BELLA POV
Desperté en la mañana con un poco de trabajo, la verdad no quería levantarme, quería seguir acostada al lado de Edward. La noche anterior había sido la mejor noche de mi vida, después de irnos del mirador del amor me trajo hacia la casa e hicimos el amor durante casi toda la madrugada. Así que no me puedo quejar por levantarme a esta hora, si por mi fuera pasaría las noches sin dormir con tal de despertar a su lado. Cuando de me giro hacia su lado para mi sorpresa el no estaba, en su lugar había una nota. Y entonces recordé algo…miré el reloj de la mesita y marcaba las 11:00 am, eso quería decir que el estaba ya en el aeropuerto y quizás hasta en el avión con sus hermanos en camino hacia sus vacaciones. En cambio yo me iba a quedar aquí sin poder cumplir mi sueño.
Decidí no darle mas importancia de la que tenía a las cosas, tomé el sobre que se encontraba sobre su almohada en el cual con una elegante caligrafía se leía Para Bella. Abrí el sobre y en su interior se encontraba una carta y comencé a leerla.
Bella, mi amor:
Estos días a tu lado han sido hasta ahora los mejores días de mi vida, y sé que estos dos meses que estaremos separados pasaran muy lentos sobre todo para mi. Te extrañaré a todas horas, sobre todo a la hora de dormir, ya que no tendré a tu cuerpo abrazado a mi, ni tu fragancia embriagadora…discúlpame por no despertarte ni despedirme de ti, se que si lo hacía posiblemente no podría irme, y no quiero decepcionar a Alice con sus añoradas vacaciones. Para mi nuestra despedida fue anoche, cuando nos la pasamos amándonos el uno al otro. Prometo escribirte en cuanto nos instalemos y espero que el tiempo pase deprisa para volver a tenerte entre mis brazos y hacerte mía. Cuida mi corazón hasta que yo vuelva…que lo he dejado contigo.
Te amo Edward Cullen
Leí la carta tantas veces que las palabras se me quedaron grabadas en mi mente. Y en parte el tenía razón si yo me despedía de el creo que tampoco podría dejarlo ir. Me levanté de la cama y me di una ligera ducha, salí dl bañó y recogí mis cosas, la carta y salí hacia mi casa. Cuando llegué todo se encontraba muy callado. Fui hacia la cocina por un poco de agua y en la nevera había una nota de mi madre:
Bella:
Regreso en la tarde, fui a cenar con Esme, si tienes hambre hay algo hecho en la nevera solo tienes que calentarlo.
Mamá
La verdad que lo que menos tenía ganas a esta hora era de comer, así que subí hacia mi habitación, me acosté en la cama y encendí mi laptop. Ahora solo me quedaba esperar a que Edward me escribiera, solo esperaba que no se demorara mucho. Estuve un buen rato esperando por su correo hasta que me quedé dormida…
-Bella despierta querida.- podía oír a lo lejos como mi madre me llamaba.-Bella despierta.
Lentamente fui abriendo los ojos para encontrarme a mi madre sentada a mi lado sonriéndome.
-Hola mamá, que tal fue la cena con Esme.- le dije mientras me sentaba en la cama.
-Estuvo muy bien…toma.- me dijo dándome un sobre.
-Y esto que es.- le dije mientras tomaba el sobre en mis manos y lo miraba detenidamente.
-Ábrelo, es tu regalo de graduación.- me dijo sonriendo.
-Mamá, no debiste molestarte.-le dije mientras comenzaba a abrir el sobre
-No lo he hecho, además sé que has soñado mucho con eso.- me dijo mientras yo terminaba de abrir el sobre.
Mis ojos no creían lo que estaban viendo, estaba más que sorprendida. Dentro del sobre se encontraba un pasaje de avión para Brasil, acompañado de una reservación en un hotel. Era todo lo que siempre había soñado y en estos momentos no sabía que decir.
-Wao mamá, esto es increíble la verdad.- le dije como pude mientras continuaba con el sobre en mis manos asegurándome de que fuera verdad.
-Sabía que te iba a gustar.- me dijo mi madre mientras me abrazaba.
-La verdad que no me lo esperaba.-le dije separándome un poco de ella.
-Bueno entonces será mejor que comiences a empacar porque se te va a ir el avión.- me dijo mi madre
-El vuelo sale hoy.- le dije sorprendida.
-Bueno sale en unas cuatro horas así que será mejor que te apures.- y diciendo esto me levanté de la cama.
Comencé a buscar las maletas y las coloqué sobre la cama, este era uno de esos momentos en que me haría falta la ayuda de Alice, a ella si que no se le iba nada. Comencé echando los biquinis que Alice me había comprado, sabía que en Brasil hacía calor y aprovecharía para ir por la playa. Eché unos shorts, algún que otro juego de tanga, unos jeans, y así hasta llenar las maletas. Cuando terminé me fui hacia la ducha y me di un baño muy rápido, no quería que se me fuera el avión.
Salimos de la casa cerca de las 7:00 pm, directo hacia el aeropuerto. Ya eran las 7:30 pm y yo me encontraba junto a mi mamá en el aeropuerto en la puerta de abordaje. Estaba muy emocionada con el viaje, aunque no quería dejar a mi madre sola. Ella me prometió que no iba a estar sola, que iba a aprovechar e ir a visitar a Emily, ya que hacía mucho tiempo que no la veía.
Esperé hasta último momento para abordar el avión, quería estar el mayor tiempo posible con ella, ya que estaríamos separadas por dos meses. Hicieron una última llamada a los pasajeros del vuelo hacia Brasil. Me despedí de mi madre y me encaminé por las puertas hacia el avión que me llevaría hacia el sueño de mi vida…unas inolvidables vacaciones en Brasil. Al sentarme en el avión sentí un poco de nostalgia, me hubiera gustado que Edward estuviera aquí conmigo, pero en su lugar solo había un asiento vacío. Al final nunca escribió, así que todavía no sé hacia donde se le ocurrió a Alice ir de vacaciones.
El vuelo en el avión fue tranquilo, solamente alguna que otra turbulencia cosa que es normal. El viaje era un poco largo así que tomé mi IPod y me lo puse, nada como un poco de música para pasar el tiempo…
El altavoz anunciando que íbamos a aterrizar fue el que me despertó, debía haberme quedado dormida en el viaje y mi IPod se quedó son carga. El avión llegó al aeropuerto y eran cerca de las 12:00 am. Entre la demora de las maletas y la salida de allí tomé un taxi cerca de la una de la mañana, le di la dirección al taxista y este me llevó hacia el hotel que para mi suerte no estaba muy lejos de allí. Me bajé del taxi, le pagué, tomé mis maletas y entré al hotel.
Me dirigí hacia la recepción para registrarme y me sorprendí al ver que la muchacha de allí hablaba perfectamente el español.
-Buenas en que puedo ayudarla.- me dijo muy amablemente.
-Si, creo que tengo una reservación hecha aquí.- le dije tendiéndole el papel que venía dentro del sobre que me dio mi madre.
-Si me da su identificación.-me dijo y yo se la tendí.
Ella comenzó a teclear en la maquina introduciendo mis datos y cuando terminó me devolvió mi identificación.
-Aquí tiene su tarjeta y donde esta localizada la habitación.- me dijo tendiéndome luego un papel.
Tomé mis cosas y me dirigí hacia lo elevadores, cuando llegué allí llamé a uno y esperé unos segundos hasta que este se abrió. Entré en el y había un muchacho del hotel que se encontraba allí.
-Hacia que piso.-me dijo sonriente.
-No lo sé déjame ver.- le dije mientras buscaba el papel.
Yo miré el papel que me había dado la muchacha y no creía lo que decía allí claramente escrito decía:
Ultimo Piso. Corredor de la derecha hasta el final y luego hacia la izquierda. Habitación 310. Suit 1
-Creo que es el último piso.- le dije aún sin creerlo.
El elevador comenzó a moverse hasta que llegó al último piso y las puertas de este se abrieron. Tomé mis maletas y salí de allí buscando mi habitación guiándome por el papel que me habían dado en la recepción. Cuando llegué al ultimo corredor allí solo habían tres puertas comencé a caminar buscando la mía. Pasé dos puertas una bien separada de la otra y en ambas se leía Suit en la puerta. La ultima habitación se encontraba de frente a mi al final del pasillo.
Llegué hasta allí y me paré frente a la puerta, la verdad no creía que esto me estuviera pasando. Tomé la tarjeta y lentamente la deslicé por la puerta y esta se abrió automáticamente. Entre a la habitación y me quedé hipnotizada por la amplia habitación. Cerré la puerta detrás de mi, dejé las maletas allí mismo y me dedique a recorrer la habitación. Era amplia, en una esquina tenía una barra con un bar detrás y dos banquetas allí.
Seguí admirando la habitación hasta que llegué a unas imponentes puertas lo que supuse que sería la habitación. Tiré de las puertas hasta que estas se abrieron completamente. La habitación estaba a oscuras, pero se podía ver en la parte más alejada de esta que se encontraba un gran ventanal que daba a un balcón desde donde se podía apreciar la belleza de la ciudad. En el centro de la habitación se encontraba una enorme cama. Caminé hacia la vidriera que daba al balcón y pude ver que la ciudad era realmente hermosa.
Todavía mis ojos no creían lo que estaban viendo, todo era tan irreal, parecía como si estuviera soñando. Entonces desee con todas mi fuerzas que Edward estuviera aquí conmigo y poder disfrutar ambos de esto.
-Desearía que estuvieras aquí Edward.- dije como en un susurro y cerré mis ojos para imaginarlo junto a mi.
Ya podía sentir su olor embriagador y sus brazos alrededor de mi cintura, abrazándome por detrás. Podía sentir su suave aliento, mientras sus labios se deslizaban por mi cuello besando todo a su paso. Solo quería que esto no fuera solo producto de mi imaginación.
-Quisiera que fueras real.- dije mientras me perdía en mi mundo imaginario.
-Solo si quieres que lo sea.- me contestó una voz a mi espalda mientras me giraba para besarme apasionadamente.
no podre subir mas por ahora ya que tengo a mi mama enferma, dejen sus comentarios y voten en cuanto pueda subo los otros
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