Ardiente Tentacion

Autor: lady.lausc
Género: + 18
Fecha Creación: 27/02/2013
Fecha Actualización: 12/04/2013
Finalizado: SI
Votos: 7
Comentarios: 9
Visitas: 54551
Capítulos: 30

Isabella Swan Psicóloga y columnista lleva una vida aparentemente normal, esta comprometida y tiene exito en su trabajo, su vida da un giro cuando decide ir a un bar a tomar una copa y se encuentra a sus amigos del bachillerato, entre ellos a Edward Cullen quien fuera su mejor amigo y tambien su primer y unico gran amor...

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Capítulo 19: Jugando al amor

Cap 19 Jugando al amor


Desperte adolorida en una blanca habitación, el rostro sonriente de mi amiga Irina me recibió
-Hola hermosa, como te sientes?
-i…irina donde esta mi bebe? Que hago aquí
-Shh tranquila, Renesmee esta bien, ahora mismo la están bañando, que bueno que despertaste, comenzaba a preocuparme, llevabas 3 dias inconsciente, le llamare a una enfermera para que venga a valorarte- Salio del cuarto, 3 dias, vaya, no crei que hubiera pasado tanto tiempo, llego la enfermera, me tomo la presión, me pidió que me levantara un poco a caminar, no recordaba mi herida, y quise ponerme de pie muy a prisa, el dolor que senti fue inmenso
-Ahhh- grite, que rayos!!!
-Tranquila Bella, los paramédicos tuvieron que cortar, estabas demasiado débil y Renesmee se estaba asfixiando.
-Cierto, el enfermero, donde esta? Debo agradecerle
-No lo se, le costo el trabajo, los doctores tacharon su conducta de irresponsable, el es apenas un pasante de medicina, esta estudiando para medico cirujano, fue una suerte que no te cortara mal, con el movimiento de la ambulancia pudo haberte hecho un enorme zigzag- se solto a reir y yo le enseñe la lengua, como si fuera una niña pequeña.
Pedi ver a mi hija, y enseguida la trajeron a mi presencia, tenia el rostro mas angelical que jamás había visto, cabellos castaños y ojos color chocolate como los mios, mejillas rosadas y en la boca creo que se parecía un poco a Edward, suspire pensando en lo feliz que habría sido si el estuviera aquí en este momento, estuve 2 dias mas en el hospital por que aun me mareaba si me ponía de pie, después me dieron de alta y me fui con mi hija y mi amiga Irina a casa…
5 años después
Estaba haciendo el aseo de mi casa, levantando los juguetes de Renesmee, cuando alguien llamo a la puerta, abri y un hombre afro americano estaba en mi entrada con una enorme sonrisa, tenia el cabello crespo y ojos azules, cosa que se le veía realmente bien.
-Hola Bella- dijo y entro a casa sin ser invitado
-Disculpa?- le dije en tono de disculpa
-Oh, que ingrato no me he presentado, me llamo Laurent, Laurent Da Revin para servirte- hizo una graciosa reverencia.
-Bella Swan- le extendi una mano
-Te conozco mas de lo que crees Irina no para de hablar de ti, habla tanto que siento que ya hemos platicado.
En eso bajo Irina
-Laurent! Amor! Ya estoy lista!- eso me sorprendió, no sabia que Irina tenia un novio se despidieron y salieron no escuche llegar a Irina, al dia siguiente le pregunte sobre Laurent, se me hacia un buen hombre pero sentía curiosidad por saber donde lo había conocido.
-Recuerdas que frecuentemente voy “de compras”?, pues no es asi, estoy inscrita en un club, donde se encargan de hacer citas, funciona asi, te graban en un video, describes al hombre perfecto para ti, de acuerdo a tu descripción buscan a alguien con características similares a las que quieres, te muestran por video y si alguno te interesa les hacen una cita
-Irina, eso es peligroso, no sabes con que tipo de personas puedes encontrarte, que tal si es un secuestrador, o un narcotraficante, Dios Irina puede ser un maniático sexual.- dije levantando una octava mi voz.
-Maniatico sexual si es, pero te juro que no es peligroso, dijo esbozando una sonrisa picara- tranquila Bella, ya soy mayor, nadie puede engañarme tan fácilmente, lo mejor de este club es que son gente de bien, para poderte inscribir necesitan una carta de antecedentes no penales, y tienes que demostrar que estas soltero.
Encogi los hombros y suspire
-Amiga, creo que tu también necesitas conocer a alguien, me dijo sonriente
-No, estas loca yo no voy, no necesito conocer a nadie, estoy bien asi-
-Aja! Aquien quieres engañar, todavía sigues amando al recuerdo del papa de Renesmee, Necesitas algo con que distraerte-
-Me distraigo saliendo a pasear con mi hija
-Hablo de otro tipo de otro tipo de distracción, vamos antes de que salga mi sobrina de la escuela.
No me dejo protestar, salimos de la casa y nos dirigimos hacia unas oficinas, estaban repletas de mujeres y hombres, me llevo hasta un mostrador donde una chica nos atendió, quise arrepentirme pero era tarde tomaron mis datos y me llevaron a una habitación, me sentía tonta por haber accedido a esto, me pidieron ponerme un antifaz, el propósito de este lugar era juntar parejas que no solo tengan atracción física, primero se tienen que conocer los sentimientos, y una vez conociendo la belleza interior se procedía a la exterior…
-Esta bien, señorita, descríbame a su hombre ideal- dijo mientras activaba la video cámara
-Yo… creo que esto es tonto- me miro y sonrio
-Vamos, no sea timida descríbalo-
-Ok, busco… a un hombre que sea cariñoso, que este dispuesto a dar todo por amor, y que me acepte como soy, por que deben de saber que yo tengo una hija, y tienen que aceptarla a ella incluso antes que a mi, y… ay que tonto ya por favor, no quiero hacer esto…
La chica sonrio y corto la grabación.
-Eres difícil, no te prometo nada, aun asi espero que tengas buena suerte la membresia esta pagada, y espero que encuentres a ese alguien que llegue a ser todo para ti…
Durante 3 semanas estuve recibiendo llamadas para conocer, chicos, uno parecía interesante, era un hombre rubio de ojos azules, solo le conocía medio rostro pero era atractivo visualmente, lastima que quiso sexo en nuestra primer cita, ya me estaba hartando de todo eso, un dia por la mañana recibi una nueva llamada del club, había otro candidato, le pedi a Bree que me hiciera una cita, estaba decidida, este seria el ultimo encuentro, estaba segura de que solo seria otro tipo tal superficial como los demás…
Me vesti con un entallado vestido azul marino tipo “strapless” largo, me hice un chongo me maquille un poco, acoste a Renesmee se la encargue mucho a Irina, y sali a mi cita, esta vez seria en las instalaciones del club, conduje con cuidado deje mi coche y me dirigi a las instalaciones, el estaba esperándome ya, tenia puesto un traje color verde, un suspiro se me escapo, por un momento me acorde de Edward bien podía ser el, tenia unos hermosos ojos verdes que se acentuaban aun mas por el color de su traje se puso de pie y extendió una mano
-Buenas noches, bienvenida-
-Gracias- hizo un ademan para que me sentara, no dijimos nada durante un buen rato, solamente nos mirábamos, suspire aburrida, voltee a todos lados... se escucho que comenzó a llover, otro suspiro se me escapo.
-Y… te gusta la lluvia?- me pregunto tratando de hacer platica, era tan inexperto como yo, se notaba que este tipo de cosas no le hacían mucha gracia
-Me preguntas sobre el clima?
-Si, creo que si- ambos soltamos una risita tonta, terminamos la cena y me invito a salir al balcón
-Escucha… yo, bueno no soy experto, en estos asuntos, no suelo citarme con extrañas
Rei tontamente, teníamos algo en común.
-Yo tampoco- poco a poco la platica fue surgiendo hablamos de nuestros empleos, nunca me dijo su nombre ni yo el mio.
Volvimos a hacer un par de citas mas, era un hombre interesante, por su forma de hablar tenia el corazón roto, es medico y ahora estaba dando un seminario en el instituto de cancerología, la ultima noche me platico que le ayudo a vender pulceras a una de las niñas que estaba tratando, ella necesitaba el dinero para sus quimioterapias, me obsequio una para Renesmee y aunque intente darle el donativo no me lo permitió, estaba acumulando puntos a su favor, el hecho de que pensara en mi hija aun sin conocerla me hacia sentir bien, después de cenar platicamos otro poco, el tema de hoy… Ex amores, le conte mi historia con Jacob, omitiendo la parte del video solamente le dije que me había jugado mal al igual que el padre de mi hija, cuando llego su turno, note la nostalgia con la que hablaba de ella, no podía creerlo como un hombre tan lindo podía haber tenido un solo amor en toda su vida?, sin saber por que lo abrace al ver que las lagrimas comenzaban a salir de sus ojos
-Shh, tranquilo, aquí estoy yo…
Levanto la mirada y clavo sus hermosos ojos verdes en los mios, senti una extraña conexión, rompiendo mis propias reglas estampe mis labios en los suyos, era una locura, me había prometido no intimar con ningún extraño de los que conociera aquí, su beso fue tierno al principio, luego fue apasionado, nos encontrábamos en el balcón de la habitación, me separe un poco y le susurre en el odio
-¿quieres ir a otro lado?
Me miro soprendido, y luego me contesto….
-Te agradaría mas estar en la habitación?
Le sonreí coquetamente y entre a la habitación, me voltee para mirarlo y nuevamente lo volvi a besar…

Capítulo 18: Mi pequeña pateadora Capítulo 20: Noche loca

 
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