Cuando recobre el conocimiento, me dirigí de inmediato al cuarto de Anthony, estaba angustiada y asustada, no tenía ni idea de lo que Jacob le pudo haber hecho a mi bebe, entre a la habitación rogando porque nada malo hubiese pasado, pero allí tirado en el piso estaba mi bebe, me acerque a él despacio, lo tome en mis brazos, su cuerpecito estaba frio, su rostro pálido y aquel pequeño corazoncito ya no latía, me aferre a mi hijo, llorando, gritando, odiando al maldito que lo mato, porque la vida es tan cruel, tan solo tenía un añito.

-Porque Dios-grite con todas mis fuerzas-era tan chiquitico, tan indefenso, porque tuvo que pasar esto-dije en apenas un susurro, en ese momento entro a la habitación Jacob, pude ver el arrepentimiento en sus ojos, pero eso solo sirvió para enfurecerme más- tú lo mataste-dije apretando el cuerpo de mi hijo más fuerte contra mi cuerpo- lo mataste, no te importo nada, eres un desgraciado, él no tenía la culpa.

-Bella, yo lo sien...

-No digas que lo siente porque es mentira, un monstruo tan despreciable como tú no puede sentir nada, ya me quitaste a las personas que amaba, que más quieres de mí, déjame en paz, déjame de una vez por todas Jacob, NO TE AMO, NUNCA TE AME Y NUNCA LO ARE, es más te odio como nunca a nadie he podido odiar, me das asco.-grite

El no dijo nada simplemente se fue de la casa, me senté en la sala aun con mi niño en brazos, todo era tan injusto, llore, llore por los errores que cometí, llore por perder a mi hijo, llore por no poder volver a ver sus ojitos, que eran una réplica exacta de los de su padre, llore por Edward, llore por mi vida tan miserable.

Las estrellas miran,

la luna la abraz

y un angel llora.

Cogí el teléfono y marque al 911(en mi país el 911 es para soportar secuestros, asesinatos o cosas por el estilo)

-911 en que puedo ayudarla- preguntaron del otro lado de la línea

-Mataron… sollozo… mataron a mi… sollozo… mataron a mi hijo-dije llorando

-Señora, por favor trate de calmarse, donde se encuentra

Le di la dirección después de varios intentos ya que casi no se me entendía debido al llanto, poco después escuche patrullas de policía y una ambulancia acercase, hundí mi rostro en el cabello de mi hijo de aquel tono cobrizo tan poco común, la puerta estaba abierta, por lo cual los policías entraron, los paramédicos entraron con una camilla, aferre aún más fuerte a mi hijo, no quería que se lo llevaran, esto no podía estar pasando, no otra vez, primero mis padres y ahora mi bebe.

-No… no se lo lleven-dije

Trate que no me lo arrebataran de los brazos, pero mi fuerza era poca comparada con la del paramédico así que después de unos minutos me lo logro quitar, llore mientras le relataba a la policía todo lo que había pasado, recordando con dolor cada momento, les pase una foto de Jacob y de inmediato procedieron con su búsqueda y captura por asesinato y violación. Al día siguiente, mande a incinerar el cuerpo de mi hijo y sus cenizas las coloque en un pequeño cofre de madera.

Anthony Cullen Swan

18 de julio del 2011 - 25 de noviembre del 2012

Los días fueron pasando con extremada lentitud, ya no tenía fuerzas, poco a poco el dolor me iba consumiendo, poco comía, poco dormía, pero mucho lloraba, estaba enferma y lo savia ya que cada día se me hacía más difícil pararme de la cama, me dolía el cuerpo, me dolía el alma, pero más me dolía el corazón, prendí mi laptop y busque el correo de Alice.

Querida Alice:

Sé que ya debes de estar enterada de lo que le hice a tu hermano y me debes estar odiando por ello, pero por favor necesito que me creas, nada de lo que dije fue cierto, necesito explicarle las cosas a Edward, por favor créeme cuando te digo que lo amo y me odio por haber sido tan estúpida y mentirle de semejante forma, si logras creerme, por favor convence a Edward de venir a chicago, estoy en la misma casa en la que me recogiste hace ya más de dos años, la llave esta debajo del tapete, utilízala, yo estoy en la última habitación del segundo piso, espero poder verlos.

Te quiere Bella

Posdata: si todavía te preguntas, no Jacob ya no está en la casa.

Le envié el mensaje rezando para que lo leyera antes de que fuera muy tarde, así pasaron dos semanas y cada vez me era más difícil moverme, la tristeza me estaba matando poco a poco, sabía que no aguantaría más de unos cuantos días más, así que cogí papel y un esfero.

Edward:

No encuentro palabras para explicarte lo que hice y mis motivos para hacerlo, pero sé que necesitas repuestas así que tratare; te acuerdas aquella mañana, cuanto te llamaron del hospital porque había ocurrido un accidente muy grabe que dejo muchos heridos, por lo cual te necesitaban urgente… bueno aquella mañana yo salí a caminar a los alrededores de la casa, cuando de repente Jacob apareció y me amenazó, dijo que si no volvía con él, te iba a matar, me advirtió que solo tenía una semana para dejarte o el mismo se encargaría de acabar contigo, así que durante los siguientes días pensé la forma de romper contigo y que de igual manera pudieras olvidarme fácil y lo único que se me ocurrió fue decirte que no te amaba, de  burlarme de ti por haber sido tan ingenuo y creerme, por eso al término del plazo que me había dado Jacob, cuando el entraba dispuesto a matarte, lo agarre del brazo e hice todo lo que había planeado, fue difícil ver tu cara de dolor, pero lo tenía que hacer, tenía que salvarte, ese día me fui con Jacob pero parte de mi corazón se quedó contigo, ya que la otra parte la tenían nuestros hijos, fruto del amor que te tengo. Cuando Jacob se enteró de mi embarazo me iba a obligar a que abortar, pero no lo permití, ¿cómo podía dejar que me quitara el único recuerdo que tendría de ti?, así que lo amenace con denunciarlo a la policía e irme de nuevo de la casa, ante lo cual no le quedó otro remedio que dejar que el embarazo concluyera.

Lleve a casa a un niño hermoso y fuerte al que llame Anthony, nació el 18 de julio del 2011, tenía tus mismos ojos, tú mismo cabello, hasta tu sonrisa, pero por desgracia la vida es muy cruel con migo y el 25 de noviembre del 2012 Jacob llego borracho y encolerizado por el simple hecho de que Anthony se parecía mucho a ti y lo mato, desde ese día, la tristeza me ha ido consumiendo rápidamente. Las cenizas de nuestro hijo están en un cofre de madera, en el altar que hay en la sala.

Quiero que sepas que te amo, siempre lo hice y siempre lo hare, aunque ahora me arrepiento de no haberte dicho estas palabras… TE AMO. Por último, quiero pedirte que antes de que cometas alguna estupidez, busques a Rosalie McCarty, vive aquí mismo en chicago, ella tiene algo que es mío y deseo que tú te quedes con ello, ella ya lo sabe, vive a 10 calles de aquí, frente al hotel Hyatt Regency Chicago

TE AMARA POR SIEMPRE, BELLA

Doble la carta y la metí en el sobre que previamente había marcado con su nombre, junto con una foto de Anthony y una mía en el hospital después de haber dado a luz, me recosté manteniendo la carta entre mis manos, escuche la puerta de la casa abrirse, pero no pude aguantar más, me deje llevar por la eterna oscuridad, donde me encontraría de nuevo con mi bebe.