todas las vidas muy unidas. Claro sabía que mi hermana era de algún modo así, pero desde que conoció a Bella le gustó, la encontró transparente y eso le dio confianza desde el principio.

Hoy por fin la vería, estaba ansioso, quería tenerla entre mis brazos y que me contara como se había sentido con mi madre y con mi hermana.

Ya era la hora de ir a buscar a Bella al hospital y me apuré para estar listo y no atrasarme. Me fui en cuanto terminé, y la esperé en el estacionamiento, estuve esperando por unos minutos cuando apreció en las puertas del recinto y me bajé del auto y me fui directamente donde ella mientras ella también lo hacia.

Nos abrazamos muy fuerte, nos separamos un poco, la besé, necesitaba de sus labios, de su sabor, de su esencia. Fui un besó dulce, tierno, me sorprendió que Bella no estuviera tan eufórica, pero aunque no estaba así me respondió el beso en la misma magnitud.

-¡oh amor te extrañé tanto!- le dije sin dejar sus labios.

-yo también Edward, quería verte, quería sentir tus labios- me dijo tiernamente dejando besitos tras besitos en mis labios.

Nos separamos y nos fuimos al auto, estaba emocionado por verla, pero sorprendido, por que de ves que estuviese apasionada, esta muy tierna, no es que no lo fuera antes, pero esta vez estaba muy tierna, parecía un gatito meloso, que solo necesita que la acurruquen y la acaricien.

Me pidió que la llevara al parque, pero antes fuimos a comprar un poco de comida rápida para llevar, me dijo que quería caminar un poco y disfrutar un poco de la naturaleza. Nos fuimos tomados de la mano, cuando de repente comenzó a correr y me desafió a alcanzarla. Le sonreí y esperé que avanzara, ya que sabía que la alcanzaría de inmediato, me sorprendí, hoy estaba como una pequeña traviesa, ojalá que dentro de su actitud haga travesuras de las que me gustan- pensé viéndola alejarse.

-¡Edward no me alcanzarás si te quedas ahí!- me gritó con una sonrisa pícara en sus labios.

-¡espera, solo te estoy dando chancee!- le dije de vuelta.

Comencé a correr detrás de ella alcanzándola y agarrándola de la cintura, la abracé por detrás y la besé en su cuello. Bella tomó mis manos y se dio vuelta para tenerme de frente. Me miró con ojitos llenos de amor.

-no sabes cuanto te amo Edward, queda tan poco tiempo para que estemos casados, eres lo más importante en mi vida- me dijo sin dejar de mirarme y cunado terminó me abrazó con sus manos en mi cintura.

Sentí a Bella diferente, no se si era mi idea, estaba apasionada, pero diferente y eso me gustaba, nos sentamos en un banco y comenzamos a comer, se notaba que no había comido, ya que se devoró todo lo que compramos, después se quedó sobando su barriga ya que había comido muy rápido, me miró y me tiró un beso cerrando sus ojitos como una niñita dando una porción de ternura a sus seres queridos.

Quedé mirándola como un bobo y sin decir nada, la tomé de su quijada y me acerqué y la besé con un beso lleno de amor.

-¡te amo Bella Swan!- le dije mirándola.

Ella estaba con sus ojitos brillante, sin dejar de mirarme, con su mirada me decía cuanto me amaba y eso se le agradecía.

-¿Edward?-

-dime-

-debo decirte algo- me dijo poniéndose seria, y al mismo tiempo me asusté ya que se puso muy tensa.

-la noche que me pasé con tu hermana estuvimos conversando de muchas cosas entre las cuales salió algo muy importante que comprendí que lo era también para ti y que no me había dado cuenta la magnitud de lo significativo que es para ustedes como familia- me dijo dando un suspiro al finalizar.

-y ¿Qué es lo significativo?- le pregunté sonriéndole para poder relajarla un poco ya que se notaba que estaba nerviosa.

-Bue…bueno es sobre la primera vez- me dijo muy tímidamente.

Era tan raro verla así pensando en todo lo vivido durante estas semanas, y me resultaba extraño pero adoraba verla así, me encantaba verla tan inocente, tan ella, sabía que al estar juntos habíamos despertado nuestros cuerpos como nunca antes, y era mutuo, pero su esencia era esa.

-¿y? pregunté frunciendo mi frente tratando de entender.

-es que… trataré de que mis hormonas no me jueguen chueco durante esté contigo el resto que queda hasta la noche de boda, pero necesito tu ayuda- me dijo temiendo a mi reacción.

La quedé mirando y comprendí cuál era su determinación, y le di una sonrisa explicando así que estaba encantado por su decisión.

-claro que te ayudaré amor, yo no quiero que hagamos algo antes del matrimonio, no es que no lo quiera y tu sabes eso, te deseo tanto, pero también está lo que siempre he soñado… ¡claro que te ayudaré!- me paré del banco y la tomé entre mis brazos y la di vuelta como un chiquillo enamorado. Bella me abrazó hundiendo su rostro en mi cuello.

Estuvimos conversando, riendo, acariciándonos hasta que se nos hizo de noche. La llevé a su casa y al llegar nos quedamos en el auto. Bella se desabrochó el cinturón de seguridad y me quedó mirando.

-¿Estás de acuerdo de todo lo que te dije en el parque?- pregunto con cautela.

-claro Bella, estoy más que de acuerdo- le dije acercándome dejando un suave beso en sus labios. –te amo y si tu me lo estas pidiendo, esperáremos…

-entonces nada más de caricias en nuestras partes sensibles- me dijo con penita pero muy segura en lo que decía.

-no hasta nuestra noche de bodas y te aseguro que ese día nuestras caricias serán las más maravillosas- le dije mirándola tiernamente a sus ojitos.

Ese fin de semana fue muy hermoso, fue pura ternura, fue como un noviazgo que recién comenzaba, dejamos de lado toda la lujuria que nos había embargado las últimas semanas y me encantaba. Bella se veía cómoda, aunque de repente se ponía apasionada solo que ella sola bajaba los desniveles.

La semana pasó tan rápida que llegamos a otro fin de semana, que prácticamente la pasamos junto a la familia, salimos al parque de diversiones con Alice y Jasper y mis padres, fue maravilloso. Me sentía tan feliz, Bella se veía tan cómoda compartiendo con el resto de la familia, ya era parte de ella una hija más para Carlisle y Esme y una hermana más para Alice.

El lunes daba mi examen y estaba ansioso por terminar, después tendría solo tiempo para preparar lo que quedaba del matrimonio junto a Bella. Ella estaba más ansiosa que yo pero era justificado, me conoció preparándome para este y durante este tiempo he estado privado de ella por esto y por querer salir con éxito en esta etapa. Después vendría mi unión con ella y después trabajar para llevar el sustento al hogar y darle una estabilidad a mi esposa y mis futuros hijos.

Quería darle lo mejor a mi Bella, se merecí mucho más de lo que al principio podría darle, pero ella se merecí eso y mucho más. Nadie sabrá cuan valiosa es ella, cuan extraordinaria es para que mi existencia siga en pie.

Llegó el gran día del culmine de mi estudios… todo un esfuerzo en este tiempo para darle un buen porvenir a mi futura familia…


BPOV

Estaba asustada de la reacción que tuviese Edward a mi determinación de dejar de lado un poco las hormonas y respetarlo. Al verlo venir hacia mi en el estacionamiento del hospital tenía ganas de correr donde él y subiéndome a su cuerpo y besarlo descontroladamente sin cansarme pero ya mi mente me estaba jugando chueco. Pero reaccioné y me contuve y le besé con ternura, así como a él le gustaba, le gustaba cuando era tierna y así sería, solo que no me daba cuenta cuando mi calor corporal subía, ya que con Edward a mi lado mi temperatura habitual no era la misma.

Le pedí ir al parque a caminar un poco, así que me dio en el gusto, pero antes compramos comida rápida ya que tenía mucha hambre, en todo el día no había comido nada, ya que el trabajo estuvo muy ajetreado, llegaron varias urgencias y me pidieron asistir en algunas y no había tenido tiempo de probar bocado.

Al llegar al parque estuvimos caminando tomados de la mano, pero en un momento, me dieron ganas de correr y de jugar un poco con Edward, y me dispuse a hacerlo y lo solté y corrí, se quedó parado viéndome con esa sonrisa que tanto me gustaba, era tan hermoso, tan lindo, su postura, todo… en mi mente lo deseaba ahí mismo, pero mi mente era peligrosa para mi determinación, pero tendría que detenerme, eso dependería solo de mí.

Lo vi correr hacia mí y seguí corriendo, pero era evidente que me alcanzaría, era más rápido, me tomó de la cintura y me atrapó en sus brazos, al sentir sus labios en mi cuello no podía soportarlo así que le tomé sus manos y me di vuelta para quedarme frente a él, tenía una sonrisa tan hermosa que al verle me derretía. Le dije lo tanto que lo amaba. Después de estar ahí un rato entre sus brazos, nos estamos a comer ya que tenía mucha hambre, Edward me miraba, pero no decía nada, era como si estuviera esperando que yo hablara.

Me sorprendió cuando le comenté lo que había determinado después de haber comprendido lo importante que era para y él y su familia la primera vez, después de haber hablado con Alice hace una noche atrás. Él me miraba con ternura y en ese momento solo quería devorármelo, acariciarlo y sentirlo gemir, pero me contuve, sabía que iba a ser difícil pero le pedí que solo lo lograríamos si el me ayudaba. Su reacción me gustó ya que de alguna manera era cómo él quería.

Quedé tan feliz después de eso, tuve un fin de semana hermoso junto a él. Estaba tranquila sabiendo que no estaba sola en esto. Él sería mi otro yo y desde ahora ya lo estábamos comprobando.

Pasó tan rápido la semana que llegó el otro, la pasé genial junto a mi novio, fuimos al parque con toda su familia, Carlisle era un amor, era un tierno empedernido, ahora comprendía de donde salía la ternura que emanaba Edward, Carlisle era un amor con Esme, los dos parecían una pareja de novios, y para que decir la pareja más joven, Alice y Jasper eran unos melosos, pero él la trataba con tanto respeto y a la vez tiernamente, era tan calmado, me parecían una pareja muy linda, a pesar de su juventud, se veían que se adoraban.

Fue grandioso ese fin de semana. Le pedí a Edward que quería que se repitiera en otra ocasión una salida con su familia. Pero junto a Emmett y Rosalie cuando ellos estuvieran con nosotros. Me lo aseguró con un besito en mis labios.

Estaba ansiosa ya que ese lunes Edward tendría su examen, no quería transmitirle mis nerviosismo, pero era inevitable, él me calmó dándome a entender que no tenía que preocuparme ya que saldría bien y que de ahí en adelante, lo tendría todos los días hasta nuestro matrimonio.

Lo más importante es que durante estos días mis hormonas las pude controlar, Edward se veía cómodo, aunque sabía de alguna forma yo lo tentaba pero me controlaba y no dejaba que pasara más allá. Fue difícil ya que Edward me volvía loca cuando me besaba y profundizaba sus besos introduciendo su lengua en mi boca saboreándome, me enloquecía, sentía cómo mi respiración era más profunda y como mis manos trabajaban solas, pero mía autocontrol lo sacaba a flote y calmaba la situación, me encantaba parar ya que Edward me daba una sonrisa de las que me gustaba y se daba cuanta que no debía seguir.

Me di cuenta que era capaz de soportar y de salir airosa. Me sentía orgullosa de mi misma. Me sentía feliz de ver a mi novio orgulloso de su novia.

Capítulo 20: "Los primeros preparativos" Capítulo 22: "Culminando una etapa"

 
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