Bella POV
Mi madre estaba sentada conmigo en la sala, hablábamos sobre la cena con Edward y lo más importante sobre cómo le arrancaríamos el cuello a Jacob, la verdad es que no podía dejar de reír como una loca histérica escuchando las descabelladas ideas de mi madre
El teléfono comenzó a sonar y mi madre no paraba de reír como loca tomándose el estómago, camine hasta el teléfono mirándola con una gran sonrisa
Hola – conteste sin dejar de sonreír
Bella – dijo una voz dura del otro lado del teléfono la cual reconocí al instante
Papá, como estas?- dije incrédula por su llamada
Bien espero que al igual que tú, me entere que decidiste hacerte el trasplante – como se había enterado de eso?
Si, supongo que debo esperar – René camino hacia mí con una mirada curiosa, yo solo moví la boca diciendo “Charlie”
Que debes esperar? – volvió a hablar el con tono confundido
Pues hay una lista y debo esperar a que aparezca un donante que sea compatible conmigo – que esperaba él?
Es que acaso ya gastaste todo el dinero que te envié?- dijo molesto
A que te refieres?- dije un poco molesta por su tono, él era el único que me hacía molestar con solo decir una palabra
Por qué no usas el dinero que te envié para que te buscan un donante lo antes posible?
Charlie yo no necesito tanto la donación como otras personas que la han estado esperando por años, así que esperare y si eso fue todo adiós – dije colgando el teléfono sin esperar una respuesta
Que te dijo – me pregunto René apenas colgué
Nada, solo quería saber cómo estaba- dije caminando hacia las escaleras- me iré a dormir, buenas noches
Buenas noches cariño – respondió
Subí casi corriendo las escaleras me arregle para dormir y apenas toque la cama caí inconsciente
……
Me desperté con muchas ganas de salir de casa, ya me sentía asfixiada entre estas cuatro, paredes así que me levante y fui directo a la ducha me di un baño de agua caliente la cual relajo mis músculos, me coloque una pantalones de mezclilla y una linda camisa blanca, peine mi corto cabello y me coloque un lindo sombrero con algunas flores, la verdad parecía que iba a la playa con ese sombreo pero lo amaba, tome mi chaqueta y mi bolso y baje
Mi loca madre no estaba en la cocina ni se veía por los alrededores de la casa así que solo le deje una nota pegada en el refrigerador y después de tomar un pequeño desayuno, salí de casa
Había mucho viento, aunque no parecía como si fuera a llover y eso hacia mi día más feliz, camine por las calles casi vacías, tenía pensado en ir a visitar a Ángela, no había hablado con ella en mucho tiempo y de verdad la extrañaba Llegue a su casa y su madre salió a recibirme
Bella – dijo dándome un abrazo – como estas linda?
Bien señora y usted – pregunte sonriendo amablemente
Bien, pasa – se apartó de la puerta dando espacio para entrar- Ángela está en su habitación, sube
Subí corriendo las escaleras la verdad tenia muchísimas ganas de ver a mi amiga, de hablar con ella sobre lo que había pasado en mi vida recientemente, llegue a su habitación y toque
Pase- dijo con voz suave, entre sin pensarlo dos veces
Ange – corrí abrazarla –
Como estas?
Bien amiga y tú?-
Genial
Hablamos sobre Ben y la relación que mantenían, de verdad que ese chico la hacía feliz sus ojos no dejaban de brillar mientras hablaba de él, platicamos un poco sobre el incidente con Jacob su reacción fue como la de mi madre diciendo que quería arrancarle el cuello, también hable con ella sobre Edward
Entonces te gusta ese chico no?- dijo con sus enrojecidos ojos por la risa, intentando mirarme levantándose en su codo
No lo sé – respondí mirando el techo pues estaba acostada en la cama a su lado
Como que no lo sabes – me dijo dándome un golpecito en las costillas- se besaron e hicieron todas esas cositas que hacen las parejas – se rió de mi a lo que yo solo pude acompañarla en su diversión
No seas tonta, me gusta pero eso es todo, él ha tenido muchos problemas y no creo que quiera una relación ahora y yo tampoco sé si la quiero- respondí siendo sincera con ella
Desde ahí no hablamos más sobre Edward, almorcé con ella y su madre, la verdad es que Ángela no se veía muy bien, casi no podía caminar y su piel estaba más pálida de lo normal, pero ella no me diría como se sentía, era muy fuerte para aceptar que estaba mal
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