Caímos en un profundo sueño mi ángel y yo, debido a que esa había sido la mejor tarde de todas en mi vida, puesto que ahora Edward y yo estaríamos juntos para siempre y nos habíamos amado como nunca los dos, desperté en los brazos de mi ángel, dormida en su pecho, cuando me levante para verlo, estaba dormido, lo bese sin tratar de despertarlo y acaricie su cabello, a la vez que escuchaba, voces en el comedor de la casa y alguien gritando...

- Oigan chicos, ya regresamos, dejen sus juegos sucios para después - gritó Emmett, por suerte mi ángel no despertó, entonces me levanté y me puse mi ropa, pero en vez de ponerme mi blusa, me puse la camisa de Edward, solo para darle coraje a Emmett, entonces abrí la puerta y voltee para ver a mi ángel otra vez, seguia profundamente dormido, en su rostro se reflejaba una felicidad inmensa.

Cuando baje, me encontré con toda la familia de Edward, todos se quedaron con la boca abierta al verme con la camisa de mi ángel y sobre todo, lo más notorio fue el anillo de compromiso en mi mano, a lo que todos sonrieron y Emmett solo me vió con cara de pocos amigos a lo cual sonreí:

- Bella... ¿Y ese anillo de donde salió? - me preguntó Alice.

- Pues verás Alice, el hombre más maravilloso del mundo, me pidió matrimonio, a lo cual acepte con todo el amor que siento dentro de mi - le dije.

- ¡Bella! - me gritó - ¿Verdad que me dejarás organizar tu boda? - me preguntó Alice y todos se quedaron viendo a Alice.

- Ni lo sueñes Alice - escuche la voz de mi ángel a mis espaldas, venía con su ropa y una nueva camisa y me abrazó por detrás - Porque te vas a mandar Alice ya tuve la experiencia con Rosalie y Emmett - le dijo.

- Cierto Alice, tu te mandas organizando todo, lo haces con muchos lujos, aparte es la boda de tu hermano y Bella, dejalos organizar todo a ellos - le dijo Rosalie - No les arruines su día.

- De ninguna manera - ahora habló Alice - Pienso ayudarlos y esta decidido, ¿Verdad Bella?

- Yo ni siquiera he dicho sí - le dije.

- Pero lo dirás, por favor Bella, hazlo por mi - me suplico.

- Esta bien Alice, si eso te hace feliz, pero no hagas muchos lujos, y me dejarás ayudarte - la amenace.

- Bueno, esta bien, que remedio - me dijo no muy convencida.

- Familia, basta de discutir, en vez de felicitar a Edward y Bella, están discutiendo por organizar todo - dijo Carlisle - Vamos a felicitarlos y luego platicaremos lo demás.

Todos los Cullen nos felicitaron, solo Emmett fue el más alegre conmigo y mientras me dio unas vueltas en el aire, me felicitaba por haberme robado el corazón de su hermano, y que lo hiciera muy feliz, porque Edward me amaba, hice esa promesa de por vida con Emmett.

Rosalie me felicito y dijo que no me preocupará mucho con las cosas de Alice, que contaba con mi apoyo para pararla un poco, Esme también me dijo lo mismo, Jasper me felicito y me dijo que hiciera feliz a su hermano, Carlisle nos felicito a ambos y dijo que fueramos felices y él y todos me abrieron para siempre su apoyo y cariño incondicional.

Pense para mis adentros: "Al fin encontré una verdadera familia, que me quiera y me proteja, y sobre todo al hombre más hermoso y maravilloso de este mundo, los Cullen robaron mi corazón, cada uno tenía un lugar especial dentro de mi, pero el más importante lo ocupaba mi ángel Edward"

Sonreí, el resto de la noche transcurrió entre risas, bromas y juegos entre todos, al final de la cena, Emmett decidió que jugaramos algo, y pues lo más típico fueron unos juegos de mesa, luego todos nos trasladamos a la sala a ver televisión un rato, y al poco tiempo algunos se caían del sueño, por lo que se fueron a dormir, los primeros en irse fueron Carlisle y Esme, al poco fueron seguidos de Emmett y Rosalie, solo quedamos Alice, Jasper, mi ángel y yo.

- Bueno chicos, ¿Como que les gustaría hacer? - preguntó Jasper - ¿O ya quieren ir a dormir?

- Pues no se, por mi no hay problema - dijo Edward, aunque si me gana algo el sueño, mejor vamos a dormir.

- Bueno, esta bien, entonces descansan los dos y otra vez, felicidades - nos dijo - Vamonos Alice - la ayudo a levantar y se fueron.

Nos quedamos solos en la sala, mientras tanto vi a Edward y me sonrió, eso provoco que me mordiera el labio, a lo cual mi ángel me abrazo y me dijo:

- Bella, ¿Sabes que provocas cuando haces eso? - me pregunto.

- La verdad no se Edward - dije sonriendo - entonces Edward me cargó y me sento en sus piernas, entonces sentí su erección y me exitó más, entonces me voltee y estampé mis labios con una urgencia en la boca de Edward, a lo cual sonrió y se levantó llevándome en brazos a su cuarto.

Mientras subiamos a su cuarto nos besabamos con urgencia, mientras mis manos desabrochaban su camisa y acariciaba y besaba el pecho de Edward a lo cual gemía bajito, para cuando llegamos a cuarto, Edward me bajo, mientras cerraba la puerta con seguro, yo me apresuré a quitarme toda mi ropa y me recoste en la cama, cuando Edward volteó y me vió gimio y se sorprendió de verme, mientras llevaba su mano a su muy notoria erección, me encantaba ser la causante de esa erección...

Con toda la velocidad, Edward se quito la camisa ya desabotonada, y cuando iba con su pantalón, lo detuve y le dije:

- Ni se te ocurra quitarte tu mismo el pantalón, de eso me encargo yo.

- Amor, me estás torturando con tu belleza, al verte así no puedo controlarme, es una necesidad que no te imaginas, necesito estar dentro de ti - me dijo, mientras sostenía su mano aún en su erección.

- Tranquilo amor, te juro que esta noche será la mejor de tu vida y sera involvidable - le dije mientras me acercaba y gemía bajito en su oído.

Después de eso, Edward se rindió y comenzó a besar mi cuerpo, pero lo detuve, mientras tanto mis manos bajaban a su pantalón y se lo quitaba, ya cuando estuvo fuera, comencé a acariciar su erección y Edward gemía y en eso le quite su boxer, y bese su muy erecto miembro, llevándomelo  a la boca, a lo cual Edward gemía diciendo mi nombre y después de eso subí a besar a mi ángel y seguía acariciando su miembro, después del beso, Edward se dejo caer al suelo aún gimiendo y baje junto a él:

- ¿Qué pasa amor? - le pregunte - ¿No te gusto?

- Al contrario amor, me encanto, es solo que fue demasiada mi felicidad, nunca había estado tan feliz como ahora, solo que ahora la excitación que me has dado, dejaste a mi erección tan dolorosa que mi necesidad por estar dentro de ti, aumento y ya no tengo control sobre mi - dicho eso, Edward me recosto en el suelo y comenzó a besarme con urgencia, en su expresión se denotaba el placer y el dolor que sentía en su erección, y lo supe cuando la sentí en mi pierna y me hizó perder la razón.

- Edward, ahora me has hecho perder la razón a mi - le dije - Hazme tuya de una vez, ya no soporto sin sentirte dentro de mi, te amo Edward.

- Tus deseos son órdenes para mi, te amo Bella, dueña de mi corazón - después de eso, Edward y yo fuimos uno solo nuevamente, callamos los gemidos con besarnos, para no ser notorios, mientras haciamos nuestros movimientos de siempre, me encargaba en observar al hombre que estaba unido a mi, cuando llegamos al climax, Edward se dejo caer sobre mi, mientras recuperabamos la respiración:

- Bella, mi Bella, te amo, gracias por este momento, fue el mejor de mi vida - me dijo, mientras se enderezaba sobre mi, ya que aún estábamos unidos.

- Te amo Edward, no tienes nada que agradecer, yo tengo mucho que agradecerte, fue una de las mejores noches en mi vida - le dije mientras nos besabamos y nos levantabamos para irnos a dormir, como siempre mi ángel me ayudaba a levantarme.

Cuando llegamos a la cama, nos amamos de nuevo, hasta que caimos dormidos, tarde en dormir un poco, puesto que estaba demasiado feliz, Edward era el ser más maravilloso del mundo, me hacía sentir la mujer más especial y feliz del mundo, lo amaba tanto, que ese amor no cabía en mi pecho, ese día comence una nueva vida a su lado y con su familia, una vida llena de amor, cariño y felicidad junto a Edward y su familia los Cullen, las mejores personas del mundo y que ahora son mi familia para siempre.