Enamorandome de un Gigolo

Autor: midnight_medianoche
Género: Romance
Fecha Creación: 19/09/2012
Fecha Actualización: 17/07/2013
Finalizado: SI
Votos: 5
Comentarios: 4
Visitas: 20279
Capítulos: 17

Alice a sus 20 años es virgen, sus amigas intentan persuadirla de salir con chicos para que deje de serlo. En la ultima negativa, Bella y Rose, deciden pagarle a un chico para que salga con Alice, pero no cualquier chico.. un Gigolo. ¿Qué pasara cuando Alice se entere? ¿Perdonara a sus amigas por su traicion? Sobretodo, ¿Olvidara al chico del que se enamoro?

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esta historia es de  Paulinita Rathbone ... como siembre gracias a todos lo que leen 

bueno ella me pidio que recomiende su beta asi que aqui va:

Se llama Eve Sophie Runner Pattinson, del grupo de betas FFAD

pacecen si quieren

 

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Capítulo 17: capitulo 16 final

Enamorándome de un Gigoló—_

16—

Me levanté de mejor humor en la mañana, me sentía extrañamente bien. La conversación del día anterior había sido muy liberadora pero algo estresante, ni en mis más profundos sueños me hubiese imaginado que mi padre cambiaría de opinión y al fin aceptaría a Cinthya; quiero decir, no soy pesimista, pero conociendo a mi padre como lo conocía, pensaba que pasarían muchos años antes de hacerle entender lo suficiente como para que cambiara, aunque sea un poco, de parecer y no le hiciera la vida tan dura a Cinthya. Y hablando de ella… Miré a mi hermana, su semblante estaba tranquilo, se notaba a leguas que un gran peso había sido quitado de sus hombros.

No era para menos, mi padre por fin la admitía, y no solo eso, también se había arreglado todos los males entendidos con Leslie. Me sentía tan feliz por ella.

De manera cuidadosa me levanté de la cama, procuré no hacer tanto ruido para no despertar a mi hermana, fui al baño para hacer mis necesidades fisiológicas, después me di un ligero baño y salí. Cinthya aún dormía, así que me dispuse a prepararme para irme a la escuela, me puse un conjunto sencillo, de todas maneras hoy no sería un día muy especial.

En eso mi cerebro me trajo a colación otras imágenes. Hoy, era hoy el día en que yo hablaría con Jasper, quiero decir, puedo posponerlo para otros días pero me conocía a mi misma para saber que entre más lo postergara menos me daría valor para hacerlo. Me miré en el espejo, como si mi reflejo tuviera las respuestas que necesitaba, trataba de darme yo misma palabras de aliento, yo puedo, yo puedo, me decía una y otra vez, tú lo amas, no dejes que esto te derrote.

— Estará todo bien. —Di un brinco—. Lo siento, Alice, no quise asustarte.

—No te preocupes. —Volteé a ver a mi hermana, ella ya se había levantado, pero estaba recargada en la cabecera—. Estoy algo nerviosa, eso es todo.

— ¿Qué es lo que te pone así?

—Ya sabes, hoy trataré de hablar con Jasper —contesté, dándole una media sonrisa—. Espero que no esté lo suficientemente herido y que no me odie, quiero decir, le he hecho daño de muchas maneras, ya es ganancia que siquiera me voltee a ver.

—Con esa actitud no vas a lograr nada.

— ¿¡Pero qué puedo hacer!? —dije desesperada—. Nunca antes había hecho esto, en parte para evitar estas situaciones me negaba a salir con chicos.

—Huir de los problemas no siempre es la mejor solución, ya viste lo que pasó por no escuchar; así que deja de actuar como una niñita asustada y sé valiente. —Me miró de manera penetrante—. Espero que cuando regreses de la escuela me des la buena noticia de que has arreglado las cosas con Jasper y que de nuevo están juntos. ¿Está claro?

Asentí. No quería darle falsas esperanzas a mi hermana, para mí era fácil decir: Sí, claro, Jasper me perdonará y los dos estaremos juntos.Pero del dicho al hecho…

— ¿Alice? No escuché tu respuesta. —Mi hermana cruzó los brazos.

—S… sí. —Fue lo único que contesté.

—Bien, ahora vete. —Me despidió con la mano.

Tomé mis cosas y prácticamente corrí a la salida, solo me detuve unos minutos para tomar una tostada de la alacena, la medio unté con mermelada, saqué un yogurt natural y salí de mi casa, no sin antes gritar a todo pulmón que ya me iba.

Fui a la parada de autobuses para esperar mi transporte. Seguí con la mentalización.

Vamos Alice, tú puedes…

Llegué a la escuela algo nerviosa, además de que me sentía estúpida y parecía una mujer paranoica, me la pasaba mirando de un lado a otro, vigilando todo el lugar por si me encontraba a Jasper. Iba caminando por el pasillo cuando me crucé con Bella y Rosalie.

—Hola, Alice —me saludó Rosalie—. ¿Cómo estás?

—Supongo que estoy como debería estar… ¡No! —Me detuve a mí misma—. Estoy nerviosa, asustada y creo que me va a dar… —Hice un movimiento con mi cabeza—. Ya saben, eso que me pasa cuando estoy nerviosa.

—Te refieres a la dia… —Comenzó Bella pero la interrumpí.

— ¡Bella! —La detuve antes de que dijera la palabra—. No es necesario que digas algo que sabes de antemano que me avergüenza.

—Lo siento. —Levantó las manos en señal de rendición—. Es que era natural para nosotras decir esa palabra, ya sabes.

—Sí, pero muchas cosas cambiaron. —Suspiré—. Miren chicas, sé que aún tenemos un largo camino para que volvamos a ser lo que éramos antes, ¿sí? De verdad, estoy intentando que las cosas vuelvan a como estaban, pero aún me es un poquito difícil.

—Lo entendemos, Alice —me dijo Rose—. De hecho, no pensábamos molestarte hoy, sabemos que hoy es un día importante para ti, queremos hacértelo más fácil.

—Lo sé y de verdad se los agradezco —dije sinceramente; además quería un poco de charla con amigas, no tenía a nadie más a parte de mi hermana, pero hay cosas que no se les deben decir a las hermanas—. Seré sincera, estoy nerviosa por hoy, ¿y si lo retraso un poquito?

—Eso sí que no, amiga, él te ha esperado todo este tiempo, la escuela se acabará pronto, así que debes solucionar las cosas antes de que sea demasiado tarde y otra chica quiera quitarte a tu hombre.

Eso hizo que todos mis sentidos se despertaran.

— ¿Qué? —exclamé un poco más fuerte de lo que debía—. ¿Qué chica? ¿De qué hablas?

—Gracias, Rose —Bella dijo sarcásticamente—. No era necesario que la alteraras por algo de lo que no estamos seguras.

—Pero nosotras lo vimos —contestó entre dientes—. Además a ella le concierne esto.

—Miren, dejen de cuchichear y díganme qué es lo que está pasando.

Ambas se dieron una pequeña mirada antes de que Bella tomara la palabra.

—Como te dije, aún no estamos del todo seguras, pero hay una chica… ¿Mara? —le preguntó a Rose.

—María —contestó la aludida rodando los ojos y cruzándose de brazos.

—Bueno esa, la vimos muy pegadita a Jasper el otro día y pues a él no le parecía molestarle en lo absoluto.

— ¡Pero qué…! Eso sí que no, nadie me roba a mi hombre sin darme una pelea —expresé más convencida. Vi que ambas soltaron una risita, pero no me importó. En este momento tenía que encontrar a Jasper, hablar con él, y tratar que todo volviera a ser como antes.

No me despedí de las chicas y caminé por todo el campus buscándolo; recorrí los lugares donde mayormente lo encontraría pero tuve la mala suerte de no encontrarlo, cuando estaba a punto de darme por vencida fue cuando lo vi sentado en una de las bancas de hierro que estaba en los jardines más alejados del campus, pero lo que me puso roja de coraje fue a la chica que estaba junto a él.

Con que esa era la suripanta que quería robarme a mi chico, eso no lo iba a permitir, me dije a mí misma, antes de caminar hacia ellos.

POV Bella

Sentía que una carcajada iba a brotar de mi cuerpo pero no podía hacerlo, eso hubiera molestado mucho a Alice, a pesar de que ella estuviera ya a unos pasos alejándose de nosotras.

—Espero que tu plan funcione, Rosalie —le comenté—. Está molesta.

—Recuerda que ella necesitaba un incentivo, estaba muy nerviosa —contestó.

—Pero decirle eso de Jasper… creo que eso la molestó más.

— ¡Nah! —Hizo un ademán con la mano, restándole importancia—. Mi plan funcionó, quería darle motivación y eso fue lo que hice.

—Ojalá todo salga como tú lo planeas y no empeore las cosas —expuse.

— ¡Oye! Nosotras solo le dijimos lo que vimos, no estábamos diciendo nada malo. —Se encogió de hombros.

—Pero no le dijiste la otra parte importante, ella es…

—Sí, sí, lo sé —me interrumpió—. Pero si le decíamos eso no hubiera tomado valor para hablar con él.

—Bien —contesté.

Crucé los dedos, esperando que todo saliera bien y que Alice arreglara las cosas.

POV Alice

Me detuve justo en frente de ellos, parecían estar muy contentos riendo de lo que sea que fuera, pero cuando notaron mi presencia Jasper dejó de reír y me miró algo sorprendido o debería decir… ¿asustado?

—Hola —dije al fin, ya que ninguno de los tres hablábamos.

—Eh… hola —saludó la chica morena—. ¿Se te ofrece algo?

—Sí, de hecho, quería hablar con Jasper. —Ella miró a Jasper con el ceño fruncido. Él solo bajó la mirada, como evitando la mía… Eso dolió. Al parecer la chica me conocía porque me miró y abrió los ojos sorprendida.

—Debes ser Alice. —No era una pregunta—, Jasper me ha hablado de ti.

— ¿En serio? Pues Jasper nunca me habló de ti, extraño, ¿no? —declaré con una sonrisa.

— ¿Cómo dices? —preguntó confundida mirando a Jasper—. ¿Estás bien?

—Sí, claro, María —respondió.

—Jasper, de verdad, quiero hablar contigo. —Me dirigí a él—, es importante.

Él se quedó callado unos momentos hasta que finalmente asintió; le dijo algo despacio a María, ella se levantó, antes de irse me dio una mirada significativa, de la cual no entendí el motivo.

Aún así no le di importancia, caminé lentamente y me senté junto a Jasper, esperando que mi presencia no le molestara.

— ¿Cómo has estado? —pregunté para romper el hielo.

—Supongo que bien, ¿y tú? Me enteré que te irías a España con unos tíos.

—Eso creo —respondí ya no muy convencida—. Sabes… ya no hay que irnos con rodeos, estoy cansada de no ser directa en lo que quiero decir y eso me está comenzando a molestar.

— ¿Sabes? No entiendo de qué hablas —anunció.

—Claro que lo sabes, creo que para empezar todo esto… te debo una disculpa enorme. —Me tomé de las manos—. Siento mucho haberte dejado sin ninguna explicación, pero es que cuando me enteré que las chicas habían contratado a un hombre para que saliera conmigo… me dolió mucho, y mucho más me dolió pensar que me había enamorado de una ilusión, de que tú no hubieses sido real, que solo estuvieras actuando. —Respiré un poco, pero tampoco le di tiempo de hablar porque continué—. Fue por eso que huí, de esa manera, no quería saber nada, no quería que me confirmaran ese temor que tenía… que tú hubieses sido… un prostituto.

—Debiste habérmelo preguntado —alegó.

— ¿¡Pero cómo saber si decías la verdad!? —Alcé la voz—. ¿¡Cómo no creer que no era una actuación!? ¿Cómo?

—Confianza. —Me miró a los ojos, había olvidado su hermoso color—. Si decías amarme, con solo verme a los ojos hubieses sabido la verdad.

—Hubo algunos factores que hacían la historia más convincente, como el hecho de que casi no hablabas de tu vida personal, el que me mintieras con tu empleo…

— ¡Diablos! —me interrumpió—. ¡Tú nunca me preguntaste nada personal! —me contestó molesto. En el poco tiempo que estuvimos juntos nunca lo había visto de esa manera y me asustaba—. Te limitaste a preguntarme cosas superficiales, yo no te decía nada porque no quería hostigarte con mis cosas, y sí, te mentí al no decirte dónde verdaderamente trabajaba, pero sentía que si te lo decía tú simplemente te avergonzarías de mí.

—Entonces también me conocías muy poco para haber llegado a esa deducción. —Me dolió llegar a esa conclusión—. Supongo que tampoco me amabas tanto como decías. —Miré a otro lado.

— ¿Eso crees? —preguntó acercándose a mí.

Alcé la mirada, sentía que sus ojos podían ver mi alma, medité su pregunta para llegar a una mejor conclusión; yo lo amaba, de eso no tenía dudas; pero no nos conocíamos tanto como creíamos, muchas cosas no fueron dichas y era por ello que estábamos en esta situación.

—No lo sé —contesté sinceramente—. Una parte de mí quiere creer que hay un futuro para nosotros dos, pero la otra tiene miedo de que lo que sentimos no es tan fuerte y es por ello que estamos como estamos.

—Eso puede solucionarse fácilmente—me dijo con una media sonrisa.

— ¿Ah sí? —cuestioné no muy segura.

—Debemos empezar de nuevo —respondió con simpleza.

— ¿De qué hablas?

—Quiero decir, que empecemos desde el principio. Sé que no pasamos por una etapa que se llama amistad, nosotros nos la saltamos completamente al salir sin conocernos demasiado. —Me tomó de las manos.

— ¿Quieres decir que debemos ser solamente amigos, por ahora? —Sentí como si mi corazón comenzara a hacerse pedazos, sabía que él no me perdonaría tan fácilmente lo que pasó. Ahora solo quería tenerme como amiga y eso me hizo enojar—. Mejor dime que no quieres volver a verme, eso me haría las cosas menos dolorosas.

— ¿Qué?

—Ya sé que solo usas esa idea como excusa para decirme indirectamente que no quieres nada conmigo, Jasper. Muy bien, lo entiendo, lo arruiné, pero no soy la única culpable. —Me solté de su agarre—. ¡Anda! Ve con María, seguramente con ella sí quieres estar, por mí no te preocupes.

—No entiendo —manifestó confundido, ¡sí, ¿cómo no?!

— ¡No finjas, Jasper! Ya me enteré de que andas saliendo con ella, así que no mientas, no lo niegues.

Él se quedó callado un momento, lo que para mí fue una confirmación a mis sospechas.

— ¿Estás celosa? —me preguntó con un deje de burla.

— ¡Puf! Y aún tienes el descaro de señalármelo en mi cara. —Me levanté—. Que te la pases bien con ella y sé sincero, esa es la mejor arma para que tu nueva relación funcione.

No alcancé a dar ni dos pasos cuando él me tomó de la mano y me obligó a sentarme de nuevo.

— ¡Espera, huracán! —Me crucé de brazos y miré a otro lado—. Antes que nada, quiero que me respondas… ¿Quién te dijo que yo estaba saliendo con María?

—Eso no importa, lo que importa es que lo haces —respondí aún sin verlo.

—María no es lo que tú crees, ella es…

— ¡No me interesa saber lo que ella es…!

—Mi prima —me interrumpió, fue entonces cuando lo miré, él tenía una sonrisa de suficiencia en su cara.

— ¿Cómo dices? —Me detuve a preguntar.

—María es una prima que acaba de mudarse a la ciudad y se inscribió aquí; solamente estaba enseñándole la ciudad y la escuela, porque ella entrará el año que viene.

Entrecerré los ojos y me le quedé viendo para ver si podía detectar si era una mentira, pero por más que buscaba un atisbo de que me mentía, no lo encontré.

— ¿No me estás mintiendo? —pregunté.

—Claro que no. Alice, aunque no lo creas, tú eres la única chica que quiero. —Me sonrió—. Es por eso que quiero que nos conozcamos mejor… Empezar de nuevo.

— ¿De verdad quieres eso? —pregunté contenta, porque él no estaba saliendo con nadie.

—Sí, empecemos de nuevo, de esa manera no volveremos a cometer los mismos errores.

Me quedé en silencio, meditando todo lo que me dijo. Ahora entendía, él nunca me había odiado por lo que le hice, simplemente estaba esperando el momento para que ambos habláramos y resolviéramos las cosas; me sentí tan tonta por haber postergado más las cosas, sintiendo que él no querría estar conmigo o simplemente me ignoraría, pero no, él seguía amándome como yo lo hacía, eso me hizo sentir eufórica.

Le sonreí y me levanté de mi lugar, con su mirada en mí en todo momento.

—Hola. —Le extendí mi mano—, soy Alice Brandon.

Él sonrió antes de estrechármela. En el momento que nuestras manos se tocaron supe que nunca más nos íbamos a separar.

Fin

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Al fin dije FIN, ooooh es una tristeza termina una historia, porque como que es una parte de ti

espero que le alla gustado tanto como a mi :') se lo agradesco su tiempo por leer y todo.

 

Capítulo 16: capitulo 15

 
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