BELLA POV

Me senté con Edward a mi lado, miramos dos películas o eso creo, ya que me quede completamente dormida.

Cuando logre abrir los ojos me di cuenta de que no estaba en mi habitación. El espacio era muy luminoso las paredes estaban recubiertas de manera elegante, por  estantes llenos de libros y cd´s. Edward dormía sujetando con su esbelto brazo, mi pequeña cintura. Era una mañana bastante nublada, mire mi reloj y me reí. Mas que mañana era el mediodía!! Eran las dos de la tarde.

Edward entreabrió los ojos  lentamente.

-         Buenos días dormilón- le dije sonriendo.

-         Hola amor- dijo dándome un beso sumamente tierno.

Mientras acariciaba sus desordenados cabellos le dije:

-         Me quede completamente dormida anoche-

-         Si- me dijo riendo- cuando se fueron mis padres tuve que cargarte hasta mi habitación- seguía riéndose, pero yo me puse colorada como un tomate.

-         Que vergüenza!!- le dije apenada- tus padres pensaran cualquier cosa...- no me dejo terminar.

-         No seas tonta, es mas mi madre me reto por haberte dejado dormida en el sillón- dijo riendo, me relaje un poco- Emett y Jaspers también tuvieron que subir a sus respectivas mujeres- dijo riendo.

-         Se ve que la película no era tan buena- dije tirándole juguetonamente un almohadón en la cabeza.

-         La verdad es que era bastante interesante- dijo comenzando a acariciar mis piernas.

-         ¿Desayunamos?- le dije sonriendo mi estomago pedía a gritos algo de comida, ya tendríamos tiempo de hacer otras cosas...

-         Esta bien- dijo con una sonrisa mi ángel.

Me senté de golpe en la cama lo que provoco que me mareara.

-         Bella, ¿estas bien?- me pregunto Ed preocupado.

-         Si solo me maree- le dije con una sonrisa, la verdad que esto siempre me pasaba, y no tenia de que preocuparme, ya que ayer antes de acostarme me había tomado la pastilla del día después.

-         ¿No estarás embarazada?- dijo sonriendo.

-         No!!- dije sobresaltada- siempre me pasa esto. Hablando de eso, no se si te diste cuenta pero el otro día no tomamos precauciones- dije en tono serio.

-         Si lo se- me dijo un tanto apenado.

-         Fuimos muy irresponsables- le dije sinceramente, me encantaba ver como simulaba la carita de perro mojado tan característica de Alice.

-         A mi no me molestaría que tuviéramos un niño - me dijo apenado.

-         A mi tampoco amor, pero no es el momento, apenas nos conocemos y me gustaría terminar mi carrera- le dije seria.

-         Te entiendo amor, y no tengo ningún tipo de apuros, somos jóvenes todavía- dijo sonriendo.

-         Claro que si amor- le dije dándole un corto beso- Por el momento comencé a tomar anticonceptivos, así que por un tiempo tendremos que usar condones- le dije como en tono mandón.

-         No hay problema amor- dijo sonriendo pícaramente- ¿Quieres que empecemos a practicara ahora?

-         Prefiero comer algo- le dije en tono sensual.

-         Muy bien, pero luego no te salvas- me dijo al oído, provocando que se me erizara la piel.

Comencé a besarlo mientras recorría con su mano, su muy marcado pecho, llegando a su zona sensible, dejando una pequeña caricia y le dije:

-         El que no se salvara eres tu- dije riendo, y Salí disparada para la cocina.

-         Eso no es justo Bells- me dijo como un niño. Yo sonreía mientras llegaba a la cocina.

-         Vaya vaya, se levantaron dormilones- dijo Alice sonriendo.

-         Estamos preparando el almuerzo- dijo Jaz con una sonrisa en la cara.

Se veían muy graciosos, los dos estaban con delantales de cocina, hasta tenían un gorrito blanco, esta Alice es terrible!! Pensé.

Estos dos eran tal para cual, no me contuve y les dije en voz alta:

-         Chicos ustedes se tendrían que casar- se dieron vuelta y me miraron extrañados, aunque podía vislumbrar cierta emoción en la mirada de Jaz.

-         ¿Que?- les dije- son tal para cual.

-         Algún día lo haremos- dijo Jaz, Alice lo miro con su rostro iluminado, estos dos irradiaban amor.

-         ¿En serio piensas en un futuro conmigo?- le pregunto Alice.

-         Claro que si pequeña,  ¿acaso te quieres librar de mi tan rápido?- le dijo Jaz fingiendo dolor.

-         No tonto!!- dijo Alice saltando sobre el- te quiero para siempre!!- dijo entre risas.

Edward apareció detrás de mí, y me dijo:

-         Y tu Bells, ¿piensas en un futuro conmigo?

Lo mire sonriendo y le dije:

-         Claro amor, ya me veo con un vestido blanco- dije seria, aunque era un broma, me sorprendió ver cierto brillo en la mirada de Edward, solté una risita nerviosa, el me miro ceñudo y dijo:

-         No me parece gracioso- por suerte Jaz salió a mi ayuda.

-         Es que Bells siempre ha dicho que no se va a casar- le sonreí a mi hermano.

-         ¿Como que no?- dijo Alice.

-         La verdad es que nunca lo vi como algo necesario- le dije.

Edward me miraba serio, hasta que me sonrió y dijo:

-         Puedo hacerte cambiar de opinión.

-         Lo dudo- contraataque.

-         El tiempo lo dirá, ya veremos- me dijo sonriendo.

Comimos todos juntos, por cierto Rose y Em parecían imanes no se separaban un momento, pasamos un agradable fin de semana, junto a los chicos.

Tal vez en cierta forma estábamos predestinados a vivir en este pueblo, ya que en el estaban nuestros grandes amores. Al fin y al cabo todos nos merecíamos un poco de amor...