3.11 Belgica
Silencio.
De nuevo me encontraba sumida en un profundo sueño. Tan dulce, tan lleno de amor… sola con Jake. Pero poco duro. Fríos escalofríos subían por mi columna. Ahora eran fríos los labios que antes ardían. Alcé las manos en un intento desesperado por coger aquella cara que ahora me besaba la frente. Pero, cuando abrí los ojos de nuevo aquella imagen relampagueo en mi mente. Me intente cubrir los ojos con las palmas de las manos, no sin antes ver como volvían a estar llenas de sangre. Di un respingo hacia atrás y sentí unos fríos brazos que me acunaban. Ya no estaba en su calido pecho. Ahora era frió y marmóreo. ¿Papa?
-¿Si, cariño?- susurro su dulce voz. Adoraba ser la niña de sus ojos, ver como mi rostro se reflejaba en sus pupilas dorados.
-¡Papa!- le abrace con toda la fuerza que mis débiles brazos me permitían. ¡Todo a sido horrible!- gemí.
-¡Nessie!- note unos nuevos brazos helados a mí alrededor.
-¡Mama!- apoye la cabeza en su regazo. Mis ojos buscaron a Jake con toda la rapidez que pudieron. Allí estaba… a unos cuantos centímetros de mí, sonriéndome.
- Cariño debes contarnos que te a sucedido- suspiro preocupada, mientras sus manos se enredaban en mi cabello- a sido, otro… ¿ataque?- note como se le amontonaban las letras en la boca antes de soltarlas.
-Yo, bueno, supongo que eso fue lo que ocurrió- trague saliva y continué - realmente no lo se, fue tan extraño todo, que… solo note como se me… paraba el corazón de nuevo.
-¡Eso es cierto!- me interrumpió Jake.
-¡Cállate!- rugió mi madre- ¡Estúpido! ¡La deje a tu cuidado! ¡Deberías
haber tenido mas cuidado con ella!- escupió aquellas palabras mientras sus pupilas se tornaban de color.
-¡Bells! ¡Maldita sea!- contesto Jake indignado- ¿¡A caso crees que quería que pasase!?- gruño.
-Todo sucedió demasiado rápido no dio casi tiempo a reaccionar- se excuso Nahuel.
Pero era demasiado tarde, pude ver como el oro líquido de sus pupilas pasaba al más duro y pétreo negro. En un instante todos los músculos de su cuerpo se tensaron y aquellos labios pálidos, ahora se coloreaban a un tono más fuerte. Dejo asomar sus colmillos y profirió un grito ahogado antes de…
-¡Mama!- grite. Mi padre me soltó de sus brazos y se abalanzo sobre ella, reteniéndola en ellos.
-Cálmate Bella, Nessie está bien- Le susurro al oído- no a pasado nada- le acariciaba la cara con los labios-.
-¡Casi la volvemos a perder Edward! ¡Como puedes decir eso!- gimió desolada, a veces agradezco ser medio humana para poder desahogarme llorando. Sus ojos imploraban poder derramar algo de su sufrimiento, pero su especie las retenía en sus ojos, ahora cristalinos- ¡Casi la… - los labios de mi padre sellaron aquellas dolorosas palabras en su boca-.
-Salgamos de la habitación un rato bella- le susurro lentamente, eso la debió tranquilizarla, ya que no opuso resistencia alguna. Sus ojos se posaron en mí y salieron de la habitación.
Jake salto y se sentó detrás de mí rodeándome, mientras Nahuel se apoyaba a los pies de aquella cama… ¿Dónde estábamos?
-¿Dónde… estoy?- pregunte mientras ojeaba la oscura habitación.
-En Bélgica- dijo Nahuel- debíamos continuar el viaje, has estado durmiendo 18 horas desde el último ataque. Bella, cuando te despertaste la otra vez gritando, yo… ¿Quién era aquella niña?- pregunto ansioso.
-Yo… tengo hambre- interrumpí aquella molesta conversación, no quería volver a recordarla, su mirada aun me acechaba.
-Será mejor que todos comamos algo Nessie- suspiro Jake- todos estamos algo hambrientos- creo que Jake entendió mi brusco cambio de tema.
-¡Pero yo quiero saberlo ahora!- grito Nahuel enrabietado.
-¡Basta!- Jake desapareció de mi lado, y salto sobre Nahuel incrustándolo en la pared- ¡basta!- gruño.
Una ligera brisa abrió las puertas del pequeño balcón de la habitación. Todos nos quedamos sin respiración por un momento y miramos ansiosos aquella silueta bordeada por al luz de la luna.
-Al fin… te encontré…
O_o_kristy_o_O
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