Capitulo 17:

Me desperté temprano porque no quería seguir durmiendo. Tenía una sensación de vacío en mi interior, el agujero seguía estando y no desaparecía.

Ya no sentía odio hacia la familia Cullen, me habían acogido de nuevo como si no hubiera pasado nada. Se sentían felices por que había vuelto pero por otra parte se sentía al igual que yo, como si algo les faltara. Estaban tristes por que se había marchado Edward. Por cuanto tiempo se habrá marchado? Llamaría para saber como se encuentra su familia?

“debe estar en Brasil”, pensé.

Por que me di cuenta tarde de la realidad? Tuve tan poco tiempo para convencerlo de que se quedara! No soporto el no saber en cuanto tiempo no lo veré.

Me levante y me fui a la cocina por que mi estomago gruño. Saque una manzana y me fui a ver televisión al salón.  Puse un canal de música y estaban tocando una canción que era movida. Preste atención a la letra de la canción y me di cuenta de algunas frases.

                              Antes que te vallas dame un beso

                             Se que soñare con tu regreso.

                             Mi vida no es igual,

                            Ahora que te perdí. Como te voy a olvidar?

Lo que decía la canción era verdad. Como iba a olvidar a Edward si lo hecho de menos mas que nunca? Y si fuera así, si me pidieran olvidarlo, seria un crimen. Matar mi amor por era algo sin perdón en la vida.
Fui a la habitación de Edward para colocarme la ropa que Alice prestado o regalado como había dicho ella ayer por la noche. Menos mal que sabia mi poco gusto de la moda ya que solo había un par de zapatillas que se veían cómodas, un jeans azul ajustado y una blusa blanca de manga corta, mi pelo lo recogí en una coleta.

Cuando baje la mayoría de la familia Cullen estaba levantada a excepción de Edward que dejaba todo incompleto.

Todos me sonrieron y me invitaron a sentarme a la mesa, junto a ellos.

-         buenos días.- dije. Sonó raro ya que hace tiempo que no decía esa frase.

-         Buenos días.- dijeron a coro y con sonrisas.

-         Bella- dijo Alice que se sentaba frente a mi.- te tengo un plan genial para hoy.-sonaba animada.- a que no adivinas?

-         Escúpelo ya- dije apurándola. Todo rieron a este hecho que provoco que me ruborizara. “muy raro en mi” pensé. Hace mucho que no se me teñían las mejillas.

-         Vamos a ir de compras!- celebro como niña pequeña.

-         Estas loca- hice una mueca.- Edward se ha ido y tu piensas en compras- dije irónicamente. Vi la tristeza que paso por sus ojos. “entupida” me dije.- lo siento. Solo que me cuesta…

-         No te preocupes.- dijo Esme tratando de calmar los ánimos.

-         Discúlpenme.- dijo Alice mientras se levantaba de la mesa y se fue a las escaleras.

-         OH, OH- dijo Emmett como bromista.

-         Emmett- le regaño Carlisle.

-         Permiso- dije levantándome-  iré a pedirle disculpa.

No dijeron nada y subí a la habitación de Alice.

Me quede frente a la puerta que daba a la pieza de Alice debatiéndome mentalmente si llamar a la puerta o no.

Suspire y me resigne. Yo fui la culpable así que tenia que remediar el problema.

Golpee tres veces su puerta.

-         Alice? Puedo pasar?- llame. Sentí pasos hacia la puerta y luego que retrocedían.

-         Adelante.- dijo con voz fría.

Pase y la vi sentada en su cama. Antes ya había entrado a la habitación de Alice pero nunca me dejaba de sorprender. Tenia un closet tremendo, una televisión igual que Edward, dos sofás color crema, y muchas fotografías de su familia, amigos en cuadros pequeños. Una vista espectacular hacia el bosque.

Me acerque a ella y le tome la mano.

-         lamento lo que dije.- susurre.- fui entupida. No tengo justificación- roque.- en verdad Alice, por favor. Eres mi mejor amiga y no quiero estar peleada contigo ahora que estamos de buena nuevamente.

-         Para, Bella- me freno en seco.-no estoy molesta contigo.

-         Enserio?- me sorprendió

-         Bueno, un poco. Pero me sentí mal porque…Edward se fue.- dijo apenada

-         Le extraño.- susurre.

-         Bella- esta vez me hablo con ánimo- yo también lo extraño pero por eso quiero tratar de que estés mejor. Que no recaigas a lo anterior. Ahora que estas mejor quiero ayudarte par que cuando vuelva mi hermano.- la mire extrañada- volverá, lo presiento.

-         Estas loca- dije bromeando.

-         Lo sé- sonrío.- como te decía, cuando Edward vuelva quiero que te vea bien y no se imagine tonteras y así se quedara.

-         Tengo una duda.- agregue. Espero a que continuara.- si Edward vuelve y me ve “bien” se marchara creyendo que hizo bien en irse.- se quedo pensativa un momento.

-         Tienes un poco de razón aun que Edward no están entupido para no darse cuenta que yo estaré ayudándote a subir tu autoestima porque si no fuera que estas aquí apostaría que estarías en tu habitación llorando a cantaros.- dijo.

-         No lo creo.- contra ataque.

-         OK, quizá estarías en algún rincón de tu casa llorando.- siguió bromeando.- pero eso no va a pasar por que iremos de compras!- iba a protestar pero hizo su típico puchero.- por favor!

-         Esta bien.-dije – necesito distraerme.

-         Wi!- celebro. Era muy fácil hacer feliz a mi amiga pero lo difícil era como resultaba la persona que la hacia celebrar como niña pequeña.

Nos preparamos y  luego salimos en su nuevo porche amarillo. Era muy lujoso pero sencillo; se lo había obsequiado Edward porque se lo debía, según ella.

Fuimos a buscar a Rosalie a su casa que quedaba a unos minutos de la casa Cullen. Al igual que ellos, los mellizos Hale viven en lujos.

Tenían una casa de dos pisos muy ostentosa. Alice me explico que ellos habían perdidos sus padres cuando eran pequeños y se quedaron los Cullen por unos días pero luego quisieron vivir en su casa para estar con las cosas de sus padres. Esme les había contratado una nana que lleva más de 5 años con ellos. “es de confianza” dijo Alice. Carlisle se hace responsable de los negocios de los Hale por eso los mellizos no les falta nada.

Ya Alice le había avisado a Rosalie que iríamos de compras así que ella nos esperaba sentada en el porche de su casa. Al vernos nos vio y subió al auto.

-         hola chicas.- saludo mientras Alice se ponía en marcha para ir a Port Ángeles.

-         Hola- dijimos a coro.

-         Estoy ansiosa- comento Rose- hace unas dos semanas que no salimos de compras, Alice.

-         Si, tienes razón.- sonó frustrada mi amiga.

-         Tengo un problema chicas- dije. Me quedaron mirando preocupadas- no tengo dinero. Deberíamos ir a mi casa para sacar un…

-         Para nada.- me contradijo Alice.- yo te he invitado y yo pagare tus compras.

-         No es justo.- me cruce de brazos.-ustedes siempre hacen todo por mi.

-         Deja de reclamar, Bella- advirtió la duende.- ya he dicho y no cambiare de opinión.- Rosalie soltó pequeñas carcajadas por nuestra discusión en la que Salí perdiendo.

Llegamos en poco tiempo al gran centro comercial en Port Ángeles ya que Alice conducía a toda velocidad. Al igual que Edward, le encantaba ir rápido pero la diferencia era su loca manera de conducir.

Íbamos de tienda en tienda. En cada tienda pasábamos, cada una salía con tres bolsas. Nosé como permitía esto pero Alice sacaba la escusa de que no tenia sentido de la moda.

Me entregaba como 20 prendas de las cuales me gustaban 5 o 6. el problema de todo esto era que entrábamos a las tiendas mas lujosas  y caras. A Rosalie y Alice les brillaban los ojitos cuando me colocaban una tenida que me quedaba bien.

-         Ay Bella, con nosotras a tu lado, la moda dejara de ser tu problema.- comento Rosalie satisfecha.

-         Estoy orgullosas de nosotras- agrego Alice. Yo solo rodee los ojos.

Estuvimos como 4 horas seguidas comprando, me dolía todo el cuerpo pero lo peor de todo era que tenía un hambre feroz y cargábamos más de 25 bolsas cada una.

-         chicas tengo hambre- dije cuando mi estomago volvió a gruñir

-         yo también Alice.- me apoyo Rose.

-         Esta bien- refunfuño la duende.- pero luego de comer…continuaremos.- “demonios!” pensé.

Estuvo muy delicioso todo lo que comimos. Fue un banquete ya que Alice era cliente frecuente en estos lugares.

Finalmente convencimos a la compulsiva de Alice que volviéramos a casa. Para rematar nos hizo jurarle que volveríamos la otra semana sin objeciones.

El pequeño porche iba repleto de bolsas de todos los tamaños. Alice iba feliz coreando una canción mientras conducía, se veía satisfecha por el día que pasamos.

-         como se la pasaron?- pregunto Alice cuando aparco en el garaje.

-         Genial- dijo Rosalie con alegría.

-         Ha sido fantástico- agregue- gracias, han logrado que me distraiga.

-         No tienes que agradecer. Eres de la familia- se encogió de hombros Alice.

-         Te queremos mucho Bella y estamos aprovechando al máximo todos los momentos que estamos contigo ahora que nos has perdonado.- dijo amablemente mi rubia amiga.

-         Eso es cierto. Por eso te tienes que acostumbrar a nuestros mimos-me guiño un ojo Alice.

Bajamos todas las bolsas. Llegamos al living y los chicos nos ayudaron. Estaban sorprendidos por todas las bolsas que trajimos. Esme y Carlisle no parecieron estarlo.

Cenamos juntos pero en un momento Esme se ausento con Alice. Me pareció raro pero no debí entrometerme.

Aun no llegaban ellas, me comencé a preocupar así que me disculpe y fui a la cocina. Antes que entrara escuche murmullos de las personas en las que iba en busca.

-         no seas entupido.- le recrimino Alice en tono mordaz a nosé quien- hago todo lo que puedo pero tu has hecho que esto pasara- se quedo callada unos segundos.- Bella es fuerte pero no durara mucho así, ella debería ser la que estuviera hablando contigo, Edward- que!? Edward? Alice estaba hablando con Edward?

-         Edward?- Salí de mi escondite y vi que Alice tenia un móvil pegado a su oreja. Me quedo mirando con los ojos abiertos al igual que Esme, luego Alice cambio se reacción y me tendió el Mobil. Lo tome sin pensarlo- Edward? Eres tu?- se sentía respirar a alguien al otro lado de la línea y luego el pito anunciando que la llamada estaba cortada.

No quiso hablar conmigo, me corto. Por que? Esta enojado? Ya no me quiere?

Le entregue el móvil  a Alice y Salí corriendo a llorar a la habitación de él. Ya me estaba acostumbrando a subir los tres pisos así que ya no me cansaba. Mire el cuadro de Edward y mío con las lagrimas impidiéndome verlos claramente. Me lance en la cama; destrozada porque él ya no me quiere hablar, ya no me quiere!

-         Bella?!- me llamo Alice alarmada. Entro y me abrazo para consolarme.

-         Ya no me quiere- susurre en su hombro- ya no me quiere.

-         Eso no es cierto.- dijo levantando mi rostro para que la mirara.- Edward si te quiere. Esta preocupado por ti pero el es cabeza hueca, es tan entupido que piensa que todo esta bien por que se fue.- solté pequeñas risitas por sus insultos- tranquila amiga. Tú sabes como piensa él así que no digas que no te quiere porque si te quiere.- asentí.

Alice y Jasper se ofrecieron llevarme a casa para poder estar mejor. Emmett se había ofrecido para escapar de Rosalie ya que ella lo estaba obligando a llevar todas las bolsas de su ropa.

Mi amiga duende no dejo que me llevara todas las cosas que me compro, no entendí porque pero dijo que luego me explicaría.

Olaaaaaa! Aki les dejo unn kaap… ya ke subí solo uno el viernes J espero ke les guste zhayito!