Ardiente Tentacion

Autor: lady.lausc
Género: + 18
Fecha Creación: 27/02/2013
Fecha Actualización: 12/04/2013
Finalizado: SI
Votos: 7
Comentarios: 9
Visitas: 54545
Capítulos: 30

Isabella Swan Psicóloga y columnista lleva una vida aparentemente normal, esta comprometida y tiene exito en su trabajo, su vida da un giro cuando decide ir a un bar a tomar una copa y se encuentra a sus amigos del bachillerato, entre ellos a Edward Cullen quien fuera su mejor amigo y tambien su primer y unico gran amor...

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Capítulo 11: Mi locura POV Edward

Cap. 11 Mi locura


Salimos de casa de Bella con rumbo al hotel donde mi madre estaba hospedada, se dio cuenta de que no llevaba su agenda
-Edward, podrías regresarte por mi agenda? La deje en casa de bella en la mesa de centro
-Claro- encendí mi direccional para dar vuelta
-No hijo, ve tu, a mi no me da tiempo déjame en el hotel mientras me doy un baño tu vas por mi agenda, si no perderé mi vuelo-
Asentí con la cabeza la deje en el hotel y regrese con Bella, en el camino vi una farmacia y recordé sus dudas sobre un posible embarazo, sin pensarlo estacione mi carro y le pedí una prueba casera a la encargada “lastima, guapo y casado” mascullo entre dientes, en el camino iba pensando en las posibilidades de que eso fuera verdad una y otra vez hice cálculos mentales, todo apuntaba a que habíamos tenido relaciones sin protección por cierto en sus días fértiles, una llama de esperanza broto en mi interior “ojala sea positiva” pensé para mis adentros una vez en que llegue llame a su puerta un par de veces y me abrió, estaba en pijama y aun así se veía hermosa, seguía estando enamorado de ella como un vil adolescente, sin pensarlo mas la bese, espere su reacción agresiva pero no la hubo, ella me amaba tanto como yo, hasta cuando se daría cuenta?, con todo el dolor de mi corazón rompí el beso explicándole por que iba, pude ver algo de decepción en su rostro, ella deseaba otro encuentro tanto como yo, le explique lo de la prueba y acepto hacérsela, le propuse que fuera al día siguiente por la mañana para que sea mas seguro el resultado, le dije que la visitaría en su consultorio para saber el resultado, casi no pude dormir, al día siguiente me levante y fui al trabajo, mi secretaria dijo que me veía feliz, como nunca me había visto, casi estaba seguro de que la prueba arrojaría positivo, fui al área de cuneros y vi a cada uno de esos niños, imaginando a uno mío, “seguro será hermoso como bella” pensaba una y otra vez, cuando imagine que llegaría la hora de comida me dirigí a su consultorio, en el camino, vi una tienda de bebes, y no pude evitarlo, entre y comencé a fantasear viendo una y otra vez las cosas que ahí estaban, cunas, moisés, ropa...
-Hola, le puedo ayudar?- dijo la vendedora-
-Mmm no, yo solo veía, aun no estamos seguros-
Me miro divertida- Usted será un buen padre me advirtió
- apárteme una cuna por si las dudas, y un moisés, también una carriola, es mas, las pago de una vez, después le digo a donde enviarlas- asintió con una sonrisa, tomo mi tarjeta y la deslizo, enfrente del edificio donde estaba su consultorio, había una joyería, entre también la futura madre de mi hijo también merecía un regalo, todo me parecía común y corriente, anillos relojes pulseras gargantillas, hasta que encontré algo original, un guardapelo de oro que en su interior tenia escrito “Plus que ma propre vie”(mas que a mi propia vida) Era cuanto yo la amaba, no podía negarlo ya, lo pague y espere a ver que su secretaria saliera, me dirigió una mirada coqueta y aviso a Bella de mi presencia, me indico que pasara, al verme Bella no pudo evitar comerme con los ojos, ella también me deseaba, le hice saber que me había dado cuenta de sus miradas, nuestra platica fue divertida, pero me corto al instante, y muy tranquila me dio la noticia, NEGATIVO, sus palabras sonaron como un eco en mi cabeza me deje caer en una silla, había esperado que dijera que si, lo estaba deseando tanto.
-Lo, siento, encontraras a la mujer indicada para que sea la madre de tus hijos, yo, no lo soy, lo nuestro es… bueno, fue, solo sexo y ya…- sus palabras me dolieron tanto, como podía ser tan fría, como podía jugar así conmigo, me senti iracundo, después de todo, nada cambiaba en ella, me seguía utilizando como antes, me levante y cuando me iba a despedir, ella giro la cara, el beso que depositaria en su mejilla, fue a dar directo a su boca, ese roce fue como una bomba en mi interior, la bese de nuevo con ansias, sabia que no me detendría, ella quería eso solo el sexo y ya, no me importaba que jugara conmigo si de esa forma podía tenerla y sentirla mía aunque por breves instantes.
Su mirada llameaba de deseo, le volvi a hacer el amor, por que eso le hacia yo, le hacia el amor, para mi no era solo sexo, una vez que terminamos me di cuenta de sus lagrimas, en su mirada había culpa, lloraba por sentirse culpable, tal vez de verdad amaba a Jacob y yo solo la estaba corrompiendo, después de la boda me alejare de ella pensé para mis adentros, no debía tener otra cita a solas con ella, no debía ponerle esas pruebas después de todo ella y Jake estaban juntos desde hace tiempo, me senti una basura, la hice mirarme a los ojos, solo veía eso, solo culpa, me senti mal por tentarla de esa manera
-Perdóname Bella, siempre trato de no perder el control contigo, pero no puedo eres mi perdición- 
No dijo nada comenzó a vestirse y yo hice lo mismo, quise ayudarle a levantar el tiradero pero me detuvo
-Vete- me ordeno en tono seco, levante algo mas
-Vete!- Salí de inmediato, con su regalo quemándome el bolsillo de mi bata, llegue a sentirlo hasta pesado pensé en tirarlo pero no lo hice, de regreso observe la estúpida tienda de bebes, recordé la tonteria que había hecho anteriormente, precipitarme no había sido la mejor idea, al entrar la encargada me sonrió
-Hola, a donde lo envió.-
Me daba vergüenza por haberme precipitado tanto
-Avenida central núm. 34, Los Ángeles California, Sam Uley- le ordene, me miro extrañada, tal vez se extraño de que el nombre no coincidiera con el mio…
Lo anoto en la computadora me dijo que llegaría en 2 días, me despedí, y le mande un texto a Sam
“En 2 días llegara un regalo para el bebe, saludos a Emily, los quiere Edward”
“gracias hermano, ya solo faltan 4 meses para que nazca, nos vemos pronto, Rosalie esta organizando una despedida para Jacob y Bella, no te ha llamado?
“no, y la verdad no creo asistir, estare fuera por unos días, todo depende de la fecha”
“Ok, nos vemos tal vez para la boda, saludos de parte de Em, cuidate”
Senti que una daga atravesaba mi corazón, la boda estaba cada vez mas próxima, no regrese al trabajo, me reporte enfermo, estuve 2 días ahogándome de borracho en el canta bar donde volvi a ver a Bella, y maldije mi suerte una y otra vez, es noche una chica hispana canto con el corazón la misma canción que Bella había cantado meses antes “Ardiente tentación” sin pensarlo me la lleve a la cama, me perdi en cada centímetro de su cuerpo tratando de olvidar a Bella la hice mía una y otra vez “hazme olvidarla” le repetía “hazme olvidarla”

Capítulo 10: Ardiente tentacion Capítulo 12: Verdades que duelen

 
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