Edward POV
Cuando Bella cayó en mis brazos, entre en pánico, los paramédicos llegaron y la llevaron a una ambulancia, la subieron y me dejaron subir con ella, y observe como hacían cosas sobre ella, mi corazón latía fuertemente. Llegamos a una clínica, y la llevaron en una camilla a lo que supuse era una sala de parto, yo iba tras de ella pero un paramédico me detuvo al llegar a la puerta.
- Lo siento, no puede pasar - dijo. - Pero... - me queje. - No puede pasar - dijo firme.
Yo asentí, y me fui a la sala de espera, decidí llamar a Alice. - Edward, ya encontraron a Bella? - cuando Bella desapareció, llame a mi familia y estaban tan preocupados como yo, y como sabía que no se quedarían con los brazos cruzados, ellos ayudaron con la búsqueda desde Chicago. - Si Alice, la encontramos - en mi voz se notaba la preocupación, y sabia que ella lo notaria. - Eso es genial Edward, pero porque tan preocupado? - lo sabía, a ella nada se le escapa. - Estoy en una clínica Alice, Bella se desmayo y no sé, al parecer va a dar a luz - dije tapándome la cara con la mano libre. - Pero ella está bien no? y mi sobrina? Ed ellas están bien? - pregunto exaltada. - No lo sé Ali, no me dicen nada - dije frustrado. - Bueno, tranquilo, ella estarán bien, pero por ahora tengo que dejarte, hablamos más tarde - dijo rápidamente. - Ok hermana, bye - y colgué.
En eso llego Jacob. - Hey Edward, como esta? - pregunto, sentándome en la silla continua. - No lo sé - dije mirando el piso. - Tranquilo hermano, ellas estarán bien - dijo poniéndome una mano en el hombro. - Eso espero Jake - en todo este tiempo Jacob y yo nos habíamos hecho amigos. - Familiares de la Srta. Swan- llamo un doctor desde el pasillo. - Yo - me puse de pie y camine hacia él. - Y usted es? - dijo señalándome. - Edward Cullen, pareja de Isabella y padre del bebe - dije firme y cortante. - Bueno Sr. Cullen déjeme decirle, que el estado de la Srta. Es muy grave, al parecer no estuvo alimentándose bien los últimos meses de gestación y por los estudios practicados, fue víctima de intoxicación, no sabemos aun cual es la sustancia lo que sabemos, es que es la causante de la gran pérdida de peso de la Srta., por otro lado, el bebe se encuentra estable, solo está un poco anémico, ya sabe, como la madre no se alimento bien, por ende, el tampoco, pero nuestra preocupación ahorita es la señorita Isabella - concluyo. - Porque doctor? - esto no me gustaba para nada. - Pues, existe el riesgo de que la señorita Swan no sobreviva al parto - dijo algo nervioso. - Eso quiere decir que... - no podía ser cierto. - La señorita Swan está en peligro de morir Sr Cullen - dijo mirándome fijamente, con la disculpa en los ojos. - Doctor tiene que salvarla, ella es mi vida, sin ella no vivo, por favor, sálvela, tiene que hacerlo... por favor - sentía mis ojos arder, señal de que en cualquier momento me iba a derrumbar. - Hare lo que esté en mis manos, por ahora, tengo que irme-dijo dándome la espalda. Yo me quede ahí parado procesando todo lo que el doctor me había dicho, sentí como Jacob me puso una mano en el hombro. - Que te dijo? - cuestiono. Yo solo me voltee, y camine hacia las sillas, me senté nuevamente y tome una gran bocanada de aire, y comencé a decirle todo lo que el doctor me había dicho, el rostro de Jacob se lleno de tristeza.
Habían pasado 5 interminables horas y no me habían informado nada sobre Bella, tenia los nervios a flor de piel, Jacob me había obligado a tomarme un café y comer algo, ya que no había ingerido nada en las últimas 12 horas, me encontraba de pie, apoyado en una pared con los ojos cerrando cuando sentí como una finos brazos rodeaban mi cintura.
- Alice? - cuestione sorprendido. - Claro tonto, quien más? - dijo en tono de burla. - Que haces aquí? - estaba en shock. - Como que hago aquí?. Soy tu hermana, tengo que estar contigo, además no vine sola - dijo mirando a sus espaldas, enfoque mi vista hacia donde estaba la de ella y ahí vi a toda mi familia caminando hacia nosotros. Nos saludamos y abrazamos, sabía que estaban aquí para darme apoyo, yo siempre podía contar con mi familia, sentí una pequeña alegría, la cual se desmorono cuando preguntaron por Bella, como había hecho con Jacob, les conté todo lo que me habían dicho hasta ahora, Alice empezó a llorar, al igual que mi madre, todos estábamos tristes y preocupados. - Sr. Cullen - me llamo el doctor a mis espaldas, voltee rápidamente. - Doctor, que paso? - pregunte nervioso. - Su hija ha nacido, se encuentra estable, pero la mantendremos en observación, por otro lado lamento informarle que la señorita Isabella esta demasiado débil... y esperamos lo peor... - solo miro el suelo negando con la cabeza.
En ese momento sentí que algo se rompió dentro de mí. Mi Corazón.
- NO¡¡, doctor ella no puede morir, NO PUEDE MORIR¡¡¡ - en ese momento no me importo estar en una clínica, mis gritos se escuchaban por todas partes. Oí los gemidos de dolor y los llantos por parte de mi familia. - Cuanto lo siento, está haciendo mucho esfuerzo, su corazón no da más - dijo tratando de razonar. - Puedo verla? - le dije en un susurro. - Si eso quiere - me indico la habitación y luego se alejo.
No mire a mi familia, solo les di la espalda y camine entre los pasillos buscando la habitación 206, cuando la encontré, una enfermera salía de ella con un bulto en los brazos, sonara egoísta pero ahora solo me importaba mi niña, así que deje que saliera y entre yo y ahí estaba. Mi Bella, acostada en esa cama, con una máscara de paz en su rostro más blanco de lo normal, tenía un montón de cables a su alrededor, lo cual hacia la escena mas enfermiza. Me pare al lado de ella tomando una de sus manos. Estaba fría. - Mi Bella, mi niña, por favor, no puedes hacerme esto, no puedes dejarme - no aguante mas, y llore. - Tienes que vivir mi niña, por nuestra hija, por nosotros... por mí - el dolor desgarraba mi alma, sentía mi corazón roto en miles de pedazos, no tenía las palabras para describir mi dolor en ese momento. - Mi vida, mi amor, no me dejes, te lo suplico, por favor, no me dejes... sin ti no soy nada - dije en un susurro, me incline y llore sobre ella. Luego de unos minutos, me levante, y el sonido que hasta ahora era pausado, lento, se volvió cada vez mas rápido, hasta convertirse en un ritmo acelerado. - Bella? - una lágrima corrió por la mejilla de mi pequeña, y yo la limpie con mis labios. La mire y ella empezó a abrir sus hermosos ojos marrones, la felicidad que sentí dentro de mí era indescriptible. - Porque lloras mi ángel? - dijo levantando una de sus finas manos para acariciar mi mejilla. - Bella, mi amor... - pero ella no me dejo terminar. - Shhh - puso uno de sus dedos sobre mis labios. - No digas nada - me ordeno, acaricio mi mejilla, secando mis lagrimas. - Me diste un gran susto amor, por un momento mi corazón se partió de dolor - dije con voz contenida. - Lo sé amor, y lo siento - dijo cerrando los ojos. - No Bella, no cierres los ojos, no me prives de ver el hermoso chocolate de tu mirada - no podía ni siquiera pensar que haría si perdiera esa mirada que era mi perdición. - Tranquilo mi ángel, estoy aquí, y prometo no irme a ningún lado - dijo mirándome con ternura, yo no aguante mas, y la bese, la bese como tenía tiempo que no lo hacía. El beso fue dulce, lleno de amor... sin prisas. Mi corazón reconstruido saltaba de alegría, y yo no sabía como una persona puede pasar de estar tan triste e infeliz a estar completamente feliz y lleno de esperanza, definitivamente mi corazón era fuerte como para soportar tantas emociones juntas. Cuando nos separamos, junte nuestras frentes. - Te Amo pequeña... las amo - dije sonriendo. - Ya la viste? - pregunto ansiosa. - No, esperaba para verla juntos - no podía revelarle mis miedos y temores, no ahora. - Gracias Edward - susurro. - Voy por el doctor, no tardo -dije y camine hacia la puerta.
Una vez afuera mi familia se veía cabizbaja, me acerque a ellos y me miraron con sus rostros llenos de preocupación. - Como esta Edward? - pregunto mi madre. - Por qué no pasan y lo confirman ustedes mismos - dije sonriéndoles, ellos asintieron y caminaron hacia donde yo les estaba indicando.
Yo me dispuse a buscar al doctor el cual se encontraba hablando con una enfermera.
- Doctor – lo llame el me miro, y camino hacia mí.
- Si, Sr. Cullen – llego a mi lado.
- Lo necesitamos en la habitación 206, para que revise a mi Bella, y no se preocupe, ella está perfectamente bien, solo para salir de dudas – el me miraba con los ojos muy abiertos como si estuviera loco, tal vez creía que su diagnostico había fallado.
- Eh si, si claro, deme un momento y ahí estaré – dijo y me dio la espalda.
Yo me encamine a la habitación de mi amada, cuando iba a entrar, venia una enfermera guiando una cuna, y se paro frente a la puerta de la habitación, y yo me acerque a ella y le puse una mano en el hombro.
- Podría entregársela yo? – pregunte nervioso, mirando el bultico en sus manos.
- Claro – dijo entregándomela.
- Gracias – dije abriendo la puerta, ella solo asintió y entro detrás de mí.
Entre y la escena que presencie era muy graciosa, Emmett estaba sobándose la cabeza mientras miraba a Rose, que tenia los brazos cruzados y lo miraba como si quisiera matarlo, y mi Bella tenía sus mejillas húmedas, eso me desconcertó, así que informe de mi llegada, carraspeando.
- Edward – me susurro Bella.
Yo le sonreí y mire hacia mi bultico, todos siguieron mi mirada, y claro, Bella, fue la primera en dar señales.
- Edward, puedo? – dijo extendiendo sus brazos.
- Claro que si mi amor – dije caminando hacia ella y pasándole a nuestra hija.
- Es hermosa hijo – dijeron mis padres al mismo tiempo.
- Claro que lo es, tiene a la madre más Bella del mundo – dije acariciando la mejilla de mi Bella.
- Y al padre mas apuesto del universo – dijo ella de vuelta.
- Mira Jazz, mi sobrinita es hermosa, imagínate toda la ropita que le comprare – dijo Alice abrazando a Jasper.
- Que ya no le compraste mucha ropa? – pregunto Emmett.
- Nunca es suficiente mastodonte – chillo.
- Porque llorabas amor? – le pregunte frunciendo el ceño.
- Nada cielo, boberías – dijo ella negando con la cabeza.
- Emmett la llamo vaca – chillo Alice, señalándolo.
- Pero es que… - empezó a decir pero Rose fue más rápida, y le dio un ligero golpe en la cabeza.
- Rose¡¡¡, deja de hacer eso – se quejo.
- Deja tú de decir estupideces – dijo ella amenazadoramente.
- Ah, disculpen que los interrumpa, pero tengo que terminar de llenar la ficha de la bebe – dijo la enfermera.
- Claro – dije yo.
- Que nombre le pondrán? – pregunto mirándonos.
- Bueno, no sé si ya tenemos el nombre – dije mirando a mi Bella.
- Si, se llamara Renesmee Carlie Cullen Swan – dijo muy decidida.
- De acuerdo, eso es todo, gracias, hasta luego – dijo y se fue.
- De donde sacaste ese trabalenguas hermanita? – pregunto Emmett.
- Es la combinación del nombre de tus padres con el de los míos oso – dijo ella, y todos nos quedamos en silencio analizando la información, era verdad, Renesmee, por Renee y Esme y Carlie, por Carlisle y Charlie, mi Bella definitivamente era maravillosa.
- Ahh… vaya hermanita sí que eres inteligente – dijo el sonriendo.
- Claro, no es como cierto oso que hay en esta habitación – dijo Alice como quien no quiere la cosa. Emmett se quedo pensativo y luego se encogió de hombros, no había entendido el mensaje.
Todos nos carcajeamos con tan chistosa escena.
- Disculpen, puedo? – dijo el doctor asomándose desde la puerta.
- Claro, doctor, pase – le indico mi padre.
- Vaya, srta Swan, veo que está mucho mejor, me alegro de eso – dijo el sonriéndole a mi pequeña, que le devolvió la sonrisa tímidamente.
- Si doctor, solo fue una falsa alarma – dijo ella apenada.
- Me alegro, por ahora, les pido, me dejen un momento a solas con la srta Isabella, para practicarle una revisión – dijo el profesionalmente.
- Por supuesto – dijo mi madre, y miro a mis hermanos con seriedad al ver sus caras de puchero, sobre todo Alice y Emmett.
Salieron todos en una fila india, y por ultimo Salí yo con mi hija en brazos.
- Vaya Edward, una hija, yo creí que te quedarías virgen – se burlo Emmett.
- Emmett cállate – le dije mirándolo fijamente.
- Pero es verdad, y mira que tuviste buena puntería – dijo carcajeándose.
- Ya verás Emmett – dije entre dientes.
- Edward compórtate, ahora eres un padre de familia, debes actuar como un adulto responsable – dijo Alice riéndose.
- Cierto Eddie, eres un padre responsable, debes comportarte – dijo Emmett fingidamente indignado.
- Ya niños, dejen a su hermano tranquilo – los calmo mi madre, luego de eso seguimos admirando a mi hija, que paso por los brazos de todos, y termino en los miso de nuevo.
- Ya pueden pasar – informo el doctor saliendo de la habitación.
- Gracias – dijimos al unisonó.
Entramos y mi Bella nos miro sonriendo, volví a darle a nuestra hija, y me senté a su lado teniendo cuidado de no lastimarla, y comenzamos a conversar hasta que se hiso tarde, y mi familia tuvo que irse al hotel no sin antes decir que estarían aquí temprano, a la niña nos la dejaron un rato mas, pero a las 9 pm ya se la estaban llevando. Jacob había llamado diciendo que no podía venir porque estaban con el tema de los Vulturi, y los padres de Bella estaban declarando así que vendrían después. Como a las 10 pm me acomodaron la cama para acompañantes, tome el bolso que Alice me había traído con mis cosas de aseo personal mas mudas de ropa, y me metí al baño, me cambie y cuando Salí mi Bella ya estaba dormida, me acerque le di un beso en la frente y me acosté, me dormí enseguida. Agradeci a Dios que todo salió bien. Estábamos completamente felices.
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