Narrado por Paulina

El segundo día de los chicos en México, yo estaba nerviosísima, Nikki no me había dicho que Robert venía con ella, el día anterior me había dado la impresión de que el me buscaba con su mirada, tan sexy y hermosa, que prefería evitarla, era mejor para mi no ilusionarme con un imposible, el era una estrella y jamás se fijaría en alguien tan insignificante como yo.

A pesar de eso decidí arreglarme más de la cuenta, y así llegue lista para llevarlos a recorrer el centro de la ciudad.

Me vestí así.

Desde mi llegada al hotel note a Robert más cercano a mi.

Rob: hola oruga

Paulina: tu también me dices así ya?

Rob: a mi me pareces más una mariposa, pero con Nikki no discuto, oruga

Paulina: creo que tendré que buscarte un apodo yo también

Rob: el que quieras bonita

El que me dijera bonita me impacto, era como sí me hubieran echado un bloque de hielo encima.

Así pasamos todo el día, los siguientes tres días fuimos al área de Chapultepec, de compras y a ver espectáculos, Rob y yo ya habíamos agarrado confianza, ya estábamos cada vez más juntos y risueños el uno con el otro.

Rob: eres una niña muy linda y muy amena

Paulina: y tu un adulador de primera! No te creo nada, seguro eso le dices a todas las niñas que conoces

Rob: de verdad eso crees? No soy un patán

Paulina: no dije eso, disculpa

Rob: nada que disculpar me encanta platicar contigo digas lo que digas

El viernes por la noche Nikki me dijo que el sábado querían descansar todos, que si me parecía bien podía verlos en su hotel y nadar un rato, decidí que no iría así que empezó la despedida ya que ellos salían el domingo muy temprano a los Angeles.

Llego el turno de Rob y me pidió que si íbamos a una sala de estar en el piso donde se ubicaba su habitación, me despedí de mis nuevos amigos y fui con Robert.

Rob: yo no quiero estar todo el día aquí así que quería invitarte a salir

Paulina: a mi?

Rob: si a ti, no veo otra oruga por aquí

Paulina: si, me encantaría, a donde vamos?

Rob: mi amigo Jerónimo me contó que existe un lugar llamado Marquesa y no esta lejos de la ciudad

Tu: ah sí es un bosque donde puedes estar cerca de la naturaleza

Rob: que dices? Vamos?

Paulina: OK pero tengo que regresar temprano, tengo una cena familiar

Rob: OK oruga, hecho, nos vemos mañana

Regrese a mi casa muy nerviosa, no dormí, Rob y yo solos, jamás ni en mi mejor sueño habría pasado.

Al otro día llegue un poquito más arreglada, me vesti asi.

Ya estaba Rob esperándome, nos fuimos platicando en el camino, le comparti muchas cosas de la cultura mexicana.

Al llegar caminamos, hicimos varias actividades y comimos; íbamos de regreso a la camioneta y de pronto sucedió lo más increíble de mi vida. Se paró y me detuvo, paso una mano por mi cintura, con la otra mano subió tiernamente mi barbilla y con timidez me dio el beso más romántico del mundo.

Perdí la noción del tiempo y me deje llevar por ese beso; cuando término volvió a acercarse a mi y me dio otro beso pero más apasionado.

Tenía ganas de seguir besándolo pero algo me decía que era malo para mi

Paulina: Rob, Robert, esto no esta bien

Rob: porque?

Paulina: tienes novia, sólo por eso, tu y yo somos muy diferentes, esto esta de más, no voy a ilusionarme con un imposible

Rob: que pasa? No te gusto?

Paulina: claro que me gustas, eres el hombre más guapo del mundo, pero yo no soy ninguna tonta para creer que con un besito se arreglan ese tipo de diferencias. Tu eres guapísimo, famoso, todas mueren por ti

Rob: a mi no me importa en lo más mínimo que no seas famosa, no se porque a ti te importa tanto

Paulina: Rob, vamos por puntos, tu y yo no nos hablábamos hasta hace 5 días, no puedes hablar en serio

Rob: tu me hablas a mi desde hace 5 días, pero yo te conozco desde hace 3 meses, si para ti es difícil entender que me esta pasando créeme que para mi más

No entendí en un principio lo que me dijo pero me sospechaba a lo que se refería.

Rob: si, me entendiste bien, Nikki me apoyo y ha platicado contigo todo este tiempo contigo por que me gustaste

Fue demasiado duro escuchar eso, pensé que Nikki era mi verdadera amiga

Paulina: ósea que no le importa mi amistad

Rob: no dije eso, lo que dije fue que inicio una amistad por mi, pero si a alguien le caíste bien desde el principio créeme que fue a ella, ella y Kellan me han apoyado y me han hecho ver que en ti tengo una oportunidad

Paulina: espérame, de verdad que no entiendo nada de lo que me dices, aparte el hecho de que yo le caiga bien a Nikki y a Kellan, no elimina que Kristen sea tu novia

Ante eso Rob se quedo callado.

Paulina: ves que no tienes nada que alegar

Rob: es cierto, tengo novia y la quiero pero se que eres alguien especial para mi y no pienso dejarte ir sin descubrir que es

Paulina: voy a ser sincera contigo, me gustas demasiado como jamás me había gustado alguien, aunque eso no es novedad para ti, todas te deben decir lo mismo

Robert sonrió ante esa frase pero no dijo nada.

Paulina: no acostumbro quitarle el novio a nadie, y mucho menos competir con alguien tan hermosa como Kristen, pero tampoco soy plato de segunda mesa

Rob: es que yo no te quiero de esa forma

Paulina: sabes que Rob, mejor dejemos el asunto aquí, me llevas de regreso por favor

Rob: ni mi amiga quieres ser?

Paulina: si quiero ser tu amiga, pero no me vuelvas a besar, no me hagas daño, no me hagas soñar que alguien tan insignificante como yo puede soñar con cuentos de princesas y príncipes porque la realidad es otra

Rob: porque no me das y te das una oportunidad...

Paulina: o dejamos el tema o mejor me voy yo sola

Rob: ok, vámonos ya

Todo el camino nos fuimos callados y sin mirarnos, habíamos pasado un día increíble y se había arruinado. Llegamos y sin mayor palabra me despedí y le desee que le fuera bien. Di la vuelta y cuando estaba a punto de bajar de la camioneta me tomo del brazo y me jalo hacia el.

Rob: si crees que las cosas conmigo son así de fáciles, estas equivocada, voy a conseguir que me conozcas y confíes en mi

Y me dio un beso, tan diferente a los otros dos, lleno de pasión y de desesperación por la inminente separación.

Después de unos momentos me separe y lo mire fijamente, aunque por dentro me estuviera muriendo de ganas de decirle que si a todo, no me habían inculcado el quitarle el novio a nadie, así fuera Robert Pattinson, con los ojos llenos de lágrimas, pero sin llorar, lo solté y abrí la puerta.

Paulina: adiós Robert

Baje de la camioneta y tome un taxi, al momento que me subí, no pude evitar llorar, me pasaba algo tan hermoso pero tan difícil. Sabía que eso era el deseo de cualquier persona pero yo no quería hacer las cosas mal, aunque eso significara que no nos volveríamos a ver jamás.

Llegue a mi casa, mi mamá y mi hermana aún no llegaban, decidí tomar un baño; al salir tenía dos mensajes en mi iPhone, ambos de un número desconocido.

Mensaje 1
Gracias por tu tiempo y tu amistad, eres una niña que vale mucho, incluso más que yo. Sigo recordando el beso de hoy.

Mensaje 2
No me voy a dar por vencido, voy a arreglar mis asuntos y pronto sabrás de mi. Un beso oruga.

Era él, Nikki le había dado mi número. No sabía que hacer y decidí no contestar, esa ilusión que se asomaba en mi no podía seguir creciendo, principalmente por mi propio bienestar emocional.