Edward Pov

Aun no me lo podía creer, Bella y yo nos habíamos unido como una sola persona, habíamos demostrado nuestro amor en todo su esplendor pero una parte de mi se sentía mal, la culpa me invadía sentía que me había aprovechado de su dolor, de su debilidad, decidí que debería dejarla en un lugar seguro y hacerle creer que lo que paso anoche solo fue un sueño un hermoso, perfecto y mágico sueño

-"ni se te ocurra Edward Cullen"-me regaño Alice-"te deje ropa cerca del árbol vístete de inmediato"-acomode a Bella con cuidado, cubriéndola con mi chaqueta. Me apresure para encontrarme con mi hermana, estaba muy cerca de allí con la mirada cargada de odio

-eres un completo imbécil Edward-

-pero no me fui- le respondí mirando mis manos, la vergüenza era tan grande que ni siquiera podía mirarla a los ojos

-pero lo pensaste- me reprocho- ¡acaso no te das cuenta que te dio lo más preciado que una mujer tiene!- se tomo el puente de la nariz tratando de controlarse y no partirme en dos, respiro profundo, creo que estaba contando hasta diez- dejando a un lado tu estupidez tenemos un asunto más importante, Tenemos que contarle a Charlie la verdad, tiene que decírselo Bella-

-yo me encargare de que Bella se lo diga-

Bella Pov

Nunca había soñado de esa manera a Edward, la mayoría de veces él me veía frío e impasible pero este sueño era distinto, él me adoraba, anhelaba cada espacio de mi cuerpo como yo lo hacía con el suyo, nos fundíamos con pasión, ternura y sobre todo con mucho amor. Trate de levantarme sintiendo un pequeño dolor proveniente de mi pelvis, al tratar de cubrirme nuevamente con las cobijas note que se sentían diferentes, no eran mis cobijas de lana, eran unas suaves sabanas de seda, al abrir los ojos me encontraba en una pequeña tienda de campaña cubierta únicamente por aquellas sabanas, me encontraba completamente desnuda, entonces me di cuenta de lo que paso, no fue un sueño, ¡Edward y yo habíamos hecho el amor!

Muchas imágenes venían a mí, cada una más hermosa que el anterior Edward recitaba con adoración que me amaba cada vez que se fundía en mí, de pronto al estirarme encontré un pequeño papel escrito con una exquisita caligrafía:

Mi querida Bella:

Anoche me regalaste la noche más perfecta de mi vida, te pude demostrar que te amaba y siempre te amaré en cuerpo y alma.

Te acabo de dejar un juego de ropa limpia junto a la "cama", te espero para desayunar, tenemos que hablar

Siempre tuyo

Edward

PD: Te amo, más que a mi propia vida

Dios mío todo fue real, nada fue un sueño había perdido mi virginidad con el hombre que deseaba, con mi Edward. Me vestí de inmediato con unos jeans, camiseta y un par de converse que Edward me había dejado, a pesar del tiempo el recuerda las cosas que me gustan, cuando salí de la tienda de campaña me encontré con un Edward inmóvil frente al lago, recibiendo directamente los rayos del sol, de veía hermoso un verdadero ángel, al mirarme mirándolo completamente embobada solo me sonrió

-buenos días hermosa-me recibió con un casto beso en los labios- te amo-pude sentir como mi rostro se ruborizaba

-también te amo-le devolví de nuevo el beso, sentir sus labios contra los míos hacían que todo mi cuerpo se estremeciera al recordar la noche anterior

-gracias de nuevo por la mejor noche de mi vida-me abrazo inhalando profundamente-¿te duele algo?- tan solo negué con la cabeza- vamos a desayunar- me tomo de la mano y me condujo hacia una manta extendida en el suelo con la comida que mas me gustaba: tostadas francesas, fresas, jugo de naranja y te.-sírvete lo que quieras princesa

De inmediato devore todo lo que había delante de mi estaba realmente exquisito, mientras Edward simplemente me miraba sonriendo

-Bella tenemos que hablar-hablo en un tono muy serio, de inmediato la sangre abandono mi rostro, el me iba a dejar de nuevo, me hizo pasar la mejor noche de mi vida y ahora planea marcharse, lagrimas inoportunas se deslizaron silenciosamente por mis mejillas- no es eso, yo nunca más me alejare de ti, mucho menos ahora- el me conocía demasiado bien sabía lo que yo suponía, suavemente limpio las lagrimas con suaves besos

-te amo- le susurre entre sollozos, el me regalo la hermosa sonrisa torcida que tanto amaba

-también te amo princesa, plus que ma propre vie-me lleno de dulces y algunos apasionados besos por todo mi cuello- se trata de Charlie- ¡Oh no eso no fue un sueño!- el está bien, pero algo confundido no entiende de donde sacaste toda esa fuerza, tienes que contarle la verdad

-pero lo pondría en peligro, no puedo permitir que pase esto, además el resto de la tribu no me dejara- trate de explicar desesperadamente

-Alice a hablado con el resto de la tribu y los ha convencido que es lo mejor para todos, tienes que decírselo tu misma Bella- de pronto me inundo el pánico, sentí que de nuevo los temblores se apoderaban de mí, me sentía impotente, vulnerable- yo estaré ahí- me apretó la mano para infundirme valor

Después del desayuno Edward y yo fuimos a casa para hablar con Charlie, al llegar encontramos a Jake en mi pórtico con los ojos llenos de lágrimas

-gracias a Dios Bella- me abraza con demasiado ánimo-este bien

-tu mismo me dijiste que ya no querías verme- le empuje tratando de soltar los fuertes brazos que prácticamente me estaban asfixiando-¿por qué debería preocuparte?

-después que le gritaste a todos que te dejen en paz no hemos podido escucharte, creímos que había pasado- me miro pateando una piedra, pero lo más extraño era que yo seguí por un momento después de la pelea sin cambiar de forma acaso ¿aun tengo el escudo que no permite que Edward lea mi mente?

-de todos modos no quiero que vuelvas a estar cerca de mí, tu ya no eres mi amigo me lo dejaste muy claro-

-perdóname Bella, no quería hacerte daño-me mira con la amargura plasmada en sus ojos

-¿Jacob?- el voltea rápidamente con una chispa de esperanza en su rostro- Dile al resto de la manada que me perdone, no fue mi intensión faltarles al respeto- el solo asintió.

Cuando entre pude encontrar a Alice en el sofá de la sala al mirarme salto a mis brazos

- el está bien Bella, pregunta por ti-sentí que mi cuerpo se tensaba completamente pero Edward estuvo ahí mostrándome su apoyo, subí lentamente las escaleras y encontré a mi padre hablando con Carlisle pidiéndole que me busque

-papá estoy aquí-lo abrace de inmediato-perdóname

-Bella, ¿qué sucedió contigo?, ¿qué paso con mi pequeña?-me limpia las lagrimas-dime la verdad, por favor

-papá, soy un monstruo perdóname-Charlie tranquilamente me acariciaba el cabello tratando de consolarme

-tu siempre serás mi princesa, mi pequeña-me da un suave beso en la frente- confía en mi

-soy un licántropo-al escuchar eso mi padre simplemente empezó a retorcerse de la risa en la cama

-hay Bella ¿no pudiste inventar algo mejor?-con el dorso de la mano se limpia una lagrima producto de la risa

-es enserio papá-con mucho cuidado me zafo de su agarre para mostrarle el tatuaje, al verlo los ojos prácticamente se le salieron de las cuencas-

-¡ISABELLA MARIE SWAN ¿QUÉ TE HE DICHO ACERCA DE LOS TATUAJES? PERO ME VA A OÍR JACOB BLACK, NI PIENSE QUE VOY A PERMITIR QUE VUELVA A MI CASA! –ahora fui yo la que empezó a doblarse de la risa- ESTO NO ME CAUSA RISA JOVENCITA ESTAS EN SERIOS PROBLEMAS, TENDRAS MUCHO QUE LIMPIAR

-¡oh papá yo limpio toda la casa si es necesario!- papá me miraba muy confundido mientras yo lo abrazaba

-Carlisle ¿me puedes explicar que le pasa?-

-Charlie todo lo que te dijo es verdad, al parecer tienes descendientes Quileutes, el gen licántropo esta en sus venas, el tatuaje los identifica

sorry de nuevo x el cap tan corto no e podido escribir estoy en finales del semestre gg rebe no es brujeria son los super powers d bella ggg graxias x leer besitos y apapachos d gomita