- ¿Qué haces aquí? – le pregunte cuando ya estábamos a salvo detrás de la puerta de mi habitación, Jake estaba sentado en un mueble y aun me miraba con sus ojos penetrantes
- Vine a buscarte
- No regresare – me senté al frente del, el se inclino hacia delante estando a solo centímetros de mi rostro
- Tienes que regresar todos te necesitan, yo te necesito ¡acaso no lo entiendes! – se levanto y comenzó a caminar por toda la habitación, me había acostumbrado a su aroma de perro pero en este momento su olor quemaba en mi nariz por la estrecha habitación
- Jake… no puedo regresar ¿acaso no entiendes que lastimo a Renesmee? – estaba totalmente irritada
El solo asintió con la cabeza, y nos quedamos en silencio
Un largo silencio
- ¿Qué has hecho aquí? – me pregunto cambiando de tema
- Nada, pero al parecer he causado revuelo en el hotel
- ¿Por qué tienes a un custodio en la puerta de tu habitación?
Reí, si le digiera el porque lo tenía allí… ¿Cómo sería ver a Jake molesto o… quizás celoso?
- Bueno, cuando llegue al hotel me pidieron autógrafos, pensaban que era una estrella – decía mientras recordaba como uno de los hombres que iba a su suite se paraba solo para pedirme un autógrafo
Jake frunció el ceño
- Otro me llego con un ramo de flores, eran hermosas, otro se me arrodillo y me dijo ¿quieres casarte con migo? – reí a carcajadas
Jake no estaba muy feliz de mi relato, apretó los puños con fuerza
- Si lo veo lo mato – dijo enojado
- No lo mates, otro fue más atrevido me dio su número de habitación y en ella coloco “quiero tener a la rubia mas hermosa en mi cama” – reí aun mas fuerte al ver el rostro de Jake, en su rostro se marcaba líneas de enojo y tensas
- En la única cama en la cual estarás será en la mía, porque – me decía señalándome – tu Rosalie Cullen eres mía
Entrecerró los ojos con una media sonrisa
- ¿tuya? No sabía que tenía dueño… ¿y qué tiene de especial tu cama que la hace distinta a las demás? – pregunte seductora, Jake trago en seco y levanto una ceja divertido
- La mía es mas cálida
- Eso hay que probarlo – me acerque a él y pude sentir como su pulso se aceleraba, sonreí
- Rosalie… ¿prometes no volverte a ir? – me pregunto a solo centímetros de mi rostro
- Solo con una condición
- ¿Cuál?
- Si te veo coqueteando de nuevo con una mujer mas horrible y resbalosa, a parte que me darás el gusto de probar su sangre… me iré y esta vez no volverás a verme – el hundió sus gruesos dedos en mi cabello
- Solo tengo ojos para ti
- Eso espero – me acerco mas a el apretándome con cuerpo
Con una sonrisa dibujada en sus labios me dijo
- Te amo
Pude sentir de nuevo esa marea de emociones en mi ser, algo tan distinto y tan inusual
- Te amo – respondí
El hundió sus labios con los míos en uno solo, su boca era cálida, caliente… pero suave y dulce, poco a poco se comenzó a incendiar una llama de pasiones, sus labios se movían aun mas rápidos llenos de pasión y entrega, me quite la chaqueta, y lentamente comencé a quitarle la del, tocando sus hombros, su pecho, su cuerpo… no me había dado de cuenta que ya estaba sin camisa y que mis senos estaban en el aire, Jake sonrió. Si fuera humana estaría roja como un tomate…
- Eres hermosa – me decía mientras llenaba mi rostro de dulces besos
Me recostó en la cama quitándose la camisa blanca, dejando en evidencia su hermoso pecho, el me tocaba las piernas, el cabello… inspiraba mi aroma, me besaba con pasión, besaba mis senos… me estremece y solté un gemido.
Su sonrisa se dibujo en su rostro ¡dios! ¡Hasta cuando aguantare!
- ¿vas a hacerme tuya o tengo que aceptar la propuesta…?
El gruño
Y yo reí
La diminuta luz al fondo de la habitación era perfecta para este momento, Jake entro en mi cuerpo de una manera tan especial y perfecta que me estremecí, llenos de pasión y entregados al amor…
El sol se resplandecía radiante por la estrecha ventana de la habitación, estaba aparentando estar dormida, cerré los ojos y no los abría, los abrí por unos instantes, me encontraba con la cabeza apoyada en el pecho de Jake, mientras el dormía profundamente… con cuidado para no despertarlo Salí de la cama y me puse la ropa y telefone al servicio del hotel
- Comida muy cargada para la habitación 1245 por favor
- En unos instantes se la llevo
- Y champan
- ¿de cuál quiere?
- Del mejor
- Su servicio estará allí en solo segundos
Tranque el teléfono, ¿Cómo era posible que durmiera tanto? Ni siquiera se movía, cualquiera podría pensar que esta muerto, me quite la ropa y me hundí a su lado
- Mmm… - decía mientras abría los ojos
- Estoy un poco decepcionada – decía para seguir el juego, el me miro y frunció el ceño
- ¿en que?
- Pensé que lo iba a disfrutar… - aguante las ganas de reír – pero creo que haciendo el amor no eres bueno Jake
- Dame otra oportunidad
- No lo se… quizás…
- ¡te are ver las estrellas! – sus ojos brillaron de emoción
- Tendrás que hacerme ver todos los planetas juntos
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